Lily

Me encontraba en esa realidad aún, veía como Steve y mi otro yo estaban confundidos tocándose la cabeza y mirando a los demás entre sorpresa y confusión.

-¿Hija?, ¿Qué paso?- le preguntó Lily a Isla.

-¡Mamá!-grito con dolor y cariño, para luego ir a abrazarla.-Bueno...., digamos que el Darkhold los poseyó- les contó Isla, miré el rostro de mi otro yo, la cual estaba sorprendida para luego verme.

-No entiendo nada, ¿Por qué ella se parece a mi?- me preguntó, mientras me señalaba.

-¿Quieres la versión larga o corta?- le pregunté.

-Corta, al grano- contestó y sonreí un poco.

-Un día normal, en la boda de Christine Palmer apareció Gargantos y luego llegó una niña que viaja por el multiverso, y queríamos pedirle ayuda a Wanda pero fue poseída por su otro yo y su otro yo atacó Kamar-taj y controló la mente de la niña que viaja por el multiverso y caí aquí- le comenté, y ella se sorprendía más con cada palabra que decía.

-Debemos advertirle a Wanda- habló mi otro yo, Stephen la miró con dolor.

-Wanda esta muerta, al igual que Wong, Steve y tu tuvieron una pelea con ellos....y los mataron...-contestó Stephen, Lily no lo podía creer, sus lágrimas comenzaron a brotar.

-Eso es imposible- contestó con un nudo en la garganta, para luego comenzar a llorar aún más, Steve también comenzó a llorar.

-No fue tu culpa Mamá, fue el Darkhold- le consolaba Isla.

-¿Qué le paso a Bucky?- preguntó Steve acercándose a la estatua de él.

-Murió para que ustedes regresarán-contestó Peggy.

-A que costo....-susurro con dolor Steve para luego llorar más.

-Lamento oír lo que paso con Wanda y Wong, pero...- algo me estaba transportando a un lugar.

-¿Lily?- me llamó Stephen, yo lo miré sin responder.

-Aquí esto....- de nuevo pasó ese espasmo.

-¡Es Wanda!- comentó Peggy y mi otro yo se levantó y tocó mi cabeza.

-Lily, no dejes que te controlé, calma Lily, calma- me decía pero me fue imposible, cerré los ojos y me transporte a un lugar.

Abrí mis ojos lentamente, ya que el lugar estaba todo de color blanco, comencé a caminar lentamente, hasta que escuche una voz.

-¡Lily!, ¡¿Puedes oírme?!- me preguntó Stephen.

-¡Stephen!, ¡Mi Stephen!- le grite y pregunté.

-¡Si!- contestó y apareció en esa habitación, corrí a abrazarlo- Mi cielo, ¿estás bien?- me preguntó mientras tocaba mis mejillas.

-Si, ¿tú estás bien?- le pregunté.

-No tanto, estoy encerrado en una celda extraña, pero estoy bien junto con América, ¿Todo bien en el universo en el que estás?- me preguntó.

-Si, por suerte me ayudó tú otro yo, destruimos el Darkhold porque estaba poseyendo a mi otro yo, y también para que Wanda no me siga, ¿Qué tal la realidad que te tocó?- le pregunté.

-No entiendo muy bien lo que pasó, pero al parecer mi otro yo murió para salvar su universo....- se pausó- Lily, necesito que busques el punto que une a todos los universos, pídele ayuda a mi otro yo, no tengo mucho tiempo, alguien viene- me contestó para luego besar mis labios.

-¿Nuestros hijos estarán bien?- le pregunté, él me miro con cierta preocupación.

-Espero que lo estén, cuando nos encontremos, le pediré a América que habrá un portal a nuestra realidad y vallas por nuestros hijos....- iba a seguir hablando pero escuche ruidos inaudibles- Luego te digo el resto- contesta y salgo del trance, abrí mis ojos y caí al suelo.

-¡¿Estás bien?!- preguntó exaltada Peggy.

-Si, gracias-respondí y Steve me ayudo a levantarme.

-¿Qué te dijo Wanda?- me preguntó Isla.

-No era Wanda, era mi Stephen, hablamos y me explico que debo de ir al punto de unión de todos los universos- les comenté.

-Stephen, necesitas ayudarla- comentó Lily mirándolo apenas, él sonrió del lado y la fue a abrazar, sonreí por inercia, y pude darme cuenta que nuestro amor en los universos que estamos juntos es el mismo, puro y genuino, luego vi que Steve se acercó a Peggy y le abrazó para luego besarla con un corto beso.

