- ¿Por qué regresamos hasta el hotel?

- Necesitamos cambiarnos de ropa, Silver propuso revisar Montaña SKY de nuevo, según su intuición "no femenina" -dijo haciendo comillas con sus dedos- le da mala espina esa montaña desde que la mencionamos -terminó de decir el azebache-

- ¿Vamos a esquiar o algo así? -el azulado enredó sus piernas en el cuello del azebache, apretando sus muslos con los cachetes del moreno-

Se encontraban en una posición un poco extraña, nuestro amigo negrizo se había sentado en la esquina de la cama para cambiarse de botas y buscar unas más apropiadas, pero el azulito que ya estaba en calcetines se sentó atrás de él y lo jaló con sus piernas.

El moreno mordió la parte interna del muslo por encima del pantalón, dejando la marca de sus dientes y quitando al cobalto de inmediato.

- ¡Auch!, ¡Óyeme!

- No abuses, Berry.

El de ojos cafés se ruborizó al escuchar el apodito; se quedó acostado con las piernas semi abiertas, dándole la oportunidad al azebache de ganar lugar entre ellas. El mayor puso sus manos a cada costado de la cabeza del menor (evitando jalar sus púas), se dieron una sonrisa traviesa entre ambos y empezaron con aquellos besos secretos que se daban.

Tras pasar un tiempo donde ambos se saciaron, escucharon unos toques insistentes provenientes de la puerta. Al abrir el azulado, que esperaba ver a Silver, encontró a Mephiles el cual lucía muy intranquilo.

- ¿Sucede algo?, No me digas ¿Ya es hora de irnos?, ¡No me he cambiado!

- Eh jeje, no no, aún no es hora de irnos. La verdad quería hablar contigo...a solas. -mencionó mirando al azebache que estaba en el interior de la habitación, regresó su mirada a el azul que lo miró confundido-

- ¿Conmigo?, ¿Tenemos algún tema pendiente acaso?

- Solo necesito decirte ciertas cosas que me ha notificado el comandante...son muy importantes y tiene mucho que ver con tu seguridad. -aun no es oficial así que no quiero alterar a Shadow y a Silver -le mencionó por lo bajo-

- Entiendo -le contestó, volteó a mirar al de ojos rojos- en un momento vuelvo, deberías cambiarte esas "botas misteriosas" de Hello Kitty -le dijo en burla y después salió con el hermano del bicolor-

Caminaron hasta el restaurante del mismo hotel, tenían permiso de entrar a lugares donde solo había empleados de aquel establecimiento; entraron por la cocina y salieron a una parte exterior dónde sacaban los residuos de comida, un callejón bastante mal iluminado.

- ¿Qué sucede? -le dijo el azul sin su notoria sonrisa, cambio su actitud a una más seria y su mirada le provocaba los mismos escalofríos a Mephiles desde su primer encuentro- para que no le quieras decir a tu propia pareja debe de ser bastante delicado.

- Verás, hace unos momentos hablé con el comandante. Me dijo que tus archivos de criminal ya están en tu historial bajo tu mismo apodo, creó un archivo falso para respaldar el papeleo que harán para convertirte en civil.

- Eso significa que...¿Estoy haciendo esto bien?

- Algo así, mira, Eh...no es muy sencillo de decir esto pero, después de hablar con él comandante me llegó una notificación de Scourge y...

- ¿Cómo tienes el número de Scourge? -le dijo con duda-

- Las ventanas.

- Ah.

- Bueno, recibí un mensaje de él, decía que había espiado un poco al comandante mientras hacía el archivo y lo escuchó conversar con el subcomandante. Es probable que te manden a una zona más oculta si llegas a dañar de muerte a un civil inocente en esta misión.

- ¿Oculta...?

- Es algo como una dimensión que distorsiona las demás a su antojo, lo llaman... la Zone Cop.

