001

La familia Oh, era un familia típica y común.








Un hombre divorciado que solo vivía para su trabajo y su único hijo. Años después el mayor de los Oh se había reencontrado con su viejo amor de adolescente, que casualmente estaba casi en la misma condiciones que el. Los dos hombres solo sabían una cosa, la vida le estaba volviendo a sonreír.








— ¿Nos mudaremos? — pregunto un Changmin de cuatro años a su padre.

Sehun suspiró, sabía que estaba siendo egoísta con su hijo, pero él estaba esperanzado que Changmin podría integrarse a la nueva familia que estaban por formar.

— ¿Te agrada Luhan?

Changmin asintió en automático. A él le encantaba el señor Luhan, era divertido y siempre jugaba con él y le regalaba cosas, lo único malo que tenía aquel hombre era su hija. Xiao Wonyoung, una pequeña niña que solo era un año menor que el.

Aquella niña no lo dejaba en paz, sabía que estaba siendo malo puesto que Wonyoung solo tiene tres años, pero él estaba acostumbrado al silencio y soledad y sobre todo que respeten sus cosas. Xiao Wonyoung no sabía que era silencio, lloraba la mayoría del día y la noche y si no lloraba es porque estaba riendo o gritando, siempre tocaba sus juguetes y los rompía o los llenaba de baba y Changmin le parecía tan desagradable aquella bebé.

































Un Changmin de cinco años no entendía muy bien del todo que era lo que estaba pasando. De alguna manera entendía que su padre se había casado con Luhan y que ahora vivirían juntos en una nueva ciudad y lo peor de todo, con Wonyoung; que ya a sus cuatro años, aparte de llorar y gritar, ya podía hablar y no se callaba nunca.
















La integración de los Oh al nuevo barrio no fue problema. Dado que la familia misma eran muy educada y amigable y los vecinos tenían la misma carácteristicas con sus familias.

Lo único que sorprendía a todos era la manera en la que Oh Changmin, el hijo mayor de los Oh, se manejaba. Era un niño tal calmado, tranquilo, educado, al que nada le parecía afectar. Ese chiquillo siempre era bien portado y amable con todos y parecía que nunca, jamás, sería capaz de ser desagradable con alguien... o eso era lo que creían todos.






Hasta que Oh Changmin conoció a su vecino de al lado, Kim Sunwoo un niño un año menor que el y su peor pesadilla a sus cortos cinco años.











































Un año después.












Sehun tocó la puerta de la habitación de su hijo y entró sin más para encontrarlo comiendo en el piso y suspiro ya que de nuevo prefirió estar toda una tarde solo que ir a jugar con los niños del barrio.

— Deberías ir a jugar con tu hermana Changmin — hablo dulce su padre.

El nombrado arrugó la nariz no gustandole. Cada que Wonyoung iba a jugar con sus amigos, venía absolutamente sucia e irreconocible y el moriría si siquiera se ensuciara su cabello.

Sehun decidió no presionarlo, ya hizo suficiente en traerlo a una ciudad desconocida para el, en una casa nueva y que conviva con personas que no conoce.

Luego de acariciar la cabellera castaña de su único hijo salió de su habitación.

Changmin siguió con la tarea de comer las galletas del piso como si fuera un perro. Sonrió satisfecho cuando logró agarrar uno solo con su lengua.











"¡Kevin deja de hacer trampa!











El pequeño castaño giro los ojos oyendo nuevamente los gritos de los niños de afuera. Se levantó del suelo y luego de sacudirse las migas de galletitas de su ropa camino hasta su ventana para ver porque era todo el alboroto.


Se encontraban cinco niños gritando y corriendo, apuntándose entre sí con sus pistolas de agua mientras reían.

Changmin soltó una pequeña risa cuando vio como un niño rubio mojo totalmente a su hermana y está lejos de enfadarse río y persiguió al mismo niño que la mojó con intenciones de también mojarlo.






— ¡Hey!





Changmin frunció el ceño y bajo su vista y giro los ojos al encontrar a ese odioso moreno sonriéndolo malvado y cuando iba a soltar un "¿Que quieres?"  Ya tenía el rostro mojado y Sunwoo río travieso corriendo con su pistola de agua en manos. Lo odiaba tanto.































Un años después.













Changmin estaba aburrido en esa fiesta.

Era el cumpleaños número seis de su hermana y sus padres le habían organizado una fiesta sumamente grande en su patio trasero y por ende estaban invitados sus mejores amigos, sus vecinos de la misma edad: Kevin Moon, Choi Chanhee, Eric Son y lamentablemente para el hermano de la cumpleañera también estaba invitado el amigo y vecino Kim Sunwoo.

Estaban en el juego de adivinalo con un dibujo y todos estaban muy entretenidos riendo de los feos dibujos que cualquier niño de seis años pudiera dibujar.

— ¡Es un Alcón! ¡No, un avión! ¡No, ya se...es un Ángel!

— Kevin, apenas hice un garabato —  lo miro Chanhee con el pincel en la mano.

Todos rieron por eso, incluso Changmin quién también estaba sentado en la ronda que se hizo para ver mejor la pequeña pizarra.

— ¡Es mi turno! — grito entusiasmado Sunwoo y se levantó casi corriendo y empujó a Chanhee no antes de quitarle el pincel.

— ¡Es una bola! — todos giraron los ojos ya que Kevin ni siquiera daba tiempo para que otros niños adivinen — ¡No, una ballena! ¡Una pelota, si, es una pelota!

Sunwoo negó divertido y tapo el pincel y giro para ver a un castaño de siete años travieso.

— Es Changmin — aclaro Sunwoo apuntándolo con la punta del pincel y todos rieron por eso y el mayor lo míro mal.

— ¡Yo no me veo así! — exclamó ofendido por ese horrible dibujo —  Es la ardilla más fea que e visto.

— ¡Es un Hámster! — respondió Sunwoo incluso más ofendido que la víctima de la broma.

— Apestas en esto — dijo y tomo el pincel del pelinegro con violencia y volteo a la pizarra con intenciones de devolverle la broma.




Las mejillas de Sunwoo se tiñeron de rosa al ver el dibujo de su archienemigo.

Todos los invitados rieron al ver el dibujo de Changmin.

"Un círculo con dos puntitos como ojos, un punto como la nariz, en vez de labios dibujó un corazón y para terminar su maliavelica obra; coloreo todo ese deforme círculo de color negro, dando a entender que estaba acentuando el color oscuro de la piel de su vecino"








— ¡Por dios! —  grito Sunga al ver como su hijo saltaba sobre aquel niño con intenciones de golpearlo.

— Changmin basta — pidió Luhan serio mientras sostenía a su hijo que parecía a nada de soltarse para iniciar una nueva pelea con el moreno.

— ¡Voy a dejarte calvo, sé dónde vives! — amenazaba Sunwoo mientras era llevado del brazo por su madre que estaba sumamente avergonzada.
































Kim Sunwoo 9 años — Oh Changmin 10 años.












La vida de Sunwoo siempre fue tranquila, tenía una bonita casa al igual que la familia y tenía unos amigos divertidos. Su vida era maravillosa hasta que ese niño detestable se mudó a la casa de al lado y trastornó su mundo.

