Capítulo 26: Asesino de los Cien Hombres.
Decir que esto fue malo probablemente sería un eufemismo, ¿no?
Apenas me queda energía o concentración. Y ahora tengo que enfrentarme a los caballeros de Baldur que, si mal no recuerdo (no confío en mi memoria) correctamente, están muy por encima del hueco promedio en términos de dificultad con la armadura y la técnica adecuadas.
Luchar contra enemigos con habilidad real es mi mayor debilidad. Gerald me señaló este hecho mientras entrenábamos.
(Escena retrospectiva)
*Golpear*
''¡Ay, mierda! ¿¡Cómo diablos te las arreglas para esquivarme cada maldita vez!?'
Estaba tirado en el suelo después de la enésima vez que perdí con Gerald mientras entrenaba. Para mí, el hombre parecía un maestro espadachín o algo así. Ser capaz de esquivar fácilmente y bloquear la mayoría de mis ataques con facilidad. A pesar de que mis ataques no deberían ser muy diferentes, todavía estaba siendo fuertemente reprimido.
Ayudándome a levantarme, arrojó luz sobre mi situación.
"En realidad, es bastante simple, eres demasiado predecible en tu manejo de la espada, a diferencia de ti".
"¿Qué quieres decir con predecible?"
'' Verás, me atacas como si fuera un hueco sin sentido. No esperas que responda inteligentemente a tus ataques. Solo esperas lo esperado pero nunca lo inesperado. Todo lo que se necesita es una finta para atraparte con la guardia baja. Para ser honesto, peleas como un hueco".
...
Así que la elección razonable sería retroceder aquí.
Pero, ¿cuándo fui razonable?
Si lo fuera, no habría intentado desafiar al demonio del asilo.
Y no llegué aquí por acobardarme ante un desafío, ¿verdad?
< ¡ Has recibido la misión { Rodeado } ! >
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<Rodeado>
Descripción: Has llamado la atención de los huecos que habitan en la Parroquia de los No Muertos. Ahora estás exhausto y rodeado pero no inclinas la cabeza ante lo insuperable. Demuestra tu determinación.
Derrota a todos los Hollows que habitan en la parroquia sin descansar en una hoguera.
Premio:
{Título: Asesino de 100 hombres}
{5 humanidad}
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Ahora estás hablando mi idioma.
Tomé algunos tragos de mi estus y me puse de pie. Luego rugió en voz alta para anunciar mi presencia y el hecho de que me niego a huir.
¡Estoy aquí y soy débil! Venid a por mí, bastardos huecos.
Mi único arte marcial de combate con huecos locos se comporta de manera bastante única, diría yo. En lugar de otras artes marciales que se basan en formas, diligencia y paciencia. Mientras que Mad Hollow Combat se basa en dejar que tu cuerpo se suelte por completo. Correr por instinto sin obstáculos.
Y ahora, con el escenario listo mientras los actores dibujan la escena, más de una docena de caballeros Baldur y unas pocas docenas de soldados huecos y huecos. Allí estaba parado frente a ellos un hombre, herido y exhausto pero de pie, no obstante, con la sonrisa en su rostro inquebrantable.
Lento pero seguro se estaba escribiendo un cuento.
Invoqué una maza en una mano y una espada corta en la otra.
Era hora de soltar a la bestia que había estado reteniendo durante un mes en Firelink.
Varios caballeros cargaron contra mí con los escudos en alto y las espadas en alto. Corrí hacia el primero con un estoque y un escudo y le lancé mi espada corta a la cara, que bloqueó con su escudo. Utilicé esa abertura para golpear mi estrella de la mañana en su cintura desprotegida, haciendo un repugnante chapoteo y enviando al caballero hacia atrás.
Confiando en mis instintos, salté usando el salto de D'man para evitar por poco un corte dirigido a mis piernas por otro caballero Baldur. Utilicé mi altura de salto actual para darle una patada giratoria en la cabeza y hacerlo caer por las escaleras.
Cuando aterricé, una espada atravesó mi abdomen, pero simplemente agarré la muñeca que sostenía la espada y la aplasté usando más poder del razonable y arranqué la espada de mi abdomen que usé para atravesar al enemigo que infligió la herida.