El azulado cambió su expresión a una sorprendida, después a una preocupada. Ya había escuchado hablar de aquella zona, una dimensión dónde todos tenían un "yo" diferente, se hablaba como un simple relato entre criminales. Qué los más grandes llegaban ahí, pero la mayoría no creía en dimensiones y esas cosas. La Zone Cop era reconocida entre lenguas por su famosa Zona Blanca, un lugar en donde te perderías en la nada misma, encadenado y obligado a permanecer en el primer lugar en que apareciste al entrar ahí.

Nadie volvía de ese sitio.

- Dices que...que aún es una suposición ¿No?...¿Verdad? -miró con un poco de esperanza a Mephiles, el cual asintió-

- Aún no es oficial, pero es preocupante que lo esté considerando. Si te mandan ahí no podrás volver, y aquí entre nos, sé que mi hermano aprecia tu lugar a su lado -le susurró lo último mirando como un rubor algo fuerte aparecía en el azul, el cual estaba algo avergonzado-

- Sé que empezaron por el pie izquierdo, pero jamás había visto a mi hermano ser tan cercano con alguien que no fuese yo o María. Te aprecia y tu partida le dolería muchísimo -lo tomó de los hombros-, trata de acabar bien está misión tan caótica, forma parte de la civilización y has algo que te guste además de robar. La Zona Blanca... jamás hemos mandado a ningún criminal ahí...odiaría que fueras el primero porque se ve en tus ojos que añoras el futuro tanto como el presente -miró como los ojos cafés se cristalizaban en lágrimas- en el presente esta Shadow y en el futuro muros que deberás cruzar, y estaremos contigo para hacerlo si aceptas dejar esa vida tan poco sana que llevas...solo...solo si estás con nosotros...podremos apoyarte como nadie lo ha hecho.

El azul rebosaba en lágrimas, resbalaban danzantes por sus mejillas pálidas gracias a la temperatura mínima que existía en el exterior, miraba los ojos reptiles...aquella mirada que tenía esperanza...esperanza...¿En él?...¿Otra persona más creía que debía vivir la vida que jamás tuvo?...¿Después de todo?

Hipeó con dulzura y sollozó en decadencia, cubrió sus ojos y su rostro de aquel azebache frente a él. Se sentía extraño, herido, jamás estuvo así...¿Calidez?...¿Porqué sentía calidez si estaba tan triste?

El moreno lo abrazó en un consuelo mudo, sobó la espalda del más pequeño en altura para rebajar su llanto. Trató de pensar en otra cosa, pues era de esas personas que lloraban si alguien más lo hacía.

Se quedaron así unos minutos más, el cobalto se separó lentamente y limpió las lágrimas que aún sobraban en sus pómulos. Mephiles se talló las manos en sus ojos para quitar la picazón que le había entrado ante el lloriqueo del azul, el mismo cobalto tomó de la muñeca a Mephiles en un pequeño consuelo que aún necesitaba. Esté comprendió y de esa forma empezaron a caminar en dirección a los cuartos nuevamente, el de ojos cafés trató de calmarse y parecer a como el azebache frente a él lo encontró en la habitación. No quería que Shadow lo viera en ese estado.

Entraron al elevador, donde ambos se soltaron para evitar malos entendidos con sus amoríos si los llegaban a ver así.

- Gracias por decirme, me dará tiempo a aceptarlo si es que llego a fallar. -le dijo el azul-

- Lo siento mucho, era necesario decírtelo a ti primero, serás el más afectado en todo esto -recordó algo y hablo-, oye...la primera vez que te vi en aquel callejón, ¿A dónde llevaste aquellos sobres de colores?

- Ah, la verdad solo quería molestar, los tiré a la basura -dijo con simpleza- además esos tipos ya tenían mucho tiempo molestando en mi zona, debía de hacer algo.

Llegaron al piso dueño de sus cuartos, Mephiles entró al que compartía con el albino despidiéndose del azul, y esté entró al que compartía con el otro moreno.

