ADOP.33

El omega castaño frunció el ceño en confusión al ver aquel extraño alfa correr muy lejos de él, llevándose consigo aquel aroma tan diferente al resto...

Hizo una pequeña mueca con sus labios, prefiriendo dejar pasar aquello y todo lo que su lobo intentaba comunicarle mediante gruñidos y ladridos. Debía de enfocarse en su trabajo y realizar la tarea que Seokjin le había encomendado.

Se quedo parado unos segundos en su lugar, viendo desde a través del cristal a aquel pequeño bebé que lo veía con ojos tan brillantes y llenos de curiosidad que el omega no pudo evitar soltar un gritito lleno de dulzura, sintiendo como una sensación de ternura embriagaba a su corazón y llenaba su pecho con una emoción que muy pocas veces había logrado sentir.

Se acercó a la puerta de madera con un bonito y simpatico dibujo de una cigüeña y la abrió, pasando a la habitación en donde todos los bebés recién nacidos que necesitaban ser monitoreados.

Caminó con calma hasta la incubadora que estaba enfrente del cristal y chequeo la misma, verificando que el termómetro digital que la incubadora tenía incorporado funcionara correctamente y se encontrara en la temperatura correcta.

Anotó unas pequeñas cosas en su libreta y sonrió al escuchar al pequeño balbucear mientras jugaba con sus piecitos, causándole una ternura extrema al omega, quien se sorprendió que el pequeño se encontrara tranquilo y jugando, pues usualmente los pequeños recién nacidos lo primero que hacían era llorar hasta que eran llevado con sus madres o padres.

Sin embargo, este pequeño parecía ser diferente, pues se encontraba mas que tranquilo, mirando con curiosidad y entretenimiento sus pequeños piecitos, los cuales eran cubiertos por un abrigadita y peludita tela de color amarillo pastel.

El castaño sonrió en grande al escuchar nuevamente cómo está vez el pequeño hacia un pequeño sonidito con sus labios, aparentemente jugando con su boquita a hacer pequeñas burbujitas de saliva.

Se acercó nuevamente a la incubadora y vio que efectivamente el pequeño estaba jugando a hacer burbujitas. Su lobo se emocionó, saltó y lloriqueó en su interior, sintiéndose extrañamente impaciente por sacar al pequeño de la incubadora y tomarlo en brazos para darle un pequeño besito en aquella pequeña naricita de botón...

¿Que le estaba ocurriendo? ¿Por qué sentía tanta necesidad de tomar aquel pequeño entre sus brazos y nunca mas soltarlo?

¿Era acaso que su lobo ya estaba ansiando tener a su propio cachorro? ¿Tantos años dedicándose a niños y bebes le había otorgado un gigantesco deseo de tener uno propio al cual cuidar y criar?

Sacudió la cabeza y coloco inconscientemente una mueca en sus labios, torciéndolos en una expresión triste y angustiada...

Él no podía ser padre, él no podía dar vida y los doctores ya se lo habían dicho y todos lo malditos exámenes existentes se lo habían confirmado. Él no era capaz de tener vida su interior sin que todo terminara desastrosamente para él y su lobo.

Relamió sus labios e intentó no pesar mucho en el tema, intentando hacerse creer que toda aquella necesidad de tener al pequeño bebé en sus brazos simplemente se trataba de la ternura que este mismo desprendía.

Sacó lentamente los seguros que mantenían cerrada a la incubadora y la abrió por fin, dejándole ver completamente al pequeño cachorro, quien al enfocar su pequeños ojitos en el omega soltó una pequeña carcajada de encías rosaditas, haciendo derretir en el proceso al corazón del omega y provocar que al mismo se le escapara una pequeña lagrima por todo lo que estaba sintiendo y lo doloroso que le estaba resultando el nudo que se había instaurado en su garganta.

Se limpió rápidamente la pequeña lagrima llena de dolor y angustia que se le había escapado y tomó al pequeño bebé entre sus brazos con extremo cuidado, dándose cuenta que el pequeño pesaba tan poco que llego a preocuparlo, sin embargo, era algo normal dada a las circunstancias de que este había nacido con 2 meses de anticipación.