Nunca lo habían castigado hasta que conoció a Oh Changmin. Nunca se había comportado mal, nunca había hecho ninguna travesura, nunca había fastidiado a nadie, ni había tenido pensamientos malvados.

Pero ese niño sabelotodo se creía mejor que el y solo despertaba su peor lado.













— ¿Que te paso? — pregunto Sunwoo asombrado cuando vio a su mejor amigo venir con un ojo morado.

— No sabía que las niñas golpeaban así de fuerte — contesto a su vez Eric y se sentó en la cama de la habitación de Sunwoo.

— ¿Niña? ¿Una niña te golpeó? —  pregunto divertido el moreno mirándolo.

Eric asintió despacio — Wonyoung me golpeó.

Sunwoo agrando sus ojos sorprendido y luego tiro la cabeza para atrás riendo y Eric lo miro mal por eso.

— ¡No es gracioso! — exclamó el contrario avergonzado.

— ¿Pero...? — río — ¿Pero porque te golpeó?

— Le pedí que se casará conmigo — explicó luego de un suspiro.

— ¿Solo por eso? — interrogó con las cejas juntas.

—Se lo pedí mientras le pegaba chicle a su cabello.

Y Sunwoo nuevamente rió. No podía creer que a Eric le pudiera gustar alguien de esa familia.


Los señores Oh eran estupendos, Wonyoung estaba algo loca, pero también era fabulosa, el único defectuoso era aquel chico que estaba acostado en su cama con un libro en manos.

A través de su ventana, lastimosamente daba la vista a la habitación del niño más horrible que alguna vez pudo conocer. Sin duda alguna jamás desearía estar con alguien que si quiera le parezca en lo más mínimo a Oh Changmin.






































Kim Sunwoo 11 años - Oh Changmin 12 años.










Changmin estaba más que harto de los golpes que Sunwoo hacia al rebotar su pelota en el piso. Si fuera otro día simplemente iba a ignorarlo como estaba acostumbrado hacer, pero ese día estaba realmente de mal humor.

Otros seis golpeteos más y el castaño dejo sus pinturas y salió de su casa para ir al patio trasero con una clara intención de tal vez estrellar ese balón en el odioso de su vecino.

La reja que dividía ambas casas no era muy alta y Changmin podía pasarla con subirse encima de una caja y luego saltar hasta el otro lado, pero toda acción quedó congelada cuando vio que un chico hizo algo mejor con aquella pelota.

Kevin y Eric se hicieron a un lado cuando vieron salir a un chico rubio de la casa de los Kim.

Sunwoo quedó con la boca abierta cuando el rubio tomo la pelota que su padre acababa de comprarlo para posteriormente clavar unas diez veces en el con un cuchillo que tenía en la mano y luego devolverle la pelota ya desinflada a su dueño como si nada.

La furia de Sunwoo aumento cuando escucho esa odiosa risa. El moreno volteó y se encontró con Changmin observando divertido la escena y se dio cuenta que tal vez exista alguien que odie más que a Changmin o tal vez odiaba a los dos por igual.

Pero su primo Yoshi Nori sin duda era un digno oponente.







































Kim Sunwoo 13 años — Oh Changmin 14 años.



















— Así estás muy bonito Changmin, no hace faltas que te mires — sonrió Chanhee viendo al mayor del grupo mirarse en el pequeño espejo que había prestado de su hermana.

— Si, verte por horas no cambiará tu horrible aspecto — se adentro Sunwoo y el castaño giro los ojos a su némesis.

—¿Lo dices por experiencia propia? — contraatacó el bajo.

— Auch ¿No ves el daño que me haces? — soltó con sarcasmo el moreno.

Los miembros restantes rodaron los ojos. Ya estaban casados de esa manía que tenían los dos en discutir apenas verse.

Realmente ninguno se imagina en un universo donde eso no pase.

Porque Kim Sunwoo y Oh Changmin eran enemigos y sabía que jamás nadie podría cambiar eso.
































Kim Sunwoo 14 años - Oh Changmin 15 años.
















Los años transcurrieron, al igual que su rivalidad. Ya ambos estando en su etapa adolescente, los dos adversarios empezaron a acercarse mutuamente atraídos el uno por el otro.

Kim Sunwoo se convirtió en un chico sumamente guapo, atraía a todos con solo verlo. Un gran hijo cómo gran alumno, calmado y de buenas notas.

Tantos las chicas como los chicos se derretía con tan solo verlo, recibía declaraciones de amores al menos dos veces por semanas. Lo hacían personas populares, personas con bajo estatus social, personas tímidas como personas extrovertidas, de varios tono de color de piel como de cabello, altas y bajas, personas de todo tipo; pero parecía que nadie era el tipo de aquel moreno puesto que rechazaba a todos, hombres y mujeres y nadie sabía porque...
















— Hola señora Kim — sonrió Changmin al ingresar a la casa de su vecino — ¿Esta Sunwoo?

Sunga sonrió y asintió — En su cuarto.





















Sunwoo vio entrar a su cuarto a un hermoso jovencito de preciosos ojos avellanados, enmarcados en una preciosa mirada de ardilla, su cabello color chocolate que le hacía recordar a su bebida favorita.

Tenía la cara bien enmarcada con una expresión sublime y dulce. Labios rosados apetecibles, todo en conjunto daba un aura angelical y tierna; un cuerpo que comenzaba a destacar, sus piernas largas y unas curvas que lo acompañaban, las cuales tentaban a más de un joven atolondrado.

Y Sunwoo viendo a su precioso vecino entrar a su habitación...temió por su vida.

















— ¡Voy a matarte! — amenazó más que enojado Changmin yendo al cuerpo del menor —  ¿¡Cómo pudiste hacerme esto Sunwoo!? — tomo la almohada del moreno y empezó a golpearlo y Sunwoo no hizo nada para esquivarlo, al contrario, se entregó totalmente hasta que el castaño se cansé y tal vez bajará su enojo. — No me toques Wonnu, enserio estoy molestó. — hablo con los brazos cruzados.






— Amor lo siento ¿Ok? — suspiro sentándose sobre el colchón y su novio se acomodó mejor encima suyo — Sabes que soy celoso y cuando ese imbécil se atrevió a tocarte...

— Sunwoo, solo me tocó el rostro...

— ¡Te toco mi hoyuelo! — se alteró al recordar cómo Mongkut se atrevió a tocar el hoyuelo izquierdo de su pareja.






Sunwoo y Changmin habían iniciado su relación cuando el mayor apenas cumplió quince. Después de muchas peleas, discusiones y sobre todo bromas, se dieron cuenta que se gustaban.

Ambos no tenían nada que perder, nunca hubo una amistad de por medio, así que si eso no funcionaba, simplemente podrían volver a tomar sus papeles de ser el Adversario del otro.

Changmin giro los ojos, pero no cambió su expresión. El mayor estaba consciente de lo celoso que es su novio, en especial si se trataba de sus hoyuelos o su cabello. Porque Sunwoo podría tolerar incluso que besen los labios de Changmin, pero cuando alguien se atrevía a tocar sus dos cosas favoritas perdía totalmente el control.


— Perdoname — pidió y llevo sus manos a la pequeña cintura de su novio.

— Yo no me meto cuando tus miles de conquistas se te ofrecen en mis narices y tú vas y le dices al Mongkut que soy Xenófobico solo por poner su dedo en mi mejilla.