- ¡Holis, ya llegué! -exclamó el menor, tirándose en la cama donde aún se encontraba el azebache-

- Ey~ ¿Porqué tanta alegría?

- Nah, quizás el aire fresco me hizo bien.

El de tez morena tenía cierta inquietud por saber que le dijo su hermano al pequeño azulito, volteó a ver a su acompañante, éste tenía los ojos cerrados mientras se mantenía con los brazos extendidos a como cayó.

- Oye, Berry.

- ¿Hm?

-...Eh...que...¿qué te dijo mi hermano?

Notó cierta tensión en el ambiente tras hacer la pregunta, el azul abrió sus ojos y lo miró con cierta luz apagada.

- Que...que el comandante ya está haciendo mi papeleo para convertirme en civil -terminó de decir con una sonrisa-, al parecer no me he equivocado en esto.

- ¿Enserio?, Me alegro por ti...ya no tendrás que correr de la ley.

- ¿Aún no encuentras otros zapatos para la nieve? -le dijo cambiando de tema, al ver que seguía con las Hello Kitty's-

- Oh, no, aún no. No sé dónde quedaron mis botas de G.U.N, estoy segurísimo de que las puse en la maleta. -se sentó de nueva cuenta en la cama, para después agacharse a la maleta que tenía enfrente- A demás, ni siquiera sé cómo llegaron estás botas de la repipi a mi equipaje.

El cobalto rió al escucharlo quejarse, hizo los movimientos suficientes para que quedara sentado en las piernas del azebache y se dirigió a su cuello, dónde comenzó a darle besos cortos y lo mordía en ocasiones. El azebache se sonrojó ante esto y simplemente se dejó querer, tomó al chiquillo de la cintura para poder abrazarlo.

Tocó sus hombros dando suaves masajes, dejó de dar besos y mordidas para concentrarse solo en aquellos toques relajantes que le proporcionaba a su dominante. Después de un rato se detuvo y lo abrazó con fuerza.

- Ya deberíamos bajar.

- Tendré que llevarme las botas de Kitty -suspiró con fastidio-

El azulito se separó del azebache para dirigirse por un calzado más adecuado para la nieve, observó la mochila que había dejado en una de las mesitas de noche y se acercó a ella; miró en su interior los dulces que tenía, tomó unos cuantos para si mismo y tomó especialmente aquel dulce de coco que era para el azebache. Dudó de dárselo en ese momento así que lo metió en los bolsillos de su suéter.

Bajaron a la plaza del hotel donde ya los esperaban Silver y Mephiles, el plateado iba vestido de un blanco completo y Mephiles llevaba algunas ropas entre azul y morado. Shadow iba resignado con aquellas botas levemente aniñadas y el azulado llevaba la misma ropa anterior, solo que con botas negras adecuadas para la nieve que les dió G.U.N.

- Estuve haciendo algunas hipótesis -habló el albino-, quizás el echo de que no encontremos a Roy cuando salimos a buscarlo...

- Es porque el horario influye en su aparición -le prosiguió su pareja- en la mayor parte de sus movimientos se muestra de día, pero a como lo hemos notado desde hace años -miró al azul-, los criminales tienen un jefe que les da la orden de como actuar; en cuanto nosotros nos trasladamos acá, dejó de atacar en horarios con luz solar.

- Entonces, la hipótesis de Silver es que... ¿Ahora ataca de noche?

Siguieron conversando en aquel sitio mientras el azul bajaba la mirada para pensar un poco.

- "Saben que hay un mayor, un alto mando. Pero aun no saben quién es y por eso no estaba en la lista que nos dió el comandante. Si ayudo a atrapar a Fleetway...puede que el comandante no considere la Zone Cop" - se dijo a si mismo con leve esperanza. Empezó a seguirle el paso a los otros que ya habían comenzado a caminar, pues su destino era montaña SKY.

