Peter se apartó de vuestro largo esperado beso y juntó su frente con la tuya.

-Lo siento- Suspiró- Debería haberme quedado.

-No lo sientas. Eres un héroe. Eres mi héroe, por tonto que suene. Has salvado a gente.

-No a Tony- Sollozó. Entonces escondió su cara en un lado de tu cuello. Lo sujetaste fuerte.

-No es tu culpa, no hagas eso.

Siguió llorando y le dejaste, pasando tus dedos por su pelo suavemente para reconfortarlo. Todo lo que necesitaba era que lo abrazaran y lo reconfortaran.

May y tus padres oyeron los sollozos de Peter desde la otra habitación y corrieron a la puerta de tu cuarto para ver a un destrozado Peter en tus brazos, sujetándoos el uno al otro por estar vivos. May fue hacia vosotros y os abrazó. Entonces tus padres hicieron lo mismo, acariciando tus hombros y los de Peter. Todo el mundo intentando hacer que los demás se sintieran más o menos mejor otra vez.

al día siguiente- el funeral

-¿P-podrás venir? te necesito- Peter sorbió suavemente por el teléfono.

-Sí, cualquier cosa que necesites, estaré ahí- Contestaste.

-Vale, gracias T/n. May te recogerá en una hora.

-Por supuesto.

Te arreglaste rápidamente. Poniéndote un vestido largo negro fuiste al upstate con los Parker. No conocías a ninguno de los héroes personalmente, a los que ibas a recordar con Peter, pero sabías que habían sido unas de las personas más valientes y fuertes del mundo. Con lágrimas silenciosas en tus mejillas, sabiendo cómo de duro había tenido que ser esto para tu amor. Estaba tan dolido. Y siempre llorabas en los funerales fueran de quien fueran.

Una llamada a la puerta de tu casa hizo que soltaras un soplido ahogado. Tus padres te vieron y a Peter en la puerta esperándote, con los ojos rojos e hinchados.

-¿Lista?

-Sí.

Los dos fuisteis al coche de May cogidos de la mano. Y no soltó tu mano incluso cuando los dos entrasteis por la misma puerta y os sentasteis. Iba a ser una mañana difícil.

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Los Vengadores estaban parados detrás de la cabaña de los Stark, esperando a que todos llegaran. Viste a todos los héroes juntos, honrando a los que habíais perdido.

Pepper Stark y Morgan Stark os saludaron cuando llegó el trio.

-Peter, cómo estás- Pepper preguntó, dándole un abrazo.

-I-intentando s-superarlo señora Stark.

-Yo también- Sonrió.

Morgan abrazó la pierna de Peter y dijo- Va a estar bien Peter. Mamá dice que lo estará y ella siempre tiene razón ¡Eso es lo que siempre decía papá!

Peter intentó sonreír y acarició la cabeza de la pequeña niña. Entonces se giró hacia ti y dijo- ¿Quién es ella?

Peter te miró- Esta es T/n, mi novia.

-Oh ¡tú eres la T/n de la que siempre habla!- Pepper sonrió.

Peter asintió- Sip, la misma.

-¡Hola T/n! De hecho te conozco por las historias de papá ¡Papá me dijo que Peter tenía una nova y que siempre le decía a Peter que la tratase bien!

Le sonreíste a Morgan- ¡Qué dulce!

Morgan fue a abrazarte y te agachaste para alcanzarla.

-A papá le hubiera gustado conocerte- Dijo Morgan.

-Es cierto. Tony siempre quiso, por las descripciones de Peter parecías perfecta. Y quería a Pete, hubiera estado bien- Pepper rio.

-¡A la señorita Romanoff también le hubiera gustado conocerte!

Sonreíste a las Starks.

-A mi también me hubiera encantado conocerlos.

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Todos se agruparon detrás de la cabaña de los Stark. Era tranquilo, casi incómodo. Pero porque era muy depresivo. Los vengadores habían perdido a sus dos mejores luchadores en la lucha por sus vidas. Si no se hubieran sacrificado, nadie estaría aquí ahora mismo, con funeral o sin él.

