-mi señora ¿cuál es la siguiente fase? -preguntó el Warden por radio a Cortana quien ya se aburría de su tiranía.

-aun nos falta encontrar a los Spartans y supervivientes de Infinity... aún tengo que matar a 117.

-¿y porque no solamente iniciamos de una vez con la aniquilación total? -preguntó el Warden aún algo preocupado por lo que 117 pudiera hacer ahora que estaba enojado.

-¿nunca has visto películas de héroes? Siempre, cuando todo parece perdido, el héroe se levanta y salva el día con el poder del guión... bueno, yo soy ese Plot Twist que no ves venir...yo me encargaré de matarlo por mano propia si es necesario.

-pero mi señora, usted es una I.A holográfica, no puede tocar nada.

-mi querido Warden, es lo divertido de empoderar y estudiar a los Foreruners y su tecnología, aprendes mucho de ellos.

-no comprendo.

-logré mover mi mente y cuerpo a una representación física, ahora puedo tocar las cosas como una persona... pero no una persona cualquiera.

A modo de presentación, Cortana agarró un trozo de metal y en cuestión de segundos logró derretirlo por completo.

-ahora solo resta seguir buscando a los tripulantes restantes de la ya destruida Infinity -exclamó Cortana- que las tropas registren la zona del incidente, dejaremos en pausa los ataques a las otras bases por ahora.

-si mi señora -dijo el Warden para cortar comunicación y obedecer las órdenes impuestas.

En el satélite.

Amy y William hablaban... bueno, ella hablaba, sobre sus misiones pasadas mientras B-312 solo oía callado y atento.

Entre tantas historias y anécdotas, Amy habló del entrenamiento cosa que a B-312 no le agradó demasiado pues no tenía muy buenos recuerdos de esa época.

-oye... ¡oye!

-mm?

-te quedaste mirando a la nada, B-312, ¿qué sucede? ¿Porque andas todo el tiempo con casco?

-tengo mis razones.

-como sea, creo que no me interesa entonces. Vere si los Marines necesitan algo -dijo Amelia levantándose- ya que quedan pocos.

Cada día mínimo moría un Marine debido a las heridas o al feroz aterrizaje, o alguna enfermedad. La razón real se desconocía pero lo que sí se sabía a la perfección es que casi toda la tripulación de una nave-crucero-militar del tamaño de dos ciudades había muerto por obra de Cortana.

Una simple I.A había acabado con toda una flota militar dejando al equipo Azul, tres Spartans, Halsey, diez marines y cinco ODSTs.

-hija de perra -murmuraba Halsey para sus adentros, aborreciendo su propia creación.

B-312 llegó con la doctora para ayudarle en lo que fuera como hacia diariamente.

-hace demasiado por mi Spartan, debería descansar.

-eso quería, hasta que me despertaron en medio de otra guerra.

-se trata de órdenes superiores, la ONI sabe de tus excelentes habilidades y ordenaron que...

-ordenaron que me tomaran y evitarán mi muerte para así usarme de nuevo como solían hacerlo.

-¿es insolencia lo que veo en esa oración?

-es inquietud.

-ya veo.

-pues tampoco creo que sea justo, debí morir en la operación Torpedo, debí morir en Reach... pero sigo viviendo para despertar una vez más en agonía y ver más compañeros morir.

-la ONI no lo quiere muerto.

-¿quién quiere muerto a su juguete?

-eso no es lo que...

-lei mi propio expediente, vi lo que opinaban de mi.

El Spartan sacó la carpeta doblada y arrugada de uno de sus bolsillos de armadura, la desdobla con cuidado y la arroja a los pies de Halsey, luego abandona la sala médica improvisada rumbo a la zona de descanso de los Marines para encontrarse nuevamente con Amy y Trevor.

Para Halsey era un misterio el como logró B-312 infiltrarse en la ONI y robar su expediente en el plazo de dos meses que llevaba despierto.

B-312 llegó al campamento de Marines, preguntando por el equipo Azul y más tarde por Clara.

-no esperaba verte por aquí compadre -saludó Trevor lavando algunos vendajes usados por marines que ya habían muerto.

Suena antihigienico, pero no había nada más que hacer.

-William...digo... B-312... ¿vienes a ayudar? -pregunto Amelia recogiendo un par de cajas.

-si, pero, más que nada vine a ver a alguien -respondio Seis entrando.

Siguiendo las palabras de Halsey respecto a los linajes y su presunta hermana, B-312 buscó a la misma marine quien aún seguía con vida, entró a la carpa y caminó hasta encontrarla.

-vaya vaya, buenos días Spartan, su visita matutina sigue sin molestarme -saludó Clara.

-buenos días Marine, ¿se encuentra bien? -respondio Seis sin mucho ánimo.

-si, por supuesto, ¿porque no habría de estarlo? -comentó ella dándose cierto aire de orgullo y rudeza.

