-Squirrel-una voz suave llamó a Sana, quien se giró y visualizó a Tzuyu, una chica a la que había conocido hacía menos de un mes.

Tzuyu era amiga de Chaeyoung, la hermana menor de su novia, Momo. Sana sonrió cálidamente y abrazó a Tzuyu. -Hey, Yoda. ¿Cómo estás? ¿Momori y Chaeng vinieron contigo?-dijo la japonesa animada, mostrando interés. Sana se alegró al ver a Tzuyu asentir.-Sí, Squirrel. Momo se quedó buscando algo en el auto y Chae y yo venimos a presentarte a alguien -respondió Tzuyu.

Sana dirigió su mirada hacia la chica que estaba agarrando la mano de Chaeyoung, sintiéndose avergonzada por no haberla saludado antes. -Hey, Chaeyoung. Hola. Y hola, ¿cómo te llamas? Yo soy Minatozaki Sana, y tú?- exclamó Sana, ofreciendo una sonrisa dulce y su mano a la otra chica. La chica rápidamente respondió -Kim Dahyun, un placer.

Dahyun le dio una dulce mirada a la chica que tenía enfrente, sintiendo una conexión instantánea. Aunque habían acabado de conocerse, había algo en esa mirada que transmitía una sensación de comodidad y entendimiento mutuo.

Dahyun sintió el cálido tacto de la chica cuando la tocó, una sensación que la hizo sentir aún más conectada. El contacto físico transmitía un sentimiento de cercanía y afecto, fortaleciendo la conexión que estaban formando. Era un gesto que indicaba la apertura a una amistad más profunda y el deseo de conocerse mejor.

A pesar de la conexión inicial, Dahyun comenzó a sentir una extraña vibración o sensación inusual proveniente de la chica. Algo en su comportamiento o en la energía que transmitía la hizo sentir incómoda o insegura. La intuición de Dahyun la alertó sobre algo que no encajaba del todo en la situación.

Aunque había sentido una conexión, Dahyun confiaba en su instinto y se mantuvo alerta ante esa sensación extraña. Decidió ser cautelosa y prestar atención a cualquier señal adicional que pudiera ayudarla a entender mejor lo que estaba experimentando en ese encuentro.

Dahyun se despertó rápidamente, sin haber tenido un sueño perturbador. El sonido molesto de su alarma había interrumpido cualquier posibilidad de seguir durmiendo. Se levantó y se arregló mientras desayunaba, pero su mente seguía atenta al sueño que acababa de tener. Ahora recordaba claramente quién era Sana.

Las imágenes del sueño seguían frescas en la mente de Dahyun. Se dio cuenta de que aquel encuentro entre Sana, Tzuyu, Chaeyoung y ella misma era solo una recreación de su subconsciente. Sin embargo, había algo en aquel sueño que parecía tener un significado más profundo. ¿Podría haber alguna conexión entre Sana y los problemas pasados de Momo? Dahyun sentía la necesidad de desentrañar los misterios que se ocultaban en su sueño y en las vidas de su amiga.