Holis a todos mis amores, espero que esten bien!

Mis bellezas aqui vine yo, con un nuevo cap que espero disfruten!

Muchas gracias por leer y espero les guste, ya saben... Kimetsu no Yaiba no es mio!

Hasta luego :3

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Capitulo 16

Después de que Shinobu había masticado y tragado a Douma verbalmente por su falta de verguenza, también que Kotoha se fuera ido vestida (y ligeramente molesta por haber sido interrumpida en pleno acto) el pequeño grupo se había ido a otra habitación donde el olor a sexo no estuviera tan pronunciado.

Tanjiro todavía estaba medio traumatizado, pero igual intentaba ignorar su trauma con una sonrisa - ummm bueno, yo...

No es que no te quiera aquí, nada menos! Siempre eres bienvenido es solo que.... Que haces aquí? - pregunto un siempre sonriente Douma.

Solo quería hacer algo útil, recuerda que Muzan nos dejó encargados de llevarle demonios fuertes para que pueda recuperar a sus Lunas Menguantes y Crecientes - respondió Tanjiro suspirando - lo que no esperaba era ver... Eso

No puedes decir que no te gusto ver mi.... - la mirada asesina de Shinobu detuvo cualquier comentario estupido que podría haber salido de Douma - bueno creo que podría arreglar algo, he tenido a un par de molestos demonios queriendo probar sus habilidades desde hace....

... Momento, si eso es así entonces porque no los has escuchado....? - pregunto Tanjiro con la ceja temblando de estrés.

Ummm... Me gustan las vacaciones, Muzan-sama no dijo que teníamos que buscar a estos demonios rápido..... O si? - de nuevo la sonrisa de Douma era tan enorme...

Vacaciones? Si serás desgraciado, si nunca haces nada! - regaño una Shinobu con mala cara

Claro que hago, estoy siempre atendiendo a mis seguidores y haciendo sus vidas mejor! - chirrido Douma muy alegre.

Busca a esos que te han estado molestando, les atenderemos hoy - gruñó Tanjiro frustrado, que decepción, y pensar que está bola de idiotas le había causado tanto temor en el pasado.

Bueno esta bien... Que más, aunque si nos aburrimos no respondo.... Tampoco se miraban tan fuertes - gruño un Douma medio enfurruñado mientras salía, Tanjiro solo suspiro, todavía no creyendo que una jodida Luna Superior, la segunda en rango de hecho... Hiciera berrinches como un cachorro pequeño.

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Lejos de allí...

El.... No sabía dónde estaba, la verdad era que solo recordaba haber estado en aquella habitación de su antiguo hogar que su Omega había arreglado con esfuerzo. El había estado esperando verlo, tenía días sin hacerlo y ya se estaba preguntando donde era que se había metido.

Si el... Había estado en eso, y luego... Luego todo se había borrado, una sensación de somnolencia había llenado su ser y luego nada... Miró alrededor, parecía estar en una especie de bosque brillante y...

Momento, Miró alrededor confundido... Parecía estar a plena luz del día, pero su cuerpo no se estaba haciendo cenizas y.... Estaba muy confundido, no entendia nada de nada y... Esas eran risas? Si, de pronto podía escuchar risas infantiles y divertidas a la lejanía.

La brisa soplo y con ellas las hojas de ginko corrieron en dirección al tierno sonido, era su imaginación o la brisa y las hojas le estaban empujando justamente en esa dirección? Duro un segundo dudativo pero luego su cuerpo se movió casi solo y se encontró caminando hacia las risas, los árboles se hicieron poco a poco más espesos, mientras que las risas más claras.

Los árboles se hicieron tan espesos que estaba seguro su figura no era visible por aquellos a los que miraba, pero el sí que podía ver gracias al ángulo donde estaba a aquellos reunidos y su corazón dio un vuelco tan fuerte que pensó se saldría de su pecho.

Allí, sentado en el suave pasto se encontraba su hermano, aquel que tenía años sin ver, aquel que había muerto de viejo frente suyo... Aquel que extrañaba con cada fibra de su alma y también que amaba/odiaba con todo lo que tenía.

Y por si fuera poco allí, sentado junto suyo estaba su Muichiro. No... No lo era, era totalmente idéntico a el y sin embargo sentía en sus entrañas que el no era su Omega. No entendia que estaba sucediendo, el...

