Me diste esperanzas
"A ti, hermosa villana...
Hoy llegué a clases más feliz que nunca. Hablé con Lila y le conté todo lo que ocurrió ayer.
Chilló de emoción, todo París la escuchó.
Te vi alejada mirando como ella se lanzaba a abrazarme y gritarme miles de felicitaciones que no entendí para nada, pues estaban en Italiano.
Querida villana, nos miraste con una ceja alzada, como averiguando que pasaba entre nosotros.
No te confundas mi hermosa antagonista. Mi corazón solo late como un loco cuando estoy a tu lado. Entre Lila y yo no hay nada, es solo una amiga que me da concejos sobre como enamorarte. Su mente está junto a un amor imposible ante la sociedad, y la mía contigo.
Yo sería incapaz de serte infiel, aunque aún no estemos juntos, yo soy solo tuyo. Cada molécula de mi cuerpo reacciona ante tu dulce aroma, tu sonrisa ladina, tu cabello al viento, la manera altiva que tienes de dar a conocer tus puntos, y esa fuerza interior que tienes para afrontar todas las desventuras que ha tenido tu vida.
Oh amor de mi vida, si solo pudiera dejar mi cobardía, acercarme a ti, poder mostrarte todas estas palabras que cada día redacto para describir como mis ojos te ven, hablarte con la confianza con la que Adrien le habla a Marinette, dedicarte cada puesta de sol como lo hace Alí con Lila, disfrutar de cada pequeño momento a tu lado así como Ivan y Mylene lo hacen, poder tomar tu mano sin importar lo que diga el mundo, tal y como Juleka y Rose suelen actuar a diario, incluso me gustaría que me miraras tan desafiante como se miran Alix y Kim.
Los envidió tanto.
Envidió el hecho de que ellos puedan expresar su amor con tanta facilidad. Hasta hace poco creí que jamás lograría llamar tu atención.
Pero ayer... Ayer fue mágico.
Solo necesité tus sonrisa y aquel beso en la mejilla para reafirmar mi esperanza. Tener el doble de fuerza y envalentonarme por tu amor.
Esto recién empieza pequeña mielsita, te aseguro que lucharé hasta que tu corazón, tu mente y todo tu ser, me ame tanto como yo lo hago contigo.
Seguiré cada paso que me den para conseguir tu amor, leeré cada novela de romance que exista para mejorar mis palabras, me armaré de valentía para hablarte, y conseguiré que tus labios y los mios formen el más hermoso de los lienzos que podría pintar.
Te amo Chloe... Y lo voy a demostrar.
Con amor, y eterna devoción,
Tu esperanzado artista.
Nathaniel Kurtzberg".
El joven guardó aquella carta en su bolso, y suspiró con una sonrisa boba en su rostro, mientras caminaba directo a la cafetería del instituto.
— ¡Nath! ¡Esperame pelirrojo antisocial!—. El joven rodó los ojos de manera divertida ante el apodo que aquella adolescente castaña le había designado. Esperó hasta que ésta llegara y caminó a su lado.
— Digame castaña medio loca—. Ahora fue el turno de la chica de reír, y es que así era su amistad. Por más que muchos pensarán que ellos eran algo más, ninguno de los dos podrían mirarse de otra manera, eran como hermanos.
— Hace un rato Chloe estaba celosa ~...—. Canturreo cerca del chico, a lo que Nathaniel la miró confundido y algo sonrojado. — Vamos Nath, ¿enserio no lo notaste?, ¡me mataba con la mirada!—.
— E-estas loca mujer... A mi Chloe me ignora por completo —. Término hablando con un suspiro, a lo que la italiana rodó los ojos.
— Dos cosas... La primera, Chloe ignora casi todo en este universo. Es una chica indiferente, y algo fría, pero de buen corazón... Y dos, ella si nos miró raro, podría apostar a que le caes bien —. El pelirrojo sonrió ante la idea de que la rubia tuviera una buena imagen de el, eso le facilitaría un poco más las cosas.
— Lila, quiero que me ayudes a conquistarla. Quiero que Chloe de fije en mi, y me ame por lo menos la mitad de lo que yo la amo —. Ambos chicos pararon el seco cuando el pelirrojo dijo aquellas palabras, pero cuando la castaña iba a responder, una voz a sus espaldas interrumpió sus palabras.
— No creo que eso valla a ser posible. No es por desearte mala suerte Nathaniel, pero Chloe se cerró la puerta ante el amor hace mucho... Ese es un tema delicado para ella, y no creo que tu puedas hacerla cambiar de opinión —. El pelirrojo frunció el ceño de inmediato al reconocer al poseedor de esa voz.
— Adrien, a ti no te importa lo que yo haga para conquistar a Chloe, y yo sé que puedo sanar cualquier herida antes causada. Les demostraré a ti y a todos, que mi amor es sincero, y lograre conquistar su corazón —. El Oji turquesa bufó, y salio rápidamente, seguido del la joven de largo cabello castaño.
Lo que ninguno de los tres notó, ni siquiera Adrien, fue que una llamada del teléfono del rubio, no había sido cancelada, y la persona al otro lado de la linea, había oído todo
— Tengo que volver a París... Ahora —. Susurró aquella persona, antes de cortar la llamada.
Muchas gracias a las personas que han votado en esta historia, enserio se los agradezco y espero que esto les guste.
Se despide, este intento de escritora.
Tanny.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top