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Sentado en una de las bancas de la extensa Zona turística, miraba la conversación que mantenía con su jefe.
Se sentía dolido, pues necesitaba creer que aquel erizo amarillo le tenía un poco de aprecio al menos y se dignaría a aceptar su oferta de ayudarle un poco con Darkblue.

Anteriormente, cuando Fleetway era algunos años más joven y él apenas iba agarrando "confianza" con el ámbito criminal. Se enteró de una pelea que se había dado en el plantel central de criminales que recién manejaba el erizo dorado.

Muchos decían que, Fleetway había logrado hacerle una llave a Darkblue, algo meramente imposible para todos los demás que se habían enfrentado a él. Le hizo una llave, lo acorraló y estuvo a punto de matarlo por asfixia, pero Darkblue, Oh ese Darkblue, había jugado sucio. Nadie supo cómo fue que se liberó de esos brazos tan peligrosos, pero le dejó una marca de navaja en el cuello a su jefe.

Quería contar con su ayuda para poder atraparlo, sabía que jugaba con fuego al pedirle algo así, también sabía que su "recompensa" estaría en peligro; a este punto ya no le importaba, daba lo mismo después de una sesión de autolesión, alcoholizamiento y fumar un poco de hierba durante toda una noche para al final tomar un relajante baño de burbujas bajo la luz de suaves velas.

Abrió sus ojos de par en par al ver los zapatos que había frente a los suyos, subió su mirada y ahí encontró aquellos ojos rojos en espirales que se negaba a seguir alabando. El amarillo se sentó a su lado, levemente cansado de estar entre algunas personas después de mucho tiempo.

Si, Fleetway si viajó a Snow Montain. Se alojó en un hotel privado que era estrictamente para rufianes como él, riquillos y poderosamente peligrosos.

- ¿De qué querías hablarme?

Los nervios se le subieron a la lengua, no podía pedirle lo que quería y era todo tan extraño. Le dió una mirada , notó que se cubría con un periódico que tenía por cabezera la noticia la última aparición de Darkblue en la joyería. Miró con odio a esa figura que la cámara del banco había tomado, se le fueron los nervios y su orgullo volvió.

- Quería pedirte un favor, sobre los movimientos que haré esta noche. -se cruzó de piernas en torne a diva al igual que sus brazos, lo miró finamente-

- ¿Qué necesitas?, ¿A mis hombres?

- Necesito que tú me ayudes personalmente -trata de echarle una mirada a los costados de su cuello, para verificar si era cierta la pelea de hace años- a llevar a Darkblue al cuarto de tu Doctorsito.

Miró la expresión de Fleetway, esté miraba sorprendido al periódico, aunque Iván sabía que en realidad su vista estaba bloqueada. Notó el leve rubor de aquel que es su jefe, eso lo hizo entristecer. Sabía que si aceptaba, era por mero gusto de volver a mirar a aquel chico azulado.

-que...¿Qué te hace creer que te ayudaré?, Mis manos no se entrometerán hasta que todos mis hombres fracasen, aunque honestamente tú eres el último.

- Por eso, Rayito, todos han fracasado porque los mandas como bala directo a él. No hay planes, no hay aliados, NA-DA. De esa forma nunca conseguirás que Darkblue se una otra vez a tu organización y te entregue la esmeralda blanca para tus negocios ilícitos.

- Agh...eres un idiota que sabe pensar muy bien -bajó el periódico y talló su entrecejo con las puntas de sus dedos índice y pulgar- está bien, ¿A qué hora harás tú movida?

- Justo ahora.

- Qu- -el amarillo tapó su boca, notó que le dió una señal con su mirada. Volteó la vista y ahí lo vió-

Vió a aquel que trabajó para él como mascota a su amo, el brillo de su mirada bajo esas lentillas que lo cubrirían bien si no conociera ya ese cuerpo. Recorrió sus púas pálidas y miró con odio aquellas malditas botas de esos estúpidos de G.U.N, al igual que odió la cercanía que tenía con ese Agente que Iván había safado de la muerte por sus gustos indecentes y su homosexualidad afeminadamente fina.

