El lobo comenzó a jadear pesadamente sobre el cuerpo inerte de Dongsun, mirándolo con odio, buscando acabar con su vida y terminar con la amenaza hacia sus cachorros, él había lastimado a su hijo mayor y era el culpable del dolor en su vientre, su lobo tenía la necesidad de acabar con el peligro que representaba hacia sus bebés, sin embargo el fuerte llanto de Taehyung le hizo reaccionar de la profunda furia en la que se encontraba sumido y parpadeó confundido, saliendo del ataque de rabia que lo había dominado y sintiendo su vientre punzar en una dolorosa sensación cuando la furia se disolvió.

El omega alzó su vista y observó a su pequeño Tae completamente asustado. Mirando desesperado en su dirección y después hacia un punto cerca de la pared. Jin siguió su vista y observó a Jungkook temblando en el suelo y respirando con dificultad.

Pero gracias a la luna no parecía lastimado de gravedad.

Inmediatamente corrió hacia él cambiando a su forma humana en el proceso. Hincándose a su lado se acercó al pequeño cuerpo con lágrimas en los ojos sintiendo la peor de las torturas al verle de esa manera.

— Kookie… — Susurró en un pequeño jadeo.

Jungkook le miró con un pronunciado puchero sorbiendo su nariz con ojos cristalizados y alzó sus bracitos hacia él, buscando el calor de su cuerpo para sentirse mejor. 

El omega lo tomó en brazos con cuidado y acercandolo delicadamente hasta su pecho sollozó al verlo llorando lastimado.

Comenzó a acariciar su cuerpo y restregó su mejilla contra la coronilla del cachorro buscando tranquilizarlo y esperarando que su bebé se sintiera mejor con su presencia cubriéndolo.

El omega caminó hacia Taehyung y le tomó con su brazo libre, pegandolo a su pecho dejó que el bebé inhalara directamente de su cuello para calmarlo y caminó de vuelta hacia el alfa. Necesitando sentir a sus bebés cerca y analizar la situación en la que Dongsun se encontraba.

Jungkook se aferró a su cuerpo y poco a poco dejó de sollozar, mirando con miedo al alfa que aún sangraba en el suelo de la sala.

Múltiples rasguños manchaban toda la piel de su rostro y pecho, la camisa desgarrada colgaba de su torso y la sangre brotaba sin control de una profunda mordida en su cuello. No había dado a su yugular sin embargo la cercanía dejaba en riesgo su vida…

El miedo tomó protagonismo de nuevo en su ser y sintió a su omega encogerse completamente aterrado en su interior. Dándose cuenta que él había atacado y herido de gravedad a su alfa.

Dongsun podía matarlo por haber hecho eso en contra de él. Y si el alfa acababa con su vida, dejaría a sus cachorros completamente solos.

Dongsun no podía quedarse con sus bebés…

Con el corazón latiendo desbocado dentro de su pecho, instintivamente aferró más a sus cachorros contra su cuerpo. Y sin pensarlo un poco, salió corriendo de aquella casa.

Sin tomar nada más que sus hijos se dejó invadir por el pánico huyendo aterrado de ese lugar.

No podía permitir que Dongsun siguiera dañando a sus bebés…

Comenzó a correr con sus cachorros en brazos y se adentró en el bosque.

Confiando en su instinto huyó en busca de algún refugio temporal, necesitando alejarse del alfa que había atentado contra su propio cachorro.

No estaba seguro de cuánto tiempo llevaba corriendo, pero cuando el dolor en su vientre se volvió insoportable comenzó a disminuir la velocidad incapaz de continuar con el mismo ritmo que la adrenalina e instinto impulsaron.

Tambaleándose a cada zancada abrazó con más fuerza a sus bebés y sintiendo sus brazos entumecidos se detuvo sólo hasta que sus piernas comenzaron a arder por el esfuerzo y sintió un líquido espeso y cálido escurrir por sus piernas.

El aroma a sangre llegó a su nariz y su omega se puso alerta para identificar de dónde provenía, escaneó rápidamente a sus cachorros para comprobar si ellos estaban sangrando sin embargo un fuerte dolor explotó en su vientre y soltó un quejido al darse cuenta que él estaba sangrando.

La desesperación comenzó a apoderarse de su cuerpo y sus cachorros la olieron brotar en su aroma.
Jungkook comenzó a acariciar su mejilla al ver su rostro deformarse en dolor, buscando borrar el sufrimiento en su papá con ese pequeño acto.

