Editado: 09/ 05/ 2021

*Nota: Ahora mismo habrá algunos disgustados, pero así es esto. A partir de ahora la personalidad de Peter molestará a muchos, pero deben entender QUÉ FUE ROCIADO POR FEROMONAS su actitud será de este modo molesto por un tiempo*

Nuevas ideas.

[Apartamento parker]

Lastimosamente esa persona especial no fui yo, aquel día Wade me platico sobre una chica anterior a mí, su primera pareja; ese día lo miré llorar demasiado, al parecer era la primera vez que se lo contaba a alguien de esa manera, y verlo actuar de esa forma por aquella chica, la verdad... me hizo sentir como si el corazón se me partiera, no solo por saber que no fui su primer persona especial, sino por la idea de que quizá yo no lo haga sentir ni la mitad de lo que aquella chica lo hizo sentir... para amar a alguien de ese modo, ni siquiera puedo imaginar la increíble persona que debiste haber sido. Luego de llorar termino dormido en mis brazos, tuve que levantarme un poco antes de media noche para ir a tomar un baño y responder todos aquellos mensajes y llamadas que no había visto... tantas llamadas y ni siquiera pude escuchar el tono del móvil.

—Entonces... ¿Simplemente te vas a mudar?

Le dedico una sonrisa a Harry; durante mi ducha Wade entro bajo el agua y besando mi nuca me pidió un favor, aun recuerdo sus manos sosteniéndome con delicadeza, como si yo... fuera tan frágil y pudiera romperme con el mínimo toque.

—Lo lamento Harry, como te dije había tenido un problema con esa persona y al arreglarlo me pidió eso... yo realmente siento algo fuerte por él, por eso... espero que esto no te moleste y comprendas lo que estoy haciendo.

—No... no, no, claro que esta bien que lo hagas, es decir... —sujeta su nuca mientras me señala con su palma —es tú vida, umm... —sonríe relajándose —realmente pareces enamorado, estoy feliz por ti.

Con una sonrisa en cara me pongo de pie hasta poder abrazar a mi amigo; Harry siempre me ha apoyado en todo aun cuando no se lo pedía, por eso siempre lo he visto como mi mejor amigo. Al separarse de mí suspira con la tristeza de un padre que ve marcharse a un hijo, y simplemente sonríe para bajar la mirada a mi equipaje.

— ¿Necesitas ayuda con las maletas?

—No, para nada, él llegará dentro de poco...

— ¿Y tú dirección? —saca el móvil.

—Iré a visitarte de vez en cuando a la empresa así que no te preocupes.

La sorpresa borra su sonrisa mientras vuelve la mirada sobre las maletas con algo de duda, Harry suspira y guardando en móvil termina sujetando mi hombro para inclinarse con seriedad hacia mí.

—Oye, si ese tipo te está amenazando o algo...

—No, no es nada de eso Harry, en algún momento llegue a contarle lo que hacíamos...

Tragando saliva se separa algo incomodo e inseguro.

—No te preocupes, no le contaré a nadie, pero se siente un poco... celoso, —explico algo apenado —de ti, quizá inseguro, no sé como decirlo... pero me dejará seguir viéndote así que no hay problema, solo no quiere que vayas a nuestra casa sabes...

—Peter...

Expresa con un semblante de preocupación mirándome de frente. La puerta se abre y mi sonrisa crece al verlo entrar con su chamarra negra y la capucha arriba, tiene un pantalón normal y su mirada rápidamente es dirigida a mí, sin decir palabra avanza a mi lado rodeándome por los hombros y sujetando mi mejilla para besarme. Sonriendo entre nuestro beso puedo sentir su mano entrelazarse con la mía y al alejarnos lo veo sonreír con seguridad.

— ¿Cuáles son tus maletas?

Tranquilamente se las apunto y luego de tomarlas deposita un beso en mi frente para llevárselas sin mayor problema, solo son dos valijas. Entusiasmado, me acerco a Harry para darle un abrazo rápido y ponerme en marcha hacia la salida.

—Oye... —extiende su mano sin tocarme.

— ¿Qué pasa Harry? —vuelvo la mirada con calma.