Un brillo en la mirada de Fleetway relució, lo admiró con fascinación y saboreo en su boca aquel cuello que había podido probar tan solo una vez, sonrió lascivo y tomó la mano que cubría su boca para quitarla. Miró a su compañero de ojos naranjosos carmines y habló.

- ¿Cuál es el plan?

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- ¿Estás seguro de qué es por aquí?, Llevamos un buen rato dando vueltas y ya ví ese árbol tres veces -exclamó el azul-

Se encontraban en la búsqueda de alguna pista de aquel equidna, observaban a los niños del área cuando un chico con capucha tomó a una linda bebita de al menos un año de edad. Al mirarlo fueron corriendo tras de él, llegaron a una zona de arbustos y hierba que no había sido cortada hace tiempo en la montaña y perdieron el rastro.

Sin embargo, hay que aclarar que Mephiles no tiene un buen sentido de la orientación.

Llegaron a un acantilado no muy profundo, pues se notaba el paso de un río bastante agresivo. No podían verlo por ser de noche, pero podían escucharlo.

- Vaya, vinieron hasta aquí por una linda bebé que aun no sabe apreciar su cortita vida -sonó una voz burlona y el dueño salió de entre los pinos- está bien, no la quiero.

La dejó caer en la nieve e inmediatamente la bebé empezó a llorar. El cuarteto lo miró con enojo, Silver estaba a punto de sostenerla con su Telequinesis, pero...

- Ah, Ah, ¿Qué crees que haces plateadito? -apuntó con un arma a la niña, mientras ponía un pie sobre su pechito- si usas tu poder le daré un tiro , tengo un dispositivo en esta muñeca que anula tu telequinesis así que puedo disparar -terminó de forma fría-

- ¡Tch! -se quejó entre dientes-

Mephiles trató de usar sus sombras, pues incrementaba su poder en la noche. Acercó una de forma lenta hacia la espalda del Equidna, a punto te atacarlo pero de igual forma no pudo acatar sus acciones.

- ¡Ups!, Tu tampoco puedes usar tus demonios, rarito -le señaló con la mirada hacia la dirección donde se encontraba el albino, el cual soltaba quejidos-

Un tipo lo tenía por detrás, le amenazaba con una navaja en el cuello, justo en la yugular y el albino forzejeaba para que no pegara más el filo a su piel. Mephiles se quejó molesto y a la vez preocupado, alzó sus manos en señal de que no haría nada. Shadow miró al azulado y esté asintió sin que los dos sospechosos lo notarán.

- ¿Y porqué este trato tan repentino? -dijo en voz alta el azebache mientras caminaba en medio de su hermano y cuñado- siempre has estado escondido, Roy.

- Oh~ el dinero mueve al mundo negro de mi*rda, tu y los tuyos deberían de saberlo.

Mientras el azebache distraía a aquellos dos, nuestro adorable y para nada peligroso azulito trepaba en la copa de un pino, se pasaba cuidadosamente de uno en uno hasta que llegó a dónde se encontraba Roy, pensó en como quitarle a la bebé. No podía tirarse como quisiera, pues pisaba a la niña, no tenía sus dardos con veneno y su única arma era una pistola que lo delataría al quitarle el seguro, maldició a G.U.N por quitarle sus cosas.

Movió sus orejitas al escuchar un sonido ajeno a los que estaban debajo. Había un tercero con ellos.

- Hola, agentucho. Creo que no hemos tenido el honor de hablar nunca.

Se paralizó al escuchar aquella voz, abrió sus ojos sorprendido haciendo notar sus reliquias ocultas en color marrón. Dió una mirada a los que estaban abajo, y ahí lo vió.