-Gracias por regresarlos- comentó Isla tocando mi hombro.

-De nada, me gusta ayudar- le contesté y ella me abrazó.

-¿Cómo soy en tu universo?- preguntó cuando se separó de mi.

-En realidad tienes otro nombre, te llamas Amelia, eres la mayor de tus dos hermanos, sip, tienes dos hermanos más en mi universo y eres más pequeña en mi realidad, tienes 7 años, apunto de cumplir los 8- le comenté y ella sonrió.

-Me alegra oír eso- contestó sonriendo aún más.

-Lily- me llamó Stephen, lo miré con duda- Vamos, debes regresar a tu realidad, aún no sabemos lo que planea Wanda- me comentó.

-Tienes razón, fue un gusto conocerlos- les comenté mientras les daba un pequeño abrazo.

-Bien, ahora debo de recordar en donde esta esa puerta...-susurro Strange.

-Abajo, en mi oficina, librero- le comentó a medias Lily.

-¡Gracias cielo!- grito alegre y salimos de allí juntos.-Bien Lily, el plan es el siguiente, iremos a la puerta para llegar a la intersección, pero no quiero que te separes de mi por nada del mundo, Wanda puede tomar ventaja y eso no es lo que queremos, ¿de acuerdo?- me comentó y preguntó al final.

-Si, todo claro- le contesté.

-Bien, no tenemos mucho tiempo- contestó y comenzamos a correr hacia la oficina de mi otro yo, realmente estaba muy lejos del punto en el que iniciamos, hasta que escuchamos que una voz nos llamó.

-¿Lily?, ¿Qué haces?- preguntó una voz, yo giré y me topé con Natasha.

-Yo....., digo....tienes razón, solo amo a un hombre y ese es Stephen- le contesté fingiendo ¿ser yo?.

-¡Me alegra!- contestó sonriente y miro a Stephen.-¿A donde se dirigen ahora?- preguntó.

-A mi oficina- le contesté y escuche un ruido estruendoso, había sido una bomba, nos miramos entre los tres.-¿Chicos?, ¿Me oyen?- preguntó Natasha por su comunicador.

-Aquí Steve, no sabemos que es, pero parece ser una Bruja- contestó Steve apenas.

-Mierda.- dijimos Strange y yo al mismo tiempo.

-¿Que sucede?- preguntó Natasha.

-No tenemos tiempo para contarlo, no sabemos como está aquí, pero debemos de huir, ¡Huir!- grito Strange tomando nuestras manos y comenzamos a salir de allí corriendo lo más que podíamos, escuchamos como la voz de Wanda se acercaba poco a poco.

-Lily......¿en donde estás?, ven cariño, puedo ayudarte- comenzó a decir, Natasha intentaba abrir la puerta para escapar de allí, pero no se abría.

-Dice que ese no es el código- comentó nerviosa Natasha.

-Debo de hacerlo, yo puedo, yo puedo- susurre y con ayuda de mi mente, destruí el candado digital y la puerta se abrió.

-¡Vamos!- ánimo Nat y comenzamos a correr nuevamente.

-¡Lily!, ¡Lily!- gritaba Wanda mi nombre, pero nosotros seguíamos corriendo, hasta que Natasha abrió una puerta y entramos, vi una sombra negra persiguiéndonos, pero por la puerta cerrada ya no pudo pasar.

-¿En donde está?- preguntó en susurro Natasha.

-No lo sé...- le contesté de la misma manera.

-¡Lily!- grito una Wanda ¿Zombie?.

-¡Mierda!- grito Strange y comenzamos a escapar de ella nuevamente, hasta que tuve una buena idea por primera vez en mi vida, le prendí fuego a una oficina y la encerré allí con ayuda de Nat.

-¿La mataron?- preguntó Strange.

-¿Cómo dijiste idiota?, si esta muerta, ahora solo esta poseída- le respondió Nat.

-¿Y que esperamos?- les pregunté sin entender porque estaban esperando.

-¡Perdón!- respondió Strange y luego me miro- Pon tu huella, espero funcione- comentó y eso hice, la oficina se abrió e ingresamos en ella, Strange realizo unos movimientos en frente de un estante de libros y se abrió, dando entrada a nosotros, ingresamos en ella y el estante se cerró solo, bajamos muchas escaleras, hasta llegar a otra oficina, la cual estaba muy bien decorada y tenía cosas de magia, Strange se acercó a una puerta que estaba allí.

