n/t/p: Nombre de tu padre

n/t/m: Nombre de tu madre (no sé como se abrevian así que los dejo así lol)

POV del narrador

(miércoles depués de clase)

-T/n baja el ritmo ¿qué pasa?- Preguntó Peter mientras literalmente lo arrastrabas de la mano de vuelta a tu apartamento.

No respondiste, solo querías ir a casa y sentarte en vuestro sitio, como hacíais de niños. Y quizás hablar porque estabas bastante confundida.

Cuando llegaste al apartamento, continuaste arrastrando a Peter por los pasillos, a tu habitación, y a la ventana que daba a la salida de incendios. Los dos os parasteis ahí, soltando las mochilas. Peter miró alrededor, admirando tu habitación desordenada, estaba igual que siempre.

-¿Te acuerdas de cuando nos sentábamos aquí fuera y hablábamos?- Preguntaste.

-Por supuesto, compartimos muchas promesas de dedo meñique...-Peter empezó a deicr, pensando-...y bueno, eh, me besaste.

Te congelaste, acordándote de aquella vez en 2º de la ESO después de la fiesta de Cass. Cuando solo besaste a Peter por menos de un segundo. Te acordaste de la promesa de dedo meñique que hicísteis de no decírselo a nadie. Especialmente a Dylan. Pero lo que Peter no sabía es que tú se lo habías dicho a Cass. Cass era tu mejor amiga y no se lo iba a decir a nadie, probablemente se le habría olvidado de todas formas. Fue tu primer beso aún así, se lo tenías que decir a alguien. Pero rompiste tu promesa de dedo meñique, que tú habías iniciado, justo después de que Peter se fuera esa noche.

-Ya, eh vamos a sentarnos- Abriste la ventana y saliste, Peter siguiéndote. Sentías culpa, pero lo que no sabías es que Peter había hecho lo mismo. Se lo había dicho a Ned.

¿Así que qué pasa? ¿Por qué me has traído aquí?- Peter se rió.

-Peter, ¿estoy tomando la decisión equivocada? ¿Debería darle a Dylan una segunda oportunidad? ¿Y- y qué pasa con Cass? Siento como que se está separando de mí, y los dos usan la misma excusa, "una cosa familiar" ¿Qué significa eso, solo la primera excusa que se te viene a la cabeza? ¿Qué les he hecho?- Soltaste.

-T/n, tú no has hecho nada ¿vale? Eres una amiga increíble y estoy seguro de que una novia inceíble también. Eres tan amable y tienes un gran corazón. Te lo aseguro, no has hecho nada malo. Y si no pueden ver lo brillante que eres, no te merecen.

Te sonrojaste- Gracias Pete. Significa mucho.

-Y no te estoy diciendo que no deberías darle a Cass y a Dylan una segunda oportunidad, creo que sabes lo que tienes que hacer, solo...sigue a tu corazón- Pero en realidad Peter no quería que le dieras a Dylan una segunda oportunidad, el quería una segunda oportunidad contigo, aunque sabía que eso no podía pasar.

Apoyaste tu cabeza en su hombro- Vale, lo pensaré. Muchas gracias Peter, de verdad que no sé que haría sin ti.

No respondió nada, sin querer decir algo equivocado. Solo estaba disfrutando de ese momento íntimo contigo en vuestro sitio de la infancia.

Después de que pasara un rato en el que solo estabais sentados mirándoos, Peter habló.

-Siempre estaré para ti- Sacó su dedo meñique- Lo prometo.

Tragaste saliva. Pero aún así levantaste la cabeza de su hombro y juntaste tu dedo meñique con el suyo.

-Tengo que irme- Peter tenia que patrullar por la ciudad, para completar sus tareas de spider-man. Viste como entraba de nuevo en tu cuarto a través de la ventana para irse. Una vez que lo hizo, te giraste para ver la calle por la que pasaban coches.

Antes de que Peter saliera de tu habitación se giró para volver a mirarte. Sonrió y se fue, sin que tú te dieras cuenta. Justo mientras se giraba hacia la puerta de tu habitación, miraste a través de la ventana, viendo como salía por la puerta.

