El omega se encontraba en el aula de clases, tenía mucho sueño, no había dormido para nada bien, la fiesta de sus vecinos había durado hasta las tres de la mañana y él a esa hora apenas y había conciliado su preciado sueño, de verdad que sus vecinos eran demasiado molestos.

Sentía sus parpados caerse, por décima vez en el día soltaba un bostezo.

- Buenos días Yoonie -la voz de Jimin lo saco de sus pensamientos.

El alfa al ver al omega se percato de las ojeras y de los ojos cansados del pálido.

- No son buenos días para mí -comento el omega-, me estoy muriendo de sueño.

Su voz había salido muy somnolienta, Jimin se sentó a su lado, lo único bueno era que aún el profesor no había llegado y como era costumbre de aquel profesor llegar media hora tarde, tenía tiempo para poder estar con su omega.

- ¿Por qué no duermes un rato? Yo te cuidaré.

- ¿Estás loco? No puedo hacer eso, si el profesor Lee me ve durmiendo me sacará de la clase y me mandará a dirección y no quiero tener problemas.

- No pasará eso, sabes que ese profesor llega tarde, deberías dormir.

Yoongi soltó un suspiro, en verdad que quería hacerlo, pero sabía que habría consecuencias si es que no se despertaba para atender la clase, vio como el alfa se retiraba el suéter que traía puesto, Yoongi no comprendía y meno cuando Jimin doblo perfectamente su suéter y lo coloco en el pupitre de Yoongi.

- Anda, duerme un rato, prometo cuidarte...

Aún el omega estaba dudando. Jimin se había percatado de eso, así que acerco más el suéter a Yoongi.

- No te haré nada Yoonie, por favor confía en mí.

El omega lo miro y después de unos segundos paso su mirada al suéter doblado que se encontraba frente a él, así que soltó un suspiro, podía confiar en él tenía que tratar de hacerlo, aunque claro era muy difícil después de todo lo que había pasado desde un principio. 

Se acomodo coloco sus brazos cruzados debajo del suéter de Jimin para recargarlos en la mesa de su pupitre y luego recostó su cabeza del lado derecho, observando al alfa que le sonreía, Yoongi poco a poco cerro los ojos para disfrutar de ese descanso.

Jimin se quedo observando al omega, su lobo le decía que sería una buena idea darle caricias en la cabeza para que logrará relajarse más, Jimin había levantado la mano, después de todo no era tan mala idea, así que la acerco a la cabeza del omega y comenzó a darle leves caricias, Yoongi al principio se removió un poco, pero después suspiro entre sueños y sonrió levemente disfrutando de aquella caricias, era como sí su madre estuviera allí arrullandolo para que durmiera, pero claro, no era su madre, era Park Jimin quien hacía aquella acción.

- Eres muy tierno dormido Yoonie... 

El alfa disfrutaba de la suavidad de los cabellos de Min Yoongi, era una hermosa sensación, sintió una leve corriente que lo recorría, sabía que eso era señal de que eran pareja destinada, sonrió con tristeza, ¿habrá alguna posibilidad de que Yoongi lo cambiará? Posiblemente, pero tenía que disfrutar de esos pequeños momentos, se sentía triste al saber que seguramente su omega lo rechazaría sí intentase cortejarlo.

- Lo lamento Yoonie.

- Ya... deja de disculparte y sigue, me gustan tus caricias -hablo un Min Yoongi muy adormilado.

Y esas palabras había hecho al alfa sentir como su corazón daba un vuelco, no esperaba eso, sintio sus mejillas arder, seguramente estaba sonrojado, pero claro ¿quién no lo estaría por aquellas palabras? Se sentían tan bien, era como sí Yoongi le hubiera dicho que aceptaba ser cortejado por él.