Yoongi se preguntaba algo, ¿por qué había comprado aquello? Hace dos días había visto algo que le había llamado mucho la atención, unas pulseras de color amarillo, pero tenían distintas figuras como dijes, la primera era de una luna, y la segunda un sol.

Yoongi las miraba detenidamente, no sabía porque pero al verlas sintió la necesidad de comprarlas y lo había hecho, ahora que las tenía en sus manos se preguntaba si era buena idea regalarle una al alfa.

El pálido había logrado pedirle a Jimin que fuera a su casa en la tarde, le había mentido un poco, pues le dijo la excusa de que necesitaba que le explicará un problema de física el cual no comprendía, y claro el alfa estaba consciente de que eso era una total mentira, pues sabía que a Yoongi nunca le fallaban los problemas de física.

- ¿Debería dársela? -Yoongi se pregunto así mismo mientras aún miraba las pulseras en sus manos-. Tal vez no es tan buena idea...

El sonido de la puerta hizo que saliera de sus pensamientos, salio de su habitación dejando ambas pulseras encima de su cama, se encamino hacía la puerta para así poder abrirla, no necesitaba saber de quien se trataba, porque ya lo sabía, al abrir la puerta se encontró con el alfa que le dedico una media sonrisa, Jimin miro con detenimiento a Yoongi, su cabello ya había crecido un poco y lograba tapar un poco sus hermosos ojos rasgados.

- Yoonie...

- Pasa Jimin.

El alfa obedeció y entro a la casa, ambos fueron directo a la habitación del pálido, Jimin estaba muy feliz pues Yoongi lo había invitado y más importante ¡le había pedido ayuda! Pero Yoongi no estaba tan contento, se sentía nervioso, y tal vez eso era demasiado, no podía creer que había invitado al alfa y menos podía creer que había comprado prácticamente un accesorio de pareja que quería compartir con Jimin, pero que a la vez no quería, ni siquiera él podía comprenderse del todo y eso le molestaba.

- ¿Cuál es el problema del que tienes dudas, omega?

Jimin hablo dejando su mochila en el piso de la habitación de Yoongi, el omega se acerco a la cama y miro las pulseras, las agarro rápido y oculto sus manos detrás de la espalda.

- En realidad... no es eso a lo que quería que vinieras.

Se tenía que dar el valor suficiente a él mismo, pues no quería que algo saliera mal, aunque claro sabía que Jimin no le haría daño, pero sentía aún un poco de miedo, podría ser que ese alfa rechazará su obsequio y se fuera de allí de inmediato, aunque claro era demasiada paranoia para ser verdad, trago grueso.

- ¿A no? Entonces ¿qué es lo que en verdad necesitas?

- Y-yo -respiro profundo-, vi algo que me gusto... y p-pensé en t-ti -Jimin se vio algo sorprendido, pero su corazón había hecho un vuelco al escuchar eso-. Y quería d-d-dártelo.

Yoongi dejo de ocultar sus manos detrás de su espalda y le mostró las dos pulseras, Jimin no pudo evitar que su sonrisa se dibujará en sus labios, el omega cerro los ojos con fuerza, esperaba lo peor, algún insulto, algún rechazo, lo que fuera que podría suceder, pero en cambio sintió como Jimin tomaba una de las pulseras, abrió lentamente los ojos y vio como el alfa se colocaba la pulsera y sonreía al verla.

Jimin paso su mirada al omega, y agarro la otra pulsera, con delicadeza agarro la mano izquierda del omega y coloco la pulsera del dije de luna en la muñeca del omega, quien solo miraba las acciones de Jimin.

- Esto es lo más lindo que me han dado -comento Jimin mirando a su predestinado-, gracias Yoonie.

- N-no agradezcas, solo sentí que te debía un obsequio.

- No me debes ningún obsequio, tú eres el mejor regalo que me ha dado la vida, no puedo pedir nada más -Jimin acerco al omega a su pecho para abrazarlo, no dejaba de mirar al omega, y Yoongi al sentirse nervioso aparto la mirada.

- G-gracias por no rechazarlo -dijo Yoongi casi en un susurro.

- Gracias a ti por no rechazar mi cercanía.