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Finalmente volviste dentro y cogiste tu teléfono. Viste una llamada perdida de tu padre.

-Hola T/n, ¡soy papá! Solo quería decirte que acabo de bajar del avión y que estaré en casa en media hora. Espero que tu madre y tú estéis bien, ¡nos vemos pronto! Adiós.

Sonreíste, estabas feliz y tu padre iba a volver por fin a casa. Lo echabas de menos y te arrepentías de haber sido borde con él antes.

-¡Hola T/n!- Tu madre acababa de llegar del trabajo.

Fuiste a la cocina donde era más probable que estuviese- Hola, ¡papá va a llegar a casa pronto!

-¡Eso he oído! Voy a empezar a hacernos la cena.

Sonreíste y te sentaste en el salón, poniendo la televisión para ver Drake y Josh. Entonces, recibiste un mensaje de Dylan.

dylan

Hey, deberías venir al partido de fútbol el viernes por la noche, todo el mundo va a ir, y por supuesto podemos vernos ahí

tú

Oh vale genial ¡suena bien!

Otra vez sonreíste. Después de tu profunda charla con Peter, tu padre volviendo a casa y Dylan pereciendo que iba a cambiar, estabas feliz.

Pov de Peter

Después de salir de casa de T/n, me puse el traje. Sé que cualquier decisión que tome será buena. Por supuesto no me gustaba verla con Dylan pero quiero que sea feliz.

Me columpié un poco por Queens, a unos bloques de la casa de T/n. No estaba pasando nada así que decidí descansar encima de un edificio. Me apoyé en mi espalda con las manos cruzadas detrás de mi cabeza.

-Eh Karen ¿Qué hora es?

-Son las 16:52 Peter.

-Vale, porque tengo que hacer deberes y quiero irme a dormir pronto para-

Mi frase fue interrumpida por un estruendo enorme. Rápidamente me levanté y vi un accidente de coche a un bloque de distancia.

Llegué a la escena rápidamente. Los coches tenían humo saliendo de ellos y uno estaba bastante roto. El otro no parecía tan afectado.

-¡Karen! ¡Rápido llama al 112!

Fui corriendo hacia una mujer sentada detrás de donde estaban los coches tosiendo. No había visto a nadie más aún.

-¡¿Está bien señora!? ¿Qué ha pasado?

Tosió bastante- C-creo que sí. Ese coche estaba pasando cuando el otro ha salido de ese callejón, chocándose conmigo y con él y los dos se han estampado contra esa farola muy rápido. Y luego yo me he chocado contra ellos.

-Vale, el 112 viene de camino.

Escuché las sirenas de la policía y la ambulancia. Rápidamente salté al asiento del conductor del coche para asegurarme de que la persona estaba bien.

Era un hombre de unos 40 años, sin moverse. Estaba nervioso y sobrecogido, esperando que estuviera vivo. Arranqué la puerta del coche.

-¡Karen busca un pulso!

-Pulso débil detectado, y no parece que esté respirando.

Empujé el coche con mi fuerza del camino para que el hombre pudiese ser atendido fácilmente por los paramédicos. Justo cuando había terminado, me columpié fuera del callejón y aterricé encima de un edificio.

Dos paramédicos corrieron hacia el hombre inconsciente del coche, mientras otro se hacía cargo de la señora. La policía llegó segundos después, haciéndole preguntas a la señora y buscando en el coche del hombre su cartera para identificarlo.

El hombre inconsciente fue tumbado en una camilla y los paramédicos lo llevaron a la ambulancia intentando que volviera a respirar. Parecía que la policía había encontrado su cartera. Uno de ellos comenzó a gritar su identidad a los demás trabajadores.

-Varón, 48 años, 70 kilos, 1 metro 80, de nombre n/t/p t/a. Vive a unos pocos bloques...

No pude escuchar que más dijeron después de eso. Algo sobre llevarlo al hospital rápidamente. Sólo podía pensar en el nombre.

Era el padre de T/n.