Final - Vladimir


(T/N) nunca estuvo muy segura de a qué se dedicaba Vladimir durante la restauración de la ciudad. A veces se le veía jugando en la plaza con los niños y contándoles historias como si tuviera libros de mitología, fantasía y aventuras memorizados. Se juntó después con los universitarios de la guitarra y se encargó de ayudarles a manejar la estación de radio por un tiempo, para luego colaborar con Gilbert, Lukas y compañía con el lanzamiento de un periódico que acabó por ser distribuido hasta las ciudades más cercanas.

Luego de la reconexión a internet se le vio yendo de un lado a otro con Amanda y compañía, grabando videos semanales que subían a la red para pasar el tiempo y notificar al mundo de cómo avanzaban las cosas en Belafari. Tenían un grupo bastante fiel de fans, tanto online como en vivo y en directo, y a veces organizaban paseos a las ciudades circundantes para ampliar las noticias que transmitían a todos los sobrevivientes del mundo. Documentaban cosas pequeñas como las historias cortas de algunas personas, cómo se salvaron, qué hicieron para vivir durante la Sequía, qué dificultades pasaron; hasta el punto en el que sus mini reportajes se convirtieron en una celebración del arduo trabajo de todos aquellos que se mantuvieron con vida a pesar de tener todas las probabilidades en sus contras.

Dedicaban un episodio a una o dos personas, dependiendo de qué tan larga e interesante fuera su historia; y algunos casos especiales recibían dos entradas. Dedicaron mínimo dos episodios por cada persona del grupo de la (nacionalidad), así como al líder de Killa, los cuatro hermanos de Blend y, a petición curiosa del público, al ex líder de los Darksiders. Las últimas cuatro historias en ser contadas fueron las del rumano, ya que él era quien entrevistaba, y las de (T/N), Peter y Feliciano, puesto que las guardaban como episodios especiales.

Vladimir se sentó frente a su cámara en su estudio y contó su historia en el último de los episodios normales antes de iniciar con los tres finales. Tuvo colaboración momentánea de Amanda, Lukas y Natalya, quienes pasaban de fondo de cuando en cuando para comentar momentos de su aventura y corregirle en algunos detalles. Todos los entrevistados tuvieron unas tres personas cada uno que aparecían de acompañamiento en sus episodios para ayudar con la exactitud de la narración, así que eso no era cosa nueva. (T/N) y Peter fueron invitados a la mayoría de entrevistas debido a su constante presencia en los acontecimientos, así que cuando llegó el día en que los episodios dedicados al niño serían publicados; todos los espectadores, tanto fans como no fans, se reunieron en casas de conocidos para ver la entrevista como si se tratara de alguna película esperada.

Los episodios dedicados a Feliciano fueron igual de anticipados, y qué decir de la entrevista a la (nacionalidad). El anuncio de que el siguiente episodio estaría protagonizado por ella salió por el tiempo en que la serie dirigida por Kiku le estaba dando la vuelta al mundo. Bastó con decir que (T/N) (T/A) contaría su historia en el programa de Vladimir Popescu para que miles de personas comenzaran a hacer planes para juntarse a verlo o para proyectarlo en las plazas. Había tanta emoción por la noticia, que el equipo preguntó por la red si les interesaría que la entrevista fuera transmitida en vivo. La respuesta fue tan positiva que no les quedó otra opción más que comenzar las preparaciones para la transmisión. Se invitó a todo el grupo a la casa de la entrevistada, se acondicionó la sala para que hubiera suficiente iluminación, se acomodó la cámara, se hicieron pequeñas pruebas antes y se colocó un florero en la mesita del medio para poder poner el micrófono detrás y que no distrajera de la vista.

La emisión duró cerca de tres horas y tuvo participación ocasional de todos los que estaban presentes. El rumano y muchos de los espectadores lloraron al menos una vez durante toda la emisión, sea en las primeras partes de la historia como en las últimas, porque no era muy lejana a lo que ellos mismos habían vivido. La principal diferencia era que ella había aceptado llevar adelante toda esa empresa descabellada de la cual, a diferencia de Feliciano, no tenía conocimiento previo ni estudios al respecto.

-En realidad, lo que más me entristecía era la idea de que me pasaría el resto de mi vida buscando agua y comida sin ningún otro objetivo más allá de poder vivir mañana. -comentó ella durante la transmisión.- ¿Y qué sería de Peter cuando yo muriera? Encontrar el diario fue, al menos al principio, más una excusa de tener algo qué hacer que un objetivo real. Por supuesto que con el tiempo se convirtió en algo por lo que estábamos más que dispuestos a correr riesgos tremendos.

