Estaba recostado con las muchas mantas sobre su cuerpo. Se sentía tan calientito ante el frío clima de su ciudad. Quería dormir pero hace una semana que empezo a sentir incomodidad por la postura que tomaba al acostarse en la cama. Su pancita había crecido mucho más, ya que no es solo una vida la que guarda.

La incomodidad lo inquietaba. Sabía que en unos meses su pancita iba lucir como un globo terraqueo andante. Sentía tanta tristeza en ese momento, pues su alfa no estaba con él.

Todo el día busco algo que hacer. Hizo el aceo de su hogar, comio, se baño y ahora estaba recostado entre mantas suavecitas reconfortandose así mismo y dandose mimitos.

Necesitaba el olor de su alfa, su lobo estaba un poco inquieto desde la mañana. Quería salir a la ciudad como antes, andar de un lado a otro, salir con su amigo omega Taemin como lo hacia en la universidad.

Sintió una terrible nostálgia que lo hizo sacar lagrimas. De un momento a otro las mangas larguitas de su sueter protegieron su cara. Sollozaba ante la falta de amor y felicidad.

Solto feromonas de tristeza y toda la casa se lleno de ellas en un segundo. Aun sabiendo que su alfa no tardaría en llegar.

Quedo dormido en medio de sollozos y aburrimiento total.

No sintio nisiquiera cuando un gran cuerpo se poso a lado de él. Le beso la cabeza y le abrazo, besando ahora hombros, cuello y mejillas.

🌙

Cuando abrio sus ojitos, se dio cuenta que no estaba solo. Unos palidos y fuertes brazos lo estaban rodeando. Se volteo y vio la cara del palido papá de sus futuros cachorros. Dormido tranquilamente entre la oscuridad de la habitación. Suspiro y le abrazo pagando su narizita al pecho del pelinegro.

Pero todo fue interrumpido por el sonido de su pancita crujiendo. Trato de separarse de YoonGi, pero este lo apretujo más. Suspiro y volvio a intentar.

-Yoonie~ tengo hambre-El pelinegro fruncio su ceño aun dormido y alejo sus brazos del omega para darle la espalda.

Él pequeño rubio sonrio y piso le frio suelo de su habitación. Salio de esta aun cansado y bostezando. Se aseguro de pisar bien en cualquier lugar para así evitar accidentes. Bajo las escaleras y cuando estuvo en la planta de abajo escucho unos sonidos bastante raros. ¿Ronquidos?, se quedo estatico y rapidamente se dirigio hacia la cocina para tomar un sarten. Iba a decirle a su alfa pero los ronquidos fueron haciendose más intensos. Cuando ya estaba dando los finales pasos hacia la sala, se quedo aun más helado viendo como un bulto llacia en el sillón y este exactamente tenía un aroma muy fuerte a omega. El lobo del omega se lleno de furia y tristeza a la vez, llenandose de cosas demasiado insanas en su cabeza. Era un omega, en su casa, un extraño omega. Cuando se acercaba a él, este se volteo sorpresivamente haciendo brincar y gritar al bajito.

El postrado en el sillón abrio los ojos como platos cayendose al frio suelo de la sala.

-¿Qu-qué? -La voz era muy dulce, lo cual hizo a JiMin sentirse tranquilo de que no fuese un alfa u otra persona con voz grave.

-¿Qu-qué haces a-a-aqui? -Apunto con el sarten y el otro solo le vio con los ojos aun cerrados.

-Estaba durmiendo -Bostezo - ¿Tú que haces aquí?

JiMin trago en seco cuando se dio cuenta que aquella persona se parecía demasiado a su alfa.

- ¿Qu-quien e-e-eres? -Pregunto mientras temblaba.

-Soy Min Woozi, duh - Saco su lengua y abrio sus pequeños y gatunos ojos -Oye, ¿Tu quien eres y que haces en la casa de mi hermanito? Gritas horrible por cierto.

El rubio chillo enojado. Su alfa jamás le conto de la existencia de un hermano, ni mucho menos que este iba llegar asi como nada a su hogar. Se cruzo de brazos mirandole aun asustado.

-M-Min JiMin -Hablo con un poco de posesividad al pronunciar 'Min'.

El otro le vio como curiosidad. Le miro de arriba abajo y solo se rio.

-Mi hermano no tiene omegas, amigo, ¿No te equivocaste de casa? -Hablo el omega olor a frambuesa.

-¡N-no! -Suspiro cansado de la actitud del contrario - Y-y p-para que s-s-sepas soy s-su o-o-omega - Dijo tartamudeando, planeando sonar desinteresado, más sin embargo el otro volvio a reir pero más fuerte.

-Diablos, mi hermano no se enamoraria de un globo terraqueo -Y esta vez, JiMin fruncio el ceño, iba a lanzar el sarten a su cara, pero una mano tomo su brazo antes de hacerlo.

-Creo que ya se conocieron -Ronca, despues de levantarse, así era, se sento en el sillón y calmo a JiMin con un beso en los labios. Woozi solo abrio la boca en sorpresa -Woozi, pense que eras un adulto ya, pero sigues siendo un niño -El otro le miro indignado tratando de decir algo, más sin embargo el alfa le interrumpió -Él es Min JiMin, es mi omega. Y este lugar -Toco su vientre- Aquí es la casita de nuestros cachorritos.