Editado: 25/ 04/ 2021

Calmantes extraños.

[Apartamento de Peter]

La noche fue tortuosa, entre baños fríos y ejercicios para olvidar el sentimiento de necesidad, pero... de igual forma.

— ¡Agh! ¡No otra vez!

Enfadado me dejo caer sobre la cama, nuevamente... entre mis pantalones nuevamente hay una maldita erección, no creo poder ir a la escuela si voy a tener una dolorosa y constante maldita erección todo el día... pero tampoco sé dónde vive, sé que es un mercenario, pero...

— ¡Oh, es verdad! Tengo su número...

Poniéndome en marcha a la ducha tomo mi móvil para buscar su contacto mientras tomo mi toalla y ropa; quizá no necesito verlo, quizá con escuchar su voz me sea suficiente, solo... espero que pueda tranquilizarme al escucharlo. Tomando una profunda inhalación dejo mis cosas de baño en el mueble y marco... rogando en mis adentros porque me conteste, mi mirada baja a mi erección mientras lo espero.

* —¿Peter?

— ¡Si!... ¡No, digo... soy Spiderman!... espera... —aturdido sujeto el móvil con ambas manos — ¿Sabes mi nombre?

*Su risa resuena — ¿Hasta ahora te das cuenta? No es la primera vez que te llamo por tu nombre.

—No, bueno... yo, con todo lo que nos a pasado no he prestado real atención a muchas cosas.

Es ridículo, pero escuchar su voz se siente... tan bien, es ronca y casi... seductora; alejando un poco el móvil de mi oído pongo el botón para grabar la conversación... el silencio, aun ahora, me siento más tranquilo porque sé que esta al otro lado de la línea esperando por mi vos.

* —Es lindo... tu nombre, de verdad me gusta.

Una sonrisa no puede evitar dibujarse en mi rostro, aprieto la camisa sobre mi pecho, estoy agitado y muy... feliz...

—Tu nombre... aun no lo conozco, ¿Cómo te llamas?

* —... Wade... Wade Wilson.

—... También tu nombre es muy bueno... te queda perfecto.

*—Supongo... —ríe levemente —por algo debieron escogerlo mis padres... ¿No lo crees Peter?

Es sorprendente cómo se siente tan cálido cada vez que me llama por mi nombre, es un sentimiento acogedor y seguro, como si simplemente estuviera bien que él me nombrara.

*—... ¿Qué tal te encuentras con todo esto?

—Mucho mejor ahora, la verdad... —confieso avergonzado —estuve luchando un poco por la noche, pero... he mejorado un poco ahora.

*—Eso es bueno...

Si, es muy bueno. Es vergonzoso, pero seguramente ahora mismo tengo una cara de idiota por solo escuchar su voz; subo la mirada frente al espejo frente a mí recordando que llegaré tarde si no me apresuro.

—Umm... Wade, se me hace tarde para la universidad, necesitó irme ahora.

*—... Está bien, umm... Peter.

—Dime...

*—Por cualquier cosa... puedes llamarme cuando quieras.

—Si, gracias... bueno, adiós

*—Adios, no muerdas durante las clases Babyboy.

Entre una risa cuelgo la llamada con una sonrisa en cara para adentrarme a tomar una ducha rápida, sorpresivamente la erección desapareció durante nuestra llamada; Es estúpido, la forma en que solo una llamada me ha puesto feliz y tranquilo.

[Wade, cocina de Al]

¡Con un demonio! Luego de hacer mil señas queriendo tirar todo al suelo, bajo la mirada hacia Al que esta sentada en el sofá tomando un poco de cereal; exhalo un suspiro para tomar asiento a su lado y recargarme de su hombro.

— ¿Qué pasa ahora contigo?

—Me esta llevando la mierda Al... —expreso con molestia dejándome caer a su lado.

Ella niega y tranquilamente me acerca una cucharada con hojuelas de avena, sin dudar lo acepto para centrar mi vista en el televisor. Una llamada, me la pase despierto toda la noche entre correr por cuadras y golpear a gente mala para tranquilizarme, pero... ¡Una maldita llamada fue la solución!... además, hasta le dije mi nombre.

— ¡Agh! —cubro mi cara con ambas manos —estúpido Wade...

—Calma, ya todos sabemos que eres así.

Aun ante su broma acerca su mano sobre mi brazo pidiendo calma... mi mirada vuelve a ella mientras exhalo un enorme suspiro.

—No tengo derecho a enamorarme... —dejo caer mi cabeza hacia atrás —ni siquiera pude protegerla a ella, ¿Por qué saldría con alguien más sabiendo que no podré protegerlo?

—...Wade, si tienes derecho de querer a alguien más, —suspira alejando su mano —lo que paso con Vanesa... tú no sabias que esa capsula no soportaría el peso de los escombros... estoy segura que si lo hubieras sabido habrías intentado algo más para protegerla... lo intentaste.

