00. Gotas de esperanza
Cuando la noticia de la muerte de Gwen llenó las calles de Nueva York, la ciudad completa se vio consternada, a poco más de un año del deceso del Capitán Stacy, su hija mayor había fallecido. El trágico suceso les recordó a todos que la persona debajo del traje, era tan humano como todos ellos, se equivocaba, fallaba, sangraba y podía llorar.
Peter sigue ordenando su habitación, ha sido un desastre los últimos meses, su estado anímico no le ha permitido poner orden en su vida, en ningún sentido. Al fin está botando muchas cosas a las que ahora ve, se aferró tontamente. Aunque las fotografías de Gwen son un recordatorio constante de lo que nunca será, se permite aferrarse a sus mejores deseos y hacer lo que ella querría de él, que siguiera adelante. Ese discurso que se había perdido, se repite en su memoria, empujándole a avanzar.
No es sencillo, por supuesto. Después de todo, no tiene a nadie para buscar refugio o consuelo.
¿Cómo le explicaba a May que al final del día sí era su culpa que su novia muriera?
Cómo Peter mantuvo el temple y se permitió ver a los ojos a la señora Stacy en el funeral, es algo que el todavía no se explica. Pero lo hizo, ofreció su pésame y lo recibió de otro par de conocidos de la escuela. Es imposible para él dejar de sentirse indigno y enojado por la rapidez en que todo se había desmoronado, frente a sus ojos.
Ahora aprendería a vivir con el fantasma de Gwen, como lo hizo alguna vez con el de sus padres, de igual manera que sucedió con el tío Ben y con el padre de Gwen.
Y encontrará la manera de hacerlo. Tiene una responsabilidad con su ciudad y honrará siempre la memoria de Gwen.
Varias calles a distancia de la residencia de los Parker, una joven también daba vueltas por su habitación, buscando furiosamente el libro correcto. Unos días atrás guardó unas flores esperando a que estás se secaran, ahora no recuerda en qué libro las dejó. En el proceso, rebuscando en un viejo libro de historia, una fotografía cae del libro de texto y el corazón de Ornella se siente de repente pesado.
Es una fotografía de su cumpleaños número dieciséis, Gwen le llevó esa vez un pastel que simulaba la noche estrellada de Van Gogh. La rubia tenía un brazo sobre su hombro y la castaña sonreía con todo y frenillos. En la imagen ambas se ven tan jóvenes y felices, así como tan distintas, a pesar de que apenas han transcurrido poco más de tres años desde la pequeña fiesta.
Aparte de la muerte prematura de su madre, cuando era una niña, Ornella no tenía gran experiencia con el luto o la perdida, la muerte de Gwen fue un golpe de realidad. Pensar en el efusivo abrazo que compartieron antes de que subiera a aquel taxi camino al aeropuerto, le forma siempre un nudo en la garganta. Unas horas después de su fiesta de despedida, todos esperaban tener noticias de ella, instalada en Inglaterra con su futuro brillante por delante.
Nadie imaginó que la llamada llegaría horas antes de lo esperado, solo para informarles la muerte de Gwen.
Ornella no culpa al hombre araña por la muerte de Gwen. Aunque no fueron el tipo de amigas que pasaban todo el tiempo juntas, tantos años de convivir te hacen conocer a las personas, Gwen fue siempre obstinada y nunca dudó en defender en lo que creía. Si su amiga estuvo ahí en ese momento, fue porque así ella lo quiso.
Eso no quitaba el velo de tristeza que la cubría cuando pensaba en ella, Gwen había tenido un futuro prometedor, planeaba ir a Oxford. Si tan solo hubiese tomado el vuelo...
— ¿En qué estabas pensando, Gwen? ¿Por qué no le dijiste a nadie que conocías al hombre araña?
Existen tantas preguntas sin respuestas y Ella ya ha olvidado que buscaba en primer lugar.
— ¡Regresó! ¡El hombre araña regresó!
El grito de su hermano menor le hizo dar un brinco de la posición de cuclillas en la que se encontraba y baja corriendo hasta la sala de estar, ahí están Billy aferrándose al control remoto del televisor, apuntando a la pantalla que transmite las noticias.
Se ve al héroe luchando en directo, con un sujeto que lleva una gran armadura robótica con forma de rinoceronte. Los ojos emocionados de Ella captan el enunciado en letras mayúsculas "Vuelve el héroe de Nueva York, hay esperanza de nuevo" y piensa en cómo no podrían haber escogido mejores palabras.
—Tienen razón —murmura para sí misma.
— ¿De qué estás hablando? —inquiere el adolescente viendo de reojo la pantalla, para no perderse ni un detalle de la lucha. Es un gran admirador del héroe, como todos en su familia.
—Lo que dicen en las noticias —le responde ella esta vez en voz alta, se sienta en la alfombra también sin despegar los ojos del aparato, el sujeto rinoceronte ha hecho explotar varias cosas alrededor y el hombre araña protege a los civiles, mientras las policía despeja el área—. Es como un rayo de esperanza que él haya regresado.
—Espero que esto signifique que la mercancía del hombre araña baje de precio —masculla Billy.
Ella ni se inmuta por eso y procura no perder ningún detalle de la escena, sus dedos pican por la necesidad de trazar en papel lo que ve, es reconfortante verlo regresar. Hace bastantes semanas no se ha atrevido a colorear más que algunas mascotas del vecindario y un par de flores, se siente como un artista que acaba de recuperar a su musa. Ese vergonzoso pensamiento le llena de calor las mejillas.
—Oye —le llama su hermano desde el sofá—. ¿Por qué te estás sonrojando?
—Shhh. Mira las noticias, tal vez salga papá.
Escucha la puerta de la entrada abrirse y con ello, el ruido de una chaqueta siendo sacudida. Patrick "Paddy" el hermanastro de ambos, se apoya en una pared mientras se quita sus botines. Ella le da un rápido vistazo sin pronunciar nada, la relación de ambos no es sencilla.
— ¿Qué está pasando?
— ¡El hombre araña regresó! —responde Billy.
—Bueno —Patrick se deja caer al otro lado del sofá—, ya era hora.
Esa noche, Peter Parker regresa a su casa a cenar con May, con un par de moretones nuevos y una opresión en su pecho que al fin iba disminuyendo, aun si era poco. En la oscuridad de la noche, Peter le agradece a Gwen Stacy por haberle dado tanto y se promete seguirlo intentando, incluso si es difícil.
.
.
.
NOTA DE AUTOR:
¡Hola, hola!Se supone que esto debía estar listo el día 20, pero no pude esperar un día más. Especiales agradecimientos a: KenobiAhsoka Mandaloriana76 y chevi_potter por su apoyo y palabras de ánimo.
Peter y Ornella ya se conocen por encima, más no son amigos todavía. La última vez que ellos se vieron fue en el funeral de Gwen. No muy buen escenario, ni feliz momento para ninguno.
¡El el próximo capítulo interactuarán juntos!
Nos vemos el otro fin de semana. Gracias por leer. <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top