Capítulo 6: Once años
- Yo quiero, yo quiero, yo quiero, yo quiero, yo quiero- Repetía una pelirrojo recostado en el suelo, justo en medio de toda la habitación, Dazai, leía con tranquilidad desde el sillón, sin tomar mucho en cuenta el berrinche en cuestión.
Era un día lluvioso en Yokohama, no se había anunciado un tiempo así, pero, de la nada todo se había oscurecido y gotas comenzaron a caer, como si de un diluvio se tratara. Luego de unos minutos constantes de: "Yo quiero". El castaño cerro su libro y miro a Chuuya con una ceja alzada
- Tú... ¿Quieres crecer? - El pelirrojo de inmediato detuvo su palabrería y lo miro enojado
- Dazai, ya me has respondido eso 3 veces, así que, por última vez, ¡Si! ¡Quiero crecer!, pero ¡Sabes que no me refiero a eso en esta ocasión!
- Tienes razón, soy consciente de lo que quieres hacer- El pelirrojo de inmediato se sentó emocionado y lo miro con los ojos felices
- Entonces ¿Puedo?
- No - le respondió sonriendo Dazai, antes de volver a leer nuevamente su libro. Chuuya de inmediato volvió a recostarse en el suelo y comenzó con un interminable:
- Por favor, por favor, por favorr
- Chuuya, ¿Sabes? Hoy es domingo- Le dijo el castaño cambiando la hoja de su libro, el pelirrojo lo miro confundido
- Y ¿A mi qué?
- Que no tengo nada que hacer, enano. Puedo estar aquí escuchándote todo el día, pero mi respuesta seguiría siendo: No ¿Necesitas que te lo deletree? Porque realmente pensaba que tu cerebrito podría entender dos silabas
- ¿Silabas? - Le respondió el pequeño sentándose con cansancio- ¿Por qué usas palabras tan complicadas?
- No use palabras complicadas - le dijo con una risa suave, dejando su libro de lado y prestando toda su atención al pelirrojo- ¿No vas a seguir con lo que hacías?
- No... me aburrí...pero de verdad, de verdad que quería salir a jugar a la lluvia contigo, ¡Seria divertido! - Dazai miro por la ventana, notando que la lluvia en cuestión era mas tormenta que día para jugar con barro y esas cosas. Y, por otro lado,
- Te lo explicare así, peque. Tu sales a jugar a la lluvia, te quedas unos segundos debajo de ella, te enfermas y ¿Sabes que provocaría eso?
- ¿Que me sintiera mal?
- Bien, si, pero además de eso, Kouyou serviría mi cabeza para la cena ¿Crees que no me mataría al ver que, mientras tu estabas conmigo, te enfermaste? - Explicó el castaño
-Nee-san no haría eso - Le respondió riéndose divertido el pequeño. Dazai de inmediato se quedo anonado por como se trasformaba el rostro de Chuuya, era una imagen impresiónate, los ojos azules del pequeño parecían cambiar de color cuando estaba feliz, a un cielo claro y brillante. El castaño era consciente de que últimamente se quedaba cada vez mas anonado por Chuuya, no es que antes no estuviera ya cercano al pelirrojo, solo que ahora, siempre estaba mirándolo con mas atención, cada gesto, cada mirada, hasta cada puchero provocaba que Dazai se quedara como encantado con Chuuya. Al notar que el pequeño se levantaba, sacudió el cabeza confundido ¿Cómo podía llamar a esto que sentía? Podía ser un genio, pero, seguía siendo un niño que no podía colocar nombre a sus emociones.
- ¿Qué podemos hacer para divertirnos? - Le pregunto Chuuya sentándose a su lado con un puchero
- ¿Quieres juga a las escondidas? - le pregunto Dazai, levantando nuevamente su libro para continuar leyendo, pero sin dejar de escuchar a Chuuya.
- No caeré otra vez, bueno, por quinta vez en eso, se aprender de mis errores - Le dijo cruzándose de brazos
- No entiendo nada de lo que dices - le dijo el castaño riéndose por lo bajo - ¿Me lo explicas?