Con el final de su entrevista, Vladimir y compañía siguieron dedicándose a documentar las historias de todos los sobrevivientes, así como los avances de Belafari y áreas circundantes. Comenzaron a viajar cada vez más lejos con la meta de grabar las historias y aventuras de todos aquellos, chicos y grandes, que hubieran vivido la Sequía. La (nacionalidad) extrañaba tenerlos cerca, escuchar sus conversaciones y discusiones para pasar el rato y divertirse. Siempre regresaban, por suerte, para una actualización mensual de cómo iban las cosas en la ciudad y qué cambios nuevos había.

-Todavía no termino de creerme que solo tú y otras tres personas fueron suficientes para rescatarnos a Lukas, Natalya, Yekaterina y a mí de una pandilla entera de más de veinte maleantes. -comentó Vladimir un día en que se encontraron en la plaza.
-Tampoco es que los hayamos enfrentado directamente. -sonrió con calma ella, mirando las nubes.- Nos colamos en la refinería y causamos caos para distraerlos, no los derrotamos para salvarlos.
-Igual, ¿qué sería de nosotros si no se hubieran aparecido? -le sonrió él, girándose a verla. La sonrisa del rumano era contagiosa.- Siento que nunca podré terminar de agradecerles.
-Con todo lo que has hecho por nosotros hasta ahora, yo creo que es más que suficiente. -lo miró ella.

Y por alguna razón, lo dejó sorprendido en la banca.

No pasó mucho tiempo antes de que se decidieran por irse con Arthur en uno de sus viajes para conocer ciudades más lejanas y documentar historias distintas. Los despidieron del recién inaugurado aeropuerto; y (T/N), Natalya y Lukas se sorprendieron un poco de ver al mayor de los hermanos de Blend de pie entre los que despedían a los que se iban.

Les siguieron la pista por internet, viendo los videos que subían y enterándose de los lugares que visitaban. Se enteraron mediante pequeñas pistas en los reportajes que uno de los universitarios integrantes del equipo se enamoró de un joven en el viaje, así que regresaban con una persona de más. También se enteraron de que Amanda se rompió el brazo una tarde que salieron a jugar con la pelota, y que consiguieron equipo y micrófono nuevos gracias al joven nuevo que les acompañaba.
A (T/N) le resultaba extraño pero fascinante enterarse de los pormenores del viaje de una forma tan indirecta, y se descubrió a sí misma esperando con muchas más ansias el siguiente video para ver si se enteraba de algo más.

Regresaron con un joven pecoso con ellos y con la castaña de lentes con un yeso en el brazo derecho. Su viaje fue ajetreado, pero todos estaban más que felices por los resultados y sólo estaban tomándose unas vacaciones porque querían terminar de enseñarle las cosas al nuevo y dejar que Amanda se recuperara por completo. Lo anunciaron en un corto video que recibió miles de comentarios felicitando a los nuevos enamorados y deseando que la castaña tuviera bien el brazo dentro de poco.

(T/N) y compañía, junto con el mayor de los hermanos de Blend de nuevo, fueron a recogerlos al aeropuerto y organizaron una pequeña reunión para celebrar su retorno. La reunión se convirtió en una especie de fiesta para cuando la mitad de los que asistieron se retiraron, y la mayoría acabaron por quedarse dormidos en la sala.

La (nacionalidad) regresó de dejar a Peter dormido en la casa para verificar que todos estuvieran bien. Había tres personas en el sillón, uno en una silla, dos en el piso y alguien bajo la mesa, todos dormidos. Lukas se había retirado a su cuarto y era probable que estuviera durmiendo tranquilo en su cama sin la mayor noción de lo que había sucedido en la sala de su departamento. Se había encontrado con Amanda en el pasillo, retirándose a su casa, así que era probable que se hubiera quedado ayudando a limpiar.
Porque Vladimir seguía despierto y ordenando las cosas para cuando la (nacionalidad) volvió.

-¿Cómo vas a hacer con todos? -preguntó ella en un susurro para no despertar a nadie, apoyándose en la pared de la cocina.
-Que se queden ahí, ya mañana se irán a sus casas. -rio por lo bajo el rumano, terminando de secar unos vasos.

(T/N) contempló la sala desde donde estaba en silencio, los rostros felices y satisfechos de todos los dormidos indicándole que se habían divertido bastante.

