Estar bajo las sábanas con Violet, con su cabeza en mi pecho, nuestros corazones latiendo al mismo ritmo y sintiendo tanto amor y felicidad, era lo que más anhelaba, ya extrañaba esto. 

— Derek ¿te puedo preguntar algo? 

— ¿Qué ocurre? — pregunté acariciando su brazo.

— Mientras no estuve aquí ¿estuviste con alguien más? 

— ¿Estar en qué sentido?

— Ya sabes a que me refiero — no pude evitar reír, su expresión de celos me daba bastante ternura. 

— No, no estuve con nadie más, me enfoqué totalmente en mí y en mejorar como persona para ser el hombre que mereces. ¿Y tú? ¿Estuviste con alguien más en Los Ángeles? — Violet no respondió, simplemente contuvo su risa —. Violet Coleman ¡si estuviste con alguien! — finalmente soltó la carcajada.

— No estuve con alguien, estuve con algunos.

— ¡Eso es aún peor! 

— ¡Oye! Una mujer tiene necesidades.

— ¿Ah sí? — comencé a hacerle cosquillas para que se riera más.

— ¡Derek! ¡Basta! — dijo entre risas, me detuve quedando justo sobre su cuerpo y mirándola directamente a los ojos —. Ningún hombre se compara a ti, Derek Hale — sonreí y besé su frente.

— Tengo que confesarte algo. Tal vez no estuve con nadie cuando estabas en Los Ángeles, pero antes de que te fueras, cuando tú y yo terminamos nuestra relación, me acosté con Braeden — me aterrorizaba decírselo pero no podía mentirle, me prometí a mí mismo nunca volverle a ocultar algo. 

— Gracias por decírmelo, aunque realmente no debías, después de todo ya no estábamos juntos cuando lo hiciste, estabas en todo tu derecho. 

— La verdad es que me arrepiento de haberlo hecho, si tan sólo hubiera sabido las verdaderas intenciones de Braeden, jugó con nosotros todo este tiempo. 

— No fue tu culpa. Eres un hombre maravilloso Derek, simplemente has tenido mala suerte con las mujeres que amas. 

— Que hayas llegado a mi vida sin duda es la mejor suerte que he tenido — Violet sonrió y me besó profundamente. Estábamos completamente concentrados en nosotros mismos, besándonos sin parar y disfrutando nuestro amor, pero fuimos interrumpidos por el sonido de mi celular —. Es Scott — Violet hizo un puchero.

— ¿Tienes que contestar?

— Debe ser algo urgente — contesté la llamada —. ¿Qué pasa Scott? 

— ¡Derek! ¡No vengas! — gritó, Violet y yo nos miramos asustados. 

— El alfa siempre protegiendo a los suyos, que adorable — dijo Adam.

— Tú deberías estar muerto — dije furioso, Adam rio.

— También Violet debería estar muerta ¿no? La vida sí que da giros inesperados. Braeden y yo tenemos a toda la manada aquí en el edificio ¿por qué no vienes a presenciar la muerte de cada uno de tus amigos? ¿De la única familia que te queda?

— ¡Déjalos en paz! — y colgó, Violet y yo inmediatamente nos levantamos de la cama y nos vestimos, teníamos que apresurarnos antes de que Braeden y Adam les hicieran daño —. Violet, quédate aquí, no sé que diablos estén planeando y no quiero ponerte en peligro.

— No me voy a quedar aquí, iré contigo.

— Por favor, no está en discusión. 

— ¿Enserio crees que te voy a dejar ir solo? ¿Después de todo este tiempo no lo has entendido? Tú y yo somos un equipo, estamos juntos en esto te guste o no — y antes de que pudiera decir algo más salió del departamento decidida a acompañarme. 

Llegamos al edificio y entramos a toda velocidad; y efectivamente la manada estaba ahí, atada en distintos rincones de la habitación. Braeden y Adam estaban en el centro, sonrieron al vernos entrar. 

— Bienvenidos a la masacre. Violet ni se te ocurra sacar la bomba de acónito y verbena que tienes en el bolsillo, matarás a todos si lo haces — dijo Adam mientras Braeden se acercaba lentamente a nosotros. 

— Dame la bomba y tu arma — Braeden extendió la mano frente a Violet, ella negó con la cabeza. 

— ¿Por qué no me la quitas? — Braeden soltó una carcajada.

— ¿Enserio vamos a hacer esto? Ni siquiera ocupo usar mis habilidades de híbrida para quitarte las cosas que traes encima.

— Entonces hazlo.

— Bien, si así lo quieres — antes de que Braeden pudiera tan siquiera tocar a Violet, Violet le clavó en el cuello una jeringa con suficiente verbena y acónito para dejarla inconsciente por un largo rato, Braeden no tardó ni cinco segundos en caer al suelo. 

— ¿Quieres ser el siguiente? — le preguntó Violet a Adam, sonreí por lo bajo, esa es mi chica.

— ¿Crees que una simple jeringa con verbena y acónito podrá vencerme? ¿En especial en noche de luna llena? — nuestras expresiones cambiaron por completo, había olvidado que hoy era noche de luna llena. Scott, Liam, Isaac, Malia, Cora y Peter empezaron a gruñir, yo estaba tratando bastante en contenerme pero la luna no tardaba en estar en su máximo esplendor —. Sabes lo que le pasa a los lobos en luna llena Violet, ahora imagina a un híbrido.

— ¡Enfóquense en sus anclas! — gritó Stiles. 

— ¡Si pierden el control se atacarán entre ustedes hasta matarse, y eso es justo lo que Adam y Braeden quieren! — exclamó Lydia.

— Violet, corre — dije sintiendo mi cuerpo arder.

— ¿Qué? 

— ¡Corre! 

Violet's P.O.V 

Sin pensarlo un segundo corrí, no miré atrás aunque sabía que me estaban persiguiendo. Se habían transformado, debido a la luna llena se habían olvidado completamente de su lado humano y no me quedaba más que correr hasta encontrar un escondite. Pensé en usar la bomba que tenía en mi bolsillo pero lo que menos quería era hacerles daño, así que opté por tomar mi pistola y dispararles para tratar de ahuyentarlos de mí.

Para mi suerte, mi plan había funcionado y logré ahuyentarlos, el único que se quedó frente a mí era Scott. Sus ojos eran completamente rojos, tenía una apariencia que causaba demasiado miedo, era un alfa después de todo.

— Scott, recuerda que este no eres tú, es sólo la luna llena haciendo efecto sobre ti — y entonces no pude hacer nada más al respecto, Scott ya se encontraba sobre mí a punto de morderme, cerré los ojos creyendo que este era mi final hasta que Derek llegó y me lo quitó de encima. 

Me levanté y observé como peleaban entre ellos a muerte, por levantarme muy rápido me mareé; o creí que esa era la razón hasta que sentí la sangre caer de mi cuello. 

Scott había logrado morderme. 

Caí al suelo sintiendo un horrible dolor que se extendió por todo mi cuerpo, Derek ni nadie más hizo algo al respecto, estaban enfocados en su naturaleza de lobos por la luna llena. Antes de cerrar los ojos, Adam se acercó a mí.

— Nos vemos en el otro lado.