-Esta es la puerta- contestó e intento abrirla, pero simplemente no se abría la puerta.

-¿Recuerdas como abrir la puerta?- pregunto Nat.

-¿Que no vez que no puedo abrirla Natasha?- le preguntó obvio.

-Stephen, prueba con tu anillo de bodas- le contesté y él me miro con sorpresa.

-¡Claro!- contestó para luego retirarse el anillo de su dedo y colocarlo en un espacio que tenía la puerta.

(¡Auww!, no se lo quito nunca :3 )

-¡Abra Cadavra!- comenté sonriente, Strange me dio un ligero abrazo.

-Bien, Strange abre un portal en el lugar donde están los chicos, ya los ayude- le pidió Natasha, Strange abrió un portal y Natasha se despidió de mi y fue con sus amigos, Strange cerró el portal después.

-Bien, bajemos, puede ser que venga Wanda- me comentó, ascendí con la cabeza y bajamos hacia donde pude ver, ¿El libro de Vishanti?.

Hasta que escuche que se abrió otra puerta, Strange y yo miramos arriba a las personas que estaban en la puerta que se abrió, mire a Strange y sonreímos.

Stephen.

Mi esposa había soltado mi mano, quería ir con ella, pero allí estaba América, indefensa, no lo dude y me lancé junto con ella en ese portal, él cual nos llevó por varios universos, hasta topar con uno, habíamos caído y me dolía un poco la espalda, pero comencé a levantarme como pude.

-¿Estás bien?- le pregunté a América.

-Tu me salvaste- comentó con nostalgia.

-Espero espero- le respondí y comencé a ver a mi alrededor- ¿Lily?- pregunté entre grito y pregunta, pero no obtuve respuesta, ella no estaba en este universo, podía sentirlo.

-No vomitaste- comentó América para cambiar un poco de tema.

-No es mi primer viaje loco niña, recuerdo la montaña rusa en la que tuve que subirme junto a mi hija..., ¿así que esta es New york en el multi -no pude seguir, sabía lo que seguía, así que me acerque a una especie de vertedero y vomite allí.

-Si...no falla- contestó América con un poco de asco.

-Que asco...-comenté y comencé a limpiar mis labios, recordé la vez en la que Lily y yo comimos un burrito, que para nada me cayó bien y vomite, luego intente besar a Lily pero ella se negaba, tomé mi capa para verla, y en efecto, estaba dañada.-Si, también te hizo daño amiga, te voy a arreglar, oh posiblemente Lily- - comenté para luego colocarla en mi espalda.-okay América, Quiero que habrás un portal para recuperar a Lily y así regresar - le comenté.

-No puedo- respondió.

-Pero acabas de hacerlo- le contesté.

-No apropósito- me respondió.

-Lily esta sola en un universo que no conoce, se cuanto le aterra estar sola, tiene pesadillas con eso, además de que Wong esta peleando solo con Wanda y soy la única esperanza que tiene - le aclaré.

-Pero no puedo controlar mis poderes- la interrumpí.

-Debe de haber un modo en que lo controles, yo podría- no, estaba tocando tierra que mi otro yo destruyo, no seguí hablando.-Perdón- fue lo único que podría decir ahora.- ¿Qué tal la versión de ti en este universo?, quizá ella controle sus poderes- le plantee una idea.

-Aquí no hay una versión de mi - le contestó.

-¿Qué?- le pregunté confuso.

-Ni en ningún otro universo- me aclaró.

-¿Cómo estás tan segura?- le pregunté.

-Porque las busque.... y yo no sueño jamás- contestó triste.

-Tu tranquila, aunque pudieras regresarme no tendríamos en donde vencer a Wanda, Lily puede cuidarse sola, eso me lo demostró hace 6 años...- le respondí calmado, pero en realidad estaba preocupado por Wong y mi esposa, no podía permitirme perderla de nuevo, ese era mi mayor miedo y estaba pasando lentamente.

-¿Y el libro de los Vishanti?-preguntó América.

-¿Que tiene?- pregunté sin entender.

-El otro tú creía que con eso podía acabar con lo que venía por mi- me dio esperanza.

-Si pues, bien por mi otro yo, ¿no está aquí?, ¿Oh si?, yo no se donde está, a menos que haya otro, otro yo- iba a continuar, pero algo vino a mi cabeza.