Aprieto los puños — ¡Coloso de mierda!... —golpeo mis piernas —debió protegerla —expreso entre dientes — ¡Él era el héroe!

—Wade... —sujeta mi brazo.

—Yo... —dejo caer mi cuerpo hacia atrás — ¡No es qué me gusté! Hay una clase loca de hormonas o no sé qué mierda nos pegó el doctor pulpo, —exasperado cubro mi rostro —y ahora necesito cogerlo cada cinco segundos o siento que mi pene terminara explotando...

—... Okey...

Descubriendo mi rostro vuelvo la mirada hacia ella, parece confundida con todas mis palabras y hasta algo incomoda, Al incomoda, eso es imposible de ver... Pff, de ver. ¡Ha! Da igual, poniéndome en pie tomo camino hacia la cocina para tomar unas cuantas cosas.

—Pasan mil cosas raras en todos tus días, pero... Vanesa realmente te quería, y una persona que te quiere de verdad jamás te deseará el mal o la infelicidad... si llegas a encontrar una persona que te haga feliz, yo creo que ella estará feliz por ti, te lo aseguro, causarte daño y verte llorar no le causo felicidad alguna, en especial porque lo hiciste por ella... debes intentar superarla y ser feliz Wade idiota Wilson... te lo mereces, por una vez en tu desgraciada vida te lo mereces.

Tragando saliva continúo cortando algunos vegetales, exhalo un suspiro y vuelvo mi mirada hacia ella por un segundo... Al no miente, Vanesa siguió buscándome y esperando por mí, aun cuando en ese entonces me largue sin darle ninguna explicación... sé muy bien que ella quisiera verme feliz, pero... yo no quiero serlo, no sin ella... ella que era tan especial, hermosa, sexy, sucia y decente a la vez... ella que era una mezcla hermosa de todo lo que yo amo, la cinta adhesiva que necesitaba para repararme un poco... mi Vanesa, mi vida...

Inhalando profundamente trato de tragarme mis lágrimas para seguir preparando la comida, la verdad nada de esto es culpa de ese chico, no quiero darle alas, no creo que nada vaya a pasar entre nosotros nunca... no pienso dejar que eso suceda.

—Hoy estas más parlanchina que de costumbre Al... —bromeo —la comida estará lista dentro de poco, ¿Podrás limpiar la mesa anciana ciega?

—Claro, —sonriendo continua su queja —deja a la anciana ciega limpiar la mesa con cosas de cristal...

Vuelvo la mirada hacia la barra con diversión. Sin ti Vanesa, definitivamente no me voy a permitir ser feliz.

[Universidad, Peter.]

Exhalando un profundo suspiro vuelvo a ponerme mis audífonos; es vergonzoso de decir, pero a duras penas pude soportar para no tener una erección durante mis clases, aunque ciertamente escuchar la grabación de su voz me ha ayudado bastante... pero creo que mi cuerpo sabe muy bien que no es verdaderamente él quién habla, la grabación esta haciendo mucho menos efecto con el pasar de las horas.

Mirando el bus llegar bajo un poco el audio de la grabación; es increíble... ni siquiera me percaté de que ya conocía mi nombre de antes. Sonriendo por lo bajo me adentro adorando esta parte de la grabación...

* "—Es lindo... tu nombre, me gusta."

Apenas sonrío ampliamente como un inmenso idiota cuando siento a alguien tomar asiento a mi lado, mi desagrado se hace presente cuando siento como me aplasta parte de la pierna, mi intento de moverme no tiene éxito pues estoy pegado a la ventanilla y sin escapatoria... regreso la mirada al tipo de gorra negra que no me da la cara, tiene un cubre bocas puesto... ni siquiera soy capaz de mirar sus ojos.

—Disculpe... —intento ser educado —está aplastando mi pierna un poco.

El tipo no me presta atención, y enfadado intento alejarlo empujando su pierna, ni siquiera me da la cara, pero entonces siento su mano sobre mi muslo... mi piel se eriza al instante, y al segundo intento alejar su mano, pero entonces su rostro gira y dejo de intentarlo... sorprendido bajo mi audífono.

— ¿Flash?... ¿Qué haces aquí? —susurro precavido —pensé que tenías un partido pronto.

—No era nada muy especial.

Mi sonrojo se hace presente al sentir como su mano sube por mi pierna, mostrando una sonrisa incomoda me apresuro a detener su mano impidiendo que suba más... mi mirada pasa por sobre su hombro hacia el hombre parado a nuestro lado, qué avergonzado desvía la mirada cubriendo su boca. Tragando saliva con la vergüenza al tope, dejo su mano en paz para cubrir mi rostro.

—Te están mirando, deberías parar —susurro.

