Narradora

Tsuki había llevado a Soyama hasta la enfermería, donde se encargaría de curar la herida en su labio provocada por el Rengoku.

-Entonces... no estas molesta conmigo?- pregunto el chico mientras la Haganezuka se encargaba de buscar agua oxigenada y algodón.

-Por qué lo estaría? no hiciste nada malo, solo te defendiste- dijo aplicando el agua oxigenada en el algodón- y me defendiste... cosa que no tenias que hacer, pero te lo agradezco.

El chico la miro en silencio mientras esta curaba su labio.

-Pensándolo bien... gracias por no golpear demasiado fuerte a Tontojuro.

-Sabia que te darías cuenta- rio con gracia- ese niño, aunque es bueno con la espada de madera, es un desastre en combate cuerpo a cuerpo, ademas soy mas fuerte.

-Es posible, pero no debes subestimarlo- le dijo mientras se alejaba para guardar todo lo utilizado- ese chico tempura... podría sorprenderte.

-Lo dices porqué es verdad o solo por qué te gusta?- el las orejas rojas de la chica solo causaron que Soyama sonriera con suavidad y susurro- las chicas... son realmente tiernas cuando están enamoradas, no?

-Dijiste algo?

-Dije que deberías tener cuidado con la víbora- le miro un poco mas serio- tal vez valla contra ti con todo.

-Ja! ya quisiera ver que lo intentara.

Ambos salieron de la enfermería, sorprendiéndose al encontrarse con Tojuro a la vuelta de la esquina. El mismo estaba cabizbajo y apretaba tanto los puños que sus nudillos se volvían blancos.   

-Parece que ustedes tienen mucho de que hablar, asi que yo me marcho- dijo mientras se encogía de hombros- nos vemos luego, Hagane.

El de ojos azules se marcho dejando al par de amigos solos en aquel pasillo.

-Y bien?- hablo la chica mientras se cruzaba de brazos.

Tojuro suspiro y tomo fuerzas para mirarla a los ojos, debía ser fuerte, pero ella era su debilidad.

-Yo... lo siento, arme un escandalo sin conocer las circunstancias de todo el asunto- le dijo mientras su ceño se fruncía- no era mi intención causarte problemas, Tsukihiko... lo siento.

El chico realizo una reverencia perfecta, de 90 grados, sorprendiendo a Tsuki quien dejo salir un suspiro de rendición.

-No entiendo porque te disculpas por ser tu. Era obvio que no podrías quedarte quieto  mientras lo que tu pensabas que era una 'injusticia' - hizo comilla con los dedos- se llevaba a cabo.

-Aun asi... yo- el chico, aun si levantar la cabeza, apretó sus labios con frustración.

-No estoy molesta contigo, Tojuro- le aseguro mientras tocaba se cabeza, acariciando su melena rebelde- solo me siento un poco incomoda con todo lo que paso.

-De verdad... No estas molesta conmigo?

-No estoy molesta- repitió- ni contigo, ni con Soyama. Por otro lado esa idiota de trenzas... no sabe en el infierno en el que a caído.

-Tsuki... acaso harás algo al respecto?- le pregunto, por fin poniéndose recto y mirándola con sorpresa.

-Yo? para nada. Ella sola inicio el fuego y será ella quien sea consumida por el.

El chico la miro para luego reír con fuerza.

-A veces das mucho miedo, Tsuki.

-Como sea... -le dijo mientras lo tomaba de la mano- estas herido en alguna parte?

-Solo son pequeños raspones- le respondió mientras esta lo guiaba de regreso a la enfermería- aun asi cuidaras de mi?

-Por supuesto que si, Tontojuro. Eres mi amigo.

-Claro... por eso viniste con el senpai a la enfermería?- le pregunto mientras se sentaba en una de las camillas.

-Pues claro. Espera... no estarás celoso verdad?- se burlo ella, mientras le daba la espalda para buscar las cosas que había utilizado anteriormente.

Fue entonces que sintió la presencia de Tojuro tras ella.

El chico la arrincono contra el armario de los medicamentos, pegando su pecho contra la espalda de esta.

-Si lo estoy- le susurro al oído mientras abrazaba la cintura de la chica- estoy muy celoso, Tsuki.

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CONTINUARA...