Prefiero ser feliz jajaja.

Además mientras más sepa de Star Wars mucho mejor.

Que tal y en una de esas diosito Filoni oh John me contratan para idear dialogos, trama o cualquier cosa estupida para entretener a la audiencia en general .

Ya quisiera que eso pase jajaja.

Mortis.

Debil. -dijo el Padre sometiendo a Sidious.

El sith trato de levantarse pero recibio un fuerte golpe en la cara.

Patético. -dijo el Padre esquivando un rayo que fue lanzado por su enemigo.

Sidious gruño, creo ilusiones de el ppr todo el lugar.

El Padre levanto su mano en dirección al cielo y sin aviso alguno rayos cayeron dando de lleno en las ilusiones del sith.

Eres solo un inútil. -hablo el Padre tomandolo por la cabeza y apretarla con fuerza.

Su meta no solo era derrotarlo físicamente.

Queria doblega su voluntad.

Siempre fuiste un imbecil arrogante. -dijo el Padre estrellando la cabeza de su enemigo en una roca que se fracturó por la fuerza del choque.

¡¿Como se volvió tan poderoso?!. -penso con enojo y frustración.

Creyendote el mejor, siempre quitandole a otros lo poco que los hace felices. -dijo el Padre dandole una patada en la cara.

Los dientes de Sidious salieron volando.

¡De pié!. -demando el Padre.

Esto no es normal, se supone que su cuerpo no tolera ese poder y sin embargo...-penso el Sith viendo a Skywalker.

Todo lo malo y atroz que hiciste te lo haré cien veces peor. -exclamo el Padre.

En menos de un segundo lo hizo caer en una ilusión.

Bloqueo de las fuerzas aliadas.

¡Alisten los cañones!. -dijo Hux.

¡Pronto!. -dijo Piett.

En toda la flota habia un ajetreo impresionante.

Naves caza de un lado a otro.

Los Venator aliniandose y los destructores clase Géminis cargaban sus cañones.

¡Aseguren sus escotillas!. -dijo Constantine entrando a los cañones de proa de un destructor.

¡A sus cañones!. -dijo Aayla Secura abordo del Ejecutor.

¡Apunten a la entrada!. -dijo Padme señalando el blanco.

En sincronía toda la artillería apuntó sus baterías a Mortis.

Inicien la cuenta regresiva. -dijo Fisto a los soldados.

El reloj se ajusto.

Tienen siete horas, más les vale salir. -dijo Mace viendo el planeta.

Con la Hija y Ahsoka.

Nada mal para unas mocosas. -dijo Revan limpiando la sangre que escurria por su frente y boca.

Estas mocosas van a barrer el suelo contigo. -dijo Ahsoka con sus sables de luz en mano.

Eso creen?. -dijo Revan ansioso.

Ven y compruébalo entonces. -respondió la Hija.

Revan fue al ataque.

Al principio estaba siendo humillado pero poco a poco todo fue cambiando.

La Hija y Ahsoka atacaban con todo sin resultado alguno.

Es como si el viera el futuro y predigera todos sus movimientos.

Interesante. -hablo la Hija.

Que descubriste. -dijo Ahsoka.

Nunca pense ver a alguien con esa habilidad. -dijo la Hija.

Lo descubriste. -dijo Revan.

No fue difícil realmente. -dijo la Hija.

De que habla?. -dijo Ahsoka.

El usa la precognición. -respondió la Hija.

Según papá es una habilidad que muy pocos lograron aprender. -dijo Ahsoka recordando las lecciones con Anakin.

Estas en lo correcto jedi, esta habilidad me permite predecir los movimientos de mis enemigos. -contestó Revan tomando su sable de luz.

Con el Hijo.

Tu dominio sobre las artes oscuras es fabuloso. -hablo el Hijo.

Me halagas, pero no has visto nada de lo que soy capaz. -respondió Nihilus.

Qué coincidencia, tampoco has visto mis habilidades. -dijo el Hijo.

Sin decir nada ambos alzaron su mano y ejercieron su poder en la fuerza en un intento de hacer retroceder al otro.

