Voluntad
Una semana después.
—Tae, necesitamos hablar sobre nuestro hijo, no puedes irte así. —Hablé sujetando su brazo.
—Claro que puedo irme, sobre todo porque aborté. Yo no soy Jimin, a mí no me vas a amenazar o intimidar. —Me liberé de su agarre.
—¿Qué? ¿Por qué lo hiciste? Yo también tenía derecho sobre esa vida, era nuestro, no lo hiciste solo.
—Estaba en mi vientre, era mío y yo era quien tomaba la decisión. No sabes lo mal que me sentí al darme cuenta de que me involucraste en algo tan vergonzoso. No sé cómo pudiste hacerle eso a Jimin. Él se ve que es una buena persona, pudo lastimarme y no lo hizo en esas condiciones. ¿Quién pensaría en darte un hijo? Deberías valorarlo, porque ningún omega perdonaría a una basura como tú.
—Tae, yo realmente lo siento. Bajé mi rostro sintiéndome la persona más miserable. No tenía sentido discutir o defender lo indefendible porque sus palabras estaban llenas de razón.
—Más lo siento yo. Ahora, por favor, vete y nunca más me busques.
Estaba en casa, sentado, luchando con mi depresión. Eran tantas cosas por las que estaba pasando, pero, por otra parte, no puedo simplemente desligarme de Yoongi, sobre todo porque me hice adicto a las migajas de su amor.
"Estaba afligido por perder así a Tae, pero era lo mejor y tal vez de este modo Jimin me perdone y yo podamos empezar nuevamente".
Vi a través de la ventana los árboles moverse con la brisa y el sol se veía radiante. Tomé la tarjeta de crédito y llamé a un taxi para ir al centro comercial, tal vez de ese modo me distraiga un poco. Al llegar al centro comercial, había un olor muy fuerte a churros con canela y fui a la feria de comida, encontrándome con mi viejo amigo Jungkook.
--Jimin, tanto tiempo sin verte, no has cambiado nada. No puedo creer que vuelvo a ver a Jimin, mi amor imposible.
—Hola, no esperaba verte, creí que te habías ido al extranjero.
—Sí, pero regresé hace un año. Perdón que te lo diga así, pero te ves hermoso, nada en ti ha cambiado.
"Me sentí apenado, tenía tanto tiempo sin escuchar un halago". Muchas gracias, Jungkook.
—¿Y sigues con el idi... con Yoongi?
—Sí, sigo con él.
—Supongo que ya debes tener los cachorros que tanto anhelabas. ¿Dónde están los tres diablillos? Eran tres los que querías, ¿no?
—No, aún no he tenido cachorros —dije eso con un tono de tristeza.
“Vi mi reloj y recordé que mi amigo me esperaba en el auto”. Perdón, Jimin, me distraje y te distraje. Sé que tú estabas por comprar y la verdad, tengo que irme.
—No pasa nada, me dio mucho gusto verte.
—Déjame darte un abrazo por los viejos tiempos.
'Le correspondí al abrazo'
— Jimin, anota mi número de teléfono.
— Sí, saqué mi teléfono y él anotó su número rápidamente y se fue.
Llegué la casa para contarle todo a Jimin y él no estaba inmediatamente lo llamé.
—Sí, bueno.
— Bueno, ¿qué? ¿Dónde estás?
— En el salón, en el centro comercial.
— ¿Por qué no me avisaste?
— Se me olvidó.
— Jimin, ya voy para el centro comercial y hay de ti con que no te vea allí.
"Quise responderle, pero ya había colgado la llamada".
La estilista, nada discreta, le dijo: ¡Qué alfa tan tóxico!
— ¿Huh?
— Nada, mejor le termino las uñas.
Llegué al centro comercial y fui a la estética donde estaba Jimin sentado con el teléfono en mano.
— ¿Cuánto te falta?
— Yoongi…
— ¿Te he preguntado cuánto te falta?
—No sé, estás cosas tardan.
—Bien, entonces nos vamos. Quítale esas cosas de la cabeza.
》Señor, le estoy decolorando el cabello a su esposo, no puedo simplemente retirarle el producto porque puede quedar calvo.
—Yoongi, por favor, espera a que termine el tratamiento y nos vamos a casa.
—Tú debías haberme dicho que venías aquí con tiempo.
》El ambiente estaba cada vez más tenso, pero Yoongi terminó accediendo, sobre todo cuando todos los omegas lo retaban con la mirada.
3 horas después de vuelta a casa.
--¿Te gusta cómo me veo?. Sé que esto no arreglaría nada, pero quería sentirme nuevamente bonito, darme ánimos a mí mismo y subir el autoestima.
—Te ves igual que siempre.
Bajé mi rostro y no dije más nada, subiendo a mi habitación. No esperaba algo diferente de ti.
“Seguí a Jimin y al llegar le dije”: Tae se ha hecho un aborto.
—Lo lamento.
—¿Qué lamentas, Jimin?
—Es que debe ser doloroso para él, y de cualquier manera, ese es tu primer cachorro.
—Todo es tu culpa y sé que en tu interior debes estar hasta feliz de que así sea.
—Para nada, jamás le desearía el mal a nadie, menos a un pequeño inocente.
—Jimin, tengamos un cachorro.
“Me levanté de la cama con molestia. Ahora que Tae lo ha dejado, quiere que tengamos hijos, pero en nuestra situación no lo creo conveniente___No quiero un bebé porque eso no va a cambiar la situación entre nosotros. No, Yoongi, por ahora no creo que sea prudente.
---No te estoy preguntando, te estoy diciendo que tengamos un cachorro.
---Las cosas no son cuando tú quieras.
---No me hagas enojar nuevamente, no quiero terminar golpeándote.
—Por eso es que no podemos tener un hijo.
Me acerqué a Jimin y lo tomé por sus muñecas, pegándolo a la pared y liberando mis feromonas----Te haré mío.
Luego de entregar mi cuerpo a Yoongi, sentía una mezcla de emociones. Claro que lo amo, pero, por otra parte, me siento terrible. Lo veo aquí dormir tan placidamente a mi lado y no sé qué hacer. Me da asco, me siento peor que los omegas que venden su cuerpo. ¿Vale la pena apostar a esta relación?.Las lágrimas se deslizan por mis mejillas. Yoongi, me has hecho tanto daño y aún así te amo. Tengo miedo de dejarte, de quedarme solo, de defraudar a mis padres.
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