CHAPTER XI
CHAPTER XI
( you want a little bit of this again! )
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AGNYS NO SABÍA QUÉ SENTIR. SORPRESA, al ver a aquella persona frente a ella a tan solo unos metros después de tanto tiempo; Tristeza, por volver a verla después de todo lo que había pasado; O enojo, después de todos esos años sin su presencia a su lado.
Perséfone se encontraba en el medio de la multitud junto al resto de las familias de Auradon, sólo que esta vez, ella se mimetizaba perfectamente con aquellos egocéntricos seres. Ya no usaba sus ropas negras como lo hacía cuando estaba con su padre, ahora en cambio, usabas tonalidades pasteles, en su mayoría rosas y verdes como lo hacía antes de conocer a Hades.
Sin embargo, Agnys sabía perfectamente que su madre era la arpía más grande que podías cruzarte, y esa nueva imagen ejemplar no la engañaba ni un poco. Perséfone no era ninguna tonta, era una diosa astuta y con una inteligencia innata.
¿Acaso creían que Agnys había adquirido todas sus habilidades cognitivas de Hades?
Pero la increíble inteligencia no era lo único que la peliazul había adquirido de su madre, aquella habilidad que contrastaba con todo lo que Hades le había dado.
Cualquiera diría que Agnys es una diosa de destrucción pura, con una ira y fuego incontrolables. Más ella, también podía crear vida, lo cual delataba sus sentimientos más de una vez.
La primera vez que la peliazul descubrió aquel detalle fue con Evie, las pequeñas apenas habían sido amigas por un año y Agnys había notado aquellos raros sentimientos que aparecían. Más cuando su amiga le beso la mejilla despidiéndose, antes de correr a su casa; una pequeña corona de flores apareció en su cabello de un momento a otro, pero desapareció en unos segundos gracias a la gran barrera de la Isla que impedía toda clase de magia.
Con el tiempo Agnys notó que también podía crearlas adrede, sin tener a sus sentimientos involucrados. Por lo que cuando algún niño, que no temiera de ella, se lo pedía, no dudaba en formar una pequeña flor, que al igual que todas desaparecía. Pero ese pequeño gesto alegraba a los tristes niños de la Isla, por lo menos unos minutos.
— ¡Ven, Agnys! — la voz de Kiara la sacó de su batalla de miradas— ¡Van a jugar al croquet antes de almorzar!
— ¿Croquet? — preguntó confundida, mientras la rubia la arrastraba hacia el campo.
— Sí, ya sabes. En casa lo juegan con flamencos.
— Oh.
Todos se encontraban jugando aquel juego, a cuál Agnys aún no entendía su diversión, sólo tiraban la pelota por esos aros.
Aburrido.
El ladrido de tres perros comenzó a escucharse llamando la atención de todos, los ojos de la diosa comenzaron a llenarse de lágrimas al ver a la criatura acercarse. Esta ya no tenía el inminente tamaño, sino que tenía el normal tamaño de un perro grande, más las tres cabezas se mantenían en un mismo cuerpo.
Por lo menos no lo separaron, pensó.
La muchacha se agachó en el suelo mientras el can corría hacia ella emocionado, antes de saltarle encima y comenzar a lamer su rostro, mientras daba sonidos lastimeros. Él la había extrañado demasiado.
Todos miraban la escena un tanto conmovidos, especialmente Evie quién fue la que la consoló cuando su madre se llevó a la mascota a Auradon.
— ¡Cerbero! — exclamó la diosa mientras abrazaba al inquieto perro que no dejaba de demostrar su amor—. Te extrañé, amigo...
— Y él te extrañó a ti.
Esa puta voz...
— ¿Qué quieres, madre? — preguntó burlona mientras se volvía a parar, aun acariciando las cabezas del perro.
— Quería verte, el Hada Madrina me invitó— contestó con su porte intacto, mientras Cerbero corría a jugar con Chico—. Creí que estarías feliz de verme.
— ¿Feliz de verte? — siguió perpleja por las palabras de su progenitora—. Nos abandonaste en aquella Isla apenas tuviste la oportunidad, no lo pensaste dos veces antes de abandonar a tus hijos y, por si fuera poco, te llevaste a Cerbero contigo.
— Aquella Isla no era un buen hogar para un perro.
— ¿Y para tus hijos sí? — comenzó a elevar la voz llamando la atención de la gente a su alrededor, para después murmurar—. No lo puedo creer...
— No iba a permitir que por los errores de tu padre mi vida fuera un infierno— le contestó enojada de que su hija causara una escena frente a aquellas personas tan respetadas—. Y luego de que me enterara de su pequeña aventura con aquella... Hada hechicera maligna, no podía estar más a su lado.
Agnys se quedó en silencio antes de responder.
— Eso no responde el por qué abandonaste a tus hijos— se acercó más a ella—. Hadie lo sufrió más, ¿sabes? Después de todo, él era más cercano a ti— no dudó en continuar al ver que su hermano era un punto débil para su madre—. Lloró todas las malditas noches mientras nos abrazábamos antes de dormir, con el tiempo lo superó, pero ten por seguro que te odia desde lo más profundo de su ser.
Los ojos de su madre se iban entristeciendo con cada palabra que decía y sus lágrimas comenzaban a llenarlos, más al igual que ella, no las dejaría escapar. Se podría decir que el orgullo era algo que compartían. Agnys sabía que Hadie era el punto débil de su madre, después de todo siempre había sido su favorito, ya que ambos compartían las mismas características físicas y personalidades.
Su discusión fue detenida cuando una voz gritó "¡TÚ!", llamando la atención de todos hacia Mal, Audrey y una mujer mayor.
— ¿Q-Qué estás haciendo aquí? No entiendo cómo estás tan joven— siguió la mujer mientras todos se acercaban a tranquilizarla.