Sunwoo chasqueo la lengua disgustado. Obviamente ambos querían hacer pública su relación, pero no podían y solo había una razón.










Kim Younghoon.








Younghoon era un chico que se había integrado al grupo cuando todos tenían doce y Changmin trece. El alto en el primer momento se había quedado embelesado con Changmin, de sus sonrisas, de sus ojos y sobre todo de sus hoyuelos.

Para nadie era secreto del enamoramiento de Younghoon hacia el hermano mayor de Wonyoung, puesto que el mismo Younghoon no se molestaba en ocultarlo.

Si fuese otra persona, Sunwoo no dudaría dos veces para romperle los dientes al oír la forma en la que comentaba sobre las cualidades de su novio, pero era Younghoon y el moreno de alguna manera sentía empatía por el.

No podría culparlo. Oh Changmin se volvió un chico hermoso, llamativo. Se volvió un chico popular por su adorable ser, la manera en como trata a los demás. Era entretenido verlo, era exagerado al momento de hablar gesticulando de más y su manera peculiar de ser al gritar absolutamente por todo. Oh Changmin era diferente a cualquiera, era único, pero sobre todo, era SU novio.











— Te tocare hasta que me perdones —  anuncio el menor e inicio a repartir mordidas traviesas en su cuello a la vez que acariciaba y amasaba sus muslos y trasero. Adoraba escuchar como el mayor suspiraba y soltaba pequeños gemidos. Puede parecer absurdo cómo es que el castaño se podía excitar con el manoseo que le otorgaba Sunwoo.

Pero ambos eran vírgenes y hormonales y cualquier mínimo roce era chispa incontrolable para los dos.

A Sunwoo le parecía tan tierno como el bajo llevaba una mano a su boca para taparla y tratar de retener sus jadeos que iban subiendo de tono.

El moreno sabía que su chico es escandaloso y que le cuesta trabajo mantenerse callado, por eso le encanta hallar los momento silenciosos para pasarse de manos con su novio con tan solo una delgada pared que los separaba de la otra habitación.


Kim se aprovecha de Changmin ya que su voz es aguda de por sí y al gemir o jadear sus cuerdas vocales se agudizan aún más y eso lo ponía malditamente caliente.

ㅡ Wonnu... hmm, no sigas... me pueden escuchar y estoy enojado y tu mamá...e-esta abajo ㅡ decía el mayor con dificultad, arqueando su espalda y juntando sus erecciones por accidente. El contacto hizo que ambos ahogaran un gemido.

ㅡ Joder amor... me trato de controlar pero me excitas como la maldita mierda. ㅡ Gruñó.

Changmin paso su pulgar sobre la mandíbula de su novio, deteniéndose allí, esperando por ver si Sunwoo lo para; pero cuando no lo hace, el mayor poco a poco va acercando su boca a la suya.

En el preciso momento en el que sus labios se encuentran, sucede la misma magia de cada beso. Oleadas intermitentes de calor se despliegan en sus interiores. Empiezan por sus bocas y se propagan por todo sus cuerpos, provocando un hormigueo en los pezones del castaño antes de dirigirse al miembro del pelinegro.

Changmin suspiro tomando la lengua del moreno entre sus labios para dar una pequeña succión. Los labios del alto saben al chicle de menta que ha estado masticando toda la tarde y el sabor mentolado impregna las papilas gustativas del mayor.

Los labios de Changmin se mueven por voluntad propia y Sunwoo lo aprovecha al máximo deslizando su lengua más profundo causando un jadeo en su novio. Un sonido erótico que calienta todo el cuerpo del menor hormonal.


— ¿Ya me perdonaste? — pregunto Sunwoo totalmente agitado.

—Si — contesto y eso hizo sonreír a su novio — Pero sabes que me vengare.




El moreno hizo una mueca, sabía que el mayor hablaba enserio. En cuestión de venganzas y bromas, Oh Changmin era un respetado adversario.

En sincronía volvieron a besarse. Sunwoo llevo ambas manos al rostro de Changmin, dejando suaves caricias en donde ahora mismo se escondían sus hoyuelos y este inicio a mecerse, intensificando el placer en ambos adolescentes y desencadenando otro estallido de necesidad en ellos.







Necesitaban más.










Con un gemido de angustia, el par ladearon sus cabeza para que el beso sea mas profundo y sus lenguas exploraban con ansia la boca del contrario.

—Dios, amor ~ — jadeo Sunwoo alejándose por un poco de respiro.

El menor llevo una mano a su pelo y paso sus dedos por el cabello castaño y de nuevo lo empuja hacía él, para acercarlo y con el otro brazo rodea su cintura para que no pueda moverse.

El pecho de Changmin estaba apoyado contra el pecho de su novio, duro como una piedra y el bajo puede sentir el martilleo salvaje de su corazón. Su excitación coincide con la suya. El gemido ronco y áspero que deja escapar Sunwoo le hace cosquillas en sus labios y genera que su pulso vibre.

La boca de Sunwoo se mueve sobre la contraria con una habilidad y confianza que roba el aliento de los pulmones de su pareja.

— Wonnu ~ — soltó cuando lo mordisquea el labio inferior y sus pezones le responden con un tirón.

El mayor aprieta una mano contra su pecho para tratar de corresponder el beso con la misma intensidad. Los templado labios del menor dejan los de su novio para empezar a recorrer su mandíbula haciendo a Changmin gemir.

Sunwoo empezó a humedecer el largo cuello del contrario con besos de boca abierta causando escalofríos en el bajo.

Changmin oye un quejido torturado y le sorprende descubrir que viene del moreno. Desesperado por sentir su boca en la suya de nuevo, pone su mano en su pelo para tirar de el y forzarlo a que regrese donde el lo quiere, pero el pelo oscuro de Sunwoo es muy corto. Todo lo que Changmin puede hacer es empujar su cabeza hacia adelante, lo que provoca una pequeña risa por parte de su pareja.








— ¿Esto es lo que quieres? — dice con voz cambiada por la excitación y pubertad.

Changmin bajo la cabeza y nervioso comenzó a jugar con sus dedos.

—Y-yo...— comenzó nervioso — Yo quiero...

—¿Sexo? — interrumpió su novio mucho más nervioso que el — Bueno yo...

—¡Sexo no! — aclaró rápidamente — No quiero tener sexo a mis quince, quiero que sea especial y planeado, no así.

Sunwoo asintió, pero más porque no podían tener sexo ahora, el no tenía idea de cómo lo haría, aunque sabía lo básico, no era suficiente considerando quién es la persona a quién le entregaría su virginidad.

—Yo he estado viendo algunos vídeos y...

—¿Has estado viendo porno? — pregunto Sunwoo divertido y su novio lo miro mal sin darse cuenta que sus mejillas están sumamente rojas.

El moreno se mordió el labio de tan solo imaginar al ejemplar Oh Changmin viendo a escondidas esos tipos de videos.

—Y dime...— hablo coqueto — ¿Que has aprendido en tus vídeos para adultos?

Changmin carraspeo mucho más avergonzado que antes y se levantó del cuerpo del menor. — Quiero...— levantó la mirada y posó sus ojos en esos ojos oscuros que lo miraban curioso — Quiero prácticar tener sexo oral.

