Capítulo 7: en el infierno
Capítulo 7: en el infierno, ¡Bienvenido al Hazbin Hotel!
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Charlie se limpió las lágrimas, el maquillaje de sus párpados estaban arruinados, y no dejaba de liberar algunos sollozos, pero tuvo que limpiarse, tenía que darle las noticias a sus amigos sobre la visita de los padres de la humanidad.
Pero, de ahora en adelante, está decidida a no contactar con esa persona que es su padre.
Abriendo la puerta del hotel, siendo esperado por los pecadores que esperaban en el sofá principal. Vaggie la miro con culpa, Angel Dust intentando coquetear con el barman, Husk, que estaba bebiendo alcohol de su vieja botella con su expresión amargada matutino.
—¿Qué te paso? ¿Por que la cara de mierda? —preguntó Ángel con una ceja levantada al notar a la princesa—. ¿Ya vas a contarnos que paso en el Cielo? La tuerta culo roto de tu novia no nos ha dicho nada.
Vaggie le dirigió una mirada fulminante.
—Si, les contare todo lo que sucedió —contestó Charlie, parándose frente a todos.
Luego de largos minutos de explicaciones por parte de la princesa, los pecadores... seguían igual, como si no les sorprendiera lo que Charlie había expuesto. Esto dejo incrédula a la susodicha.
—Lo de ocultar esos requisitos no me sorprende, es el rey de las mentiras al fin y acabo. Y lo de la rebelión, literalmente está escrita en la Biblia —explicaria Husk al leer la expresión de la princesa infernal, bebiendo su cerveza barata otra vez.
—¿Biblia? —cuestionó Charlie con una ceja levantada y con los ojos entrecerrados.
—La Biblia es un libro que relata cosas de Dios, el Cielo, y todas las cosas que tú papá ha hecho contra ellos, excepto lo de tu madre, es como fuera borrada del registro —agrega Ángel con desinterés.
Un aura depresiva crecería en el interior de la Morningstar, sintiéndose estúpida y triste a la vez por la imagen positiva que tenía de su padre, y debió de esperarse, literalmente estaba en el Infierno, donde el engaño, las mentiras y las estafas son comunes, incluso entre los nativos del Averno.
—No es momento de seguir pensando en ello —interpuso Vaggie, llamando la atención de todos—. Tenemos que preparar el Hotel para la llegada de los padres de la humanidad, ¿Recuerdan?
—¡Ah, si! Tenemos que hacer ver el Hotel para los ojos de nuestros nuevos invitados —diría Charlie, quitándose ese malestar de su pecho.
—¡Limpiar la suciedad! —grita la pequeña cíclope de la nada, casi asustando a los presentes.
[...]
Adán sabe que el infierno yace la peor calaña de su descendencia, desde asesinos hasta violadores, y lo supo en la primera vez que fue al infierno, cuando antes él se encargaba de llevar a cabo los exterminios.
El mundo podría decirle hipócrita, pues, dice que ama a todos sus hijos, pero a la vez mata algunos. No lo negara, es hipócrita, y ese es uno de sus defectos.
Por que Dios puede ser amoroso y paciente con sus hijos, pero también puede ser rencoroso y vengativo si se le provoca.
Adán es igual.
Por que es hijo de Dios, hecho a su imagen y semejanza.
Sin embargo, no puede parar de sentir culpa, melancolía, y tristeza al ver a sus descendientes hundidos en el pecado como si fuese lo más normal. Frunció el ceño por el panorama de destrucción, robo, asesinato y violación. Sin duda eran horrendos, pero espera a que algunos encuentren la salvación con el pequeño proyecto de la MiniStar.
Eva, por su parte, odiaba estar en el infierno que no sea en el Día E, aquí se encuentra la peor parte de la descendencia a que ella dio luz, la parte desagradable en que pudo convertirse al comer del fruto prohibido. Si no fuera por las manipulaciones de Lucifer, el infierno solo sería habitado por sus nativos en vez de su descendencia.
La atmósfera calurosa, el olor a cenizas y azufre característico del Averno, y la constante sensación de una fuerza tratando de oprimirte. Estar en el infierno sería una mala idea para un ángel, puesto que el infierno tiene el poder de corromper, mutar la luz, como lo ha hecho con los ángeles caídos, incluyendo al Lucifuck.