El pequeño se removió un poco en sus brazos sin quitar sus grandes y brillosos ojitos de el omega, quien sonrió con su típica sonrisa cuadrara al ver como el cachorro jugaba esta vez con su lengua e intentaba con sus pequeñas y rechonchitas manos agarrar los castaños mechones del omega.

Tomó la pequeña frazada amarilla entre sus manos y envolvió al pequeño para que no pasara ningún tipo de frío. Acomodó su pequeño gorrito y le dio un pequeño beso esquimal, haciendo reír al pequeño y enterneciendo aun mas al mayor al notar que el cachorro tenia un pequeño pero muy visible lunar debajo de su labio inferior.

Con una gran sonrisa en sus labios decidió olvidar aquel tema tan triste que agobiaba su corazón hasta el punto de sentir que iba a quebrarse. Prefirió simplemente pensar en la expresión que pondría el alfa al tener esta vez al pequeño en sus brazos y tenerlo junto al omega que hacia a sus ojos brillar y delatar cualquier sentimiento oculto.

Salió de la habitación de neonato con el pequeño en brazos, sintiéndose emocionar por volver a hacer un buen trabajo y estar a punto de entregar otro bebé a sus padres.

Pero...ingenuamente se había adelantado a los hechos...

Una mano tomó su hombro desde atrás y le impidió seguir su camino hasta la habitación en donde el Omega lo estaba esperando junto al alfa. Volteó confundido y un poco asustado por lo brusco y rápido que había sido ese movimiento, agradeciendo a los mil dioses existentes que el pequeño no se le había caído de los brazos.

Cuando se dio la vuelta su ceño se frunció en perplejidad al ver a Namjoon, quien era el que lo había sujetado de esa manera. Soltó un suspiro de relajación y soltó una pequeña sonrisa nerviosa al reaccionar y darse cuenta que por alguna razón se había asustado mas de la cuenta.

—Namjoon hyung...—murmuró en un hilo de voz, intentando recuperar su compostura anterior—me agarró desprevenido, justamente iba para la habitación del paciente Park.

El mayor bajó la mirada y vio al pequeño bebe envuelto en una manta amarilla mientras hacia pequeñas soniditos con su boca y posaba sus ojitos en él, regalándole una pequeña sonrisa sin dientitos.

Eso inevitablemente terminó ahogando el corazón del alfa en una culpa y dolor que lo había estado consumiendo desde adentro desde hace meses atrás...

Pero a pesar de todo eso debía de hacerlo, pues si sentía un inmenso dolor con una vida ajena, no quería imaginar como le dolería el hecho de perder a las únicas dos personas que mas amaba en el mundo.

—No te preocupes Taehyung, yo me encargo del pequeño, tu si quieres ya puedes irte a tu casa, ya es algo tarde y debes de estar cansado...—contestó el mayor, acercándose aun mas al omega con la clara intención de quitarle al bebé de los brazos—yo me encargare del pequeño.

Taehyung no le encontró nada malo a sus palabras, sin embargo cuando estaba a punto de entregarle a el pequeño al mayor, este desvió la mirada y la enfoco en el sujeto que estaba detrás de Namjoon, el cual estaba completamente encapuchado y cubierto con una mascarilla negra, dejando únicamente a la vista unos filosos ojos negros que se le hacían demasiado conocidos...

De pronto su lobo aulló en su interior y se inquietó de una manera que nunca había ocurrido. Su lobo estaba alarmado y él no sabia exactamente del por qué, pero terminó retrocediendo cuando el mayor quiso quietarle al niño de sus brazos.

Abrazo un poco mas fuerte al cachorro y aferro sus manos a la manta con un miedo que no lograba comprender. Intercaló su mirada entre Namjoon y el extraño hombre detrás de él, el cual desprendía una aura y un aroma que no fue para nada del agrado del omega, y aparentemente tampoco del cachorro, pues este comenzó a ponerse incómodo y a hacer pucheros con sus pequeños labios rositas.

—N-No se preocupe Hyung, yo puedo hacerlo, ademas necesito anotar el nombre del cachorro y para eso necesito llevarlo ahora mismo con sus padres...—intentó de alguna manera u otra escapar de la mirada amenazadora que le estaba dando aquel extraño sujeto, el cual claramente era un alfa de rango alto—así que no se preocupe yo puedo hacer-...