Sunwoo parpadeo muchas veces no dando crédito a lo que oía — ¿Qué quieres que?

—Lo vi en los vídeos y esos chicos parecían disfrutarlo, también quiero intentarlo...

—¿Eso quieres? — volvió a preguntar solo para estar seguro.

—¡Si quiero que nos chupemos! ¿¡Tanto te cuesta entenderlo!? — exclamó enojado. — Sabes que, olvídalo...eres demasiado imbécil y ya no quiero hacer nada.

Sunwoo tuvo que retener su risa para que su novio no lo tirará por la ventana y carraspeo tratando de buscar su lado serio.

—Bebé no te enojes — pidió acariciando el muslo del mayor — Solo que me sorprendí, no puedes culparme...

—¿Lo haremos?

—Si que eres directo — esta vez si no pudo evitar su risa — Bien, como lo haremos.

Las mejillas del mayor volvieron a calentarse, aunque el haya sido el que había propuesto la idea, era como si recién se daba cuenta de la realidad. Pero quería hacerlo, estaba demasiado curioso y aparte Sunwoo era su novio ¿Quien mejor que con el?

—Acuéstate — ordenó el castaño — No dirás absolutamente nada o en la vida vuelvo hablarte.

Sunwoo obedeció y se acostó, cerró los ojos no pudiendo creer lo que vendría. Aquel niño dulce, ese que era el sueño de toda mamá para tener como hijo, ese que todo padre quiere como novio de sus hijas, el niño estrella, ese mismo chico ahora le estaba bajando el cierre dispuesto a meter su pene a su boca.

—Por favor cuída tus dientes.

—¡Que te calles! — chilló avergonzado.

Sunwoo cerró los ojos desesperado por cualquier acción y Changmin agradeció internamente que por fin su novio había cerrado la boca.

El mayor no saco los jeans del pelinegro, simplemente bajo el cierre dejando ver su boxer.













«¿Debía sacárselo?»

«En los vídeos que los hombres siempre estaban desnudos»

«Pero si veo a Sunwoo desnudo probablemente me vaya corriendo y no vuelva más»












Suspiró rendido, el quería esto así que lo terminaría. Con manos temblorosas bajo el boxer del menor y ambos jadearon en unísono.

Changmin trago grueso viendo el pene de su novio.













«¿Porque tiene ese tamaño?»

«Aunque soy mayor su pene parece ser más grande que el mío»

«A de ser porque es moreno. Es bien sabido que los hombres con la piel oscura por genética poseen un dotado miembro»
















—¿Te estás comunicando con mi pene telepáticamente o que mierda? — volvió a hablar el moreno — Joder, me estás matando aquí.


Changmin ignoro a su desesperado novio y se armó de valor para realizar lo que su alocada y caliente cabeza le dictaba. Tenía el libido demasiado alto.

Sunwoo tembló con solo sentir el tacto de Changmin, puesto que era la primera vez que alguien que no sea el mismo, toca su pene.

—¡Fuck!

Y comenzó. Changmin ajustó los labios y solo beso la punta, como si estuviera simplemente probando el sabor y eso ya estaba enloqueciendo al menor.

El castaño fue succionando pausadamente el pene que ocupaba su boca, optó por cerrar los ojos, por la vergüenza y porque así se sentiría más cómodo.

Changmin se carácterizaba a si mismo como un chico competitivo y perfeccionista, si hacía algo debía hacerlo perfectamente y sobre todo debía ser el mejor. Y es por eso que se empeño a realizar el mejor trabajo oral sin importar que es la primera vez que lo hace y que para Sunwoo es la primera vez que recibe uno.

—Be-bebé...

La boca de Changmin no dejó de trabajar en ningún segundo ni tampoco su lengua la cual por dentro se encargaba de envolver el falo en sí y también a posarse sobre el sensible glande de su novio.

El castaño sintió como de los labios de Sunwoo se escapaba un inconsciente jadeo que en realidad fue leve, tan involuntario puesto que el moreno aún no asimilaba qué ocurría. Poco a poco el pene de Sunwoo empezaba a ocupar mucho espacio en la inexperta boca de Changmin y este, muy orgulloso por su trabajo; tomo el falo del pelinegro masturbándolo mientras lo succionaba creando los típicos sonidos en el ambiente producto de una excelente primer mamada. Podía ahora incluso degustar del saludable sabor del líquido pre-seminal de Sunwoo colándose en todo su paladar.














—Hijo ¿Está todo bi...?










Ambos adolescentes se separaron automáticamente y miraron horrorizada a la dueña de la casa. En cambio Sunga controlando la situación, simplemente cerro de forma lenta la puerta.

Aunque le haya sorprendido ver que el hijo mayor de la familia de su vecino tenía en su boca el pene de su hijo, ya sospechaba del tipo de relación que tenían esos dos.







Desde hace ya tiempo...

























"Sunga escucho gritos provenientes del fondo. Sabía que se trataba de esos dos chicos, pero de igual manera fue a ver que nadie saliera lastimado.

Jadeo incrédula cuando vio a su único hijo debajo de la lluvia gritándole al menor de los Oh y apegarse totalmente a él y cuando parecía que el lindo castaño le respondería pudo escuchar perfectamente.




¡¿Por qué ahora me dices eso?! — se oyó gritar a Changmin totalmente mojado debido a la lluvia y sobre todo, sumamente furioso.

¡Porque quiero! ¡Y porque se me da la gana! — respondió el moreno con el mismo tono de voz.

¡Ya basta! ¡Entiende que no se puede hacer nada!

¿Ah sí?

¡Sí!

¡Pues vas a tener que seguir escuchándolo! ¡Eso y muchas cosas más!

¿Y por qué debería? — pregunto el castaño indignado.

¡Porque se me antoja!

¿Sólo por eso?

¡Y porque soy un maldito engreído!

¡¿Oh, en serio?!

¡Sí, y porque tengo las malditas ganas de ser tu novio! — finalizó el moreno y tomó del rostro a Changmin con ambas manos y posó su boca en la suya robándole su primer beso y entregándole su primer beso al mayor.



Cualquier madre se asustaria al ver que su hijo acaba de ser golpeado hasta el punto de caer al suelo y ensuciarse con lodo. Pero Sunga simplemente negó con la cabeza con una sonrisa y se alejó de la ventana para seguir haciendo sus cosas.

"¡Odio a Oh Changmin!"

La mujer río al oír la voz de su bebé entrando sucio y furioso a la casa.

"¡Ojalá que viniera una orca y se comiera su fea cabeza!"


















Y los gritos que escuchaba en ese instante le recordaba ese momento.










"¡Ya guarda tu maldito pene, no pienso chupartelo nunca más!"






























Aunque la vergüenza que pasó Changmin no fue nada comparado a la vergüenza que pasó al día siguiente Sunwoo.










Camino furioso hacía el baño de hombres donde recién vio entrar a un demonio de cabellos castaños.









—¿¡Cómo te atreviste a esparcir el rumor que estoy enamorado de Mongkut!? — fue lo primero que dijo el moreno al ver a su novio.

Changmin rió una vez más ya que su venganza fue completada con éxito.

—Pero si es bastante coherente — formuló y se alejó del lavado para mirar al pelinegro — Le dijiste a Mongkut que no tolero a los extranjeros, pero solo lo hiciste para que él se aleje de mi porque temés que yo te lo robe — sonrió malvado.