—¿Ese no es el Hotel? —preguntó Adán, señalando con el dedo al edificio ubicado en una montaña.
—Si, ese debe ser. Uff, desde aquí puedo ver que se ve como la mierda —comentó Eva con desagrado.
—Eva, ¿Puedes ser un poco más amable con Charlie?
—¡¿Que?! Cariño, te amo, ¡¿Pero sabes quiénes son los padres de esa perra?! —cuestiono la mujer de forma acusadora, tirando veneno a la imagen mental que tiene de Charlie y de sus padres, en especial a Lilith.
—Ningun hijo debe pagar por los pecados de sus padres —dijo Adán, acariciando una mejilla de su esposa con ternura—. Hemos vistos a niños con buenos padres convertirse en peores personas, y niños con peores padres convertirse en una mejor persona. Sé de tus dudas, y de tu odio, pero no tenemos que meter a otra alma en nuestros asuntos.
—... Odio tu amabilidad exagerada.
—Yo también te amo, mi reina.
Un rubor apareció en el rostro de la fémina ante el nuevo apodo que su esposo le dio, eso era nuevo para ella. Adán se limitó a sonreír entre labios la expresión de su esposa con diversión y ternura.
Tras unos segundos de vuelo, ambos humanos primordiales aterrizarian cerca de la entrada del hotel.
—¿Hazbin Hotel? —murmurro Adán con desinterés en su expresión.
Eva caminó a la puerta y lo golpeó tres veces. La puerta es abierta por la princesa del infierno, quien tiene una enorme sonrisa en su rostro, pero para la primera madre, es una sonrisa comemierda.
—Bienvenidos al Hazbin Hotel, Señor Adán... Señora Eva —saludó a la última con amargura.
—Hola —saludo Adán con una mano levantada.
—¿Vas a quedarte ahí o nos vas a dejar pasar? —demandó Eva con impaciencia.
Charlie abrió las puertas y permitió que ambos humanos primordiales entrarán a su hotel, Eva evaluaba su entorno con burla y sospecha ante cualquier ataque, Adán caminaba desinteresadamente, hasta que los tres llegaron frente al grupo de pecadores.
—¡Oye, ponte un pantalón, pervertido! —comentó Husk, tapándose los ojos con molestia.
—Ooooh, Charlie, ¿Quien es este guapote? —preguntó la araña gay, arreglándose sus "pechos" mientras le enviaba una mirada coqueta al rubio.
—Chicos, estos son Adán y Eva, los padres de la humanidad —presentó la princesa con una sonrisa alegre, luego estiró una mano hacia sus amigos—. Y estos de aquí son: Husk, el Barman; Niffty, la Sirvienta; Cherri la...
—¡Guardia del hotel!
—Si, si, la guardia del hotel. Y estos dos son nuestros huéspedes: Ángel Dust y Sir Pentius.
Cada integrante saludo a los invitados a su manera, ya sea por desinterés o excitación por parte de Cherri y Angel ante la belleza del primer hombre. Esto no fue desapercibido por la esposa del mencionado, que frunció en el ceño mostrando sus colmillos de la máscara Led.
—Hola —saludo Adán con una mano.
—Es maravilloso tener la amabilidad de presencia a las figuras más importantes de la humanidad —una voz casi estética sonó por toda la sala, y una figura emerge en una masa oscura similar a las sombras.
—Aunque agradezco que se ponga algunas prendas para evitar... Confusiones a largo plazo —comentó con su sonrisa afilada, un poco incomodo al ver al nudista.
—¿Que tipo de confusiones? —preguntó Adán curioso.
—No queremos que confunda nuestro humilde hotel para hacer cochinadas, no cuando la princesa está presente —respondio el demonio de la radio.
—Chicos, les presento a Alastor, es el mentor y mayordomo leal de mi familia —diría Charlie con una sonrisa, abrazando al mencionado que corresponde de igual forma, como un padre abrazara a su hija.
