Hola sé que me demoré un chingo pero es que el colegio está de mamon mandando tareas de la nada que ni siquiera aportan algo a mis notas en general pero ahí está mi madre de jodida creyendo que será mi nota final. En fin son cosas que a ustedes no les interesa xd.

Ahora si ¡comencemos :D!

Narra el Freddy:

Empecé a acomodar mis cosas en una habitación que estaba completamente vacía, las paredes eran blancas, el suelo era de madera y había una venta con una vista que daba directamente hacía la calle. La habitación tenía algo de polvo pero yo no estaba en posición de quejarme, él me ofreció un lugar donde quedarme y yo no era ningún malagradecido.

Comencé a estornudar debido al polvo así que decidí bajar al segundo piso y preguntar donde había una escoba y algunas otras cosas para poder limpiar, bueno tampoco es como que él me estuviese obligando a limpiar, yo me ofrecí, además me gusta limpiar. Iba bajando las escaleras y decidí llamarlo.

- ¿Deuz? - 

Nada, sin respuesta. Volví a llamar y otra vez lo mismo. Me preguntaba donde podría estar, me dediqué a registrar la casa buscándolo. Recorrí la propiedad de arriba a bajo pero no lo encontré, me dirigí a la última habitación que me faltaba por registrar pero al intentar abrirla descubrí que la puerta estaba cerrada ¿Por qué necesitaba proteger con cerrojo una puerta? ¿Había algo tras esa puerta que yo no debía de ver? ¿Me estaría ocultando algo? De pronto sentí un portazo desde el piso inferior. Me sobresalté y mi pulso se aceleró.

- Freddy, ya volví. Compré algo de comida ¿donde estás? -

Me alejé de la puerta lentamente, respiré hondo tratando de calmarme y respondí con un "Ya voy". Bajé despacio las escaleras dispuesto a preguntar por la puerta cerrado cuando lo pensé mejor. Él era el dueño de esta casa y yo estaba irrumpiendo en su privacidad, no me pareció correcto preguntar por temas que no me deberían interesar. Traté de relajarme quizá solo tenía la puerta cerrada por precaución y ya. Me sentía realmente avergonzado por estar tan paranoico. Me acerqué a él y lo acompañé hacía el comedor. Algo que me sorprendió bastante mientras registraba la casa fue el hecho de que no estuviese decorada ni mucho menos amueblada y aunque sentía que no era un tema de mi incumbencia la curiosidad me ganó y decidí preguntar.

- ¿Por qué está todo tan vacío? - Pregunté.

- Oh no es nada, tranquilo - Respondió un poco nervioso y una sonrisa falsa.

- Si pero ¿por qué? además ¿por qué hay una puerta cerrada arriba? - De pronto su expresión cambió de nerviosismo a una un poco seria.

- ¿Qué hacías husmeando arriba? - Me asusté un poco e inconcientemente retrocedí algo asustado por su tono de voz y su expresión, algo que nunca había visto en él, aunque eso era fácilmente justificable debido a que lo conozco desde hace muy poco tiempo.

- Yo no estaba husmeando - Dije algo asustado y nervioso. De pronto su expresión cambió a una más relajada probablemente se percató de mi muy notorio miedo, bajó la cabeza un poco y habló.

- Mi madre murió hace unos meses; mi familia tiene costumbres un poco supersticiosas por eso quité todos los muebles ya qué tenemos la creencia de que el espíritu se queda en la casa y por eso todo debe de ser renovado, la habitación cerrada era de mi madre. No quise decírtelo porque no quería que pensaras que la casa está embrujada o algo así - se le veía bastante triste.

Mierda, ahora si que me pasé de la raya. Como pude ser tan estúpido era obvio que si no me lo dijo al principio era porque eran temas muy personales y delicados, y todo por creerle a Fred, él no es una mala persona. Debería hacer algo par remediarlo pero...¿Qué?

- No está bien, sabía que eventualmente lo preguntarías pero no pensé que fuera tan pronto ¿en verdad tanto desconfías de mí? - Ay no, ay no. Tiene razón. Piensa en algo, piensa en algo.