Sunwoo ni siquiera podía negar eso puesto que no sabía quienes también están en ese baño y no podía soltar un: "Sabes que lo dije porque eres mi novio y el te estaba coqueteando"

Changmin salió victorioso del baño y fue a sus clases. Sunwoo salió minutos después mucho más calmado. Giró los ojos cuando encontró al tailandés en los pasillos y este al verlo se sonrojo y comenzó a caminar más rápido.


























































Un año después.






Changmin estaba recostando su cabeza en el hombro de Yoshi, su mejor amigo; pero ninguno de los dos siquiera se hablaban, el par estaba más entretenido en sus celulares. Uno escribiendo con su novio y el otro mandándole al demonio al chico que lo acosaba.


"¿Quieres venir a mi casa? Mis padres no estarán y Wonyoung seguro se duerme temprano'









Sunwoo se mordió el labio leyendo la sugerente invitación de su pareja.

—Se ve tan bonito hoy...— suspiro Younghoon recargando su mentón en su mano — No es que no se vea bonito los otros días, siempre se ve hermoso y...

—Younghoon ¿Porque simplemente no vas y lo invitas a salir? — hablo Wonyoung ya cansada de siempre escuchar cada mañana como el mayor de todos proclama el amor que le tiene a su hermano.

—¡¿Que!? ¡No! — exclamó avergonzado — ¿Y si me rechaza? ¿Y si me odia? ¿Y si...?

—Entonces Changmin es un idiota — hablo esta vez Chanhee.

— Changmin no es un idiota — rápidamente lo defendió Younghoon.

— Entonces el idiota eres tú — bufo el pelirosa y se paró del comedor para salir del lugar.

Sunwoo, Wonyoung, Kevin y Eric compartieron miradas. Mientras Younghoon se queja de que su crush ni siquiera lo voltea a ver, un pelirosa se lamenta mientras escucha como su crush sé que queja que su propio crush ni siquiera lo voltea a ver.

—Sunwoo ¿Tú podrías ayudarme? — pidió Younghoon en un intento desesperado — Tu eres su vecino y...

—Ni hablar — contestó el moreno sin levantar su mirada de su teléfono debido que le estaba respondiendo a su novio — Sabes que odio a Changmin, tal vez te lleve al chico sin dientes si llego a hablar con él.

Younghoon suspiro triste, porque sabía que Sunwoo era capaz de eso. Todos sabían de la enemistad que tenían esos dos chicos, así que por el bien de todos, era mejor que esos dos jamás se junten.

















"¿Ir a tu casa? ¿Nos manosearemos?"










"Sobre eso...Quizás podríamos aprovechar esta noche a solas"














El corazón de Sunwoo empezó a bombear con fuerza, levantó la cabeza para buscar con la mirada a su novio y lo encontró a unos metros de ellos, mientras parecía querer esconder su cabeza en el cuello del japonés.


"¿Bebé, estás seguro?"









"Si"



"¿Y tú?













¿Que si estaba seguro? Por supuesto que no, pero quería hacerlo. Era un sueño como cualquier chico adolescente y virgen. Había investigado lo suficiente y ya no veía el momento para ponerlo en práctica.

Y joder, si estaba seguro. Quería tener su primera vez con su novio.










"Si"

"Joder, si"







Asjghahjgs!"







"¿Que mierda es eso?"





"Significa que entre en colapsó"


"Inténtalo"





"¿Qué debo hacer?"








"Solo oprime cualquier letra al azar"










"Q"

"JJHAJAJAJQJA"

"Eres tan estúpido"











"Lo e echo adrede"

"Mmm ajá."







"¡Lo digo enserio, estúpido!"







"¿Entonces porque la Q?"


"Porque me recuerdas a un Q"









"...."






"JAajhaj. Dios eres tan imbécil"







"¿Y desde cuando señor mentecato te recuerdo a una Q?"










"Desde siempre"



"Hasta te tengo registrado así."

















Rápidamente cambio el "Odioso" a "Q 🍑" por el simple echo de no darle la razón a su odioso novio.































































—Se portan bien — pidió Luhan — Wonyoung no saldrás de casa y quedarás bajo el cargo de tu hermano.

Wonyoung asintió de mala gana y Changmin simplemente deseaba que sus padres ya se largarán.

Sehun se despidió de ambos con un beso y luego salió de la casa con la intención de llevar a su marido a disfrutar su aniversario.

Xiao y Oh, apenas se cerró la puerta, en sincronía fueron corriendo en sus respectivas habitaciones, sin saber que ambos tenían los mismos planes.












Sonrió al ingresar a su cuarto y encontrar a su chico sentado en su cama mientras escribía en su teléfono.

— Ya se fueron — llamó la atención y su novio levantó la mirada ya sintiéndose excitado — Pero debemos ser muy silenciosos — pidió — Changmin seguramente se quedará hasta tarde leyendo y no quiero que nos oiga.

Eric asintió de acuerdo y luego con una sonrisa cómplice se besaron mientras el rubio tomaba a Wonyoung de la cintura y lo sentaba encima.


























El castaño entro a su cuarto sumamente nervioso. Encontró a Sunwoo acostado boca abajo mientras leía uno de sus libros.

—¿Que lees? — pregunto el mayor mientras se acostaba sobre la espalda del moreno y apoyaba su mentón en su hombro para poder ver lo que éste estaba viendo.

—Tengo examen de historia este viernes y solo quería ver si podría memorizar algo de algunos de tus libros — respondió y luego cerro un ojo puesto que su novio lo había mordido el hombro.

—¿Y que tienes memorizado hasta ahora? — interrogó luego de dejar un beso en el lugar que acababa de morder.

— "Que llegue tarde por ir a la tienda...por mermelada, porque solo había ese, ese tonto atún"



El mayor quedó anonadado por algunos segundos asimilando lo que el moreno acababa de soltar — ¿Lilo y Stich? ¿Enserio? — cuestióno Changmin divertido.

—Te juro que me sus líneas de memoria, pero no puedo retener un simple párrafo de mi tarea — el mayor río girando los ojos — Lo digo en serio. Una vez en un examen quería recordar la regla de cambios de signos y lo único que mi cerebro me daba es "Me disciplinan duro, cinco veces al día, con piedras"


Changmin río al recordar esa escena de Lilo, puesto que su novio la imitaba muy bien.

—Tu sonrisa siempre me hizo recordar a Stich — mencionó Changmin y el moreno lo miro mal. — Lo digo en serio, incluso tengo tu sonrisa de Stich guardada como contacto.

—No inventes...

Changmin río asintiendo y sacó su móvil del bolsillo para marcar al pelinegro y que vea por el mismo que no estaba mintiendo.

—Te odio tanto — mencionó Sunwoo al ver la pantalla del teléfono del mayor y ver qué tipo de sonrísa tenía adjunta.



—¿Ves? No miento, no soy como tú — cortó la llamada y bloqueo su teléfono para rodar de la espalda de su novio y caer hasta estar junto a él.

—Tampoco miento — informo mirándolo mal.

Changmin arqueo la ceja juzgandolo y Sunwoo giro los ojos y con dificultad sacó su teléfono de su bolsillo para marcar el número de su pareja.

