—¿Vamos a ir a la pizzería del centro?—Pregunta Visión con preocupación.

—Si hombre paleta.

—Esa pizza me hace daño.

—Vision, a ti todo te hace daño.— Dice Tony mirando su reloj.

—Si lo vemos de tal manera en la que tengamos que culpar a alguien, debería culparte a ti, tu me hiciste como soy Tony.

—¿Tan defectuoso?— Visión mira a Tony con indignación mientras todos los demás reían.

Avanzaron hasta el centro de la ciudad tomándose el tiempo para detenerse a tomar fotos divertidas por la ciudad.

—¡Quiero una copia de eso!— Exclama Pietro antes de caer en una fuente a sus espaldas.— Mierda, mi sudadera era nueva.

—Pietro, ¿Por qué siempre traes la utilería de la película?— Zemo se enfoca en no ir y darle un golpe por arriesgar la utilería que le costó tiempo y paciencia encontrar para que encajara con la personalidad de cada uno de sus amigos.

—Lo siento pequeño Helmut, amo este collar.— Admite levantando la fina cadena de la que colgaba un pequeño rayito azul.

—¡No puedes arriesgar mi utilería!— Se queja con el chico.— Será tuyo oficialmente cuando terminemos de grabar. Te hice firmar un contrato por algo.

—¿Que te hizo pensar que leí el maldito contrato?

—Vamos chicos, saben nuestra regla.

Zemo mira a Pietro y luego suelta aire.

—Nunca dejar de sonreír con tu familia.— Dicen al unísono.

—Exacto.

—¿Quién invento eso?

Todos miran a Steve que se hace el loco mirando a una ardilla.

Bucky se dio cuenta de que Zemo estaba lo suficientemente distraído como para ver que el se había separado un momento del grupo para ir a una tienda.

—Hola.— Saluda el chico a la joven detrás del mostrador.

—Hola.— Responde alegremente la chica.— Soy Maya y te daré la información que necesites para hacer de tu visita más agradable.

—Hay que simpática chica.— Dice Bucky con nerviosismo.

La campana que indica que alguien ha entrado a la tienda suena y entran dos chicas.

—James ¿Que haces aquí?— La voz de la chica pelirroja que había conocido hace poco se escucha.

—¡Nada!

—Tranquilo, está bien.— La voz tranquila de Wanda hace que se tranquilice y mire por el cristal de la tienda, los chicos están sentados en la banqueta mirando las fotos en el celular de Zemo.

—¿Por qué están aquí?

—Te seguimos, nadie entra a una tienda de cámaras.— Admite Nat apunto de tocar una cámara frente a ella.— La verdad no había visto una por aquí.

—La busque por internet durante días y está es la única que hay cerca, así que no toques nada Natasha.— La dureza en la voz de Bucky hace que la chica aleje la mano rápidamente.

—¿Es para Zemo?

Bucky abre mucho los ojos y ve a Wanda sonriendo.

—Yo no dije para quien era.

—Pero tampoco lo estás negando.

Bucky sonríe, lo descubrieron.

—Es una buena persona, creo que merece disfrutar un poco de algo que le gusta, y no solo del club de cine, he visto que le gusta la fotografía,así que me dije a mi mismo, ¿Por qué no cómprale una cámara instantánea?

—Que raro eres.

Nat ríe y Bucky le lanza una mirada molesta.

.

—Muero de hambre, ¿Ya podemos ir a cenar?

Los chicos caminan en parejas, Tony y Steve, Wanda y Visión, Clint y Pietro, Nat y Bruce y detrás de ellos Bucky y Zemo, ambos se miran de reojo.

—Yo te compre esto.— Dice Bucky rompiendo el silencio y extendiendo una bolsa de papel a Zemo.— Espero que te guste, no es la gran cosa pero creí que a ti te gustaría.

Zemo toma la bolsa de papel y sonríe.

Caminan por un poco más de tiempo hasta que llegan a un lugar alumbrado con lindas luces amarillas y con un ambiente muy relajado.

Se sientan en una de las mesas más grandes y comienzan a hablar de los exámenes que se acercaban.

—Insisto en que el profesor Fury nos odia.

—Cómo no va a odiarnos si le llamamos hombre de chocolate en el cortometraje del año pasado.