Me acerqué lentamente a él, levanté un poco mis brazos, los coloqué alrededor de su cuello, levanté mi cabeza un poco y lo besé, solo un poco fue a penas un roce de labios. Esa técnica me la enseñó Fred: "Si alguna vez llegas a tener pareja, cosa que dudo mucho porque estás tan obsesionado con el oxigenado ese y probablemente él no te dé bola ni aunque seas su última opción... El punto es que si alguna vez llegas a pelearte con tu pareja solo acércate lentamente, lo abrazas, lo besas despacio y le pides perdón casi susurrando; siempre y cuando sea realmente tu culpa. Si no es tu culpa no te pongas a rogar, no vale la pena. Ah si y es muy importante que sea un beso suave, apenas un roce de labios porque si es un beso apasionado pensará que solo lo estás besando para que se calle o en casos extremos deje de llorar, aunque realmente sea así, pero mis consejos nunca te servirán porque te vas a morir solo en un departamento húmedo, cinco deudas y treinta gatos que solo te querrán porque les das de comer" Si, justo así lo dijo. No es el mejor hermano pero a la larga sus consejos sirven. Me alejé un poco ya que sentí que se estaba alargando demasiado, bajé la cabeza un poco y le dije que lo lamentaba; sentí como repentinamente me abrazó y pude jurar que estaba sonriendo a pesar de no poder verlo pude sentirlo muy en mi interior.

Puso sus manos en mi cintura y me besó suavemente. Se me hizo una escena muy romántica pero luego aquel beso se intensificó, no tenía ningún problema con eso; aunque no pensé que mi primer beso con mi primer novio fuera así, no estaba decepcionado para nada pero tampoco era lo que esperaba. Empezó a bajar sus manos lentamente hasta mi trasero. Había visto que Owynn hacía eso algunas veces con Fred y no me pareció tan mal como había pensado aunque molestaba un poco ya que no estaba acostumbrado, me sentía un poco nervioso. Apretó unas cuantas veces y luego bajó hasta mis muslos, volvió a apretar pero esta vez mucho más fuerte. Quise separarme de ese apasionado beso que ya no me parecía tan romántico que digamos, esto ya no me estaba gustando para nada. Bajé mis brazos hasta su pecho y traté de empujarlo para que se separa pero no me hizo caso, apretó más sus labios contra los míos, sentí como mordió mi labio inferior, dolió tanto que quise gritar entonces abrí la boca casi involuntariamente y de inmediato metió su lengua. Sentía que me iba a desmayar por falta de oxígeno, se separó de mí, di una gran bocanada de aire y antes de que pudiese reclamar él volvió a besarme, traté de seguirle el ritmo como pude. Si no podía detenerlo al menos iba a tratar de seguirle el ritmo hasta que se detuviera.

Se separó por un momento y mientras yo trataba de recuperar aire él me miraba sonriente. Quise hablar pero colocó su mano sobre mi boca, se acercó hasta mi cuello y dejó varios besos húmedos. Ya no estaba desesperado ahora estaba asustado y de puro miedo empecé a soltar lágrimas, por más que lo empujaba con todas mis fuerzas no lograba alejarlo lo suficiente. Entonces escuché el timbre sonar varias veces como si la peersona que tocaba estuviese desesperada. Deuz me soltó y con un gruñido fue hacia la puerta bastante enojado. Sentí que por fin respiraba; pusé mis manos sobre mi pecho para sentir mi corazón, latía fuertemente y las lágrimas recorrían mis mejillas como cascadas que terminaban manchando mi ropa, junté mis brazos hacia mí abrazándome fuertemente. Me sobresalté al escuchar un portazo y unos cuantos gritos enojados. Estaba recargado sobre la pared así que solo me dejé caer lentamente hasta quedar sentado en el suelo, junté mis piernas hacia mí y las abracé; ahora solo quería llorar hasta quedarme dormido.

...--...--...