Fleetway, ese maldito e hipócrita erizo de mi*rda que lo a estado jodiendo desde hace mucho tiempo, pasó saliva algo nervioso. ¿Qué hace ese riquito aquí?, ¿Porqué está con Roy?, ¿Qué planeaba está vez y porqué no dejaba de joder?

- ¡TOC TOC! -le dijeron tocando su hombro-

Se volteó con sorpresa al bajar la guardia y tiró un puñetazo a la cara de aquel idiota, se desequilibró y ambos cayeron del pino a un costado de Roy. Se levantó velozmente y dió saltos atrás hasta quedar frente a Fleetway.

- Hola, Blue. ¿No es un gusto vernos de nuevo? -le sonrió con malicia y le tomó del antebrazo, le iba a hacer una llave pero el azulito con su otro brazo le golpeó las costillas. Mandándole unos pasos más atrás.-

- ¿Que mi*rda quieres está vez, pollo hediondo? -se puso en posición de pelea, mientras el azebache le cubría la espalda-

Mephiles tenía la necesidad de ayudarlos, pero Silver aún era amenazado, alguien le tocó sus costillas un poco y miró a su izquierda.

- ¡Hola, Holawas!, Debe ser difícil ver a tu novio en esa situación, ¡Por eso te haré el favor de que no lo veas! -aquella voz emocionada se lanzó hacia el con una jeringa de líquido raro en su interior, Mephiles forzejeó al notar que iba directo a su cuello, en un descuido el sujeto le hizo cosquillas con el pie en sus costillas, distrayéndolo y clavando aquella aguja en su piel.

- ¡Agh!

- Shhhh, Shhhh, ya ya. No te preocupes, solo dormirás durante unas cuantas horas -le dijo riendo- a menos de que se me haya ido la mano -soltó carcajadas y se levantó de ahí, dejando a Mephiles dormido. Se acercó con Iván, el cual sujetaba a Silver-

- ¡Ni se te ocurra ponerme tus asquerosas manos encima!, ¡Mephiles!, ¡Despierta, por favor! -le llamó en vano-

- No te preocupes, no lo maté. Solo los dormiré para que no interrumpan en esto. -se acercó evitando las patadas del plateado, le inyectó el líquido de una nueva jeringa que sacó de su abrigo en su costado derecho del cuello. Poco a poco fue dejando de hacer fuerza hasta que cayó en la nieve, estirando su mano hacia su azebache, finalmente durmió-

Iván arrastró aquellos cuerpos y los amarró a un pino, el Equidna naranja le colocó a la niña entre las piernas a Silver. Ahora miraron a los dos últimos erizos, rodeados ante cuatro criminales.

- ¿Tu la derecha y yo la izquierda? -susurró el azebache, notó el asentimiento que dió el contrario y se lanzó a atacar a Iván mientras el azulito peleaba con el erizo que se presentó ante él-

Miremos la pelea de Iván con Roy contra nuestro querido amigo azebache:

- ¡Es un gusto verte, guapo! -dijo coqueto el amarillo mientras le trataba de dar golpes en el torso y esquivaba los que le daba el moreno algunos daban en dónde quería, pero otros no-

Hay que mencionar que a pesar de la "finura" con la que trata Iván, es muy bueno en el combate cuerpo a cuerpo. Roy se acercó por detrás del moreno y le proporcionó una patada por la espalda, accidentalmente el azebache cayó arriba del amarillo.