En ese mismo momento el omega fue interrumpido por un estruendoso sonido, alarmándolo a él y al pequeño, quien tembló en los brazos del mayor y se largo a llorar en un dos por tres.

Taehyung abrió sus ojos de par en par y vio como aquel sujeto había sacado un arma y había pegado un tiro al techo, claramente con el objetivo de asustarlos y demostrarles que estaba armado y que no era ningún el que estaba haciendo...

—Dame al niño o pinto las paredes de este mugroso hospital con tu sangre—amenazó, empujando al alfa a un lado y apuntando a la cabeza del omega, no dejándole ningún tipo de escapatoria—hazlo rápido, realmente no creo que quieras morir por un bebé que ni siquiera es tuyo—agregó con una sonrisa cínica en sus labios, quitando el seguro del arma para hacer mas real su amenaza—.

El Omega se paralizó en su lugar, sintiendo como el pequeño lloraba cada vez mas por la tensión y los gritos y el ahora amargo aroma que desprendían todos ahí, asustando y angustiando al pobre pequeño, quien lo que menos tenía que hacer era agitarse...

Justo en ese momento hizo acto de presencia Seokjin, quien trotó hasta el lugar de los hechos, siendo llamado por el estruendoso sonido que se había escuchado hace unos segundos atrás...

Esté vio la escena y abrió los ojos de par en par al ver como Taehyung, su mejor amigo era apuntado con un arma por un desconocido encapuchado. Notó ademas que Taehyung tenia en sus brazos a aquel pequeño recién nacido del paciente Park, aquel pequeño que había nacido con problemas de corazón y que su vida dependía de algo tan simple como un grado de alteración en su respiración.

Taehyung lo vio con ojos lagrimosos y aferro su mano aun mas al pequeño, quien a este punto su corazón se había acelerado de una manera que no debía por nada...

—¡Seokjin!—gritó desde su lugar, llamando la atención del alfa, quien volteo y vio al omega embarazado—¡llama a seguridad!—pidió en gritos, sin embargo jamas se espero que el alfa portador del arma volteara y apuntara al omega mayor, soltando un disparo en su pierna derecha, haciéndole caer inmediatamente al suelo, el cual comenzaba a ser pintando por la sangre del mismo—.

—¡Vamos! ¡Inténtalos llamar y el siguiente disparo será para tu hijo—amenazó y se burló al mismo tiempo, pintando una sonrisa al ver como el alfa castaño que había utilizado todo este tiempo para su beneficio corría hacia el omega y se tiraba al suelo junto a él, gritando su nombre e intentando que la hemorragia que el disparo había producido no mate al omega—.

—¡Eres un maldito Monstruo Min! ¡Esto no era parte del trato!—vociferó en alto el alfa, mostrando sus colmillos al alfa pelinegro, quien vio al escena con diversión—¡Ojalá te pudras en el infierno!

Taehyung apretó los dientes al ver a Jin en el suelo desangrándose, sintiéndose mareado hasta el punto de sentir como si en cualquier segundo perdería la conciencia y caería desmayado...

¿Que estaba pasando?...¿era acaso un tipo de horrible pesadilla?

—¿Ir al infierno?—preguntó con voz punzante mientras pintaba una sonrisa macabra en sus labios—¿de donde crees que vengo?—fue lo último que escuchó el omega antes de ver como el alfa se acercaba a él, le quitaba al bebé a la fuerza y le propinaba un muy fuerte golpe en la mejilla, debilitándolo hasta el punto de hacerle perder la conciencia—.

Todo se nuevamente se había vuelto un infierno en menos de cinco minutos...

Si esto era una maldita pesadilla...quería despertar de una vez de una vez por todas.

...

💔😭 lloremos 💔

1/4 🌙

Espero que les haya gustado por lo menos un poco y también espero estar haciéndolo bien 🥺👉👈

Recuerden que los amo mucho y ojalá estén teniendo un buen dia ❤😊

Cualquier duda o pregunta yo estoy aquí para ayudarlos en lo que quieran ❤❤❤🌙

Hasta la proxima~

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