(creo que nesecito un separador :v)

Narra Fred:

¿Alguna vez han ido al zoológico? ¿No? Pues que pena ¿Alguna vez han visto un koala ya sea en una imagen o por experiencia propia? ¿Tampoco? Pues búsquenlo en Google ¿Ya viste al koala? ¿Viste que para dormir se abrazan a las ramas de los árboles o a los árboles mismos? ¿Si? Bueno esa era exactamente la posición en la que me encontraba abrazando a Gold, como un koala. Después de haber llorado hasta que se me acabaron las lágrimas involuntariamente lo abracé como si yo fuese un koala y él el maldito árbol, para suerte mía no dijo nada y nos quedamos así. De hecho me recordaba mucho a ala vez en la que nos quedamos encerrados en el casillero de Bonnie, estabamos en una posición parecida y estaba igual de frío o quizá no tanto. Ahora que podía verlo más de cerca me daba cuenta de que su cabello es más claro que el de Golden, aunque Freddy ya lo había notado antes, supongo que tengo mala visión. Estaba a punto de cometer la estupidés de acariciar su cabelo hasta que mi mente reaccionó. Me separé abruptamente de él y lo alejé con mis manos suavemente por si se le ocurría volver a abrazarme.

- ¿Qué sucede? - preguntó con un tono tan calmado que hasta a mí me hacía preguntarme lo mismo.

- Creo que debemos volver - dije un tanto nervioso.

- Bueno - respondió otra vez con ese tono calmado.

Se levantó, se sacudió la ropa y luego me tendió una mano para que yo tambien pudiese levantarme. Tomé su mano y ese fue el momento preciso en donde me arrepentí de tomar su mano. Quiero creer que no midió su fuerza y que no lo hizo a propósito, en verdad quiero creer. Me jaló tan fuerte que logró leventarme de un solo tirón y no solo eso, debidó a la fuerza además de pararme me fuí directo hacia él, quise poner mis brazos frente a mí para poder amortiguar mi el golpe contra lo que sea pero reaccioné muy tarde. De no ser por la notoria diferencia de altura ya me hubiera contra su perfecta cara y muy probablemente lo hubiese besado de casualidad.

Estos son los momentos en los que agradezco ser más bajo que la altura promedio... y luego de eso llegan los momentos en los que odio ser más bajo que la altura promedio ¿Por qué? Bueno quizá porque ahora estaba recostado sobre su pecho, no es como que no hubiese estabo encerrado con él en un espacio bastante reducido, no es como que no se hubiese sacrificado por mí, no es como que no hubiese dormido a su lado por casi 30 minutos y tampoco es como que no nos estuviesemos abrazando hace solo 2 minutos. La cercanía no me molestaba pero hacía que me sonrojara bastante. Puse mis manos sobre su pecho y lo alejé lo más que pude.

- Oh perdón, a veces no mido mi propia fuerza - dijo rascandose la nuca con una sonrisa avergonzada.

- Esta bien, s-solo vámonos - dije volteando la vista esperando que no notara mi sonrojo.

Se acercó a mí y caminamos de regreso a mi casa, durante el trayecto no cruzamos palabra alguna. El silencio empezaba a hacerse bastante incómodo y al parecer Gold lo notó ya que quiso empezar una conversación.

- Oye quería disculparme por lo del parque y... -

- Hey, está bien. Solo olvidemos el tema ¿Te parece? -

- Eh si. Está bien -

- Supongo que te irás a casa ¿Verdad? -

- Si quieres puedo quedarme todo el día contigo -

- Estaré muy bien sin ti. Te lo aseguro -

- ¿Oh, en serio? Puedo hacerte compañía -

- ¿Solo eso? - Dije acercándome hacia él con un tono coqueto. Ya ni siquiera sabía que estaba haciendo.

 - Tambien podría hacer otras cosas si tú quieres - Dijo mirandome fijamente a los ojos. Me sentía un poco mal por saber que sentía algo por mí y yo solo estaba utilizandolo para beneficio propio.

- ¿En serio? - Me acerqué tanto que hasta parecía que nos ibamos a besar

- Si... - Se acercó peligrosamente a mis labios.

- Qué bien porque necesito que alguien me ayude a limpiar - Dije sonriente. Dandole unas cuantas palmaditas en el hombro.

:3

Sinceramente ya no sé que estoy haciendo con mi vida. estoy pasando por mi segunda crisis de bloqueo mental porque sinceramente esta mierda no merece llamarse capítulo pero pues no quiero que piensen que abandoné la historia. Esta del asco pero no la voy a abandonar. Me sentiría muy mal si lo hiciera. En fin comenten y voten aunque admito que esta cosa no merece ni ser leído pero les prometo que cuando se me pase mi bloqueo mental trataré de actualizar y ver si puedo mejorar esta cosa.

Algún día haré la portada :v

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