—¿Enserio eres capaz de llevar tan lejos tu mentira por el simple echo de no admitir que eres un idiota? Porque déjame decirte que eso te hace aún más idiota — destacó el castaño divertido al ver la forma en cómo le tenía el moreno por la simple mentira de esa mañana.


















— Dejemos eso de lado — hablo el pelinegro y tomo ambos teléfonos para dejarlo encima de la mesita de luz.

Changmin volvió a ponerse nervioso, hasta había olvidado del porque Sunwoo se encuentra allí.

—Amor si no quieres hacerlo, está bien — sonrió el menor y llevo una mano para sacar el flequillo castaño de la frente de su pareja.

—No — rápidamente aclaro — Yo quiero hacerlo, solo que estoy nervioso — resopló — ¿Tú no?

En cambio Sunwoo no le contesto, solo poso sus labios en la pequeña boca de su Hyung y este sorprendiendolo lo besó con hambre.

—Quiero que tú tengas mi primera vez, confío en ti Wonnu, no me imagino hacer esto con alguien más — confesó el mayor y miró directo a los ojos al moreno.

Sunwoo trago grueso y sus manos empezaron a temblar. El también no se imaginaba esto con alguien más, aunque jamás se iba a imaginar que él podría perder la virginidad con su odioso vecino que sorpréndentemente es su novio.

—Entonces hagámoslo — finalizó Sunwoo ansioso para lo que se vendría esa noche.



La respiración de Sunwo se detiene en su garganta cuando Changmin se sube a su regazo. Se podría pensar que es imposible para el menor tener una erección inmediatamente, pero su polla crece nada más sentir el abultado culo de su novio sobre ella.

El beso que se dan es suave y dulce y Sunwoo gime de decepción cuando la boca del mayor de repente abandona la suya. La decepción no le dura mucho tiempo porque lo siguiente que ve es al mayor que está de rodillas en el colchón delante suyo liberando su pene de los pantalones de chándal.

— C-Changmin... — gimio cuando la boca del castaño se encuentra con su miembro haciendo que palpitara con entusiasmo.

El orgasmo del moreno casi estalla cuando el calor húmedo de la boca contraria lo rodea. Una delicada y pequeña mano acaricia su muslo mientras trabaja con la boca. La otra mano está enroscada con fuerza alrededor de su polla, su pulgar frota el punto sensible y cada una de las veces que succiona, lo empuja más y más en una profunda y deliciosa inconsciencia.

Las caderas del pelinegro empiezan a moverse. No puede detenerlas. No puede evitar meterlo en la boca del mayor más y más adentro, mientras enreda sus dedos en su pelo para guiarlo. A Changmin no parece importarle. Sus golpes frenéticos provocan un gemido que sale de los
labios del castaño y el sexy sonido vibra a través del pene de Sunwoo y sube por su columna vertebral.

La cálida succión lo vuelve loco. No puede recordar un segundo en el que no deseara a ese chico. Un segundo en el que no estuviera absolutamente desesperado por el.

Changmin dejo el pene de su novio y se limpio sus labios con el dorso de su jersey y miro a Sunwoo avergonzado como si no acabara de tener su miembro dentro de sus labios.

—C-creo que tenemos que estar desnudo — mencionó el castaño preso de los nervios y anticipación.

Sunwoo se desviste con tal rapidez que hace a su novio reír.

Changmin uso unos momentos para asimilar que estaba viendo a Kim Sunwoo totalmente desnudo. Su cuerpo es como una sombra borrosa mientras da un paso hacia el.

—¿Porque tu si tienes ropa? — se queja el menor cohibido por el momento.

— Quitamela tu...

Sunwoo jadeo sorprendido, ambos sentía la situación irreal.

Changmin se estremece cuando el pelinegro mete ambas manos por debajo de su camiseta y la arrastra lentamente hasta su clavícula. Le da un beso suave entre el espacio de sus pechos antes de tirar de la camiseta y sacarla por encima de su cabeza. Las yemas de sus dedos acarician sus caderas y hacen cosquillas en la parte superior.

Changmin boquea cuando Sunwoo se pone de rodillas sobre el colchón, llevándose con él la tela de algodón de sus pantalones pijamas. Todo lo que Changmin puede ver es una cabeza oscura a unos centímetros de sus muslos y es una imagen tan erótica para el. Sunwoo lo tenía totalmente exitado que incluso pensó que ya no podría respirar.

Cuando la boca del moreno roza el bulto sensible ya hinchando de deseo, una descarga de placer casi hace a Changmin perder el equilibrio y se agarro a la parte superior de la cabeza del menor para no caerse.

—Amor, no — anuncio el castaño — No voy a poder mantener el equilibrio si me sigues haciendo eso.

Con una sonrisa, Sunwoo estira de la mano de su novio hasta hacer que aterrizen sobre el colchón.

Los dos ya estan desnudos y parece la cosa más natural del mundo para ambos.


—¡Sunwoo! — gime al sentir la húmeda lengua del nombrado en sus pezones.

El moreno uso eso como incentivo y chupo con mas fuerza, luego libera el pequeño botón rosa para posteriormente lamerlo y las caderas de Changmin se mueven involuntariamente sintiendo un vacío ávido de deseo.

Sunwoo cambia la posición y es el ahora el que se encuentra arriba. El moreno se apoya sobre un codo y mira enamorado a su novio.

—Eres tan bonito Changmin — confesó, causando que el mayor se sintiera mas abrumado de lo que ya esta.

El castaño no sabía que conestar, así que simplemente lo tomo de la nuca y tiro
de él hacia abajo para darle un beso. Después de eso, todo se vuelve borroso para Changmin.

Las manos y labios de Sunwoo están en todas partes y una ola de placer los arrastra a un lugar hermoso donde solo existen Sunwoo y Changmin.

—¿Compraste lo necesario? — preguntó Sunwoo tragando grueso.

Changmin asintió casi apenado recordando lo vergonzoso que fue para un chico tímido como el, comprar condón y lubricante.

Sunwoo solo lo suelta para abrir el cajón de la mesita junto a la cama y el pulso de Changmin se acelera porque sabe lo que está haciendo y lo que está a punto de suceder.

—Tranquilo, te acostumbrarás, poco a poco, centímetro a centímetro... — musitó insinuante e introdujo uno de sus dedos dentro de Changmin, viendo su expresión de dolor.

Sin perderse ninguna expresión del mayor, Sunwoo comenzó a invadir su zona íntima, esparciendo dicho líquido y calentándose con las muecas eróticas del inexperto hyung.

—¿Tu?...— inicio con pena — ¿Tu te has tocado aquí adentro antes? — preguntó minutos después, sin esperar repuesta y explorando con sus largos dedos ese húmedo lugar.

—No...¡agh!.. t-también eres el primero en eso — contestó Changmin, sorprendiendo demasiado a su pareja, ya que pensó que el mayor ya estaría muriéndose de la vergüenza — Yo...mmm... ¿Debí hacerlo?

El moreno tragó grueso y su erección parecía a punto de estallar. Era increíble lo fácil que le resultaba al castaño provocar sin querer a su novio, con sus actitudes inexpertas y al mismo tiempo queriendo ser tan diligente y receptivo.

—Ya no es que quiero, sino que necesito follarte ahora mismo — demandó.