—Oh, vamos Peter... —acerca sus labios a mis oídos —vine especialmente para verte.

—... yo...

Simplemente no puedo llamarlo por su nombre, si la gente de alrededor me escuchará nombrarlo todo terminaría siendo un caos... él se metería en líos y posiblemente hasta mi cara estaría en las revistas de chismes para mañana, pero... no necesito que por mi culpa termine metido en problemas y, aun así, no puedo negar que su mano apretando y acariciando mi pierna me está calentando un poco.

—Enserio deberías parar... —observo sus ojos —no queremos que te metas en problemas... —cubro mi boca —con la prensa, ya sabes.

—No te preocupes... —desliza su mano entre mis muslos —si llegarán a meternos en problemas puedo decir fácilmente que solo te estaba acosando...

—Estas loco... —detengo su mano que avanza entre mis piernas —no será bueno para tú... —aprieto los labios sintiendo sus caricias —ya sabes...

Tragando saliva intento mirar hacia otro lado, pero el bulto de mi pantalón ya comienza a elevarse y su mano me acaricia sin vergüenza alguna...

*—Peter...

Conteniendo un jadeo me retengo de gemir vergonzosamente en el transporte público, al volver la mirada puedo notar la satisfacción en su mirada ante mi reacción... la vergüenza me llena y al subir la mirada puedo ver al chico a nuestro lado que nos observa con atención y un sonrojo en sus mejillas... entre mi vergüenza cierro mis piernas, pero Flash se apresura a rodearme por los hombros hasta poder presionar mi pezón...

*— ¿Peter?...

La electricidad recorre mi cuerpo, y entre un suspiro puedo escuchar como vuelve a repetirse el audio... su leve risa...

*—... ¿Hasta ahora te das cuenta? No es la primera vez que te llamo por tu nombre.

Flas abre mi bragueta, completamente metido en lo nuestro, y ante la voz en mi audífono yo me sostengo del saco de Flash mientras intento contenerme... hay niños en el bus, padres... madres... adolescentes... esto no es una porno dónde las personas son compradas... esto es... la vida real... el miedo de ser descubiertos...

*—Es lindo... tu nombre, me gusta.

Cubriendo mi boca evito que un gemido salga, y entre mi preocupación vuelvo la mirada hacia s ojos que brillan llenos de emoción, en su pantalón se puede ver un bulto formarse; trago saliva con el cuerpo caliente y la respiración pesada... la voz de Wade... ¿Por qué suena tan seductora? ¿Por qué? Wade... Wade Wilson...

*—... Wade... Wade Wilson.

Apartando la mano de Flash me encorvo sobre mis piernas respirando de forma agitada... mi mirada sube al asiento delante de mí mientras mi mente me recuerda su cara... Wade... ese día de verdad te quería besar.

—Bien... —sonríe orgulloso —me detendré, pero en cambio vamos a seguir esto en tu apartamento.

—Imbécil, tengo trabajo... —suspiro.

—Ya pedí el día libre para ti —pasa su mano detrás de mis hombros.

—Eres un idiota...

Subiendo mi bragueta con el desespero en todo mi cuerpo solo doy un asentimiento. La desesperación se hace de mi cuerpo, cada curva, cada bache, cada parada en su respectivo lugar se vuelve una completa tortura para mí. Cuando por fin llegamos a mi apartamento sujeto a Flash por el saco para jalarlo escaleras arriba, solo por un momento vuelvo la mirada sobre él notando su sonrisa llena de orgullo, y al segundo vuelvo a arrastrarlo hasta poder cerrar la puerta de mi habitación; sin dudarlo lo pego contra la pared con dureza descubriendo su leve sorpresa... aun cuando no sea el mejor en el sexo... necesito hacerlo con alguien ahora mismo. Sin dudarlo me acerco a su boca jadeando al segundo que su mano hace presión en mi trasero acercándome contra su cuerpo, sonreímos al filo de los labios contrarios.

— ¿Me extrañaste?

—Un poco... —jadeo sonriente —sigue Flash...

Tomando sus mejillas lo atraigo a mi boca mientras sus manos me sujetan por los muslos haciéndome subir sobre su cadera, suspirando deslizo mis manos por sus hombros sintiendo como su miembro se frota contra mi trasero... cerrando los ojos mientras lo beso puedo recordar a Wade, me aferro con fuerza a su cuerpo dejando el pensamiento de aquel tipo fluir. Sus labios avanzan por mi barbilla llegando hasta mi cuello mientras avanzamos por el apartamento adentrándonos a mi habitación; en un segundo me veo sobre la cama, por mi cuenta me saco la camisa mirando como él hace lo mismo, sigo con mi pantalón y él sonríe subiendo a la cama sobre mí. Con una sonrisa en cara le sigo el juego tendiendo mis brazos hacia él para esperarlo... su risa sale y simplemente se acerca a mis labios para comenzar a sacar mi ropa interior mientras nos besamos, sus labios bajan a mis pezones... esto... esto se siente... horrible... no, no es lo mismo que la vez pasada, se siente raro... incomodo... el primer dedo entra y me sostengo con fuerza de Flash haciéndolo quejarse del dolor y gritar... de pronto se aleja tratando de tocar su espalda.

