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(T/n) bajó enseguida del taxi, sujetando las deportivas del líbero de su equipo y corrió dentro del gran pabellón, no sin antes pagar al conductor y agradecerle por su amabilidad.

Su respiración era agitada y un dolor en el pecho estaba presente a causa de lo desesperada y nerviosa que se sentía en ese momento.

A causa de su prisa, al girar por un pasillo, se chocó contra alguien, lo cual provocó un pequeño estruendo y ambas personas cayeron al suelo sin poder reaccionar a tiempo para evitar perder el equilibrio.

La chica cerró los ojos con fuerza al sentir el impacto acontra el piso, mientras aún llevaba en sus brazos la bolsa deportiva, abrió los ojos lentamente para ver con quien se había chocado y vió delante de ella un chico más alto de pelo negro, al cual estaba soltando algunas palabras por el daño de su trasero.

Este abrió también los ojos a la vez que se sobaba la parte dañada y con el ceño fruncido, dirigió una mirada fulminante a la peli(t/c), haciendo que ella se sintiera por unos segundos intimidada.

En un corto período recordó que la educación era lo importante y el chico se levantó primero, acomodando su cinta de su bolsa deportiva y miró desde arriba a (T/n), quien aún estaba en el suelo.

- ¿E-estás bien? .- preguntó, extendiendo la mano delante de ella con la intención de ayudarla a levantarse con timidez.

- Em... Sí .- respondió ella con un poco de incomodidad al escuchar el tono neutro de él, aceptando la ayuda y sujetarse con la mano de este -. Perdón, fue mi culpa, no tendría que haber corrido .- se disculpó, inclinando un poco la cabeza.

- No pasa nada, t-también debía haber vigilado yo un poco .- la más baja sonrió ligeramente, encogiendo levemente los hombros sin saber más que decir, en ese momento el chico abrió los ojos al reconocer la chaqueta que vestía ella.

Procesó unos segundos y decidió en abrir la boca para hablar, pero este fue interrumpido cuando ella se avanzó.

- Siento haber provocado el pequeño accidente, espero volver a verte en una forma diferente .- dijo con una pequeña carcajada para después seguir su camino a paso rápido, esta vez procurando de que no pasara lo mismo.

El pelinegro la siguió con la mirada mientras leía lo que ponía detrás de su espalda algo confuso.

- ¿Desde cuando Aoba Johsai tiene una mánager? .- murmuró, recordando cuando fueron a la práctica de esa escuela, no había ninguna chica en los partidos.

- ¡Kageyama! .- el nombrado despertó de sus ensimismamientos y volteó la cabeza para ver a uno de sus senpais, esperándolo en la puerta -. ¡Vamos a subir ya en el autocar!

- ¡Ahora voy, Sugawara-senpai! .- respondió y volvió a buscar la silueta de la chica, pero esta ya había desaparecido.

Comprobó si había algún rastro de ella pero sin resultado.

El chico decidió al fin salir para subir al vehículo junto con sus compañeros de equipo y celebrar la victoria de sus primeros dos partidos de Volleyball.

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- ¡Al fin! .- exclamó con alivio la menor, dejándose caer en el banquillo, siendo observada por sus dos entrenadores.

- ¿Cómo es que resultó tan lenta la llegada? .- preguntó el mayor, con los brazos cruzados y su mirada seria de siempre.

(T/n) tragó saliva y dejó el aire que estaba retenido dentro de sus pulmones para así finalmente a hablar.

- Cinco minutos tratando de encontrarlos en el bus, treinta y cinco minutos de vuelta a la escuela, veinte minutos allí porque no me sabía el código de su taquilla y tuve que esperar al conserje que viniera a abrirla, siete minutos en encontrar otro taxi y cuarenta y siete minutos al llegar por la carabana que hay .- se inclinó hacia delante, escondiendo su rostro en sus dos manos y apoyando sus codos en las piernas -. No pude ir más deprisa de lo que tenía planeado y llego aquí y ya habéis empezado el partido .- se reincorporó, observando a los jugadores en la cancha, mirando a un punto fijo con cansancio -. Lo siento.

Ambos entrenadores intercambiaron miradas y suavizaron su expresión hacia la chica para no agobiarla.

- No te preocupes, hiciste lo que pudiste de forma voluntaria .- la tranquilizó el más joven -. Ya nos es suficiente saber que de verdad te gusta estar con nosotros .- le dedicó una pequeña sonrisa a lo que la oji(t/o) correspondió.

- Además, Iwaizumi se le ve más energético ahora que sabe que estás aquí .- comentó el otro, haciendo que ella automáticamente fuera a ver al mencionado con sus mejillas levemente teñidas de color carmesí, pudo pillarlo en el momento que hacía un remate y exclamaba victoriosamente.

Su sonrisa se hizo más notable -. Me alegro serles de ayuda.

El silbato sonó anunciando que el equipo contrario necesitaba una pequeña pausa, a continuación, el equipo de Aoba Johsai se acercaron a los banquillos.

(T/n) no tardó en levantarse e ir a entregarles las cantimploras y las toallas para secar el sudor.

Se sorprendió al notar un tacto cálido en una de sus mejillas y nuevamente se ruborizó ante tal acto tan repentino, volteó la cabeza para ver a su pareja con una pequeña curva en sus labios, al cual fue quien le regaló un beso fugaz.

- Tardaste mucho, ¿sucedió algo? .- preguntó a la chica.

- Simplemente se me complicaron las cosas .- explicó algo avergonzada -. Estaba preocupada por no llegar a tiempo.

- Pero lo hiciste .- confirmó él, acariciando su cabeza de forma cariñosa.

- ¡(T/a)! .- la nombrada buscó quien la estaba llamando, viendo como el líbero se acercaba a ella con preocupación -. ¡Siento haber hecho que fueras a buscar mis deportivas! .- se disculpó, haciendo una reverencia con un gran arrepentiemiento.

Ella solo suspiró con pesadez  y se lo quedó mirando por unos segundos.

- Bueno, ya pasó .- el rapado se recompuso al escuchar la contestación -. No se puede cambiar el pasado, hecho, hecho está. Pero de verdad te suplico que no vuelvas a olvidarte nada más porque a la próxima vez yo no voy a ir, de acuerdo?

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➳ Capítulo editado