JiYong no esperaba que el decirle su verdadero nombre a Top fuera tan importante, pero al parecer lo había sido.

Esa noche ya no lo pintó, en medio de su emoción lo mordió hasta que ambos estuvieron satisfechos, aún ahí en su estudio.

Luego de eso Top se encargó de cuidarlo, lo subió cargando hasta su habitación y mientras la bañera se llenaba bajó a la cocina de nuevo por café y frutas. Al regresar se recostó con él dentro de la espaciosa tina, con su espalda recargada en su pecho y sus brazos aún rodeándolo.

—¿Estás bien? —preguntó SeungHyun luego de que pasaran un rato en aquella cómoda posición.

—Tranquilo, lo estoy. Además, recuerda lo que Taeyang y D-lite dijeron, puedo aguantar tus mordidas mejor que cualquier otro ser humano.

—Aún así, no quisiera causarte dolor o daño.

—Me causas muchas cosas Top, pero no dolor. —No necesitó voltear para saber que había logrado sonrojarlo.

Salieron algunos minutos después de la bañera, mientras Top se secaba JiYong se apresuró a tomar la playera de tirantes que Top había utilizado debajo de su camisa y que había dejado pulcramente doblada a un lado al meterse a bañar. Al verlo así vestido sonrió pero no dijo nada más.

—¿Volverás a irte por la mañana? —le había preguntado Top una vez que estuvieron cómodamente recostados en la gran cama.

—Sí, aún tengo cosas que hacer, pero volveré a verte por la noche ¿de acuerdo? Si quieres puedo venir a tu casa en cuanto anochezca

—Te propongo esto, ve y has tus cosas, iré por ti cuando caiga la noche y te llevaré a cenar a donde tú quieras, luego de eso vendremos aquí y comenzaremos con el cuadro.

—De acuerdo, —se movió un poco para sellar aquel "pacto" con un beso suave.

Volvieron a arrebujarse juntos y a dormitar hasta que el sol volvió a salir.

—Mi JiYong, —volvió a repetir Top con su último suspiro.

Él se quedó ahí todavía un rato más, pensativo. Comparaba la tarde que había pasado con Seungri, tan normal mientras que, por la noche, su cita con Top y sus otros amigos era tan extraña como placentera.

Bien, ya había vivido mucho con su estilo de vida actual, para ese momento quería intentar esa parte diferente y vivirla con con Top, con su Top.

«Bueno, si él me llama "su JiYong" yo puedo llamarlo "mi Top" ¿no?» se justificó mentalmente mientras salía de la cama.

Fue a cambiarse pero dobló cuidadosamente la camisa de se había "robado" para dormir, de manera que pudo llevársela también.

Salió en silencio de la habitación y de la casa, afortunadamente (para él) esa vez no se topó con ninguno de los trabajadores de SeungHyun, a pesar de eso se apresuró a salir de la casa antes de toparse con nadie.

De nuevo, no se percató de la figura castaña que esperaba en contraesquina a la que había él dado la vuelta, con un manojo de llaves en la mano luego de interceptar a ciertos trabajadores en su camino.

JiYong no se dio cuenta de nada de estos, con sus audífonos puestos iba inmerso en su propio mundo mientras avanzaba hasta la parada del transporte público. Mismo estado en el que viajó hasta llegar a su casa. Donde luego de prepararse un plato de fideos instantáneos (era lo único que tenía en casa, pronto tendría que ir de compras), volvió a ponerse la camisa de Top y se acostó a dormir un buen rato.

Despertó cuando la tarde ya estaba avanzada, aún así se tomó el tiempo para ir a comprar comida un poco "más saludable". De camino recordó que había hecho una promesa aún no cumplida, así que sacó su teléfono, marcando al contacto con un panda en su nombre.

Curiosamente tardó bastante en contestar, casi se había rendido cuando tomó la llamada.

~Hola, ¿GD?

—Hola Seungri, sí soy yo. Lo lamento ¿estás ocupado?

~Un poco, tuve que salir por unas cosas de la escuela.

—Oh, ya veo, Bueno, había prometido llamarte y lo hice, nada más.

~¡Muchas gracias! Yo volveré de mi viaje en unos dos días, si quieres para entonces vamos de nuevo por un café ¿Sí?

—Vale, me agrada la idea.

~Muy bien, perfecto. Bueno GD, debo dejarte, hablamos luego.

Y la llamada se cortó sin que tuviera oportunidad de decir nada más.

Algo extrañado JiYong terminó de hacer sus compras y volvió a su casa, donde se dedicó a arreglarse para su cita. Esta vez utilizó su propia ropa.

Una playera blanca, jeans oscuros y su chamarra de cuero serían suficientes; Top había prometido que irían a donde él quisiera, y ahora que él había probado "su mundo" esnobista y lleno de lujos, quería enseñarle su propio mundo.

Una vez que estuvo listo se acostó en el sofá a esperar, puso el canal de música siendo la luz de la pantalla la única iluminación en todo su hogar. Así se quedó esperando hasta que, finalmente, terminó dormido.