Lestat se pasea por todo el escenario contoneando sus caderas mientras canta el estribillo de Own my mind provocando que sus fans griten con más entusiasmo.

Pero el vampiro no ha quitado sus ojos del reportero que se encuentra entre las primeras filas. Paul Lynch uno de los mejores (por no decir que el mejor) reportero especializado en música de la época actual.

Lestat busco a Paul para que lo ayude a llegar a más personas ya que después de haber publicado su autobiografía espero durante una semana que Louis se comunicara con él pero al encontrar un resultado negativo en ello decidió intentar otra estrategia.

Cuando Allan termino de tocar el ultimo acorde de la canción todos los integrantes de la banda le agradecieron al público por haber venido y luego de eso se retiraron del escenario.

Lestat le pido a su manager el señor Baker que lleve al reportero a su camerino en diez minutos, y el otro hombre solo asintió ante lo que dijo el vampiro. 

Paul deja pasar a varios jóvenes de la fila de asientos que le toco y observa como ellos se integran al mar de gente que se dirige hacia la salida.

Luego de esperar un par de minutos el lugar se encuentra más despejado por lo que Paul comienza a caminar hacia la salida pero es interrumpido por un hombre desconocido vestido completamente de negro, y este le pide que lo acompañe pero antes del que el reportero decline dicha petición el desconocido de presenta.

– Soy Ralph Baker, el manager de la banda.

El reportero asiente – Un placer en conocerlo, soy Paul Lynch.

– Lo sé. Lestat quiere reunirse contigo.

– Si, dejaron una nota en mi asiento.

– Y aun así se iba a marchar ¿verdad?

– Solo vine a ver el espectáculo no a trabajar.

– Tranquilo él solo quiere charlar contigo.

Paul suelta un suspiro mientras asiente – Bien. Llévame con él.

Después de que Ralph le explicara varias reglas que debe seguir para hablar con el famoso cantante este le abre la puerta del camerino privado de Lestat para que el reportero ingrese.

– Tienes quince minutos.

Paul asiente mientras ingresa a la habitación y luego escucha como cierran la puerta detrás de él. Paul observa el lugar con atención en tanto avanza por ella lentamente, y algo que llama su atención es la copia desgastada de Interview with the Vampire que esta sobre sobre una mesa auxiliar.

– ¿Ya lo ha leído?

Paul levanta la vista rápidamente para ver al dueño de tan seductora voz, Lestat de Lioncourt quien se encuentra a unos pasos frente a él. Paul nota que el rubio solo lleva una basta de seda negra pero se concentra en contestar la pregunta que le habían hecho.

– Solo he leído la mitad.

– Entonces no ha leído mi autobiografía.

– Esta en lo correcto.

Lestat suelta una gran carcajada ante la respuesta del reportero – Sera interesante su perspectiva sobre mí en su reportaje, Paul.

– Aun no acepto el trato.

– Lo harás, Paul.

El reportero no puede evitar soltar una risa ante la confianza del otro. Por su parte Lestat se sorprende por la reacción inusual del reportero ya que no está acostumbrado este tipo de respuestas.

– ¿Usaras tus poderes vampíricos sobre mí? – pregunta Paul con tono divertido.

– ¿Disculpe?

– Señor de Lioncount, ya no está sobre el escenario por lo que puede dejar ese juego de ser un vampiro.

– ¿Juego?

Paul asiente levemente – Debe ser todo un fan de Bowie para haber creado todo este personaje.

Lestat se irrito ante el tono condescendiente divertido que uso el reportero para referirse a él – Este no es un maldito personaje. Soy un vampiro de verdad.

– Por supuesto.

Lestat sin pensarlo se acerca rápidamente al otro para agarrarlo del cuello para intimidarlo, y luego acerca sus labios al cuello del Paul, quien siente un par de colmillos rosar la piel de su pálido cuello.

El rubio espera que eso sea suficiente para que Paul sepa que no bromeaba con su naturaleza. Pero el reportero agarro la mano que lo sujetaba del cuello para alejarla de él lentamente.

– Señor de Lioncourt, imagino que este espectáculo debe fascinar a sus fanáticas pero yo lo encuentro molesto.

Lestat aleja su rostro del cuello de Paul para luego observarlo en silencio por unos segundos – Eres tan inusual.

– Un extraño cumplido – el reportero se aleja varios pasos del vampiro – Su manager dijo que quiere hablar conmigo así que hablemos antes de que se termine el tiempo. 

Lestat asiente mientras luego dirigirse al sofá que está en la habitación y le hace una señal a Paul para que se siente junto a él.

El reportero obedece dicha señal mientras saca un paquete de cigarrillos del interior de su chamarra de cuero – ¿Le molesta?

Lestat niega – ¿Me daría uno? – Paul le tiende la caja al otro y el vampiro agarra uno de ellos – Gracias.

Paul toma uno de los cigarrillos para luego colocárselo entre sus labios mientras busca su encendedor pero sin que el entienda como sucedió su cigarrillo se prende. Por lo que voltea a ver a Lestat quien se encuentra fumando el suyo con una discreta sonrisa entre sus labios.

– Interesante truco.

– Soy una caja de sorpresas, Paul.

El reportero asiente – ¿Por qué quiere que escriba sobre su banda?

– Quiero llegar a más gente.

– Su álbum es el número uno en todo el mundo, su libro es un éxito de ventas y los estudios de Hollywood se pelean por obtener los derechos para hacer una película, y tu rostro, Lestat es tan famoso como el de Jesús.

Lestat suelta el humo de su cigarro mientras observa en silencio a Paul – Alguien investigo antes de venir.

– Responde a mi pregunta.

– Quiero que alguien me busque.

– ¿Louis de Point du Lac? – Lestat asiente – ¿Por qué crees que un reportaje en Rolling Stone llamara su atención?

– No lo creo, lo espero.