-Hay que ir  buscar- me comentó América.

-Al otro, otro yo, ¿verdad?- le confirme para luego sonreír un poco.

Salimos del lugar donde nos encontrábamos, era una especie de terraza y comenzamos a caminar por las calles de esta interesante New York, estaba maravillado y sorprendido caminando y viendo el lugar, pero no me fijé que venía un auto, pero América me tomó del brazo para que no continuará un accidente.

-¿El rojo es el siga?- pregunté dudoso.

-Regla número 1 de  los viajes multiversales, no sabes nada de nada- me comentó, yo ascendí con la cabeza aún sorprendido.

-Claro, luz roja- contesté como alguien que conocía todo sobre ese universo y comencé a caminar, hasta que me giré un poco.- ¿Y cual es la regla número 2 pequeña?- le pregunté, pero no la veía, ¡Joder!- América- la llamé- ¡América!- grite después y tocaron mi hombro, giré y era la niña.

- Regla número 2, busca comida, de preferencia pizza, mira, bolitas de pizza- le comenté y seguimos caminando.

-¿Y como la pagaste?- le pregunté dudoso.

-Es gratis, en muchos universos la comida es gratis, es raro que ustedes paguen por ella- me explicaba, esto me estaba volando la cabeza.

-claro- concordé.

-¡Hey!, ¡No pagaste por eso!- le dijo el vendedor de las bolita de pizza.

-¡Hay no!, tal vez si se paga aquí- me comentó con cierto miedo.

-A pizza papa siempre se le paga- comentó el vendedor acercándose.

-Okay Pizza Papa, relájate, es una niña....- él hombre me interrumpió.

-Págalo tú, Doctor Strange- comentó con cierta molestia al ¿verme con el traje?, no me digas que en este universo me visto como Hipee- Oye, ¿de donde sacaste esta manta?, hasta se siente autentica- me comentó el hombre.

-Es una capa, no una manta y sugiero que la sueltes- le advertí.

-¿Te robaste todo el traje del museo de Strange verdad?- me preguntó, en efecto, no estaba entendiendo nada.

-¿Dijo museo?- le pregunté.

-Eres un ladrón, ¡tal vez te guste la mostaza eh!- me comentó para poder lanzarme mostaza, pero lo interrumpí y realice un hechizo en el que el se colocaba la mostaza y luego comenzó a golpearse el rostro.

-¡Vámonos!, no es permanente- le comenté a América y comenzamos a caminar de nuevo.

-¿Dura solo unos pocos minutos?- me preguntó la chica.

-Amm... como tres semanas- le contesté y escuche una risa por parte de ella, yo también reí un poco, ella me recordaba tanto a mi hermana............

..................

Estábamos caminando en una especie de parque.

-Esos universos que atravesamos, ¿en uno éramos pintura?- le pregunté.

-Si, no querrás quedar atorado allí, la comida es rara- expresó con cierto rechazo a ese universo.

-¿En cuantos universos has estado?- le pregunté interesado.

-Emmm...72...73 contando este- me respondió.

-Son bastantes- le expresé, e iba a seguir caminando, pero toque un botón con mi pie  al parecer.

- El camino de los recuerdos, revive tus recuerdos más preciados, ahora con precios en descuento, recordamos para que tu no olvides- comentó la máquina, para luego examinarme y transportarme a un lugar....

Pude ver como mi esposa estaba sentada en la arena y yo la abrazaba, mientras mirábamos el atardecer, ese viaje fue en el tiempo que estuvimos comprometidos, antes de la llegada de Thanos.

-Cariño- me habló, la miré sonriente.

-Dime cielo- le animé a hablar.

-No sabes lo feliz que estoy al saber que nos casaremos- me comentó con entusiasmo.

-Yo también estoy más que feliz, por fin seremos esposo y esposa en unos meses- concordé y ella sonrió para luego abrazarme y empujarme, ella se levantó para comenzar a correr por la arena.-¡Hey!, ¡eso no se vale!- le grite con gracia y me levanté para comenzar a perseguirla por la playa, escuchaba como se reía, hasta que la atrape y la giré.

-Te amo Stephen  Strange- me confesó.

-¿Después de todo?- le pregunté, era nuestra pregunta que confirmaba amor.