—Sé que te enteraste la verdad sobre tu padre, lo siento por eso, debí contártelo —susurro el ciervo en los oídos de la princesa, detonando tristeza en su voz.
—Sé que papá no te lo permitiría, pero gracias por tu apoyo —aseguro Charlie.
Alastor asintió con la cabeza, luego se inclina respetuosamente frente a los padres de la humanidad.
—Un gusto en conocerlos.
—El placer es mío —correspondio Adán, inclinándose de igual forma.
Lo que no supo es que, al estar de espalda de los demás, todos presenciaron su trasero desnudo, provocando un asco por parte de Husk y Sir Pentius, pero una excitación boras por Cherri y Angel Dust.
—Limpio —susurraba Niffty al ver el trasero resplandeciente del primer hombre.
—¡¿Que andan mirando a mi esposo?! —exclama Eva a las chicas.
Vaggie solo se tapaba los ojos con un fuerte enrojecimiento.
—(Parece un culo muy apretado, ¿Como se sentirá lamer el anillo?) —pensó quien sabe quién.
Eva chasqueo los dedos, causando que su esposo tuviera una ropa de campesino, tapando su cuerpo de la vista de los demás, para el alivio de algunos, y para la frustración de otros. Adán simplemente frunce el ceño al sentir la tela pegada en su piel, dándole una sensación que no le gusta.
Charlie Tose falsamente para llamar la atención de ambos—. Bueno, creo que le mostraré su habitación —diria, haciéndoles señas para que la siguieran.
Luego que ambos se marcharán, Angel Dust soltó un suspiro de enamorado junto con Cherri, sus mejillas estaban enrojecidas por el bello rostro del primer hombre.
—Tengo que chuparle el pito —comento el demonio araña.
—No fui de las chicas que se enamoran de los guapos, pero, uufff debo decir que ese se ve muy sexy —agrego Cherri con una sonrisa soñadores y afilada.
Niffty se quedaría viendo a la nada, parpadeando lentamente en su único ojo.
Husk fruncio el ceño ante el comportamiento de colegiala enamorada de las dos féminas y el maricon, bebiendo de su botella nuevamente. Sir Pentius tenía una expresión decaída, tratando de ser animado por sus súbditos huevos.
Alastor era el más tranquilo, ajustándose el moño de su cuello antes de caminar hacia quien sabe dónde. Vaggie por su lado, estaría suspirando con una mirada baja, recordando su tiempo en el cuidado del primer hombre.
—Y aquí se pueden quedar —diria la princesa morningstar, señalando una puerta.
—... Tengo el presentimiento que se verá como la mierda —comentó Eva con el ceño fruncido.
—¿Y si mejor arreglamos esto? —pregunta Adán.
—¿Mhm? ¿Arreglar? —preguntó la princesa infernal.
Sin explicar más, Adán chasquea los dedos, causando que un fuerte brillo invadió el hotel desde adentro hacia afuera.
Cuando Charlie recuperó su visión, se percata que las paredes y pasillo lucían diferentes, hasta que sintió algo cálido recorrer su cuerpo. Mirando la ventana, su boca se cae al ver el cielo azul decorado con esas cosas blancas y blandas, y un objeto amarillo iluminante que traía luz al pasto verdoso del exterior.
—E... ¡¿EL SOL?! —exclamo la princesa del infierno en consternación.
Regreso su mirada al padre de la humanidad, que solo le hizo un gesto con la mano para que fuera a explorar mientras ingresaba a su habitación, siguiendo a Eva.
La pequeña Morningstar corrió hacia el piso principal, notando la entrada abierta. Se dirigió al exterior y ahí encontró a sus amigos, maravillados por el cambio.
—¡¿Estamos en la Tierra?! —cuestiono un Angel Dust emocionado, caminando hacia una fuente de agua, inclinándose para inspeccionar su reflejo—. ¿Esto es agua normal?
—Mirad, hay cessped —dijo Sir Pentius, deslizándose por el suelo verdoso hasta llegar a unos arbustos que, sorpresivamente, eran muy cómodas—. Esto me trae recuerdoss cuando era niño —confeso con sus ojos llorosos con una sonrisa muy sincera.