—Fue genial.

—¿Ya podemos comer?— Pregunta Pietro poniendo su cabeza sobre la mesa y exagerando.— Miren como muero de hambre.

—Puedes pedir tu, no eres un niño.

—No te estoy diciendo a ti Barton.— Pietro lleva la mirada a su hermana.— Wandita, hermanita insoportable, ¿Podrias pedir la pizza?

—No me digas Wandita.

Pidieron las primeras dos pizzas y después se vieron obligados a pedir otra por qué a Steve se le cayó la primera en un intento de sorprender a Tony con su inexistente equilibrio.

Mientras todos disfrutaban de la cena, incluido Bucky que era el más feliz sintiendose cómodo con los chicos y, después de tanto tiempo, sentir que encaja en un grupo igual de único que el.

—Oye.— La voz de Zemo lo distrae.— Gracias por la cámara, me encantó, y es morada.

Bucky sonríe y le pasa la mano por la mejilla, tal y como hace Zemo con el, provocando en el castaño un leve sonrojo.

—Creo que te la mereces.— Admite bajando la mano con suavidad.

—G-gracias.

Bucky vuelve a sonreír, aleja su mano y la recarga sobre su pierna debajo de la mesa que se mueve con rapidez por los nervios.

.

—¡WANDA QUIERO VOMITAR!— Visión va corriendo sin dirección alguna y Wanda va detrás de él con su abrigo color vino ondeando.

—¡Por favor Vis, en la fuente no!

—¡Damas y caballeros, Wanda y Visión en su hábitat natural!— Banner saca de su bolsillo un lápiz que usa para simular un micrófono.—Se dice que es casi imposible admirar a esta pareja cuando conviven de manera extraña.

Nat, Tony y Clint habían comenzado a simular que sostenían cámaras, Pietro hacia sonidos de aves (que realmente le salían a la perfección) y Steve, Zemo y Bucky miran con gracia el show.

—Todos estamos sorprendidos por la cantidad de estupideces que pueden hacer cuando están juntos.— Continua Banner, varias personas se habían detenido a mirarlos con rareza pero no les importo.— Pero lo más importante, nos sorprende el amor que se tienen, polos opuestos si se atraen.

Todos sonríen mirando a la pareja, Wanda pasa con delicadeza su mano por la espalda de Visión esperando a que acabe de vomitar.

—Eso es am....— Bruce se interrumpe y pone cara de asco.— ¡Oh maldición! ¡Así es damas y caballeros, lo acaba de besar después de que vómito! ¡Da tanto asco que debemos llevarlo al aire!

Todos se ponen a reír con fuerza y se detienen cuando comienza a faltarles el aire.

—¡Wanda que asco!

—¡Métete en tus asuntos!

—¡Maldición amo esta familia!— Grita Bucky.

Todos lo miran, nunca había gritado.

—Lo siento.— Se disculpa con las mejillas rojas.

Los chicos se acercan a el y lo rodean en un abrazo.

—¡Amo esta familia!— Gritan todos al unísono.

.

—¿Te divertiste?

Zemo y Bucky caminan solos por las calles.

—Bastante, ¿Todas sus cenas son así?

—Casi todas, todos estamos en el club de cine por una razón, necesitábamos alguna distracción, después de un tiempo comenzamos a pasar todo el tiempo juntos por qué era lindo y había algo que nunca habíamos experimentado, un amor que no era romántico, pero nos llenaba. Por eso la regla, nunca dejes de sonreír.

—Son una linda familia.— Admite Bucky.

—Somos, James, eres familia, tu lo dijiste.

Bucky mira como Zemo frota sus manos, supone para mantener el calor.

Sin pensarlo extiende su mano y toma la de Zemo, el castaño se sobresalta pero no se queja, Bucky entrelaza sus dedos con los de Zemo y continúan caminando.

—Hace un poco de frío.

Es lo único que el pelinegro dice, no recibe respuesta pero el silencio es cómodo.

Ambos caminan, sin distracciones, sin pensar en lo que pasará mañana, sin considerar aunque fuera un momento en separarse.

Pues me dieron ganas de escribir un momento del club de cine sin dejar fuera la historia de Zemo y Bucky.

Así que espero que les guste.

Mar ✨