Vas a portarte bien siempre verdad? - escucho decir a su hermano con aquella voz suave y serena de siempre, justo en ese momento noto que su hermano sostenía a una pequeña cría entre sus brazos, aún más pequeña que el parecido de su Omega junto suyo.

Aquel parecido de su Omega frunció el ceño - No, puedes portarte todo lo mal que quieras siempre y cuando cuides de...

No seas malo Yui-chan, no puedes decirle al niño algo así - regaño su hermano acariciando los mechones negros y verdes de aquel.

Vio los duros ojos (otra razón más, los ojos de su Omega eran suaves y amables la mayoría de las veces... No así, afilados y desafiantes) verdosos rodar - tiene que ser fuerte, su Ka-chan es muy suave y su padre puede morirse por todo lo que me importa

Hubo más conversa, de eso estuvo claro, pero por su vida que todo esto era tan confuso que su cabeza luchaba por procesarlo. Su cuerpo se movió solo de nuevo, dio un dudativo paso que al instante se convirtió en error al romperse la ramita bajo su pie que llamó la atención de aquellos en el claro.

Creo que tenemos que irnos pequeño, después vendremos a verte - murmuró su hermano hacia el menor de todos qué hacía segundos había estado demasiado ocupado jugando con los largos mechones negros y rojos.

El parecido a su Omega parecía que quería protestar pero fue arrastrado por su hermano y frente a sus ojos ambos desaparecieron dejando al menor sentado, luciendo perdido en el claro. El no había podido detallarle bien, pero por las señales que arrojaba ahora mismo parecía al borde del llanto.

Su cuerpo termino de moverse y llego a su lado dando a conocer su presencia completamente, los ojos medio humedos e inocentes se clavaron en su persona haciendo que se extremeciera. Esos ojos... Esa mirada verde inocente y suave, vacía de todo sufrimiento o tristeza, a todas las señales era un pequeño niño humano... Pero aquella pupila casi felina desentonaba en aquella imagen.

El menor se levantó y tímidamente se prendo de su mano, las pequeñas y suaves garritas en sus manos le hicieron extremecerse - yo... Me ayudaría a salir de aquí y encontrar a mis tíos señor? - pregunto de forma infantil e inocente, la mirada franca en su ojos le tenía congelado en su lugar.

... Tu... Como te llamás....? - pregunto en voz baja, todavía demasiado confundido como para actuar de forma normal.

El menor se encogió de hombros - Ummm... No tengo nombre, aún por lo menos,... Tío dice que es poque toy chiquita aún y Kaa-chan tiene que pensar en un nombre bonito

No supo que más decir, pero su conciencia pateo y acarició los mechones negros y rojos del menor para terminar de quitar los rastros de incomodidad que tenía aquel niño - ven, buscaremos un sitio seguro para ti

No entendía porque pero, sentir el cuerpecito cálido pegado a su costado se sentía tan familiar y a la vez casi que quemaba, como si no debiera, como si no fuera digno de estar junto a el niño. No entendía por qué se sentía tan indigno, ni siquiera sabía quién era este niño!

Pero sentía debería saberlo, sentía una extraña familiaridad irradiando del menor, le miró de reojo el.... Era tan parecido a el, a Yoriichi.... No, su hermano tenía líneas más duras, este niño se parecía más a....

Muichiro, su cara completa, la redondez y forma del rostro, sus ojos verdes suaves e inocentes se parecían tanto a los de su Omega. Pero su cabello era idéntico al suyo, no entendía nada pero sentía debia hacerlo... Quién era este pequeño niño?

..... No me gusta este lugar - murmuró el menor acurrucandose aún más contra suyo.

Miró alrededor justo ahora notaba que el bosque, anteriormente brillante y hermoso se había transformado mientras caminaban, ahora los árboles parecían estarse secando y muriendo, la luz atenuando como si la noche bruscamente cayera sobre todo.

Frunció el ceño mientras sentía una como la ansiedad e incomodidad corría por su cuerpo, a él tampoco le estaba gustando mucho la situación en la que se encontraba. Inconcientemente puso su mano de forma protectora alrededor de los pequeños hombros e instó a que apuraran el paso.

De pronto hubo un extraño ruido y un temblor sacudió el suelo, sus reflejos no fueron lo suficientemente rápidos y cuando menos se dio cuenta el pequeño había sido alejado de su costado con un gritó cortado. Una rama se había enredado en su tobillo y velozmente era arrastrado lejos de él.