-Ah- cierto. -recordó de pronto Vladimir, dejando lo que estaba haciendo para caminar hacia su mochila en la sala. Ni siquiera habían desempacado bien.

Rebuscó algo entre su equipaje de mano, sacando un par de casacas y paquetes de galletas hasta dar con una pequeña bolsita de papel. La miró un momento con una pequeña sonrisa en su rostro y regresó a la cocina. (T/N) observó todo sin pronunciar palabra.

-Te traje esto. -anunció el rumano, entregándole la bolsita con una pequeña sonrisa.- Lo encontré mientras viajábamos y me recordó a ti, así que lo traje.
-Eh- gracias. -se las arregló para decir ella, sorprendida. No se había esperado eso para nada.

Tomó la bolsita ente sus manos y la abrió, extrayendo de su interior una cadenita plateada con un dije de una Luna llena que brillaba con el reflejo de la luz del foco de la cocina.
Era preciosa.

-Es preciosa. -lo mencionó en voz alta luego de admirarla por un rato. Miró al rumano.- ¿Estás seguro que me la puedo quedar?
-Bueno, te la traje por algo, ¿o no? -rio un poco él, caminando hacia un lado para apoyarse en el counter.- Por alguna razón, cara vez que veía la Luna llena me acordaba de ti. No sé por qué, honestamente. -mencionó algo avergonzado, mirando a un lado sin borrar su sonrisa.- Debe ser porque, la primera vez que te vi, cuando te asomaste por la escotilla del tanque esa noche, detrás de ti se podía ver la Luna.
-¿Había Luna llena ese día? -preguntó ella, algo asombrada por la revelación del castaño, aunque también nerviosa por sus palabras. Volvió a mirar la cadenita.- Ni me percaté.
-Supongo que esa imagen debe haberse quedado tan grabada en mi memoria, que cada vez que veo la Luna llena me acuerdo te ti. -sonrió Vladimir, parándose derecho y caminando hasta estar frente a ella.

(T/N) lo miró y lo observó tomar la cadenita en silencio sin borrar su sonrisa tranquila. Desabrochó el seguro y pasó sus manos por los lados de su rostro hasta estar a la altura de su nuca, abrochando de nuevo el seguro a ciegas y colocándole la cadenita con cuidado.
Ella la tomó entre sus manos y sonrió. Le encantaba.

El silencio reinó ente ambos mientras ella admiraba el collar y la sonrisa del rumano desaparecía. Al cabo de un rato, (T/N) se percató de que el castaño seguía de pie frente a ella y levantó la mirada para verlo. Descubrió una expresión que no había visto nunca, como si estuviera triste por algo que va a pasar, pero como si tampoco quisiera evitarlo. Observó sus ojos carmesí en silencio mientras él miraba los de ella y se quedaron inmóviles por un par de minutos.
Vladimir suspiró en rendición, rompiendo el silencio, y la jaló hacia su pecho en un fuerte abrazo.

-Eh-
-Perdón, ya no puedo pretender más. -murmuró él en su oído, interrumpiéndola y tirando por el piso toda la calma que había levantado durante esos dos minutos de miradas en silencio.
-¿Qué-?
-Me gustas, (T/N). -susurró, apretándola más.

Ella se quedó inmóvil, solo siendo capaz de escuchar su corazón en sus oídos. No supo cómo reaccionar durante un sólido minuto, su cabeza dándole vueltas y su boca negándose a producir sonido. El abrazo de Vladimir la acercaba más con cada segundo que pasaba, como si quisiera tenerla lo más cerca posible antes de la inevitable respuesta que no estaba muy seguro de si quería escuchar. Era triste.
La (nacionalidad) correspondió el abrazo algo nerviosa y lo sintió tensarse de la sorpresa.

-Tú también me gustas. -se las arregló para decir, su voz ofuscada por las prendas en frente.

Sintió que era separada de él de inmediato y se encontró con su expresión de sorpresa y alivio, un tinte de alegría escalando hacia su sonrisa con cada segundo que terminaba de convencerse de que lo que había oído no había sido una alucinación.

Tan pronto como la separó volvió a atraparla en un abrazo, esta vez de felicidad, y ella no dudó en corresponderlo de inmediato. Podrían haberse quedado así el resto de la noche.


~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Al paso que vamos con este internet mío, ni idea de cuándo acabaremos :'v

envíen ayuda pls

Sigue Lukas ^^7

Nos vemos cuando mi internet quiera portarse bien ^^;
Les loveo <3 Feliz 2018!

-Gray

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top