Al final resultó que sí había mucha fila, pero igual esperaron a comprar las paletas de agua.

Les tocó esperar fuera del salón a terminarlas, porque no se podía comer en clase, pero daba igual. En realidad, eso ya lo había previsto Dazai. ¿Para qué otra razón habría comprado paletas en los últimos quince minutos del descanso?

Para perder clase, duh.

Pero el truco no les salió bien, pues no contaban con que la maestra de la siguiente clase esperaría pacientemente a que terminaran de comer para que todos recibieran la misma información.

Entraron al salón, un poco confundidos al ver que la clase no había empezado aún.

—Bienvenidos —Saludó una maestra delgada y estirada que no recordaban haber visto nunca—. Los estábamos esperando, pasen.

Se sentaron con cautela y Dazai se acercó un poco a Sigma.

—Ey, ¿qué está pasando?

—Ni idea, la maestra dijo que era importante que todos escuchemos una información, así que esperó a que terminaran. Por cierto, ¿sabes quién es ella?

—No tengo ni la más mínima idea.

Alguien les siseó. No se había dado cuenta de que el director Fukuzawa también estaba allí.

—Oh, cierto, Fukuzawa también vino —Comentó Sigma tardíamente.

—Gracias por decirme, te juro que no me había dado cuenta —Farfulló el castaño.

Sigma frunció el ceño.

—Eres un idiota, es por eso que no consigues novia.

Miraron al frente y se quedaron en silencio, pero con Dazai reprimiendo un comentario mordaz. "No tengo novia porque no me gustan las mujeres, idiota"

Prefirió no decir nada por dos razones. La primera era que su padre adoptivo lo estaba vigilando desde una esquina del salón, y la segunda es que no quería que lo juzgaran. Si lo decía en voz alta, por lo menos lo escucharía la mitad del salón, y eso significaba que todos a quienes consideraba sus amigos sabrían que era gay.

Incluso en esta época, para países tan tradicionales como Japón seguía siendo "peligroso", por así decirlo, ser homosexual. Te arriesgabas al rechazo social a y a la discriminación. Y en Japón, siendo el suicidio la manera más usada para escapar de los problemas, la mayoría de los adolescentes lo hacían por el estrés de no pertenecer a un grupo social.

La maestra desconocida carraspeó.

—¿Ya estamos todos? —Preguntó— Muy bien, entonces dejaré que el director Fukuzawa les explique de qué va esto.

Fukuzawa pasó al frente y recorrió con la mirada a los estudiantes, para fijar la vista en Dazai. Él se hizo el idiota.

—Buenos días —Saludó finalmente—. Seré breve para que la maestra pueda iniciar. La secretaria de educación propuso un programa para enseñar educación sexual y reproductiva a los estudiantes que estén entre cuarto y sexto año de bachillerato, ya que están atravesando la etapa de la adolescencia. Así pues, nuestra maestra asignada es la señorita Dorothy. Eso es todo. Señorita Dorothy, puede empezar.

Yukichi se retiró a su esquina y Dorothy sonrió alegremente.

—Bueno, como ya les dijo Fukuzawa-dono, estaré encargada de darles clases de Educación sexual y reproductiva —La maestra sonrió—. Así que, ¿quien me puede decir cuál es el órgano reproductor del hombre?

Nadie contestó.

—Vamos, no sean tímidos, que no tiene nada de malo. Tú, bonita, ven acá.

Sigma abrió los ojos como palos. Dorothy le hizo un gesto.

—Vamos, párate, ven aquí —La instó. A la chica no le quedó más remedio que levantarse de su asiento y ponerse al lado de la profesora—. A ver, dime, ¿cómo te llamas?

—Sigma —Contestó ella automáticamente.

—Me refiero a tu apellido.

—Ah... Stoker.

—Bien, señorita Stoker, ¿puede decirme cuál es el órgano reproductor del hombre?

—Ah... Bueno... —Miró con nervios a sus amigos— Hay varios, internos y externos, pero los principales son los testículos y el pene.

La mayoría del salón se echó a reír, y Sigma intentó sentarse de nuevo y esconder la cabeza en la cartuchera, pero Dorothy la agarró del brazo.

—Silencio, niños. Decir pene no es nada extraño, es una parte del cuerpo, ¿se reirían si dieran, por ejemplo, "mano"?