- Oh cielos, ¡primero se invita a cenar travieso!~ -golpeó en su estómago, sacándole el aire al azebache. Esté se forzó a recuperarse y pateó las costillas del Erizo para después darse la vuelta y golpear en la cien a Roy (el cual se acercaba quitando el seguro de su arma), esté cayó inconsciente al instante-

- Perdón por la descortesía, creo que también te daré tus dulces sueños -tronó sus dedos en puño y se abalanzó contra el de ojos rojos, esté esquivó el ataque y notó como el moreno había dejado un hueco en la tierra con su mano-

- Eres muy fuerte, ¿Me preguntó dónde más darás así de duro? -le tiró un beso con su mano derecha y ahora fue él el que golpeó las costillas del azebache. Esté se levantó y barrió las piernas de Iván con las suyas, se dió la vuelta para quedar encima de él y le regresó el golpe en el estómago que le sacó el aire-

- No querrás saberlo.

El amarillo rió y se levantó de un salto hacia atrás, al acabar de hacer esto el azebache le proporcionó una patada en la mejilla derecha, dejando una Hello Kitty. El de color primario miró el calzado del azebache desde el suelo y fue grande su sorpresa.

- ¡Mis bebés!, ¡Tu tomaste mis botas!

- ¿Qué?, ¿Está porquería es tuya? -miró el calzado del contrario y frunció el seño molesto- ¡Y tú tienes mis botas!, ¡Ladrón!

- ¿¡Adivina qué es lo que soy!? - se levantó y le dió una patada en la mejilla, dejando el pequeño logo de G.U.N en ella- JA, ¿Ahora quien se ri-?

El azebache lo tomó de la cabeza y lo empujó contra su rodilla, dejándolo inconsciente al golpearse la cien, se quitó las botas y se las quitó a Iván también, se puso las que le correspondían y dejó las otras tiradas; tomó la pistola que tenía Roy para ir a ayudar a su azulito.

Mientras esa pelea se daba, el azulino también luchaba contra aquel erizo de orbes hipnotizantes.

- Es un gusto verte de nuevo -ambos estaban en posición de pelea, ninguno había atacado aún-

- No te esfuerces en ser cordial, no te queda para nada

- ¿Qué haces con estos agentes, querido? -se acercó a paso lento hasta quedar frente al cobalto, este se puso firme alzando su mirada para conectar con los espirales contrarios- mírate, escondes tus bellos ojos en ese desagradable café -acarició la mejilla suave del azul y acercó sus bocas- si estuvieras de mi lado, no te ocultarias ni usarías ese apretado traje negro - dijo con segundo sentido lo último-

- ¿En serio?,y yo pensando que tendría que serte leal con mi vida, entregandote a alguien que amo como préstamo eterno para tenerme amarrado a tu lado como a Iván - dijo de forma brusca y tomó la muñeca del amarillo, la torció hasta escuchar un tronido desgarrante, lo acercó más hacia él y le proporcionó una patada en el estómago, mandándole a volar a unos cuantos metros delante de él- pero yo cuento con la suerte de que no tengo a nadie -sonrió con burla y rió un poco sinico-

El amarillo se levantó recuperando el aire y con su mano sana tomó la dañada, la hizo tronar para que regresara a su lugar y la movió como si nada hubiera pasado. No por nada era líder de criminales.

- Nadie será capaz de apreciarte tanto como yo -empezó a dirigirse a el azulito nuevamente-, nadie te dará apoyo y un lugar al cual regresar, ¿Te recuerdo lo que pasó con el antiguo líder?, Te extendió la mano para poder cortar la tuya, pero lastima que lo mataste con un plumón naranja.

- Daba lo mismo, maltrató a Iván y a todo el séquito. ¿Y tú dónde estabas?, Lamiendole las botas -golpeó el estómago del contrario y este agarró su puño, forcejearon hasta que Fleetway lo aventó contra un pino-

Se levantó de un salto y le barrió las piernas, pero otra vez el amarillo le tomo de uno de sus pies y lo hizo caer con él. Se encimó en su pecho y empezó a ahorcarlo, el de ojos espirales empezó a hacer los mismo con el azulito hasta que una bala los hizo separarse.