- ¡Deja de tratarme como un tonto! Tu eres tonto, yo no
- Claro, claro. ¿Por qué no buscas un mejor insulto para mí? Ese ya se está volviendo repetitivo- le respondió Dazai sin dejar de sonreír, la verdad, no le decía en serio sobre buscar un insulto nuevo, sin embargo, el pelirrojo pensó un segundo en eso, desde que lo conocía le decía, tonto o estúpido, pero no había empleado su vocabulario, igual era porque Nee-san no le gustaba que dijera groserías, pero ¿Decir una no era malo? Decir una, no significaría que comenzara a decir más de la nada. Pero el pelirrojo no conocía más Groserías, se quedó pensando en ello un segundo, seguro en la escuela había escuchado alguna
- Imbécil Bastardo - dijo de la nada, Dazai de la sorpresa dejo caer el libro de sus manos. Lo miro con la boca abierta y Chuuya poco a poco se fue sonrojando- ¿Qué? ¿No me dijiste que te llamara de otro modo? - El castaño seguía mirándolo sorprendido, pero poco a poco, cerro la boca y le sonrió divertido
- Chuuyaaaa, no pensé que pudieras decir algo tan sucio hacia mi persona, me siento lastimado - le dijo quejumbroso, y luego le saco la lengua divertido- Entonces, ya que me insultaste, explícame eso de que aprendiste de tus errores
- No se puede jugar a las escondidas contigo, nunca me vas a buscar - le dijo apoyando su cabeza en el respaldo del sillón
- El problema es que tu no sabes esconderte, ni siquiera tengo que levantarme para saber dónde estás - le dijo mirándolo fijamente
- ¡No es posible que lo sepas si no me ves!
- Chuuyaaa, la primera vez estabas escondido detrás de la cortina, luego debajo de la cama, luego dentro del armario y la última vez, aunque no consigo explicármelo del todo, estabas dentro de la alacena de los alimentos ¿Estoy en lo cierto?
- ......No- respondió enfadado el pequeño, siendo consciente de que se había escondido en todos esos lados en el mismo orden que se los habían dicho.
- Una... una - Dijo tarareando Dazai, Chuuya lo miro sin comprender
- ¿Una?
- No lo tomes en cuenta, ¿Entonces? ¿Qué quieres hacer? - le pregunto mirándolo y estirando la mano para acariciar su cabello, pero deteniéndose antes de hacerlo.
- Salir a...
- No, seguirá siendo un gran No, así que intenta de nuevo ¿No hay un nuevo juego en tu escuela o algo? - Chuuya de inmediato se tenso y lo miro con los abiertos
- ¿Nuevo juego? No, claro que no - Dazai lo miro curioso, el pelirrojo parecía nervioso
- Dos...dos- Le dijo tarareando nuevamente
- ¿Qué? ¿Porque cuentas? - le dijo con el ceño fruncido Chuuya, Dazai solo se encogió de hombros
- Bueno, entonces ¿Por qué no te ayudo con tus tareas para mañana?
- Ya las hice todas- dijo rápidamente el pelirrojo
- ¿Enserio? Por qué no te vi en ningún momento - le respondió sentándose derecho lentamente, y estirando sus brazos
- Cuando no mirabas las hice...- le murmuro evitando mirarlo. El pelirrojo se sorprendió al ser tomado del brazo con fuerza, pero sin ser lastimado, miro la sonrisa de burla de Dazai
- Tres, Chuuyaaa - le dijo canturreando. El castaño de inmediato lanzo al pelirrojo hacia atrás, quedando recostado en el sillón, subiéndose encima de el
- ¡Bájate! ¿Qué te pasa? - le dijo intentando sacarse al castaño de encima, pero este solo se rio y le sonrió con burla.
- Prometimos no mentirnos, dijiste 3 mentiras ¿Sabes que significa eso? - El castaño observo como Chuuya se tensaba por completo y comenzaba a negar con la cabeza.
- ¡No te atrevas! - le dijo removiéndose, pero sin poder moverse ni un poco
- Podría no hacerlo, si admites que metiste
- ¡No lo hice!
- Solo estas enterrándote más, enano
- Dazai, ¡Ya! ¡Déjame!
- No quiero - El castaño sin pensarlo mucho comenzó a hacerle cosquillas a Chuuya, que, siempre había sido muy cosquilloso.
