El director Olsen nos dejó solos en la habitación a nosotros cinco. Reinaba un silencio muy incómodo en la sala.
- Vaya trío de sosos nos ha tocado ¿Eh, Caleb? - dijo el más mayor dirigiéndose al chico  que tenia al lado. Era moreno, ojos marrones claros y atlético. Parecía el típico chico que era la estrella del deporte en su instituto. Tenía una cara afable pero mostraba una sonrisa burlona. Además había hablado con un tono chulesco que no me había gustado nada.
- Tú no es que seas míster simpatía ¿Eh chaval? Acabo de hacer un duro viaje y no estoy para que nadie me insulte - Le contesté bordemente. Jack me miró sonriendo.
- Oye morenita, no te pases de lista. Esta bien,me presento. Soy Sam y este este chico de aquí se llama Caleb. Llegamos hace dos días a este piso desde la otra punta del país¿Cuál es tu poder por cierto? -Dijo,dirigiéndose a mí.
- Puedo controlar el hielo a mi antojo y congelar lo que me parezca. Este de aquí es mi amigo Jack y controla el aire. Esta pequeña de aquí es Elsa y puede causar electricidad- respondí señalándolos.
- Oh, así que tu eres la reina de las nieves. Mis respetos majestad - Luego, hizo una reverencia muy forzada mientras Caleb se reía estrepitosamente. Definitivamente,esos chicos eras idiotas.
- Y los vuestros cuáles son listillos - Pregunto suspirando Jack. Esos chicos le cansaban aunque a el le gustaba también gastar bromas constantemente.
-Admirarme - Dijo Sam levantándose de la silla donde estaba. Corrió hacia la pared y la traspasó sin ningún problema. La pared seguía intacta. Unos segundos después apareció por la puerta,traspasándola obviamente.
- Vamos,que eres un fantasma - Dijo Jack riendo. Yo me reí también con el, le había devuelto la jugada.Pero en vez de enfadarse, sonrió.
- Muy buena delgarucho. Creo que tú y yo podemos ser buenos amigos - Le dijo a Jack. A lo mejor no me caía tan mal después de todo.
- Y tú, Caleb. Muéstranos tu habilidad - dije sonriente. Me lo estaba pasando bien en realidad.
Caleb era un chico de unos quince años. Tenía el pelo corto liso y marrón y sus ojos eran marrones claros. Era delgado y parecía un chico muy reservado.
El chico se levantó sin decir nada de la silla, se acercó a Elsa y ella se escondió detrás de Jack.
- Oye tranquila,no te voy a hacer nada. Sólo tengo que fijarme en ti - dijo el joven con una voz tranquila.
Elsa salió de su escondite y se puso en frente de Caleb. Acto seguido, empezó a estirarse la cara del chico al igual que su cuerpo. Al poco tiempo,era una copia clavada de Elsa. Ella lo miró maravillada y,por primera vez desde la salida de la casa del campo, sonrió abiertamente. Caleb le devolvió la sonrisa a ella también.

En ese instante, alguien llamó a la puerta. Al abrirla vimos que era uno de los hombres que había operado a Bonnie.
- El director Olsen quiere verles a todos en su despacho - nos dijo fríamente el hombre.
- ¿Cómo esta Bonnie,señor?: dijo, para mi sorpresa, Elsa.
- La hemos podido estabilizar. La operación ha salido bien pero no despertará en algunos dias - le respondió.
- ¿Ves Elsa? Te dije que todo iba a salir bien - dijo Jack dulcemente.
Me encantaba esta nueva faceta de Jack,tan paternal. Siempre había sido el chico divertido de la clase, listo y simple con una sonrisa. Ahora le veía mucho más maduro.
Fuimos al despacho de nuestro jefe y allí estaba él, con las manos encima de la mesa de madera y con gesto muy serio.
- ¿Cómo ha ido las presentaciones jóvenes? - nos preguntó sin mostrar ninguna sonrisa.
- Digamos que hemos conseguido no matarnos - dijo Sam mirándonos a nosotros tres.
- Director, quiero saber que pasó en la central. Necesito saber todos los detalles - dije seriamente y con autoridad. Me había costado mucho decidirme si preguntarlo o no.
- ¿Para que creéis que estáis aquí? - me respondió
Tras esto, se levantó y una pantalla se desplegó en la pared del despacho.

Mostraba las grabaciones de las cámara de seguridad. Eso lo sabia yo porque ya las había visto,así que no me iban a aportar mucha nueva información.
- Ayer a las 16:32, un grupo armado de hombres irrumpieron en la sede,disparando unas balas que con seguían que la gente a las que disparaba se pusieran de su parte.
- ¿Se sabe qué es esa sustancia? - Pregunto Jack
- Se llama Estadiplosinos. Una sustancia que hace que la voluntad de uno se elimine completamente del cuerpo y solo responden a las órdenes de ellos. Sin embargo, no son unos zombis bobos. Siguen teniendo su inteligencia y sus habilidades,pero no sus pensamientos - Nos explicó.
- Es decir, como si todos los agentes se hubieran puesto en nuestra contra - Razonó Sam. El director asintió.
- ¿Cómo salió usted de allí?- Preguntó Jack.
- En mi despacho hay un túnel secreto para emergencias como esa - respondió
- ¿Se sabe quién es el causante? - Pregunté muy seria.
- Se hacen llamar Inferno. Es una organización criminal en la que hay varios como vosotros. Su objetivo es es la eliminación de Gamma y conseguir el control absoluto. Además, os buscan a vosotros también. Sois un estorbo para ellos por pertenecer a Gamma e intentarán capturaros. - Informó el director. Ninguno de nosotros mostró signos de preocupación.
- ¿Quien está al mando de todo eso - Preguntó Caleb.
- No lo sabemos - Negó con la cabeza - Nunca ha aparecido ni ha sido posible capturarlo con éxito.
- Los agentes que han sido capturados...¿Dónde están? - Pregunté, levantándome del sitio.
- Se han trasladado a un lugar desconocido. No nos ha sido posible rastrearlos - Me respondió Olson.
Eso hizo que me preocupara aún más. A saber que le había hecho a Steve esos hombres. Tenia la esperanza de que pudiera salir de ese control mental que le habían hecho.

- Señor ¿Y qué hacemos nosotros? - Preguntó la pequeña Elsa con decisión. Le sonreí por su acto.
- Por ahora, intentar ser un equipo y entrenaros como tal. Así podréis enfrentaros a Inferno y a recuperar la gente que os importa - dijo mirándome fijamente a mi - Ahora,iros cada uno una su habitación. Jack,Elsa y Susan, mis empleados os enseñarán las vuestras.
Fuimos con ellos y cada uno nos asignó una. La mía estaba al lado de la de Caleb y Jack. Al menos tenía a mi mejor amigo cerca.

La habitación era pequeña. Había un escritorio vacío y una cama en el lado derecho de la habitación.Las paredes eran de un verde oscuro y en el techo había una lámpara grande. También había un armario con perchas. Afortunadamente, en el lado izquierdo de la habitación se encontraba un cuarto ds baño,con ducha y todo. Inmediatamente, me puse a deshacer mi maleta,que ya me la habían subido, y luego me pegué una ducha larga y relajante.Lo necesitaba.

Después de esto me tumbé en la cama. Había sido un día muy ajetreado y estaba muy cansada. Cerré los ojos y poco a poco me fui quedando dormida.