Me agaché bajo otro corte, pero no logré esquivar la puñalada hacia mi pantorrilla mientras estaba rodeado. Torcí mi cuerpo y rompí las rodillas del que me cortó con mi maza y le di una patada al que apuñaló mi pantorrilla.
Esquivaba de izquierda a derecha mientras hacía todo el daño que podía, pero estar rodeado no me estaba haciendo ningún favor. Y antes de que pudiera racionalizarlo, se formó un plan en mi cabeza y se ejecutó. Invoqué una bomba incendiaria negra y la arrojé a los pies del caballero Baldur frente a mí.
Sí, acabo de lanzar una granada de fuego a un enemigo a un metro de mí. Era un plan de acuerdo, solo que no era bueno.
Fui golpeado por la explosión pero ellos fueron golpeados más fuerte. Salí corriendo del cerco y cargué contra el hueco más cercano a mí, luego salté, le di un rodillazo volador al pobre soldado y le aplasté la cabeza cubierta con un casco. Sin permitir que mi momento se desvaneciera, volví a invocar la cadena que usé en el jabalí y la até al caballero Baldur detrás del soldado al que oculté y tiré con fuerza.
Ambos fuimos atraídos el uno hacia el otro. Antes de que el caballero pudiera salir del susto, lo agarré del cuello y lo volteé. Mis pies tocaron el suelo cuando sus pies lo abandonaron, luego usé el caballero aerotransportado como proyectil, gracias a que lo lancé tuvo un resultado aún mejor de lo que esperaba. Lanzando completamente el cerco en desorden.
Usé el caos para tragar y estus y luego clavé una espada de repuesto en un soldado que estaba demasiado cerca para que me gustara. Pero mientras lo hacía, un caballero casi apuñala mi ojo, afortunadamente agarré su mano y golpeé su abdomen con mi rodilla.
Ahora la horda parecía mucho más manejable. El caos que sembré estaba trabajando a mi favor, pero parecía que a lo que sea que me envió al mundo realmente no le gustaban mis probabilidades actuales.
Porque tan pronto como tuve espacio para respirar, de repente los huecos fueron envueltos por un aura azulada y entraron en un frenesí.
''Fuckkkkiiiiiinnnngggg Channnelerrrrrrr!!!!!''
Ahora los huecos estaban atacando con un frenesí que nunca antes había visto y para agregar a eso, el maldito canalizador piss baby trajo a su manada de unas pocas docenas de niños con carne seca.
Con cada movimiento mío, al menos me arañaba. Me hacían varios hoyos pero seguí peleando con fervor, peleando fuego con fuego, peleando loco con más loco.
En algún momento, solo había recurrido a esquivar ataques que eran fatales o debilitantes. Giré alrededor del machete de mi Gran Demonio como si fuera un maldito granjero y mi guadaña fuera el machete y los huecos fueran las malas hierbas.
Correr con humo era un eufemismo. El motor estaba en llamas, el coche estaba en llamas. todo el maldito mundo estaba en llamas. Lo único que mantenía unido el maldito motor era una cinta adhesiva de mierda colocada allí hace meses.
Los huecos estaban disminuyendo y también mi fuerza.
Joder, ni siquiera sabía si me quedé sin estus o no. Tenía tanta adrenalina corriendo por mis venas que debería ser físicamente imposible.
Estaba corriendo por completo instinto y estus.
Pero lo que no noté fue el aura azul tenue que me cubría y que se hizo más y más visible cuanto más dañado estaba.
Mis almas estaban aumentando más de lo que deberían tener considerando a mis enemigos.
Mi cuerpo se movía de formas que no podía comprender.
Sentí la emoción recorrer mi cuerpo como un millón de amperios de corriente mientras bailaba alrededor de la muerte mientras la enfrentaba.
Euforia.
Mi mano entró en el estómago de un caballero Baldur y le arrancó los intestinos antes de usarlos para atar a un soldado y usarlo como mayal.
Hacha, espada, ladrillo, mesa, silla, órganos, gente, cualquier cosa y todo lo que podía usar, lo usaba.
/En este momento, solo necesitaba matar todo lo que tenía delante./
/No importa qué./
Y por fin, me paré frente al canalizador. Mi cuerpo se rompió más allá de lo imaginable, y estus se acabó hace mucho tiempo. Pero justo cuando estaba a punto de terminar el trabajo escuché pasos.
