Jimin, perdón por ser curioso, pero ¿qué pasó para que quieras venir a mi casa?

Miré a Jungkook con desdén— quiero ayudar a Yoongi a mejorar.

¿Mejorar?

Sí, porque me di cuenta de que todavía lo amo y quiero lo mejor para él.

"Escuchar eso de la boca de Jimin era como una raíz de amargura en mi corazón. ¿Por qué? ¿Por qué siempre lo prefiere a él?" Bueno, Jimin, debo ir a trabajar. Por favor, si necesitas algo, no dudes en avisarme.

Sí, está bien. Gracias.

Empecé a limpiar y a llorar amargamente. Me duele esto como a nadie. Por medio de la marca puedo sentir que Yoongi sufre en mi corazón. Sé que él no le haría nada a nuestro hijo, pero era la única forma de presionarlo a que busque ayuda y supere ese trauma.

(timbre)

Fui a abrir la puerta. —¿Qué haces tú aquí?

—Tú me dijiste que podía ver a mi hijo cuando quisiera bajo supervisión, y quise verlo ahora. Tú nos supervisarás y aquí tienes la prueba de que veré a un especialista —dije, extendiendo una hoja—. ¿Está tu alfa aquí?

¿Mi alfa? —pregunté confundido.

—Sí, el de cara de conejo.

Jungkook trabaja como doctor y pasa la mayor parte del tiempo en el hospital.

—Por lo menos reconoces que es tu alfa.

No, no es así, yo...

—Tranquilo, no debes dar explicaciones. Por cierto, también les traje algo de comer. Tranquilo, lo hice yo mismo en casa.

¿Estás bien?

—Sí, estoy súper bien. Ahora déjame jugar un rato con mi cachorro y luego me iré, no quiero incomodar.

Los meses han pasado y solo queda un mes para que dé a luz. Yoongi viene frecuentemente y lo ves como un hombre renovado; su terapia le ha servido, incluso ha empezado a respetar a Jungkook. Jiyoon ya corre por todos lados...

—Jimin, perdón que te interrumpa, pero ¿piensas volver con Yoongi?

No lo sé, Jin. Yo realmente no veo a Jungkook con otros ojos, para mí es como ver a un hermano y Yoongi es el hombre que... ¡ash! No sé cómo explicar.

—Nadie tiene por qué juzgarte si decides darle una oportunidad. Es tu vida y tu felicidad, y si él realmente ha cambiado, ¿por qué no?

¿Me dices todo esto porque volviste con Namjoon?

—Después de que me contaste lo que pasó, no pude evitar entenderlo. Muchas veces, molesto, le decía poco alfa y no me imagino las veces que herí su corazón.

(Tilín).

Jin, debo irme, creo que Yoongi llegó.

—Dale rienda suelta al amor. Chao.

Me reí, colgué la llamada y fui a abrir la puerta. —Buenos días.

Buenos días, Jimin. ¿Y mi pequeño?

Está durmiendo, pero si quieres, pasa.

—No, si él está durmiendo, vendré luego con permiso.

"Me sentía confundido porque Yoongi actuaba así" —¡Yoongi!

—¿Sí?

Ten un buen día.

—Tú igual—Subí a mi auto y empecé a conducir, evitando ver a Jimin. Debo alejarme de él, necesito protegerlo.

Flashback.

Estaba saliendo de la casa de Jungkook cuando recibí un mensaje.

—Te estoy vigilando, estoy de regreso y listo para cobrar las facturas.

Esto solo puede ser J-Hope—¿Qué quieres?

—Fácil, quiero un hijo.

Apagué mi celular y fui a la policía a poner la denuncia. No puedo tomar las amenazas de ese psicópata a la ligera.

Fin del Flashback

Miro mi teléfono a cada rato viendo que las horas pasan y no sé nada de Yoongi, pero ¿a mí qué me debe importar? Eso me pasa por estar hablando tonterías con Jin. —Tomé un cojín y cubrí mi cara para gritar—.

—Jimin, ¿quieres comer?

Perdón, Jungkook, ¿dijiste algo?

—Sí, ¿quieres comer?

No, no tengo hambre.

—Esperas a que Yoongi te traiga la cena como ha estado haciendo.

No, solo que no se me antoja nada.

—¿Cuándo me darás una oportunidad si sabes que estoy dispuesto y te amo?

Jungkook, tú mereces más. Yo amo a Yoongi, sí, con todo lo que ha hecho, yo lo amo.

Me acerqué a Jimin y lo besé.

—Buenas no... Perdón, vine en mal momento. La puerta estaba sin seguro y por eso pasé. Traía la comida para Jimin, perdonen, fue mi culpa.

—No, no, Yoongi, no es lo que crees, en serio yo...

—No importa, Jimin, no me debes explicaciones. Vendré mañana a ver a mi niño, díganme a qué hora puedo.

La verdad, mi casa parece más tuya que mía. Por un día que no vengas, no pasa nada —dijo Jungkook enojado—.

Tienes razón, esta es tu casa y es un abuso de mi parte estar viniendo cada vez que quiero. Dame un horario en el que pueda venir y yo lo respetaré.

—Yoongi...

No pasa nada, Jimin. Tú alfa, su casa, sus reglas. Que tengas una feliz noche. —Dejé la comida en la mesa que estaba a mi lado y salí de la casa sintiendo un nudo en mi garganta. Era momento de darme por vencido. Yo estoy consciente de que Jimin podría decidir hacer su vida con él en cualquier momento y no lo odio. Yo lo lastimé tantas veces por mis inseguridades. Ahora me toca afrontar y aceptar las consecuencias de mis actos.

¿Por qué Jungkook? ¿Por qué lo hiciste?

—Porque él no te conviene.

¿Y tú sí? ¿El que decidió probar su suerte para ver si me embarazaba, el que ahora, sabiendo que le he confesado que amo a Yoongi, se queda sin decir la verdad y empeora las cosas? Dime, ¿estaría bien quedárme contigo?

—No me compares con esa escoria.

Mejor me voy a dormir, no tolero más esta conversación. Cruzaste tus límites, Jungkook.

—Siempre es la misma tontería, tu necedad de no querer ver que él no ha cambiado ni lo hará.

Deja que sea yo quien decida eso.