- jajajaja...ya ¡Déjame!, ¡Hablare! ¡Hablare! - Decía el pelirrojo entre risas, empujando a Dazai desesperado, pero sin moverlo ni un centímetro. Este se detuvo sonriendo feliz.
- Te rindes muy rápido, enano- Le dijo mientras se acostaba su lado, ambos quedaron uno al lado del otro en el sillón, que, por supuesto era bastante amplio. Dazai no pudo evitar mirar al otro a los ojos, Chuuya hacia lo mismo con él. Parecían estar en algún tipo de hechizo.
- ¿Qué pasa? - pregunto el pelirrojo al ver la mirada de extrañeza que había puesto Dazai, pero este solo le respondió negando con la cabeza.
- Entonces, ¿Por qué no me dices la verdad? - le dijo el castaño tomando la mano del otro, como siempre lo hacían. Chuuya la tomo de vuelta sonriendo.
- ¿La primera fue sobre las escondidas? - le dijo pensando en ello y luego hizo un puchero- eres muy odioso, por eso respondí de ese modo, pero no tenias que tomarlo tan en serio
- Chuuyaaa, como si yo no contara las mentiras que dices, anda, continúa
- La segunda fue sobre la tarea... ¿Verdad? - le dijo aun nervioso
- Nop, pero explica esa
- ¡Solo no he hecho una! Hay que hacer una receta de cocina y no se me ocurría que colocar ¡Pero iba a hacerla después!
- y ¿Por qué me mentiste con eso? - El castaño sintió que apretaba su mano un poco y luego lo miraba algo sonrojado
- No quería pasar nuestro tiempo junto haciendo una tarea...no cuando te veo cada vez menos- Le susurro al castaño. Este lo miro sorprendido, pero no podía negarlo, últimamente era enviado cada vez con mas frecuencia a misiones representativas, pero siempre trataba de volver a donde sea que estuviera Chuuya, pero, la mayoría de las veces lo encontraba dormido. Pero, solían pasar los domingos en compañía del otro. Con cariño coloco su mano en la mejilla de Chuuya, este se apoyo en ella cerrando los ojos feliz. Se quedaron así por unos segundos.
- ¿Y la tercera mentira? - le dijo a lo que el pelirrojo se sonrojo
- El juego.... Mira, es un juego estúpido y te juro que no he participado
- Ohhh, eso me da curiosidad, habla
- hummm...mira, las chicas han estado extrañas últimamente- le dijo nervioso, intentando separarse de Dazai, pero este lo mantuvo quieto, colocando ambas manos en los hombros del otro para mantenerlo acostado tal como estaban.
- ¿Extrañas? - le murmuro levantando una ceja
- ¡Yo no he jugado con ellos! - dijo nuevamente
- Ya entendí, Chuuya. Mejor explica de que trata
- Beso - le susurro nervioso, Dazai pestañeo ante eso
- ¿Beso?
- ¡Las chicas están viendo quien besa a más chicos del curso! ¡Ya! ¡Lo dije! - le respondió sonrojado hasta las orejas. Dazai hizo una mueca
- ¿Te han besado?
- ¡Por supuesto que no! ¡No me presto para esas cosas! - El sonrojo no se iba de su rostro
- Chuuyaa, aunque sé que me estás diciendo la verdad, siento que no lo es del todo, así que ¿Qué ocurrió para que estés tan nervioso?