El sonido del plástico desgarrándose pone aún mas nervioso a Changmin y miro sin pestañear como hábilmente Sunwoo se pone el condón.

Pero sorprendiendo a Changmin, el pelinegro en vez de ponerse encima suyo para tomar el control, se tumba de espaldas y le entrega las riendas.

—Móntame. — formula con voz grave, temblorosa de ansias.

Changmin trago saliva, pero obedeció. Se subió a su regazo y cogió el pene con una mano. Es largo y grueso e imponente, pero esa posición le permite controlar cuánto quiere tener dentro. Su pulso galopa como un caballo de carreras cuando se hundo y de forma exageradamente lenta en él.

—¡Dios!

—¡Fuck!

Ambos experimentan la sensación más deliciosa del mundo cuando el castaño va bajando centímetro a centímetro hasta que está todo dentro suyo dejándolo lleno.

Los músculos internos del bajo aprietan la erección del moreno, palpitan a su alrededor y él pelinegro suelta un sonido desesperado que resuena por todo su cuerpo.

—Oh, mierda. — Los dedos de Sunwoo se clavan en sus caderas antes de que Changmin pueda moverse.

—Wonnu duele.

Sunwoo cerro los ojos sintiéndose mal, puesto que mientras el estaba disfrutando, el mayor parecía a nada de llorar.

—Ya va a pasar, te lo juro — aseguró posando su frente en la frente del bajo.

—Hablame de cualquier cosa, distraeme — rogó el castaño con tal de no pensar en el dolor.

— ¿Tu sabes que pato es un pez? — formulo con voz tensa.

Changmin quiso reír no pudiendo creer que Sunwoo este distrayéndolo con líneas de Lilo y Stich.

— Leí que al penetrarte me apretarías, pero mierda, estas succionándome — jadeo Sunwoo maravillándose con la sensación — ¿Tu sabias que pato el pez controla el clima? — volvió a hablar, pero incluso para distraerse el mismo y no pensar en lo estrechó que estaba su novio.

Changmin hizo un gran esfuerzo para no reirse, recordando como Lilo había dicho que su pecesito controlaba el tiempo y no pudiendo creer que a su novio justo se le ocurrió recordar esa escena.

—¿Tu sabes lo que es atún? — hablo nuevamente el menor y Changmin pudo darse cuenta como le costaba respirar.

—Es pez... — jadeo.

—Si pato el pez comiera atún sería una...

Varias gotas de sudor aparecen en la frente del mayor, porque Sunwoo no es el único allí a punto de perder el control. La presión que hay entre sus piernas es insoportable. Las caderas de Changmin ya querían moverse. Su cuerpo quiere desahogarse.

Sunwoo deja salir una respiración larga y entrecortada. Se elevo y se dejo caer de golpe con tanta fuerza que los dos gimieron.

— Abominación — dijeron ambos en unísono, finalizando esa famosa oración.

Este tipo de necesidad ciega es nueva para ellos. Changmin asintió para si mismo e inicio con lo que tanto ellos esperaban.

Subía y bajaba despacio del pene de su novio, sacándolo gruñidos y jadeos ahogados. Le monto a un tiempo rápido y frenético, pero todavía no es suficiente para los dos.

Necesitaban más y más y en un momento dado, Changmin estaba frotándose contra él, porque ha descubierto que cuando se inclina hacia adelante y hace eso, su pene roza su hueso púbico y el placer se intensifica.

Changmin baja al cuello del moreno y empieza a besarlo y su piel está caliente bajo sus labios.

Están ardiendo, los latidos de sus corazones golpean salvajemente sus pechos.

Cuando levantan sus cabezas levemente y sus miradas se conectan, quedan hipnotizado con las expresiones del otro, la tensión de sus facciones y el intenso placer que brilla en los ojos de cada quién.

—Joder, si...

—¡Mmm!

Estan tan concentrados que sus orgasmos les toma a ambos desprevenidos.

—¡Fuck!

Changmin chilla como jamás pensó que lo haría, para luego dejárse caer sobre él pelinegro cuando un torrente de dulce éxtasis invade todo su cuerpo.

Sunwoo le toca la espalda mientras jadea de placer. Las paredes del mayor se contraen apretando la dura polla que tenia dentro y los dedos del menor se clavan entre los omóplatos de su novio mientras maldice.

—Changmin ... Oh, mierda, amor, eso me pone muy...

El mayor todavía estaba recuperando el aliento cuando Sunwoo comienza a empujar hacia arriba, rápido y profundo. Sus caderas chocan contra las suyas mientras lo llena, una y otra vez hasta que finalmente da un empujón final y gime.

El rostro del pelinegro se tensa, las cejas oscuras se juntan como si estuviera sintiendo dolor, cuando es absolutamente lo contrario.

Changmin le beso el cuello de nuevo, chupando su carne caliente mientras tiembla debajo suyo y se agarra con tanta fuerza que atrapa todo el aire de sus pulmones.


Una vez ambos se recuperaron y el condón está fuera, Sunwoo se tumba al lado de su novio de lado y lo abraza por detrás. El gran peso de su brazo, hace a Changmin sentirse seguro, cálido y apreciado. Lo mismo ocurre con la forma en que extiende su mano sobre su vientre y distraídamente acaricia su piel desnuda. Los labios acorozanados presionan su nuca y Changmin puede decir, con el corazón en la mano, que nunca se ha sentido más satisfecho que ahora.






—Quédate esta noche — murmura el mayor.

—Sabes que no puedo, Sehun me mataría si me ve desnudo en tu cuarto.

— Exceptuando que acabamos de arruinar nuestra infancia con Lilo y Stich — dijo y Sunwoo río — A sido perfecto...

—Tienes el culo más bonito del universo. No tengo idea de cómo hemos llegado a este punto. Un día te mando a la mierda y al día siguiente estoy acurrucado en tu cama. La vida es tan rara a veces...

Changmin asintió y giro para mirar al moreno.

—Fue casi como lo había imaginado — formulo cantarín el mayor.

—¿Casi? — interrogo con una ceja arqueada.

—Es que creí que lo iba a perder con la persona que amo — explicó en un susurro y bajo la cabeza.

Sunwoo trago grueso y afianzó el agarre en su cintura y de forma lenta bajo su cuerpo hasta estar a la altura de su novio.

—Que mal por ti, porque yo si lo he perdido con el chico que amo.




Changmin agrando los ojos y formo de sus labios una perfecta "O". Miro a Sunwoo como buscando algún rastro de burla, muy usual en el, pero no encontraba nada y no sabía si ya era psicológico, pero podría jurar que ya ve amor en el.

—¿Wonnu, tu...?

—¿Te amo? — suspiro y soltó a su novio para recostarse boca arriba y mirar el techo — Supongo que sí — cerro los ojos — Pienso que no existe un momento exacto en el que me enamore de ti, creo que cuando me di cuenta que estaba enamorado en realidad lo he estado desde hace mucho tiempo atrás.

—Sunwoo — susurro Changmin — Creo que nadie elige de quien enamorarse...no intencionalmente, tampoco alguien puede elegir desenamorarse. Los sentimientos están o no están, uno no puede forzarlos ni tampoco hacer que se vayan. — sonrió y llevo sus dedos en las mejillas del moreno, donde no existía ningún hoyuelo, pero su novio siempre ponía sus dedos en sus propias mejillas como si tuviera unos — Tampoco creí que exista un momento exacto en el que me había dado cuenta que estaba enamorada de ti, tal vez siempre lo supe pero nunca antes me había dado cuenta.