— ¿Te dejará trabajar en mi empresa? —cabecea hacia la puerta.

—Ha... no lo hemos hablado aun...

Entre su pensar da un asentimiento, saca su celular y busca entre sus aplicaciones, inquieto dirijo la mirada hacia el pasillo del edificio... Wade debe estar esperando por mí fuera del edificio. Entre mis dudas vuelvo la mirada hacia Harry quién ha empezado una llamada.

—Mary Jane, que bueno que contestas, necesitó tú ayuda... si, es Peter... no, no es nada muy grave así que no te alteres... ha conocido a un hombre... no, sé que no es nada raro, pero deberías oírlo hablar... su pareja no quiere dejar que vaya a visitarlo... parece que tiene celos de mí... no es una broma Mary Jane... necesita permiso de ese chico para hacer las cosas...

—Oye Harry, —sujeto su brazo —creo que estas exagerando...

— ¿Peter?... ¿Vienes ya?

—Si, —me asomo por el pasillo —si, ya voy solo dame un segundo.

*—Lamento decir que lo escucho como una pareja muy normal, es decir... eres guapo Harry, mis novios también tenían celos de ti ya que la pasaba mucho a tu lado.

—Debes creerme, esto es distinto.

—Harry todo esto no es necesario, te he dicho que estaba bien.

—Peter.

De un rápido avance llega a mi lado sujetando mi muñeca, yo me aparto del lado de Harry soltando su mano para hacerle frente a Wade entre susurros.

—Un momento Wade, por favor, espera en el auto, ya casi bajo.

—Vamos, se hace tarde así que vámonos de una vez.

—Wade, solo dame un minuto.

—Peter —Dice de manera firme.

— ¡Wade!

Algo desesperado me pongo recto frente a él retándolo con la mirada, pero entonces él solo suspira furioso sujetando su cabeza por encima de la capucha.

—Bien... —tiende las manos a los costados — ¿Quieres que suba de nuevo tus maletas? ¿O me adelanto y te vas caminando?

— ¿Qué?... —lo veo salir — ¡Oye!... —dudoso observo a Harry y vuelvo la mirada al pasillo — ¡Wade por dios!

Tragándome mis palabras veo por ultima vez a mi amigo y disculpándome comienzo mi carrera detrás de Wade escuchando como Harry le dice "¿Ya ves?" a Mary Jane. Entre un suspiro termino de bajar para ver a Wade subiendo en un coche rojo de marca, entre mi sorpresa apunto el coche acercándome.

— ¿¡De... de dónde lo sacaste!?

Sonriente toma el volante con total confianza.

— ¿Qué dices tonto? Es mío.

— ¿Có... cómo demonios compraste esto?

—Tenía cuentas en el banco cariño... —recarga el brazo del asiento a su lado — ¿Subes?

Sonrío incrédulo. ¿Qué demonios? El coche luce muy genial.

— ¿Es un Porsche? —acaricio el exterior.

—Si, justo eso... ¿Muy genial?

Lo observo por última vez y subo enseguida observando todo el interior.

— ¿Vamos a casa? —cuestiona tranquilo.

—Ha... —doy una mirada atrás —sí, claro... me habías dicho que Vanesa estaría ahí ¿Cierto?

Ante su asentimiento me coloco el cinturón de seguridad para por fin partir. Me pregunto si realmente no miente sobre haber comprado este coche, la verdad no necesito meterme en problemas justo ahora... aunque... no puedo evitar confiar en su palabra. Al llegar puedo ver a Vanesa en la entrada esperando por nosotros con una sonrisa, apenas salgo del coche la pequeña se levanta viniendo enseguida a abrazarme por la cintura, yo acaricio sus rizados cabellos dirigiéndole una sonrisa.

—Ey, realmente estas aquí.

— ¡Sip! He decidido quedarme con ustedes y comenzar a trabajar en este lado de la ciudad.

Mi sonrisa disminuye un poco mientras dirijo la mirada a Wade quién sonríe abrazándome por los hombros para hacernos entrar en la casa.

—Vanesa quiere comenzar a ayudar a sus padres, además no le gusta estar sola y el otro lado de la ciudad es un poco... peligrosa.