— ¡Vamos Peter! Eso enserio dolió... —trata de mirar su herida —no es como si no lo hubiera hecho con cuidado...

—Si, —expreso avergonzado —lo hiciste con cuidado, pero... por alguna razón realmente dolió...

Su mirada viene preocupada, pero entonces frunce el ceño y toma su camisa de la cama. Incorporándome lo veo levantarse y yo me incorporó mirándolo ponerse la camisa.

—No quiero ofenderte... pero si tienes una enfermedad y me la pasarás... —menciona sin mirarme.

— ¿¡Eres idiota!? —me levanto enfadado — ¡Claro que no tengo ninguna puta enfermedad! ¡Qué seas pésimo en la cama no es mi problema!

— ¿¡Pésimo en la cama!? —expresa completamente ofendido — Tss... —sonríe negando —pero bien que me has buscado...

— ¿¡Disculpa!? —me coloco la ropa interior — ¿Buscado? —me pongo en pie buscando mi camisa — ¡Solo fue una vez y porque estaba completamente desesperado! —colocándome la camisa le doy la cara — ¡Pero esta vez has venido por tu cuenta!

Entre mi enfado solo exhalo un suspiro agotado y comienzo a empujarlo fuera de mi casa. ¿Cómo se atreve? Jamás dejaría que una enfermedad llegará a invadir mi cuerpo... además, ¿Qué demonios sabe él de mi vida sexual?

— ¡Lárgate y no vuelvas! —doy un empujón que lo hace tambalear en el pasillo — ¡Imbécil del demonio!

— ¡Qué te jodan Parker! —muestra el dedo medio.

Devuelvo la misma seña y simplemente cierro la puerta con brusquedad para adentrarme más que enojado dejándome caer sobre mi sofá, exhalando un suspiro al techo giro la mirada a la mesa de centro donde descansa mi móvil con los audífonos puestos... suspirando lo tomo desconectando los audífonos para ponerle play. Mi cuerpo se relaja al escuchar su voz nombrarme, cayendo en la desesperación deslizo mi mano a mi entrepierna mientras la otra se centra en mi pecho comenzando a tocarme por igual... solo de este modo se siente bien, sol de este modo puedo disfrutarlo.

— ¡Señor Peter! —fuertes golpes son dados en la puerta — ¡El hombre de la otra vez dice que lo ayude con su valija!

De un salto salgo del sofá hasta acercarme a la puerta entreabriéndola para dejar ver solo mi rostro, Vanesa sonríe ampliamente.

— ¿Qué... qué dices? —cuestiono apenado.

—El hombre que estuvo aquí el otro día... —apunta su rostro con duda—el que tiene... cicatrices.

— ¿Cicatrices?... —dudoso veo de reojo hacia adentro y vuelvo la mirada a la pequeña —Vanesa, te daré dinero si lo ayudas a subir.

— ¡Enseguida!

Apenas se marcha dejo entreabierta la puerta para correr a mi habitación por mis cosas de baño, salgo con dirección a la ducha y rápidamente abro la llave quitándome la ropa interior para entrar bajo el agua fría. Estoy seguro de que él no pidió mi ayuda para subir sus cosas, Vanesa debió decirlo para que yo le pidiera que fuera en su ayuda y así obtener un poco de dinero, pero bueno... eso no es tan importante, solo... debo bajar esta erección, y... ¡El audio! Salgo a prisa apenas alcanzando a tomar la toalla para cubrir mi entrepierna sin atarla a mi cintura, me acerco a prisa a la mesa de centro.

— ¡PETER! —eleva los brazos so—seré tu... ¡Wow! —regresa deteniendo a la pequeña —espera un poco niña...

Sin darle explicaciones Wade cierra la puerta en la cara de la pequeña logrando tirarla en el pasillo; su mirada me analiza y su risa crece cada vez más, completamente apenado apago el reproductor para cubrirme debidamente.

— ¿Acaso... decidiste masturbarte con mi voz?

Sonrojado avanzo hacia la ducha cerrando la puerta y recargándome de ella completamente avergonzado puedo escucharlo parar fuera de la puerta entre su aun fuerte risa.

— ¡Oye... oye como sea! ¿Está bien qué me quede aquí?

— ¡Si! ¡Haz lo que quieras idiota!

Completamente avergonzado me deslizo contra la puerta hasta caer al suelo cubriendo mi rostro... quiero morir.