- ¿Por qué me terminaste? Aún no lo sé... - Dije.

- Porque quería protegerte... pero veo que ya es tarde... -

- ¿A qué te refieres, idiota? -

Él se separa suspirando y me suelta las manos.

- Luego de que te dispararan y lo que dijo aquel chico... creí que si... si te terminaba... nadie intentaría usarte para lastimarme a mi... no quería ponerte en esa situación... pero aún así... solo por el simple hecho de haberme conocido tú ya estás en peligro... -

Abrí los ojos de par en par al ver sus ojos cristalizados.

- Idiota... eso a mi no me importa... yo decidí permanecer a tu lado a pesar de todo ¿Por qué no respetas eso? -

Él no responde, solo se queda mirando el suelo haciendo una mueca y con las manos hechas puños y temblando.

Resoplé y fruncí el ceño pero me quejé del dolor en mi rostro.

- Itte... - Murmuré llevándome las manos al rostro y tocando levemente mi mejilla pero dolía.

Me destapé de las mantas y me levanté.

- ____ aún tienes que descansar... - Dice Manjiro tratando de detenerme.

- Solo iré al baño - Dije aún así poniéndome de pie.

Él suspira y asiente, yo caminé hasta el baño y me miré en el espejo.

¡Dios! Estaba horrible... era completamente moretones y heridas. Miré mis brazos los cuales aún tenían las marcas de aquellas cuerdas, mi estómago también tenía varios golpes.

Suspiré y salí de nuevo, me acerqué a la cama y volví a sentarme.

- Entonces... ¿Aún quieres alejarte de mi? - Pregunté con la cabeza agachada.

- Nunca quise alejarme de ti ____chin... -

Abrí los ojos de par en par por un segundo.

- Y menos ahora que sé que podrían buscarte aún sin ser novios... - Dice.

Asentí comprendiendo pero luego resoplé y miré a otra parte.

- ____chin... -

- ¿Huh? -

- Te amo... -

Lo miré, lo decía de verdad y ya no tenía nada por lo cual mentir.

- También te amo Manjiro... - Él me mira sonriendo - Pero... - Su sonrisa desaparece rápidamente - Voy a necesitar un tiempo -

Él asiente bajando la mirada.

- Está bien, lo entiendo... - Dice.

No dijimos nada más por un tiempo.

- ¿Cómo... supieron que necesitábamos ayuda... ? - Pregunté.

- Takemicchi nos vino a decir... -

- ¿Takemicchi... ? -

Asiente, ambos nos quedamos en silencio por bastante tiempo nuevamente hasta que suspiré.

- ¿Le puedes pedir a Emma que traiga bolsas con hielo? - Dije.

Él asiente, se da media vuelta y se va.

A los minutos aparece Emma con cuatro bolsas de hielo corriendo y se acerca a mi.

- ¿De qué... hablaron? - Pregunta y yo me reí entre dientes mientras me ponía una de las bolsas en el rostro.

- ¿Qué te importa? - Dije pero con cariño.

- Jo~... - Se queja pero me coloca las otras bolsas en los demás lugares afectados - Solo quiero saber si volverán o no -

- No te preocupes por eso ahora, eso lo veremos después, pero... ambos nos seguimos amando así que... - Suspiré profundamente - De verdad que no sé que hacer -

Ella se queda en silencio un momento pero resopla.

- Oye... ¿Todos siguen afuera? - Pregunté.

- Si, se calmaron al decirles que despertaste y estabas bien - Dice.

- Ah, a veces parece como si no fueran delincuentes - Me reí un poco - Es muy tierno que se preocupen -