- Preferiría no hablar de ello - le gruño, pero Dazai lo siguió mirando expectante, a lo que el pelirrojo solo suspiro- Bueno... una chica estaba siendo muy insistente sobre...ya sabes, besarme...y cuando le dije que no... intento hacerlo de todos modos...-El pelirrojo sintió como el castaño se tensaba aún más de inmediato comenzó a hablar con rapidez- ¡La evite a tiempo! No me hizo nada...bueno, casi nada...me mordió el cuello en el momento en que la empuje... ¡Pero fue causalidad la mordida! Además, ¡Aunque me hubiera besado no hubiera sido importante! ¡Es algo normal! O eso dijo la profesora... ¡Deja de mirarme así! ¡Me estas asustando! - le dijo el pelirrojo nervioso ante la mirada vacía que le estaba dirigiendo Dazai, el cual estaba descubriendo una nueva emocion en estos momentos, algo que se sentía como ira, pero más cercana al corazón - Dazai... vamos, di algo...ves, por eso no iba a decir nada...pero solo hubiera sido un beso...nada importante
- Muéstrame - le gruño el castaño al escucharlo, sentándose, instando a que Chuuya hiciera lo mismo, pero sin perder la posición de esta mirándose a los ojos. Este lo miro confundido
- La mordida, Chuuya
- Esta bien... pero ya casi no se ve... - le dijo sin perder la mirada confundida. Con cuidado movió un poco la playera que llevaba dejando ver el punto entre su cuello y el hombro, inclinando un poco la cabeza - Ves, casi no esta
Dazai, con la mirada siendo opacada por un color rojizo, dirigió su mirada al cuello de Chuuya, al ser su piel tan blanca, la marca de los dientes, que, aunque había comenzado a desaparecer, aun se notaba, dándole un color rojizo a esa sección. Con la mano temblando por la ira, paso un dedo por el lugar de la marca. Provocando que Chuuya se estremeciera.
- ¿Qué estas haciendo? ¿Puedo cubrirla? - Le dijo sin moverse de la posición, algo extrañado ante la mirada oscura de Dazai, aunque había dicho que lo estaba asustando, no era del todo cierto, la verdad es que solo estaba sorprendido, sabia que el castaño nunca le haría daño, pero era la primera vez que dirigía esa mirada hacia él.
- Mal, mal Pequeño Chuuya, dejaste que te tocaran - le gruño sonriendo, pero de un modo tenebroso
- Pero fue casualidad, no me beso o algo ¿Porque estas enojado?
- ¿Querías que esa chica te besara?
- ¡No! ¿Porque crees eso? - Chuuya intento sentarse derecho y tapar la mordida, pero el castaño con el ceño fruncido lo mantuvo quieto, tomándolo por el pelo, sin hacerle daño, solo sujetando- ¿Dazai?
El pelirrojo no pudo reaccionar a tiempo, aunque no esperaba que Dazai fuera a morder su cuello con tanta fuerza.
-Eso...duele...- le dijo intentando separarse y con algunas lágrimas en sus ojos ante el pellizco de dolor. Pero el castaño lo mantuvo quieto, hasta que estuvo satisfecho con su mordida. Noto que esta sangraba un poco, así que sin pensarlo mucho paso su lengua por ella para limpiarla.
-Mira, Chuuya. Esta mas bonita mi marca ¿No lo crees?
- ¿Qué? ¡Suéltame! Eso dolió - le dijo intentando separarse, sorprendiéndose ante el abrazo que ahora le otorgaba el castaño.
- Esto es desagradable, enano. Siento como si mi corazón tuviera un cuchillo en él, no puedo pensar como lo hago normalmente al notar que alguien mas se atrevió a tocarte ¿Entiendes ese sentimiento? La verdad, si lo haces, explícamelo, porque yo no logro entenderlo, solo se que es desagradable- le dijo apoyado en el cuello del otro, manteniéndolo en un abrazo apretado. Chuuya sumamente confundido le devolvió el abrazo al notar que Dazai lo necesitaba.
- Estas loco - le dijo con el ceño fruncido, hizo una mueca ante el dolor que aun sentía en el cuello - ¿Por qué me mordiste?
- Nadie te va a tocar con eso en tu cuello, pero, enserio Chuuya, no dejes que te hagan nada, no creo poder soportarlo de nuevo...podría matar a alguien - le gruño para mirarlo a los ojos, observo como Chuuya asentía confundido, pero, era aún afirmación que iba a cumplir. No quería que Dazai lo volviera a morder.
Ambos se quedaron cómodamente en el abrazo, la verdad era que ninguno entedia del todo, lo mucho que se querian, al punto de que los celos pasaban desapercibidos. Solo una a situación dolorosa provocaría que notaran lo mucho que necesitaban estar el uno al lado de del otro.
Gracias por leerrr guapas preciosas personas, no olviden votar comentar o dejar el visto, todo es bienvenido en esta comunidad autocreada kjajakakj
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