- ¡Shadow! -notó como ya había acabado con los otros dos, se colocó a su lado- tienes que llevar a los chicos y a la niña con la seguridad de montaña SKY, las patrullas no serán capaces de llegar hasta acá -ambos se separaron en un salto hacia atrás al ver que el desconocido que durmió a sus compañeros les lanzó una bomba de humo- ¡La zona es inestable y es propensa a un deslice de nieve! -esquivó otra vez, pero al lugar donde llegó lo atacó Fleetway y empezó a luchar con él otra vez-

Ambos iban muy parejos en cuanto a golpes y demás, sus fuerzas eran equivalentes y no podían suprimirse al otro. El azebache primero se llevó a la niña y a Silver, después regresó por Mephiles, pero...

- ¡Es de mala educación no saludar viejos amigos, Sonic!

Ambos, perplejos, se miraron a los ojos mutuamente. ¿Cómo ese tipo sabía el nombre de Blue? Fleetway aprovechó la situación y lo sujetó de las muñecas y se colocó arriba de él en el suelo.

- ¡Ahora, Rookie!

El azul se sorprendió al escuchar ese nombre...¿Rookie?...¿Estaba con Fleetway?
Sintió un pinchazo en su cuello, se separó del amarillo y dió algunos saltos hasta quedar en el borde del acantilado, sacó el dardo que le habían disparado y lo miró con detenimiento, después miró a Shadow.

- ¡N-No, B-blue!

- ¡Llévate a Mephiles de aquí, la zona va a destruirse! -de su bolsillo del suéter sacó su libreta con lápiz, escribió algo rápidamente en una de sus hojas y en medio de ella colocó aquel dulce de coco- ¡Sigan las señales para encontrar la montaña, te aseguro que estaré ahí! -la aventó hacía el azebache ya algo mareado, esté la tomo algo nervioso y cargó a Mephiles. El azulito tiró un explosivo que le había quitado a Fleetway para crear el deslicé, antes de que ambos criminales saltaran a las copas de los pinos les disparó en las piernas y dorso con el arma de G.U.N, de esa forma todos caerían al río menos los azebaches-

- ¡VETE AHORA!

La nieve empezó a caer.

- S-Solo vet-e...

Todo se volvió obscuro.

- ¡BLUE, NO!

Saltó al pico de un pino, mirando como su amante caía desde las alturas de forma inconsciente, arrastrando a los cuatro tipos que los atacaron, los cuales dos de ellos se quejaban por dolor.

- N-No, ¡No! -reposó a Mephiles en una rama, esperó a que la nieve terminara de caer y bajo hasta la orilla de tierra y nieve; notó que no había nadie aferrado a alguna piedra y entró en pánico, pues esperaba ver al azul ahí.

- ¡Blue!, ¿¡Estás ahí!?...¿Son? -exclamó agitado, se sentó tembloroso entre la nieve-

Abrió la libreta viendo un mensaje hecho con una letra un poco rara por la velocidad en la que fue escrita- Sigan las instrucciones y encuentren la montaña, los negocios son clave; este dulce es para ti, lo veías con tanta emoción que no dude en comprarte uno. -miró el dulce y después al vacío por dónde habían caído los cinco, tomó su cabeza entre sus manos, lamentándose por no haber podido ayudarlo.

El juego acababa de empezar.

('⊙ω⊙')→('⊙ω⊙')→('⊙ω⊙')→('⊙ω⊙')→

HOLAAAAA MIS NADA INOCENTES SEGUIDOREEEEES.

¿Cómo están? Yo mal hhahzhHHshsh

Equis, lo normal

Bueno, como habrán notado ¡La autora al fin puso la derrota de nuestro Blue! ¿Shady estará bien con eso?

Casi cinco mil palabras, ¡es más de lo que he escrito en un capítulo! Deben ser agradecidos con zetalol por favor.

¡Voten y comenten para ver lo que le espera a nuestro Darkblue con su amigo trastornado de la infancia Rookie!

Nos vemos!❤️