Pasos pesados.
En el momento en que sentí el peligro, salté hacia un lado cuando una maza gigante aplastó el suelo en el que me paré segundos antes de los escombros.
El caballero Berenike se mostró.
Con aproximadamente 1,8 veces mi tamaño y completamente vestido con una armadura de metal pesado, el gigante frente a mí era ciertamente una vista intimidante.
Sin embargo, no para mí, este gran lug no era lo suficientemente rápido como para representar una amenaza suficiente para mí gracias a su armadura que probablemente pesaba más que yo. Pero era esa misma armadura la que me dificultaba el trabajo. No pude perforar su defensa de manera efectiva debido a su pesada armadura.
Me apresuré hacia él mientras él balanceaba su pesada maza hacia mí, la cual esquivé rápidamente. Y justo cuando estaba balanceando mi espada de caballero negro en esta mano para cortarla en la muñeca, de repente sentí una sensación de peligro, pero no logré evadirlo a tiempo y, como resultado, fui golpeado en el costado por un azul. tornillo.
Sintiendo una ola de dolor abrasador e impacto en mi costado, salí volando a unos pocos metros de distancia. /Maldito canalizador/, olvidé su habilidad para usar el alma como se llame. Hombre, si no hubiera un guerrero revestido de acero de 9 pies disparando hacia mí en este momento, empujaría mi pie tan adentro del culo del canalizador que mis dedos le harían cosquillas en el cerebro.
No tengo idea de cómo estoy vivo o de que tengo el aura de piedra de lágrima azul a mi alrededor. Vi algunas piezas de lo que con suerte asumí que eran órganos misceláneos no esenciales expulsados de mi cuerpo cuando golpeó el hechizo. Eso me puso en un cronómetro, terminar la pelea y llegar a una hoguera o desmoronarme como un bebé perdedor sucumbiendo a la mera pérdida de sangre.
{Golpe del hombre muerto: Dash}!
Lancé una ráfaga explosiva de velocidad con todo mi poder hacia el caballero Berenike que se acercaba a mí. Y justo cuando movió su maza para interceptarme, me levanté de un salto y convoqué una mesa debajo de mí como punto de apoyo para ganar un poco más de tiempo de aire e impulso.
*Golpe*
Mi rodilla hizo contacto con la cara expuesta del caballero Berenike y soltó un repugnante sonido de crujido de ambas partes. Sin embargo, no perdí el impulso cuando agarré sus hombros y me lancé hacia adelante dándole un cabezazo. Y justo cuando la maza estaba a punto de hacer contacto con mis costillas e invertir su orientación, invoqué una espada corta y la clavé en la garganta desprotegida del pesado caballero.
Ni siquiera dejé que su cadáver cayera al suelo antes de guardarlo en mi inventario.
Ahora todo lo que quedaba era el cobarde cobarde que empuñaba el tridente.
Dejó escapar otro rayo de luz azul, pero esta vez estaba preparado, sabía de sus capacidades de búsqueda, así que saqué un cadáver hueco y lo lancé al hechizo, interceptándolo.
Antes de que el bastardo pudiera siquiera pensar en lanzar otro hechizo, me lancé hacia él y golpeé su rostro con tal ferocidad que voló unos pocos metros sólidos a pesar de que era 1.5 veces más grande que yo. Perseguí su cuerpo volador y cuando golpeó el suelo le pisé la cabeza con tanta fuerza que mi tibia me desgarró la rótula, pero mi pie también atravesó su cabeza, así que valió la pena.
Pero ahora estoy rodeado por los cadáveres de alrededor de un centenar de huecos, y mi cuerpo se parece más a un trapo ensangrentado con agujeros que a un humanoide. Lo único que me permitía mantener mi forma era el aura azul que de alguna manera me rodeaba.
Con cada paso requiriendo un tremendo esfuerzo y fuerza de voluntad para no irme a dormir (ni siquiera podía sentir la mayor parte del dolor en este punto con lo abusados que estaban mis nervios durante la batalla) y de alguna manera en un borrón, logré llegar a la iglesia abandonada y yo mismo bajando las escaleras como un muñeco de trapo.
Lo último que vi en mi visión antes de desmayarme fue...
[HOGUERA ENCENDIDA]
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