El omega dio un par de pasos más y se dejó caer de rodillas sobre la tierra, incapaz de seguir avanzando.

Su lobo comenzó a rasguñar de nuevo, buscando salir para proteger a sus cachorros y sabiendo que era la mejor decisión, los dejó a ambos junto a los pies de un enorme árbol antes de convertir su cuerpo en un poderoso animal, era la única forma en la que podía protegerles…

El aire comenzó a ser insuficiente para sus pulmones y se encontró jadeando con dificultad por el esfuerzo.

Sus cachorros de inmediato también cambiaron a unos diminutos lobos al ver a su padre en su forma animal y Jungkook se acurrucó frente a Taehyung. Escondiendo al pequeño cachorro con su cuerpo ligeramente más grande.

Jin comenzó a sollozar al sentirse débil y perder cada vez más fuerza en su cuerpo. Aullando a la luna en busca de ayuda se dejó caer sobre la tierra. Jadeando adolorido cubrió con su cuerpo a los bebés, nadie los iba a tocar si él podía evitarlo…

Su instinto salvaje despierto al sentirse tan vulnerable en medio del bosque, no debía perder la consciencia porque Dongsun podría encontrarlos y llevarse a sus cachorros con él.

El alfa lo mataría a él y al bebé en su vientre sólo para alejar a sus hijos de su lado…

Sus bebés comenzaron a restregar sus pequeños hocicos en su espeso pelaje y se obligó a tranquilizarse.

Controlando sus respiraciones intentó con todas sus fuerzas ignorar el dolor debajo de su abdomen. Rogando en su mente por fuerza, no podía perder la consciencia. Necesitaba cuidar a sus cachorros y mantenerse firme para no perder a su bebé…

La luna no podía arrebatarle al pequeño cachorro en su vientre. No lo soportaría...

Un lejano aullido se escuchó y se tensó al no reconocer al lobo que lo emitió.

Ese intruso le podía a quitar a sus cachorros al verle tan débil…

Se puso alerta y se irguió como pudo al escuchar las fuertes pisadas acercarse al lugar donde se refugiaba con sus cachorros.

Miró a Jungkook y restregó su hocico contra ellos. Pidiéndole silenciosamente a su hijo mayor que huyera con su hermanito si algo malo le pasaba al intentar protegerlos.

Jungkook le miró asustado y el corazón de Jin se rompió en mil pedazos, era apenas un bebé y ya le estaba pidiendo que cuidara a su hermanito, pero sabía que si moría sólo se tendrían a ellos para cuidarse de los peligros del mundo.

Era el peor padre del mundo al no haber sabido protegerles como se debía, pero dejaría de luchar hasta su aliento y latido para que nadie más les volviera a lastimar…

Dejó unos lametones sobre ambos rostros aterrados antes de avanzar débilmente hacia delante. Buscando alejarse de sus cachorros para enfrentar al lobo que se acercaba.

El fuerte impacto de las patas sobre la tierra se escucharon más cerca y entonces distinguió que eran varios lobos los que se acercaban rápidamente.

Sin embargo unas pisadas eran más débiles y pequeñas que las otras, sólo entonces su su omega se relajó un poco al saber que en la pequeña manada algún lobo inmaduro se acercaba hacia él.

Mantuvo su vista fija entre los árboles, esperando firme a los lobos para interceptarlos antes de que pudieran encontrar a sus cachorros e ignoró el dolor en la parte baja de su cuerpo cuando les vio…

Un enorme lobo blanco corría hacia él seguido de un par de cachorros del mismo color, olfateando el aire con desespero hasta que le encontraron.

Jin gruñó débilmente cuando les tuvo cerca y se plantó frente a ellos como amenaza.

Pero cuando el alfa blanco le vio a los ojos no pudo ser capaz de enfrentarse a él.

No cuando su omega se dobló en su interior al tenerle de frente. Ni cuando su delicioso aroma llegó hasta su nariz.

Supo que ese alfa no venía a dañarlo, su omega le gritó que él sería su salvación…

El alfa le miró fijamente y pareció mirar el universo entero en aquel omega, corrió hacia él desesperado cuando olió la sangre y con sólo tenerle de cerca supo que ya no podría alejarse de él.

Supo que era su compañero en el mismo instante que le vio, pero su mundo se vino abajo cuando el lobo gris se desplomó frente a él...