— Reina Leah, está bien— habló Ben mientras pasaba un brazo alrededor de Mal—. Maléfica aún está en la Isla, esta es su hija Mal. ¿Recuerda mi proclama para darle una oportunidad a la nueva generación?
— ¿Lo dices enserio, Ben? — preguntó asombrada—. ¡Nos destruirán!
» ¿Qué pasa? ¿No lo recuerdan? «, siguió. » Manzanas envenenadas y esa magia, su magia. Mi hija fue criada por hadas por la maldición de tu madre, sus primeras palabras, sus primeros pasos, ¡no estuve con ella! «
La pelimorada intentó acercarse a Leah, pero Chad y Herkie se pusieron en medio deteniéndola.
— ¡Vete!
— No hagan esto, chicos— la defendió Ben.
— Los criaron sus padres, Ben— contestó Herkie molesto—. ¿Qué le enseña un villano a su hijo, ¿eh? ¿Bondad? ¿Juego limpio? ¡Claro que no!
— Le robaste a otra chica el novio— Chad miró a Mal para después dirigirse a Jay y Evie—. Tú, disfrutas lastimar, y a ti solo te importa el dinero y engañar.
Herkie se acercó a Agnys creando una mayor tensión luego de lo sucedido en la fiesta, provocando que Zahid y Kiara comenzaran a acercarse, más Peyton las agarró por el brazo, sabiendo que no era su pelea.
— Y tú, Diosa del Inframundo— se burló Herkie—. Crees que te has adaptado bien a la vida en Auradon, los tienes comiendo de tu mano, pero no creas ni por un segundo que todos nos creemos aquel cuento. Sigues siendo la misma niña en busca de un poder que nunca tendrá de vuelta.
— ¡Espejito, espejito en mis manos, dime quienes son los mayores gusanos! — exclamó Evie mientras se ubicaba frente a la diosa para defenderla, pero Chad corrió su mano de un golpe haciéndola reaccionar.
Agnys la corrió antes de prender aquel fuego azul en sus dos manos, provocando que todos se alejaran con miedo, excepto Herkie que se mantuvo en su lugar listo para devolver el golpe.
— ¡ACASO OTRA VEZ QUIERES UN POCO DE ESTO! — gritó incrementando las llamas, mientras Jay sostenía a Chad del saco a la vez que Evie lo rociaba con su perfume. Para sorpresa de la diosa, Chad cayó al suelo desmayado.
Los hijos de los villanos comenzaron a correr, a diferencia de Agnys quién aún seguía sorprendida por el extraño perfume de Evie. Ésta al ver que no los seguía, volvió para sujetar su mano y llevarla junto a ellos.
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Todos se encontraban almorzando desanimados, por otro lado, Agnys se encontraba sola con su almuerzo abajo del árbol a su lado. No quería almorzar con Evie y Mal, luego de que la traicionaron (nuevamente); pero tampoco aceptó la invitación de Zahid cuando vino a buscarla. Quería estar sola para pensar, después de todo el ver a su madre también le había afectado.
— ¡Oigan, chicos! ¿Cómo están todos? — preguntó Ben llegando con su característica alegría de siempre—. Olvídenlo, ¿sí? Después de la Coronación les prometo que estarán bien.
Al no recibir respuesta, les sonrió a todos, incluso a Agnys, antes de despedirse.
Doug también intentó a acercarse a Evie, pero Chad lo impedía. Finalmente, el muchacho se rindió provocando que Agnys elevara su ceja descontenta.
Si así pelearía por Evie, mejor que no vuelva.
— ¿Cuánto crees que ella aguante aquí? — le preguntó Audrey a Jane, quién realmente hacía un mal papel de chica plástica—. Mal le atrae por ser la chica mala.
— Sí, él jamás convertirá a una villana en reina.
Ambas se fueron riendo, mientras Mal giraba su mirada a Agnys, quién ya se encontraba viéndola fijamente para ver su próxima acción. La pelimorada sacó el libro de su madre antes de decir.
— Postizos con rizos, deshagan el hechizo.
El cabello de Jane volvió a ser como era antes, ganando risas de las chicas a su alrededor.
» Tengo mucho más en mi libro «, les señaló enfrentándolas junto al resto.
— Disculpa, ¿quién te crees que eres? — preguntó Audrey enojada.
— ¿Crees que es sólo una amenaza?
Todos corrieron de allí dejando a los villanos solos en aquella mesa. Mal se giró hacia su hermana quien seguía sentada bajo el árbol expectante a la situación.
» No debí pedirle a Evie que me ayudara, cuando sabía que tenía planes contigo. Fue infantil, pero no me voy a disculpar, eso no hacen los villanos. «
La diosa se levantó lentamente, formando expectativa en el grupo de villanos, antes de pararse frente a la pelimorada.
— Al fin lo entendiste— la miró de arriba a abajo—. Pero no somos amigas, uva podrida.
Aquellas palabras provocaron una sonrisa en Mal.
— Que mañana llegue lo antes posible— dijo antes de volver su mirada a Agnys, sabiendo que en su interior quería el orgullo y la aprobación de su hermana mayor—. Tomemos esa varita y larguémonos pronto de aquí.
¿Qué piensan de Perséfone?
¿Y de la relación de Mal y Agnys?
Ya saben que si quieren ver como mis personajes se encontraban vestidos pueden ir a mi libro Zero to Hero, en las secciones de Style.
Algunos fans de Lore Olympus habrán notado el Easter Egg, siendo uno de los poderes de Agnys.
Falta un capítulo más para terminar el primer acto de Agnys con el final de la primera película de Descendants, ¡que emoción! Nunca creí que esta historia llegaría tan lejos.
Gracias a todes por hacerlo posible♥
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