Semana de Chat Noir
(Segunda parte de Athanase)

Ya hacía más de un mes desde que el joven Agreste, supo la identidad de su dama escarlata y todo por una boina, hace más de un mes que cada día esta más cerca de Marinette.

Esto sorprendió a todo aquel que los conocían, era bien sabido que Adrien había puesto el título de mejor amiga a Marinette, desde hace mucho tiempo.

Para la de coletas era un sueño hecho realidad, sin embargo había algo que aun no la dejaba ser feliz— Marinette, todo bien?— pregunto Adrien a la azabache, ese fin de semana, su padre le había dado permiso para salir con ella, al parecer el mayor aceptaba la compañía de la joven.

—Si, todo bien Adrien, solo que bueno... Todo esto... Es...— dijo y suspiro. Aun creía que esto era un sueño y que de pronto despertaría.

Adrien, miraba de forma tierna a la joven, la verdad es que para el también todo parecía un sueño, pero ahora que lo pensaba era mejor así, por que podrían disfrutar más de ese tiempo juntos.

—Te entiendo, pero no deberías preocuparte por eso... Mi princesa— dijo de modo tierno el rubio, por desgracia eso no paso desapercibido por la de coletas, algo en esa palabra le recordo a cierto gato negro, eso la hizo reír levemente, ganando una cara de confusión por parte del rubio— dije algo gracioso?— pregunto.

A lo cual Marinette negó— para nada, solo que me recordaste a cierto gato, que bueno me suele decir así, a modo de juego, creo yo— explico, Adrien sonrió levemente, saber que ese sobrenombre le recordaba a su alter ego.

Al saber quien era Ladybug, decidió acercarse más a ella, con sus dos facetas, quería conocer más a esa joven, que de amiga no tenía nada.
Quería ser más íntimo con ella tanto como Chat y Adrien, aunque después de un tiempo, se entero que la joven siempre había sentido algo por él, pero por su típica frase es solo una amiga, casi la perdía.

—Marinette, yo... Quería pedirte... Mejor dicho decirte algo...— dijo de forma abrupta el rubio.

—Que pasa?— pregunto la joven de ojos cielo algo nerviosa por como había hablado el chico.

—Tranquila no es nada malo, solo quería preguntarte... Bueno... Yo... Tu...hem...— por que esa tan difícil hacer esa pregunta?— Marinette tu, tú quieras qué fuéramos, más que solo amigos?— pregunto Adrien de forma zoza y tonta.

La cara de confusión era un poema, eso había sido una declaración de amor?— Cómo?— pregunto algo confundida la azabache— mi príncipe, no entendí bien la pregunta— respondió sonriendo levemente.

—Pues que si tu... Espera, me dijiste como creí escuchar?— exclamó con los ojos bien abiertos el rubio, cosa que hizo reír a Marinette.

—Así es, le dije como creyó y si me gustaría ser más que su amiga... Joven Agreste— respondió de forma segura como su alter ego.

—Marinette tu me...— pero fue interrumpido por una explosión, eso los tenso a ambos, la excusa de Adrien para dejar a la azabache, en un lugar "seguro", fue qué debía ir a pedir ayuda...

Marinette acepto, solo para que fuera más fácil transformarse...

—My Lady, solo le advierto qué esto debe terminar pronto, pues me encontraba en una cita...— exclamó el gato.

Para Ladybug eso fue una sorpresa, que la hizo sonreír, asinto y comenzó la pelea...

[...]

Para mala suerte de ambos la pelea se extendió más de lo necesario, pero eso le dio una idea al gato, si iba a tener algo con esa chica, debía ser honesto.

Veía como Ladybug estaba algo preocupada, tal ves pensando en la excusa qué le diría.

Respiro hondo y dijo las palabras que definirán todo...— Sabes mi princesa yo opino que deberías descansar...— dijo como si nada, esperaba una reacción ante eso dicho.

—Creo que tienes razón Cha...— sin embargo no termino la frase y miro al gato con ojos bien abiertos— cómo me dijiste?— pregunto nerviosa.

—Hem, mi princesa?— respondió tranquilamente, mientras observaba como a Ladybug le quería dar algo...— princesa... Todo bien?— pregunto Chat en un tono preocupado.

—A-a-a...— antes de que pudiera decir algo más Chat cubrió con un dedo los labios de la joven, haciendo qué guardará silencio, el héroe negó y Ladybug lo miro confundida.

—Dime mejor como lo hiciste hace un rato, así ni tu ni yo abremos infringido ninguna tonta regla mágica— dijo nuevamente tranquilo y miro fijamente a la mariquita.

Lo miro atenta y un click hizo eco en su cabeza— mi Príncipe?— susurro, su cabeza era un caos— como fue que... Esto... No... No esta bien— dijo sin poder creer lo que estaba pasando.

—Conjeturas y una pequeña investigación...— respondió— ahora lo demás no importa, solo importa que ya lo sabes y yo ya lo se... Y sera mejor que nadie más lo sepa o algo me dice que lo que lograste reparar... Sucederá— dijo serio. Ante esto Ladybug asintió.

Algo le decía que pronto tendría a Bunnix por ahí, pero por el momento, disfrutaría cada momento con su Príncipe de negra armadura...

Total de palabras 850.

Y con esto doy por finalizado este libro.
Agradezco a todos los que se tomaron el tiempo de leerlo.
Y en el transcurso de la semana culminare mi otro libro.
Sin más me despido.