Hicieron silencio. Sigma quería llorar, pero Fyodor le llamó la atención con un gesto.

"No llores" le dijo por señas. Ella lo fulminó con la mirada, pero no le dio tiempo de contestar, ya que la profesora le estaba haciendo otra pregunta.

—¿Y el órgano reproductor de la mujer?

—Es principalmente interno, la parte externa es la vulva, luego está la vagina, el cervix, el útero , las trompas de Falopio y los ovarios.

Se rieron de nuevo, y Sigma quiso llorar, de nuevo.

Dorothy volvió a llamar la atención.

—Silencio, por favor no interrumpan más.

Sigma se retorció las manos nerviosamente.

—¿Ya me puedo sentar? —Preguntó.

—No, espera, tú si sabes de esto, no seas tímida —Dorothy sonrió, poniendo aún más nerviosa a la joven—. A ver, que tal si nos dices... ¿Qué es la menstruación?

Una parte de ella le decía que fingiera no saberlo, para que la maestra la dejara ir a sentarse. Pero Sigma era una persona automatizada. Si le preguntaban algo, contestaba inmediatamente. Casi no sabía mentir.

—Es la parte del ciclo menstrual en que la mujer sangra, ya que está expulsando el endometrio al no haberse fecundado un óvulo durante el ciclo.

Muchos pusieron cara de asco, otros se rieron. Ella se puso roja y miró a Gogol.

"Tranquila" le dijo él por señas. A Sigma le gustaría que el apoyo moral de sus amigos fuera más elocuente.

—Eso está muy bien, señorita... ¿Dijo Stoker? —La profesora chasqueó la lengua— No importa. Ahora, ¿puede decirme a qué edad le llegó su primera menstruación?

A Sigma se le cortó la respiración. Gogol, Dazai, Fyodor e incluso Chuuya tragaron saliva.

—A-a m-mi todavía n-no... No me ha llegado todavía.

Las chicas del salón se echaron a reír. Chuuya fulminó con la mirada a Yuan, y Gogol tenía ganas de estrangular las a todas, y de tirar a la señorita Dorothy por el inodoro.

—¿Ah, no? —La maestra sonrió confundida— ¿Cuántos años tienes?

—Catorce.

Dorothy parpadeó un par de veces, y luego se repuso.

—Oh, bueno, seguro tienes algún tipo de retraso —La mayoría se echó a reír de nuevo. Gogol quiso levantarse a decir que se callaran la boca, pero Dazai lo detuvo con una mirada severa.

—Basta —Ordenó Fukuzawa. Todos dejaron de reír.

—Bueno, señorita Stoker, entonces si a usted no le ha llegado, dígame por lo menos a qué edad le llegó a alguna de sus amiguitas.

Dazai se tapó la boca. "Mierda" pensó.

—Yo no tengo amiguitas —Contestó la chica, rascándose impulsivamente el brazo.

—¿Ah, no? ¿Y con quién sales en los recesos, entonces?

—Con mis amigos.

El salón quedó en completo silencio un momento. Luego, Dorothy preguntó:

—¿Eres lesbiana?

Sigma abrió los ojos como platos, y el resto quedó espectante.

—¡CLARO QUE NO! —Chilló.

—Tranquila, linda, nadie va a juzgarte...

—¡NO TIENE NADA QUE VER CON ESO! ¡NO SOY LESBIANA! ¡QUE ME AGRADE MÁS LA COMPAÑÍA MASCULINA NO TIENE NADA QUE VER CON MI ORIENTACIÓN SEXUAL!

—¡Tampoco tienes que gritarme! No es mi culpa que seas un bicho raro.

Una vez más, el salón quedó en silencio, con todos sorprendidos por las palabras de la maestra. Y pasó lo que nunca creyeron que Sigma haría.

Le dio una bofetada a la señorita Dorothy. Y fue una bofetada tan fuerte, que le sacó las gafas volando y la mano de la joven quedó marcada en la mejilla de la maestra.

—¡ZORRA! —Le gritó, y salió como un torbellino del salón.

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Me salió más largo de lo que pretendía, sorry JSJSJSSJJS

Este capítulo lo llevo pensando un montón de tiempo, así que espero les haya gustado.

Gracias por leer!