Las lágrimas empezaron a brotar de sus ojos. Estaba demasiado feliz y una sensación en su pecho le embargo de paz.

Él sabía y tenía el presentimiento de que algo como eso iba a pasar. Miro el monitor delante de él escuchando a su doctor de control. YoonGi sostenía su mano y al igual que él estaba lleno de felicidad. La sala estaba llena de esta, que el Doctor por fin pudo sentira tranquilidad despues de muchas horas de trabajo.

—Son dos. —Comento el ginecólogo —Son dos pequeños cachorros señor Park.

Y así lo supo JiMin que todo valía la pena por ellos. Se escindió entre las mangas de su sueter y empezó a sollozar. Su alfa le abrazo y de sus ojos también bajaron lagrimas.

—Son nuestro cachorros Minnie...—Sobo dulcemente el cabello de su omega mientras le dedicaba bonitas palabras para asi calmarle.

—S-son n-nuestros —Sorbio su nariz como un pequeño niño y miro a su alfa con ojos brillantes y pomulos rojos por llorar.

—Tienen que tener sumo cuidado, al parecer JiMin es un fuerte omega, más sin embargo el vomito, el dolor de espalda y cabeza se haran más frecuentes, como los mareos etcétera. Por eso quiero que tomen ciertas medidas para que el bebé nazca sano —Tomo un boligrafo y saco un recetario de uno de los cajones de su escritorio —Les dare medicinas para colmar el vomito si se hace más frecuente. Sabiendo que son dos, tendras que cuidarte muy bien y no hacer mucho esfuerzo. Come cosas saludables y no intentes por nada del mundo cargar algo pesado —El doctor empezo a escribir —Si se presenta sangrado o tu celo llega de 'la nada' acude rapidamente al hospital —El doctor termino y dejo el boligrafo a un lado dandoselo en las manos a JiMin —Ellos estan sanos y todavía queda por descubrir su genero. No quiero adelantarles nada, pero segun la forma de tu vientre y por los sintomas que me o presentas son dos bonitos varones.

JiMin asintio feliz y recogio sus cosas con ayuda de YoonGi —Muchas gracias doctor, estaremos al tanto.

—Gracias a ustedes por acudir a mi y ser su doctor de confianza. Les agradezco su vista —Formalmente se despidio inclinandose frente a ellos. La pareja igualmente lo hizo dandole una reverencia corta y saliendo del consultorio.

Cuando llegaron al estacionamiento JiMin suspiro y solto un chillido feliz.

—¡Gemelos! ¡YoonGi! ¡Gemelos! —Sus manos se dirigieron a su cara sorprendido.

—Lo se amor —YoonGi le tomo de los hombros y le abrazo cariñosamente llenandole de su aroma —Te amo demasiado, me haces muy feliz —Beso su mejilla y luego esparcio besos por toda su cara —¡Siempre he querido tener mi equipo de basquetbol! Es como un sueño hecho realidad —Bromeo ganándose lindas risas del más bajito.

—Yoon~ —Ronroneo y pego su nariz al cuello de su alfa —Tu también me haces muy feliz, los tres son mis amados retoños —No se despego de él hasta que él mismo olor del omega estuvo impregnado en su alfa. Acto sumamente privado que se hacía solo entre destinados.

“La luna supo elegir bien 🌙”

—¿Iras al trabajo? —El tierno omega se encontraba cocinando unos ricos huevos fritos. Él alfa se lamento al oler el rico aroma a comida, realmente no quería irse pero tenía una junta importante en media hora.

—Lo siento amor —Ponia su roja corbata en su cuello para ajustarla a su traje negro elegante —Tengo que irme, en media hora tengo una junta —Entro a la cocina encontrandose con la figura pequeña de aquella persona que la hece muy feliz todos los días. Esta volteó y sus pequeños ojos conectaron con sus felinos.

—Te ves tan guapo de esa manera —Abulto sus labios —¿Un besito?

Él palido rio de ensias y se acerco tomando la cintura del contrario para posar sus labios sobre los de él. Prontamente cono lo hizo sintio su sabor a frambuesa sobre ellos, delicioso como su tacto.

—Te amo —Bailo un poco con él, haciendo él momento inmenso, lleno de romanticismo.

—Yo también Yoonnie~ —Apilo su cabeza con el cuello del alfa, y como siempre, dejo su aroma el cual ya estaba mezclado con un olor demasiado tenue a algodón y leche —Cuidate —Dejo un casto beso sobre los labios de su alfa y arreglo la desaliñada corbata de este.

Él palido sonrió dulcemente y solto la cintura del omega —Adios, amores —Dijo refieriendose a JiMin y a las dos personitas en su vientre. Tomo su maletín y salio de su hogar para irse a la fría calle de Seul.