Estarossa miraba como su hija de apenas seis años rechazaba las verduras de su plato, mirándolos con su ceño fruncido, su cabello hasta el hombro de color plateado resplandecía, y sus ojitos entre negros con toques azulados miraban con odio a las verduras

— "Hanabi" — la pequeña miro a su padre quien estaba frente de ella con su madre al lado, mirándola.

— "papi" — Hanabi siempre lo llamaba así cuando quería algo, y él siempre se lo daba, pero era necesario que comiera sus verduras, debía resistirse a lo adorable que era su hija, quien salio igual que a su querida Elizabeth.

— "debes comerte tus verduras" — al instante su hija hizo un puchero.

— "no me gustan" — murmuro quedito, pero aun así sus padres la escucharon.

— "Hanabi, cariño, debes comertelas, si no no creceras" — esta vez su madre con una sonrisa le hablo.

— "pero saben muy feas, Chivago me lo dijo" — Hanabi todavía con el puchero los miro.

Ambos padre se miraron, para después mirar a su hija de nuevo.

— "Chivago no sabe lo que dice, así que pruebalas" — Estarossa tenia el ceño fruncido al recordar al hijo de Ban y Elaine, no se le escapaba que el mocoso siempre le decía lo linda que era su hija y que se casarían de grandes, Estarossa era muy celoso con sus dos amores después de todo.

— "pero..." — la mirada de Estarossa le dio un poco de miedo, Elizabeth sonrió un poco, miro a su marido y con suavidad acaricio su brazo, quien tranquilizo su aura asesina.

— "cariño, las verduras no saben feas, saben muy ricas, y te ayudan a crecer sano y fuerte, el brócoli es muy bueno, pruebalo, cariño y si no te gusta entonces no te lo daremos mas, pero pruebalo".

Hanabi miro un momento a sus padres, ella quería crecer sana y fuerte, pero de solo imaginar esa cosa verde que parecía un árbol en su boca, se le quitaba el apetito.

— "si te comes tus verduras, dejare que pases una pijamada con Chivago" — a la pequeña le brillaron los ojos, ella quería jugar mucho con su amigo, mientras Estarossa, apretaba los dientes, si su padre de por si era un pervertido, el hijo seria peor, lo único que saco de Elaine fueron sus ojos, en lo demás era un mini-Ban.

— "si!!!" — decidida tomo su tenedor de plástico y atravesó con este la verdura, encaminándola a su boca, se detuvo a unos centímetros de su boca, mirándola, casi matándola con los ojos, que cerro fuertemente para después meterse la verdura en su boca y masticarla, bajo la atenta mirada de sus padres, cuando se la trago, abrió los ojos y miro a sus padres.

— "y bien, ¿verdad que sabe bien?" — Elizabeth pregunto con una sonrisa.

— "no me gusto" — tanto Estarossa como Elizabeth suspiraron, su hija odiaba las verduras, realmente.

— "¿puedo ir con Chivago?"— Hanabi pregunto mientras se levantaba de la silla.

— "vamos te llevare" — Hanabi asintió mientras Elizabeth se levantaba junto con Estarossa para encaminarse a la puerta.

— "ahora vuelvo" — Estarossa beso a su esposa, mientras Hanabi se ponía sus zapatos.

— "claro, yo llamare a Merlín, para preguntarle los preparativos de mañana" — Estarossa asintió, para después cargar a su hija y salir fuera de su casa.

En el camino el iba jugando con su hija a "veo, veo".

Cuando llegaron tocaron a la puerta y enseguida Ban apareció a su vista.

— "hola" —

— "hola" — no eran grandes amigos, ni siquiera se llevaban, pero sus hijos por alguna razón si lo eran y tolerarse, era lo que hacían, claro que luego la gran boca de Ban sacaba puras estupideces y debes en cuando una pelea se desataba.

— "y ¿Chivago?" — Hanabi pregunto rápidamente mientras Estarossa la bajaba al piso.

— "arriba, puedes subir" — ella rápidamente, pero educada, entro al hogar y subió las escaleras al cuarto de su amigo.

— "y como esta Elizabeth" — Ban trataba de ser amable como Elaine le pedía fuera a veces.

— "bien, y tu esposa como esta" — lo mismo pedía Elizabeth, ya que cuando se reunían en el bar de Meliodas, siempre pelaban, y las bebidas alcohólicas eran las causantes.

— "bien, ahora esta con King, no tardara en llegar" —.

— "cuida de mi hija, vendré por ella mas tarde" —.

— "¿que significa eso?" —.

— "nada simplemente que no quiero que su inocencia sea perdida por tu hijo" —.

— "que demo......." —.

— "cuidala, si no quieres verme enojado" — a Ban casi le estallaban las venas que se formaban por su enojo, Estarossa solo se fue.

Omake

La pequeña Hanabi, movía sus pies de adelante hacia atrás.

— "que pasa princesa" — Estarossa le pregunto mientas Elizabeth se cepillaba el cabello, los tres estaban en la habitación del matrimonio, Hanabi hoy les pidió dormir con ella.

— "papi, mami, ¿como se hacen los bebes?" — y Estarossa supo que tendría que matar a Ban y Elizabeth pediría ayuda de Meliodas para parar a su hermano de hacer un funeral.

Espero les guste, saludos