Alastor estaría sentado debajo de un árbol, sonriendo mientras una manta de picnic y unos libros de su época se materializaban. Con un tarareo bajo, tomó uno de los libros, convocando una taza de té y unos panecillos al lado suyo.
—Extrañaba estos momentos —susurro con melancolía, abriendo el libro de sus manos.
—Oh, viejo, ¡una piscina! —gritaria la cíclope terrorista, estando en el patio del hotel, donde encontra una piscina y un jacuzzi en funcionamiento. Ella se quitó la ropa hasta estar en ropa interior—. Mamá necesita relajarse de sus horas nocturnas.
—¿Esto es real? —pregunto Husk, levantando una de sus patas hacia el sol, sintiendo su tacto y calidez—. Creo que me estoy pasando de bebida loco.
Charlie sonreía ampliamente, luego se dio vuelta, inhalando un gran boca de aire al visualizar los cambios de su hotel. El anterior hotel demacrado, sucio y rojizo fue reemplazado por un edificio el doble de grande, en ancho y altura, con pintura azul celeste, tejados brillantes y reluciente como el oro; ventanas elegantes, y el letrero neón que antes decía 'Hazbin Hotel' fue reemplazado por un enorme letrero que decía 'Happy Hotel'.
—Es... ¡¡Es justo como en mis sueños!! —exclamaria, dibujando una sonrisa y casi estando al borde de las lagrimas—. ¡Es justo como lo soñé, justo como lo quería, justo como quise que quería!
Hasta este punto, la joven princesa se convirtió en una bola de alegría, saltando y juntándose con Pentius para sentir el paso, algo que nunca ha sentido en su vida.
Adán observaba la reacción de la princesa desde la ventana de su habitación, sonriendo por su comportamiento infantil. Luego se dirigió a su esposa, que lo esperaba con los brazos cruzados y sin su casco.
—¿Por que hiciste eso? —cuestiono Eva, entrecerrado los ojos.
—¿De qué hablas? —pregunto Adán de manera inocente.
—Adán, sino recuerdo mal, estamos aquí para inspeccionar el hotel de la mosca del rey de las mentiras, ¡No para mejorarla! —demando la primera madre con frustración, llevando sus manos a la sien.
Caminando hacia ella, Adán la envuelve en un abrazo amoroso, pegando su cabeza en su pectorales definidos—. Cariño, ¿Estás molesta conmigo solo por eso?
Eva suspiro por el contacto de su esposo, sintiendo sus mejillas calentarse—. ¿Y si solo está fingiendo? ¿Qué pasaría si todo este hotel sea una farsa solo para intentar invadir el Cielo desde el interior?
Adán tarareo ante la perspectiva y preocupación de su amada, comprendiendo su preocupación—. Eva, tu y yo sabemos que ella no es así. Si eso pasará, ya lo sabríamos, y sin duda alguna la atacaría. —separo la cabeza de la mujer de su pectorales para verla a los ojos—. Después de todo, tus Ojos del Espectro te avisarían.
De los ojos de la fémina aparecieron tres puntos rojizo cada uno, que inspeccionaron el alma de Adán antes de desvanecerse.
—No estas bajo un control mental, ya me empezaba a preocupar por ti —suspiraría la primera madre, juntando nuevamente su cabeza en los pectorales de Adán, envolviendo su espalda con sus brazos.
Ambos padres de la humanidad se quedaron en silencio, disfrutando del contacto personal, olvidando sus preocupaciones por unos momentos.
Pero Adán abrió sus ojos al sentir un fuerte agarrón en su retaguardia—. ... Eva.
—¡¡ESAS NALGAS SON MÍAS!!
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FIN DEL CAPÍTULO.
He aquí una actualización (muy retrasada) de mi primera historia de Hazbin Hotel.
Como dije, no sé ni cómo continuar, ni tampoco como terminarla, solo meto ideas al lazar para después desarrollarlos.
No, Eva no tiene los Ojos del Señor, es casi similar, solo eso CASI. Pero tiene sus propias habilidades que puede que demuestre más adelante.
¡DENME UNA ESTRELLA!
Tomen agua, y nos vemos pronto.
Pd: tengo sueño.
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