-Siempre- me contestó sonriente y nos besamos, ella tocó mi mano y la levantó dándole una pequeña vista al reloj que ella me regalo- Si que te gusto el reloj- me comentó con gracia.

-El reloj no, la persona que me lo dio si- le contesté y nos reímos para luego darnos otro beso.., era lo que necesitaba ahora, un beso de ella...

-No tenemos tiempo para esto- contesté con dolor, para poder seguir caminando, pero América se colocó en el lugar donde estaba antes y revivió un recuerdo de ella, era de sus madres, pero luego se convirtió en uno malo, ya que sus madres fueron absorbidas por un portal que América creo.

-Tienes razón, ya no hay que perder tiempo- respondió para comenzar a caminar nuevamente.

-Pequeña, ¿esa fue la primera vez que abriste un portal verdad?- le pregunté.

-Ya no importa- respondió.

-Claro que importa, perdiste a tus madres-hablé.

-No solo las perdí, las maté- confesó con dolor.

-No, eso no es cierto, ni lo pienses- le animé.

-Bien, pero abrí un portal con poderes que no conocía y las envíe a un universo ultramente letal del cual no volverán- me respondió.

-Si tus mamás son iguales a su hija, sobrevivieron y verás que un día volverás a verlas- le di esperanza, porque ella me lo dio.

-Nada mal- confirmo y sonreí un poco.

-Gracias- contesté y seguimos caminando.

- La mujer en tu banco de memoria, ¿era Lily verdad?- me preguntó.

-Si, era ella, fue un viaje que realizamos días después de comprometernos, antes de que viniera un alíen morado para separarnos y luego de 5 años regresará con ella- le comenté.

-Bueno, en la mayoría de universos están juntos, no me sorprendió que en tu universo también estuvieran juntos- me comentó la chica.

-Mi otro yo muerto, ¿tenía a su Lily no?- le pregunté.

-Si, pero, fue un tiempo en el que se dejaron de hablar, ya que Lily no puede tener hijos y Stephen se alejó- me comentó.

-Obvio- concordé con cierto enojo.

-¿Hiciste lo mismo con tu Lily?- me preguntó la chica.

-No realmente, pero él que mete la pata en la relación siempre soy yo, estos meses hemos estado peleando varias veces por temas ilógicos, hasta el punto de gritarnos que queremos el divorcio- le comenté con cierto dolor.

-¿Enserio?- me preguntó.

-Si..., perdona, eres una niña, no deberías de escuchar problemas de adultos- le respondí.

-No te preocupes, tú otro yo y la otra Lily eran peor, y estaban en planes de divorcio, de ellos firmaron los papeles pero no los entregaron- me comentó América.

-Bueno, ya sabemos quien metió mas la pata entre nosotros dos- comenté con gracia, ella rio un poco y nos dirigimos al santuario, pude visualizar una estatua ¿mía?.

-¿Dio su vida combatiendo a Thanos?- preguntó América sorprendida.

-Si ¿ves?, no todos somos malos ni tenemos problemas matrimoniales- comenté con sorpresa al ver esa estatua.

-Si el otro tú murió, ¿Quién protege el santuario?- me preguntó América.

Escuche que se abrieron las puertas del santuario y caminamos unos pasos para tener mejor visualización.

-¡Me lleva la...- comenté al ver a Mordo.

Tuvimos una pelea de miradas, Mordo no era alguien que apreciaba, luego de querer matarme, ¿Quién lo apreciaría?.

-Si, Mordo, fue el primero en dejarme entrar a Kamar-taj- le comenté.

-¡Genial!- comentó América sonriente.

-Luego enloqueció y se dedico en tratar de matarme -le respondí.

-¡Ah!, genial....-comentó América con bajas esperanzas de ayuda por parte de Mordo.

-Siempre sospeche que llegaría este día- comentó Mordo mientras se acercaba.

-¿De verdad?- le pregunté con sarcasmo.

-Si, porque tu siempre sospechaste que llegaría alguna vez- respondió, miré la estatua y luego a él- Mi hermano- comentó un Mordo alegre, él cual comenzó a reírse y yo también comencé a reír, segundos después me abrazó.

-Ya que- comenté con cierta incomodidad.

-Entra, debes contarme todo sobre tu universo- respondió entusiasmado, giré para ver con sorpresa a América.

-El rojo es el siga- le animé e ingresamos al santuario....sin saber lo que no esperaría.......

continuará...............

¡Espero les haya gustado!.

¡Nos vemos mañana!.