Al ver que nada de eso funcionaba decidieron pasar al siguiente nivel.

Ambos optaron por su forma astral y se atacaron.

Con el Padre.

Si hubiera alguna descripción sobre la rabia, irá e inpotencia que sentia el lord de los sith seria la que actualmente esta mostrando en su rostro.

Durante años se hizo pasar por un senador viejo e indefenso.

Alguien que amaba la política por sobre todo.

Eso solo era una fachada para ocultar su verdadera naturaleza.

El fue un aprendiz del gran Darth Plaguies, anterior lord de los sith.

Su maestro le enseño muchas cosas que lo fortalecieron de maneras asombrosas.

Todas excepto una, una habilidad que el envidiaba y deseaba a toda costa tener.

Esa habilidad era como evitar la muerte misma.

Sabía que no podia desafiar a su maestro ya que este simplemente podria acabarlo.

Decidio esperar su momento oportuno para acabar con el y asi fue.

Obtuvo todo su conocimiento sobre el lado oscuro para el sólo.

Los años pasaron, descubrió al elegido de la fuerza, inicio una guerra a escala galáctica, extermino una gran parte de la orden Jedi, entre otras cosas.

Ahora se veía a si mismo.

Derrotado...

Humillado...

Cansado...

Nunca se sintió tan inferior.

Un fuerte dolor lo saco de sus pensamientos.

En su estómago varias estacas estaban clavadas.

Sabía que era una ilusión, pero se sentía muy real.

Tranquilo, es solo una ilusion. -penso el sith buscando la forma de liberarse.

Ilusión, realidad, llamalo como quieras... el dolor es dolor. -hablo el Padre rompiendo una de las piernas del sith.

¡Ya me tienes harto!. -grito Sidious liberando su poder.

Afortunadamente eso sirvió para safarse de ese juego del cuál fue víctima.

En un simple movimiento se acomodo su pierna rota.

Te dejamos vivir una vez y casi nos matas, si te dejamos vivir dos veces merecemos morir. -dijo el Padre reanudando su ofensiva.

Esto es inútil, debo retirarme o ahora si me matará. -penso el sith.

El levanto una cortina de niebla sobre ellos para su escape.

No dio dos pasos cuando fue detenido por el Padre.

Pensabas huir de tu destino?. -hablo el Padre burlandose de su enemigo.

Aunque mostraba superioridad por fuera no se confiaba.

Debia forzar al sith a liberar más poder.

Ya que de ese modo pasara lo que el pdecia.

Forja estelar.

Solo un poco más. -dijo Ben analizando los detalles de ensamblaje.

Ante su vista varios super-destructores de la clase "eclipse" estan siendo construidos en el enorme astillero.

En el momento en que la construcción termine emprendera su viaje fuera de este mundo para acabar con toda la Orden Final e iniciar su propio regimen al que definiría como "Primera Orden".

Su unica preocupación estana siendo retenida por el lord de los sith.

Asi que escapar sera sencillo para él.

Debo asegurar la salida. -hablo Ben tomando la nave en la que llegaron Skywalker y sus hijos.

Voló lo más rapido que pudo y al llegar a donde la salida esta se llevo una sorpresa.

No habia salida.

Debe haber algo mal aqui, Skywalker es un paranoico pero no tanto como para quedarse aqui dentro el resto de la eternidad. -diría Ben buscando en el escaner de la nave.

Le tomo un minuto dar con la vía de escape.

Nuevamente la sorpresa no se hizo esperar.

La "estrella" no era mas que una ilusión optica.

Excelente. -dijo Ben.

Regresó de nuevo al astillero y se sento a meditar en lo que todo se terminaba.

Dejaría que entre todos se maten, los que queden vivos estaran agotados.

El solo aprovechará esa oportunidad y matara a sus enemigos.

No obstante, alguien lo miraba desde lo lejos.

Muy pronto ajustaremos cuentas niño. -dijo una sombra.

Aqui dejo el capítulo panas.

El siguiente ya es el cuarto de este pequeño maratón.

Una vez finalice sigo con la siguiente historia.