⌦ 40 ⌫
***
- Hoy hace buen día, ¿no crees?
- ...
- ¿No crees?
- ...
- ¡Koushi-senpai! .- el nombrado dió un pequeño salto al escuchar esa voz tan chillona y miró a la chica que tenía al lado, la cual hacía un puchero infantil.
- ¿Sí?
- Te he estado hablando todo este rato y no me contestabas .- respondió molesta.
- P-perdón... .- se disculpó algo nervioso.
Vió a la menor inflar las mejillas al saber que no la estaba escuchando y el peligris solo quería apartar la mirada, sin embargo no podía por no faltarle al respeto.
Ella solo lo observó con el ceño fruncido -. ¿Te pasa algo?
- Solo estoy cansado .- sonrió incómodo -. N-no te preocupes .- esta cambió la expresión de molestia y curvó los labios.
- Ah vale, pensaba que era porque no querías estar conmigo.
"¿Cómo te digo que tu deducción es acertada?"
- Si estás cansado, podriamos ir algún lugar tranquilo, ¿no te parece, Koushi-senpai? .- el mayor hizo una pequeña mueca al escuchar por séptima vez al día su nombre por esta chica, pero trató de disimular.
- ¿Qué... Lugar propones? .- preguntó sin estar muy confiado.
- A una cafetería que normalmente vas .- respondió con superioridad. Cambió totalmente la cara al darse cuenta de lo que había dicho y se excusó rápidamente -. ¡No pienses que te estoy siguiendo! Simplemente te vi varias veces entrar en esa cafetería cuando iba camino a mis clases de violín...
- Tranquila. Supongo... Que podemos ir .- fue tomado por su manga de la camiseta y arrastrado por ella.
- ¡Vamos!
Sinceramente Sugawara pensaba que esta chica no era la misma de la que le pidió una cita días atrás.
Ese día parecía una chica tímida y callada, con dificultad de abrirse a otras personas, pero hoy se puede comprobar que es todo lo contrario.
Hasta tiene la cara de llamarlo por su nombre después de intercambiar dos palabras, pero... El peligris no quería hacerla sentir mal y menos sabiendo las experiencias de ser rehazado o con un amor no correspondido.
Suspiró con pesadez y empezó a caminar a paso rápido por la pequeña corrida de la más baja.
***
***
- En pocos minutos os doy vuestros pedidos .- dijo la camarera después de apuntar en su pequeña libreta.
- Gracias .- agradeció el ojimarrón, a lo que la mujer sonrió y se alejó de ellos.
- ¿Seguro que no quieres más que solo bebida? .- se aseguró la más baja.
- No, tranquila. Estoy bien con solo beber algo fresco .- contestó con un gesto de manos dando a entender que no quería nada, a lo que la otra solo se encogió de hombros.
- De acuerdo, como gustes .- miró a otro lado antes de seguir hablando -. ¿Vienes muchas veces aquí?
- Bueno... Normalmente vengo más de una vez cada dos semanas con mis compañeros de Volleyball .- llevó su mano a la nuca un poco incómodo -. ¿Nunca... Has venido aquí?
- Uff, que va. Hoy es la primera vez que vengo, aunque mis amigas me recomendaban mucho que viniese a este local, pero no quería ir sola .- amplió más su sonrisa -. Pero me alegro que venga aquí por primera vez en una cita contigo .- Sugawara hizo una extraña mueca por décima vez en el día pero trató de disimularla con una sonrisa algo forzada.
- Aquí está vuestro pedido .- llegó la mayor con la bandeja y con cuidado distribuir en la mesa la comida.
- ¡Qué rápido el servicio! .- elogió la menor clavando los ojos en su tarta de coco que había pedido.
- Nunca queremos hacer esperar a los clientes .- curvó los labios con amabilidad -. Y esto para ti .- puso delante del chico el vaso de jugo de naranja.
- Gracias.
- Elegiste a una chica muy bonita .- dijo de repente la camarera, haciendo que el contrario abriera los ojos y casi se atragantara con su propio saliva.
- ¿Eh? No, espera. Se equi-.
- ¡Gracias! .- se avanzó la fémina sonriendo de oreja a oreja -. Aún estamos empezando .- le informó.
- Oh, ya veo. Entonces, os deseo buena suerte.
Sugawara parpadeó varias veces sin saber que decir, viendo como la mujer se alejaba de ellos de nuevo para atender a otra mesa y bajó la mirada para ver su zumo.
- ¿Pasa algo, Koushi-senpai? .- el nombrado levantó la mirada al escucharla.
- No... Tranquila.
"Es que perdí el apetito, y mira que ni tenía"
- ¿Te incomodó lo que dije? .- no le llegó ninguna respuesta, solo una expresión algo incómoda por parte del peligris -. Pero, es verdad, ¿no? .- siguió insistiendo -. Hoy estamos empezando.
- Bueno... .- se puso nervioso al sentir su mirada intensa sobre él -. No sabría... Como decir que es...
La menor hinchó los mofletes algo molesta por su respuesta, pero decidió mejor estar callada y no estresarle, a lo que Sugawara agradeció en mente este silencio.
Ambos empezaron a comer y beber lo que pidieron sin decir nada, pasaron los minutos eternos y en ese tiempo el ojimarrón había terminado su jugo de naranja y solo observaba por la ventana.
Sus ojos se abrieron de par en par al ver desde la lejanía un rostro muy conocido para él, de inmediato empezó a sentir su corazón acelerar su pulso algo desesperado y a sentir sus manos sudorosas.
Cierta peli(t/c) se estaba acercando hacia la cafetería y él obviamente no quería que lo viese.
- Eh... Disculpa, voy un momento al baño .- se apresuró a avisar a la más baja -. Ya vuelvo .- se levantó rápidamente de su sitio sin escuchar la respuesta de la contraria y se fue al servicio del local.
Al entrar, se apoyó a la pared tratando de tranquilizar su respiración y nerviosismo.
- ¿Por qué precisamente hoy? .- preguntó en voz alta.
Se acercó al lavamanos para mojar su cara con agua fría y se miró al espejo que tenía al frente. Se mordió el labio inferior al darse cuenta que llevaba varios días sin hablar con ella, cosa que lo estaba matando. Ahí se percató que la echaba de menos conversar con (T/a).
Se secó y fue a la puerta para abrirla un poco y buscar en que mesa se había sentado. Pudo ver que estaba algo alejada de su sitio y se había puesto a leer un libro, aprovechó el momento para analizarla un poco y sonrió con tristeza.
Cerró la puerta con cuidado y se quedó pensando que podría hacer.
- Normalmente cuando se concentra en hacer los deberes o leer no se da cuenta de nada de lo que pasa a su alrededor... .- llevó su mano en el mentón -. Dudo que se de cuenta que estoy aquí, pero tendría que salir de aquí lo antes posible por si acaso .- hizo un gran y largo suspiro -. Bien.
Al fin decidió en abrir la puerta e ir con normalidad a su mesa, donde lo esperaba la menor.
- Perdón por la tardanza .- se disculpó a lo que la otra negó con la cabeza.
- No te preocupes, por ti me espero mil años.
- Eh... Mira, no... No me encuentro muy bien y prefiero ir a casa .- ignoró totalmente el comentario de ella -. Perdón por decirlo tan pronto, no quiero molestarte. Puedo ir a casa y puedes seguir aquí si quieres.
- ¿Huh? Claro que no, yo voy contigo .- de inmediato se levantó de su silla.
- No, de verdad. No quiero molestarte.
- Tranquilo, te encuentras mal. Yo te acompaño a casa.
***
Capítulo editado
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top