—Pero dijiste que estaba con esa mujer... Al, además prometiste que estarían a salvo haya.

— ¡La señora Al ha rentado la habitación a un amigo del señor Wade, además...!

—Para su edad es muy peligroso estar por ahí sola, aun peor si no la conocen en el vecindario... además jamás voy a confiar del todo en los tipos que se me acercan jurando lealtad.

Completamente preocupado los detengo a ambos de avanzar más por la casa, Miro a Vanesa quién solo me mira con tranquilidad.

—Entonces tus padres... ¿No están en peligro?

Mi mirada sube a Wade al notar la amplia sonrisa de la pequeña que se pinta del mismo modo en el rostro de Wade; ambos están sonriendo entre el mirarse cómplices... la pequeña avanza por el lugar sin problemas, hasta donde sé la casa cuenta con tres habitaciones, Wade y yo compartiremos una y me supongo que Vanesa escogerá alguna de las sobrantes. Wade me toma del brazo guiándome hacia el sofá hasta hacerme tomar asiento a su lado.

—No te preocupes tanto, de sus padres ya me he encargado, como dije tengo a algunas personas cuidando de ellos, pero Vanesa... es una pequeña niña, no quiero dejarla con un guardaespaldas cualquiera, o sola por las calles sin saber manejar un arma.

— ¿Re... realmente te criaste en un lugar tan peligroso?

—Un... poco —ladea la cabeza —pero no me críe ahí, es decir... la verdad no recuerdo donde me crie... solo recuerdo que llegue ahí luego de un rato.

— ¿Cómo que no recuerdas dónde...?

—Eso luego Peter, solo por si las dudas le ofrecí venir a la pequeña y sus padres estuvieron de acuerdo con la decisión, además, ella luce muy feliz al estar aquí a nuestro lado.

Con algo de inseguridad doy un asentimiento sintiendo su brazo cruzar detrás de mi hombro, totalmente calmado enciende el televisor y de pronto de acerca a mi cuello suspirando contra mi piel.

—Lo único malo es que no podremos hacer el amor a gusto...

— ¡Wa... wade! —expreso sonrojado.

Con una sonrisa divertida en cara toma mis mejillas con una sola mano hasta atraerme a su rostro y besarme. No puedo evitarlo, me gusta verlo sonreír. Sin dudarlo sigo su beso sintiendo como su mano baja a mi cintura atrayéndome contra su cuerpo, mi mano se aferra a su pecho y de pronto lo siento jalarme sobre su regazo; subo a horcajadas sin dudar y me abrazo a su cuello para continuar con nuestro beso.

— ¡¡Iré por las maletas de Peter!! ¡Ya arreglé mi...!! habitación.

La pequeña se queda sorprendida ante mi caída de espaldas desde el sofá, escucho el arreglo de voz que propina Wade y solo sonrío hacia ella que parece totalmente dudosa de la situación. Con una sonrisa en cara siento como Wade acaricia mi pierna que ha quedado sobre la suya.

—Debería de rentar un hotel o algo para más tarde... —bromea en voz baja.

— ¡Wade! —sujeto su mano que me ayuda a ponerme de pie.

Su risa llena la sala causando que Vanesa nos deje en nuestra charla. Algo que he descubierto de Wade, es que tiene mucho dinero en el banco, demasiado, no es para nada una cantidad pequeña si pudo comprarse un auto de marca de un día para otro y todavía rentar una casa; con solo ver el auto y la casa puedo comprobar que Wade quiere tener una "Vida normal" conmigo, aunque me ha prometido que me ayudará con lo de ser un súper héroe que tanto amo, eso podría ser lo único raro de nuestra futura vida pues hasta ha decidido que conseguirá trabajos de medio tiempo para así poder pagar la mitad de la renta y mantener esta casa... es del amigo grandote que me dio miedo, bueno, de su madre... como sea, sé que es extraño, pero realmente quiero ver qué puede pasar entre nosotros. Vanesa entra con las maletas en mano y enseguida nos levantamos del sofá para ayudarla y llevar mis maletas a nuestra nueva y ya estrenada habitación.