Aunque de lo que si estaba seguro los dos era que nunca lo habían visto venir. Si años atrás le preguntaban a ambos si se imaginaba siendo el novio del otro, sus respuesta no seria un simple: "No" sus respuestas sería un: "¿Novio de este? Imposible, consigase un psicólogo."

Pero es increíble como las cosas cambian para los dos. Uno siempre le tiene miedo a los cambios porque tienden a ser cosas desconocidas y estarían mintiendo si dijera que no tenían miedo. Le tenían miedo a enamorarse, a ser tan vulnerable ante su enemigo, a permitirle entrar a sus vidas de una forma que nadie lo haría jamás. Pero ahora el destino estaba burlándose en sus rostros.

—Te amo Changmin.

—Te amo Sunwoo.

Ambos se quedaron serios mirándose, hasta que segundos después rieron sin motivo alguno.

Changmin con mucha energía y feliz se subió encima de su novio para empezar a llenarlo de besos haciéndolo sonrier.

—¡Te amo, te amo, te amo! — chillaba con cada beso.

—También te amo idiota — sonrio — ¡Auch amor, duele joder!

El castaño beso el lugar mordido y sonrió sumamente feliz.



























—¿Sunwoo?

El moreno casi grito del susto cuando oyó que lo llamaban apenas piso el césped de la familia Oh.

—¿Que haces aquí? — volvió a preguntar el chico quien estaba en la misma condiciones que el, pero ninguno siendo consciente de ello.

El moreno suspiro mas relajado al ver que solo se trataba de Eric.

—Yo...— murmuró nervioso el pelinegro — Salí a orinar.

—¿Orinar? ¿A las dos de la mañana, en la casa de tu vecino? ¿Porque? — interrogó curioso.

— ¿Porque no?

Eric lo miraba aun sospechoso y Sunwoo empezó a temblar por miedo a ser descubierto.

—¿Y porque parecía que saltaste de la habitación de Changmin?

—Es que fui a orinarlo a el — respondió rápidamente, tambaleando sus dedos a cada costado de sus jeans.

Eric lo miro con los ojos entrecerrados haciendo al moreno sudar, pero luego el rubio simplemente se encogido de hombros.

Sunwoo agradeció que se topo con Eric y no con Kevin, puesto que si fuera con el canadiense, incluso lo perseguiría hasta en el baño con tal que se lo contara.

Pero ahora no le importaba nada...¡Ya no era virgen! Y Changmin le dijo que lo ama... ¡Pero ya no era virgen!































Un año después.

Kim Sunwoo 16 años - Oh Changmin 17 años

Sunwoo estaba acostado boca abajo en su cama concentrado en su dibujo hasta que oyó demasiado ruido provenir de su ventana, ya sabía quién era la persona que se atreve a trepar hasta su cuarto y hacer el ruido del mundo para ello.


Sunwoo ignoro a la persona que se subió encima de su espalda, pero sonrió al comenzar a sentir sus mordidas.

—¿Sabes? Un novio normal lo primero que haría es saludar, al menos dar un beso. No entrar por mi ventana, tirar todo lo que encuentra a su paso y morderme apenas me ve.

—Suena bien, también quiero un novio normal — sonrió pícaro el mayor y se abrazo al pelinegro cual Koala — Tus dibujos han mejorado mucho luego de esa ardilla.

—Que era un Hámster — murmuró entre dientes y giro para que el cuerpo de su novio cayera en el colchón. — Hola — saludo y llevo sus labios a los del bajo para dejar un casto beso.

—¿Que estabas haciendo? — pregunto el castaño acomodándose mejor en la cama.

—Dibujando — contesto y guardo todo antes que Changmin accidentalmente lo ensuciara o lo rompiera.

—¿Algún día me pintaras como a tus chicas francesas Jack?

Sunwoo giro los ojos y luego de guardar sus cosas, volvió a la cama con su novio.

—Hoy vi que saliste con Younghoon — mencionó Sunwoo átono y se acostó sobre el pecho del mayor.

—Hoon es mi amigo Wonnu, es normal que salgamos juntos — respondió con un suspiro y empezó a dejar caricias en la cabeza del moreno.

—¿Aún sigue en pie nuestro planes? — pregunto casi con miedo Sunwoo y levantó la cabeza para ver a su novio..

—Claro que si mi amor — rápidamente aclaro el castaño — Solo estaremos así este año, para el año que viene hablaremos con Younghoon, le explicaremos que somos novios y que sobre todo nos amamos mucho y sé que él lo va a entender e iniciaré mi vida universitaria esperandote y cuando tú cumplas dieciocho y también entres en la Universidad, podremos ser abiertamente novios. — sonrió esperanzado — Ya no tendremos que escondernos, nunca más ¿Ok?

Sunwoo asintió con la misma esperanza. Ya no quería esconderse, quería sentirse libre. Si tenía las putas ganas de tomar la mano de su novio, el lo haría, si lo quería besar, lo besaria, ya no quería escuchar suspiros que van dedicado al chico que ama. Solo debían superar este año juntos y todo saldría bien.

Sunwoo se acercó a su novio hasta dejar dos pequeños besos en su pequeña boca. —¿Porque estás vestido así? — pregunto curioso — ¿Saldrás?

El mayor asíntio y llevo una mano para apartar el flequillo del moreno de su rostro — Tu primo quiere ir a ver el partido de Básquet porque "repentinamente" le interesa ese deporte.

Sunwoo giro los ojos, ya que Yoshi prefería que le corten la lengua antes de admitir que va solo para observar al capitán del equipo de Básquetbol.

— Bien, te dejo — se levantó de mala gana el bajo y se paró junto a la cama — Nos vemos mañana, te amo — sonrió y bajo su cabeza para dejar un beso en los labios de su novio.

—Tambien te amo.

Changmin le sonrió haciendo desaparecer sus ojos y giro con la intención de volver a la ventana para bajar de allí, sin importar que podria simplemente bajar como las personas normales por la puerta principal.

—¡Imbécil! — chillo cuando el moreno lo tomo de la muñeca y lo hizo acostar encima suyo.

—Solo unos besos más y ya te vas — pidió Sunwoo berrinchudo.

Changmin giro los ojos, pero no se levanto —Solo si me dices que me amas — miro ladeando su cabeza para que su novio solo mirara su hoyuelo derecho.

Sunwoo río y cambio de posición para abrirle las piernas al mayor y colocarse en medio de ellas.

—Te amo Changmin.

—¿Tanto, tanto?

—Tanto, tanto — afirmó.







Hsjshsksjs
Entra en colapso...

Aquí concluimos el primer capítulo de Adversarios.

Sinceramente espero recibir el mismo apoyo que en mi primer fanfic, puesto que lo estoy escribiendo con el mismo amor y entusiasmo.

Lo de Lilo y Stich es real no fake, hace semanas estaba en un examen y lo único que se me venia a la mente es:




Bueno, en fin...ya saben que los amito y ¡Muak!





26 de noviembre del 2021.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top