Corrió, ni siquiera entendía porque pero debía llegar hasta el. Solo que no podía y cuando menos se dio cuenta el menor había desaparecido entre los árboles, intento buscarlo, por los dioses que lo intento pero no había ni rastro del menor. Su pecho se sentía apretado, porque le molestaba tanto que le fueran arrebatado al niño tan bruscamente, ciertamente ni le conocía!

Pero no podía controlarse, la desesperación y el dolor amenazaban con abrumarlo, busco y busco al pequeño pero no lo encontró, más bien no hizo más que perderse en este bosque que cada vez Lucía más oscuro y aterrador. El menor debía estar por aquí el no pudo perderlo, el seguramente no había perdido a su....

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Sintió su cuerpo temblar y con un golpe brusco se movió solo para sentarse en aquel enorme futón, respiraba agitada mente mientras su cuerpo se recuperaba de la angustia antes sufrida...

El... Había estado durmiendo de nuevo? Y al parecer no solo eso, había estado soñando también, un sueño que pintaba ser maravilloso y termino de la peor forma posible. Puso una mano en su cabeza, necesitaba recomponerse, el era la primera luna creciente... Un sueño estupido no podía sacarlo de sus cabales (ni siquiera debería soñar de hecho).

Respiró hasta que aquella sensación paso, el... No entendía mucho, ese sueño había sido lo más extraño que le había pasado en mucho tiempo. Miró a su lado y deseo que su Muichiro estuviera allí con el, aunque pronto olvido eso.... De nuevo era la primera luna superior, ese sentimentalismos era algo que no debía existir en su persona.

Se levantó y acomodo, salió de aquella casa dispuesto a encontrar algo que hacer para distraerse, empujó en el fondo de su mente aquel recuerdo del sueño y el anhelo que sentía por llegar con su Omega, era estupido sentirse así... Más aún por un estupido sueño que ni siquiera debía haber tenido.

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En otro lugar...

Ehhh... Estás seguro de esto? - pregunto Muichiro por cuarta vez, mirando preocupado al peligrosa frente suyo.

Si, me vuelves a preguntar y me voy a molestar de verdad - gruñó ya fastidiado - hazlo y ya, si me muero igual soy libre así que ni te preocupes

Ehhh... Bueno, pero... Comenzaremos con una pequeña gota! - regaño no muy seguro de esto, pero aún así suspiro y corto con su garra su muñeca dejando que la sangre corriera, todavía mirando incómodo dejo que un par de gotas corrieran hacia la boca de Akaza que las tomo ligeramente aburrido.

Paso un rato y aún cuando el peligrosa si sentía una ligera comenzón por debajo de la piel no dijo nada y miro al menor - esto no está funcionando, deja de estar tan nervioso y dame una buena parte de sangre

Tu no viste como murieron esos otros demonios con Muzan, fue horrible - se quejó el menor pero aún así suspiro y miro al otro serio - está bien, pero que conste que intente cuidarte!

Si, anda apurate - gruñó rodando los ojos, aunque no podía negar que se sentía tener a alguien preocupado por su salud después de tanto tiempo.... No podía recordar que nadie hiciera algo así por el.

Muichiro suspiro y volvió a cortar su muñeca ya regenerada, esta vez más profundamente y dejando que la sangre corriera por su piel. Esta vez no fueron un par de gotas, esta vez fue un par de tragos grandes los que dejó al Alpha tragar antes de alejarse mordiéndose el labio con neviosismo.

Nadie dijo nada por un rato, el silencio pesado solo era roto por sus respiraciones, o bueno eso fue hasta que las venas de Akaza comenzaron a hincharse y una expresión de dolor cruzó sus rasgos. Muichiro solo podía mirar con ansiedad como el pelirosa temblaba ligeramente con el obvio dolor atravesando su cuerpo, necesitaba, no quería hacer algo pero no podía.

Aquello duro un par de agónicos minutos, donde Muichiro solo quería detener el tiempo para evitar haber hecho lo que hizo. Y de pronto el cuerpo de Akaza cayó en aquella cama andrajosa sin fuerzas.... Muichiro solo podía esperar que no estuviera muerto, su conciencia no podría resistirlo.

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Bueno mis amores, perdón por la espera es que fueron unos días super ocupados!

Pero en fin, no prometo publicar seguido pero si cada vez que pueda, espero lo disfrutará!

Nos leemos otro día!