Pepper puso un ramo de flores con la placa del reactor de arco de la "Prueba de que Tony Stark tiene corazón" en el agua. Pepper era una mujer fuerte, aunque acababa de perder al amor de su vida, valoraba todos los momentos que habían tenido juntos. La Capitana Marvel, o Carol Danvers, puso un ramo similar con una foto de Natasha Romanoff y un sándwich de mantequilla de cacahuete de plastilina que le había hecho Morgan. Carol dejó que se cayeran sus lágrimas mientras dejaba el tributo a Nat. Las dos se habían vuelto bastante cercanas durante los cinco años que habían pasado juntas.

El silencio permaneció mientras veías a los homenajes flotar a través del lago.

La mente de Peter estaba como loca. Esto de verdad estaba pasando. No iba a volver a estar en la misma habitación con Tony otra vez, nunca volvería a discutir con Nat de nuevo...

Agarró tu mano más fuerte que nunca tan asustado y vulnerable y lo único que quería era a ti. Tú eras la única cosa capaz de calmarlo aparte de May. Notaste su tensión y suavemente acariciaste su cara con la mano que tenías libre para hacerle saber que estabas ahí para él. Tu pulgar sujetando su mano pasó por encima de la suya, reconfortándolo aún más.

Después de que terminara el funeral, los vengadores socializaron y contaron algunas historias divertidas sobre Tony y Nat, como Bruce diciendo cómo Tony tenía una mente poderosa, su colega de ciencias. Furia diciendo cómo incluso aunque Tony era como un grano en el culo era una buena persona a pesar de todo. Steve y Thor comentando los mejores de los Tres Grandes. Clint diciendo cómo Nat no se rendía nunca. Wanda y Carol diciendo que aunque Nat era dura de roer, tenía el corazón más grande y tierno. María diciendo como los dos habían sido tan valientes. Happy diciendo cómo Tony y Nat fueron sus primeros amigos leales.

Harley diciendo que Tony había sido el mejor amigo que había podido tener.

Harley Keener, te aprendiste su nombre, era de tu edad y de la de Peter. Había venido él solo con la ayuda de Happy. Arrastraste a Peter hasta donde estaba Harley ya que estaba atrás el solo.

-Hola, soy T/n T/a y este es Peter Parker- Sonreíste al chico alto de pelo moreno. Peter saludó con la mano.

-Harley Keener- Señaló a Peter- ¿Spider- Man verdad? Tony me habló mucho de ti.

A Peter se le abrió la boca.

Harley se rio un poco- No te preocupes no se lo voy a decir a nadie.

-Siento mucho lo de Tony.

Harley miró abajo- Bueno fue un gran tío. Cuidó de mí. Básicamente un padre para mí. No lo sientas, nos salvó.

-Lo mismo digo- quiero decir que también era como un padre para mí- Peter asintió. Los dos comenzaron a tener lágrimas en sus ojos otra vez.

Acariciaste el brazo de Harley sabiendo que estaba sufriendo igual que todos los demás. Peter aún agarró tu mano, mirando a Harley desde cerca.

-Sé fuerte, ha sido un placer conocerte, Harley- Dijiste.

Sonrió- Igualmente.

-Vámonos a casa T/n- Peter susurró y tu asentiste de acuerdo y fue a buscar a May. Estaba hablando con Pepper, Maria, Wanda y Carol.

-Oh hola, ¿ya estáis listos para iros?- Preguntó suavemente.

Peter asintió.

-Adiós señora Stark, adiós señorita Hill, señorita Maximoff y señorita Danvers- Peter despidió a las demás vengadoras.

Entonces las tres os acompañaron al coche de May y volvisteis a la casa de Peter.

-¡Carol tenía un pelo genial!- Dijiste intentando mejorar el ambiente.

Peter rio y sonrió. Rio. Esa risa angelical que era como música y lluvia suave en un agradable día. Su risa te hacía sonreír. No lo habías visto sonreír o reírse en unos días. Lentamente volvería a estar bien otra vez.

-Tienes razón sí que lo tiene- Peter contestó.

Los dos os sonreísteis el uno al otro. Entonces te acercaste a Peter en el coche, apoyando tu cabeza en sus hombros y abrazándolo. Besaste su nariz antes de hacerlo y el volvió a sonreír suavemente.

Los dos os quedasteis así durante el resto de la vuelta a casa. Te besaba la cabeza a menudo, feliz de volver a estar en tus brazos.