En la mañana me desperté con un dolor fuerte de cabeza que me provocó no querer ver a nadie. Llevo dos días en el hospital, suspiré molesta al escuchar como la enfermera pedía permiso para entrar.
—Buenos días señorita Ramírez, ¿se encuentra bien?— fingí asentir sabiendo que me estaba engañando también —le entrego su desayuno... oh vaya, tiene visitas.
Me sorprendí al escucharla; en unos segundos pensé en Erick, pero como me dolía muy fuerte la cabeza no estaba segura de mi pensamiento. —¿Link?— me sonrió tiernamente entrando a la habitación. Se sentó a mi lado sin dejar de mirarme, luego la enfermera se marchó dejándonos solos.
—Hola ___________, ¿cómo te sientes?— negué rápidamente dejándolo preocupado mirándome decepcionado —¿qué te pasa __________?.
—Me duele la cabeza, y... no sé muy bien. Simplemente me siento un poco mareada— sus ojos me miraron y sentí lástima al verlos, ya que él en serio estaba preocupado por mí. Cerró sus ojos y suspiró, dejándome curiosa. —tengo buenas noticias ____________...
Lo miré con mirada interesante esperando saber su comentario o noticia. Quedó un silencio incómodo abundar la habitación, hasta que yo hablé: —Dime Link...— guardé silencio de nuevo con mirada esta vez impaciente. Le provoqué una leve risa y un pequeño y tierno sonrojo mostrarse en sus mejillas.
—Mañana sales de aquí; ya podremos estar juntos de nuevo— sus ojos soltaban alegría al simple hecho de verlos. Ambos estábamos emocionados, solo que me preguntaba ¿cómo sabe...?
—Una duda Link... ¿cómo te enteraste o...?— reí un poco curiosa y se guardó silencio de nuevo y me miró a los ojos.
—Cuando llegué le pregunté a la recepcionista y, me dijo que mañana salías— puso cara de emoción y me provocó nuevamente otra risa contagiosa —me encanta tu risa _________...
Luego de un rato iba calmando mi risa. Link parecía bastante sincero con cada comentario que decía, que tenía relación conmigo. Supe que me había colorado de mis mejillas al escuchar su sinceridad hacia mí.
—No empieces Link... claro que no— él rodó sus ojos y se me acercó mas al rostro con una sonrisa un tanto traviesa —soy una chica normal y corriente como las demás...
Su aliento lo sentía ya rozando mi cuello, coloqué mis manos en sus hombros para alejarlo, ya que me sentía incomoda. Ambos reímos un poco después de unos cortos segundos.
—¿___________?, ¿Link?— en un momento escuché aquella voz que me volvía loca. Sólo que esta vez me alarmó un poco al igual que a Link. (Yo había asustado a Link) —¿interrumpo algo?...
Nos miró molesto en su mirada tornándose oscura. Aquellos lindos ojos color gris se tornaron oscuros dejándome turbada. Suspiré y asentí dejando a Link confundido con sus cejas alzadas.
—¿Apoco interrumpió algo...?— me susurró al oído con voz inquieta, provocando un suspiro de molestia en Erick. Tomé con una de mis manos la mejilla de Link haciendo que Erick me mirara mas fijo, casi penetrando mi alma con sus ojos. Lo acerqué a mi boca dejando a Link inmóvil y confundido.
—¡Link!— en ese momento Erick se acercó y jaló de la camisa a Link alejándolo de mí —deja a __________ tranquila maldito duende.
—¡Erick!—esta vez me puse de pie ignorando el dolor de cabeza; me le acerqué desesperada tomando su brazo haciendo que soltara a Link —¡¡mírame!!
Ambos estábamos con el ceño fruncido y las mejillas ardiendo a todo dar. Noté como Erick ponía sus manos en puños firmes y duros, ya que se podía notar su fuerza acumulada en ellos.
—Vuelve a llamar a Link "duende" te mato... ¡ni se te ocurra decirle "maldito duende" de nuevo...! ¿entendiste?— en unos segundos rodó sus ojos dejándome aún más irritada; de reojo miramos a Link y estaba sonriendo con sus mejillas poco a poco tornándose de color rojo.
Erick luego se me acercó al oído y me susurró detenidamente dejándome aparte de molesta e incómoda... sonrojada. —Yo te amo más que él... ___________ eres y serás mía...— pasó su mano lentamente por mi mejilla. Luego noté como se mordía su labio inferior; sabía bien claro que intentaba provocarme pero, solo me provocaba rabia.
—Suéltame— lo miré amenazante y rodó los ojos sabiendo mi malestar. De pronto se acercó a mis labios y depositó un pequeño beso en mis grandes labios —no hagas eso de nuevo... ¡oíste!
—Cálmate __________, sé que me amas... acéptalo— está vez yo rodeé lo ojos molesta, provocándole una pequeña risa —no solo porque esté herida, puedes aprovecharte de mi malestar; ahora te pido por favor que te marches.
Mostré mis puños colocando uno cerca de su cara provocándole nuevamente otra risa que me causó sacar un gruñido. Se alejó y suspiré sentándome rendida en la camilla al lado de Link.
—¿____________ estás bien?— miré a Link por unos segundos y asentí un poco roja y nerviosa. Pensé en unos momentos que Link estaría celoso, pero no se veía celoso, lo cual me dejó curiosa y a la vez preocupada —¿ahora ves porqué Erick no me agrada?
Asentí en silencio sin mirarlo. Volví a suspirar y miré a Link por un reducido tiempo y él se estaba acercando a mis labios. Retiré mi cabeza ya que volví a sentir el dolor de cabeza abundar fuertemente en ella.
—Perdón Link me duele la cabeza muy feo...— coloqué mi mano en ésta y él rodeó su brazo por mi espalda, pegándome a él. Me recargué en su hombro y bostecé cerrando mis ojos lentamente.
Narra Link:
En unos segundos cuando Erick se marchó. Sentí un peso en mi hombro; volteé y noté como ___________ estaba sentada recargada en mi hombro, probablemente dormida. Sus ojos cerrados me causaron ternura. No pude evitar mencionar un "awww" con un sonrojo en mis mejillas, casi en mi nariz y orejas.
—Diosas... como la quiero...— pasé mi mano por su cabello suave castaño, poco a poco su perfume iba invadiendo mi nariz con un suave y dulce olor a flores. Cerré mis ojos recargando lentamente mi cabeza contra la suya. Abrí levemente mis ojos y la miré al separar un poco mi cabeza de la suya —no dejaré que nada te suceda __________...
Pensé sin dejar de contemplarla. Bostecé recordando que no dormí nada pensando en ver y estar con __________. Empecé a cerrar mis ojos de nuevo y recargando mi cabeza con la de ella, cayendo dormido.
• • •
Todos los días he pensado en ____________. Ella era especial y sabía que ella era la correcta. Recordar a las Diosas me partía el corazón junto con mi alma. Su sonrisa ha iluminado mi vida y aquellos pasajes oscuros en los cuales me encontraba. Sentía que algo me faltaba y ahora lo he encontrado. Tú, __________, has llenado aquel hueco vacío que se encontraba en mi corazón. Eres lo mejor que me ha pasado; no me arrepiento de haberte conocido, pero sé que algún día tendré que contarte todo y el motivo de porqué estoy aquí...
Te admiro ya que nadie es como tú, eres tú y solo tú la chica que capturó mi corazón con el simple hecho de sonreír, reír y mirarme... te amo ____________...
• • •
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top