-bueno -se sienta junto a ella- los marines mueren cada día, por enfermedades o heridas... quería ver si usted seguía bien.

-tengo el presentimiento de que se preocupa demasiado por mi, teniente.

Volviendo a su actitud indiferente, Seis volteo la mirada hacia otro lado.

-son sólo análisis de campo, nada personal.

Mientras.

John, Kelly, Linda y Fred daban un recorrido por los campos floridos con algo de nostalgia y melancolía. Las flores se movían con el viento y Linda se agachó para verlas más de cerca y tocarlas con su mano descubierta (porque algunas partes de los trajes de interior, bajo las armaduras, estaban desgastandose) y sintió los suaves pétalos de la plantita rozar sus dedos.

-que bella... me impresiona ver todo el ecosistema que ha crecido en este satélite.

-si, más aún con las condiciones del lugar -respondio John acercándose a ella- ¿porque no te llevas una?

-podría marchitarse hasta morir... prefiero que viva feliz aquí...

-a diferencia de nosotros -dijo Fred- a todo esto ¿por qué nadie nos ha encontrado aún?

-no lo sé, deberían haber rastreado la señal de impacto de Infinity, pero no lo hicieron -respondió Kelly.

-¿y si los atacaron? -preguntó Fred- es decir, ¿y si las otras bases, plataformas y cruceros también están bajo ataque?

En ese momento exacto, como si se tratara de un descaro del destino, comenzó la invasión de los Foreruners.

La tranquilidad que se sentía en aquel lugar fue opacada por un portal de magnitudes exageradas que oscureció la iluminación de aquel jardín silvestre.

-¿qué carajos es eso? -exclamó Fred.

-parece una apertura interespacial... un portal... -respondio John analizándolo- de origen Foreruner

-¿no existe un día que no nos pase algo? -gritó Fred desenfundando su pistola.

-equipo Azul, hora de ver que sucede -ordenó John desenfundando su rifle de poca munición.

Pero no avanzaron porque una risa bastante familiar resonó desde el portal y una figura femenina salió de este con orgullo.

-hola John -saludó Cortana- oh tranquilo, no vengo a quitarte mucho tiempo, solo vengo a matar a tus amigos.

-largo de aquí Cortana, ya mataste a millones, ya tienes lo que querías -respondió John apuntándole, luego recapasitó y entendió que no podía darle a un holograma así que bajó su arma... pero John no sabia de esa evolución.

-John... siempre tan impulsivo... déjame arreglar la situación. -dijo Cortana encendiendo sus manos en un aura azul tan caliente que se sentía en las armaduras del equipo Azul- ¡en un mes desde el impacto no pensé en más que en evolucionar mi estado actual a uno superior!

-alguien como que se vio Dragon Ball -rió Fred algo nervioso.

En un abrir y cerrar de ojos, Fred se abalanzó sobre ella tratando de dañarla... sorpresivamente, Cortana agarró a Fred del cuello y lo golpeó en el abdomen aboyando fuertemente la armadura (casi rompiendola) y empujándolo lejos de ahí.

Los demás miembros del equipo vieron incrédulos la escena, más que nada se preguntaban: "¿como podía Cortana agarrar algo sólido... y más aún... como tenía tanta fuerza?"

-¿asustados? No es como si vieran un fantasma -se mofó Cortana.

-que demonios hiciste -gritó Fred adolorido mientras Cortana se le acercaba.

-solo les doy una pequeña muestra de mi nuevo y magnífico poder -informó Cortana muy orgullosa y engreída.

-¡fuego! -ordenó John, a lo que sus compañeros empezaron a dispararle... sin embargo las balas no le hacían nada.

-ay niños -levanta a Fred- ¿no les han enseñado modales?

-Cortana, que hiciste, ¿cómo es que...?

-¿qué logre dañar a tu amiguito? Es una larga historia y muy poco interesante para esta situación -habló Cortana- además, no es de su interés... lo que les debe interesar es como van a escapar.

Cortana entró al portal dejando a Fred herido en el suelo, el equipo Azul se quedó sin balas definitivamente. Cuando Cortana entró al portal este se hizo más grande y los empezó a absorber.

-¡es un vórtice!... -gritó Linda corriendo en dirección contraria al portal siendo seguida por sus compañeros.

Sin embargo Fred estaba en el suelo y había perdido ventaja, no logró correr y fue absorbido por el portal.

-¡Fred! -gritó John al ver a su amigo ser absorbido.

-¡corran! -gritó Fred mientras era absorbido.

La velocidad de los Spartans fue disminuyendo mientras el Vortice los absorbía con fuerza. La fuerza de absorción llegó hasta el campamento y los supervivientes empezaron a sentirse atraídos al vórtice.

-¿alguien más siente eso? -exclamó un Marine siendo absorbido cada segundo más rápido.

-si... pero ¿de dónde? -se cuestionó Halsey... segundos después fue absorbida a toda velocidad.

Muchos marines y ODSTs lucharon por aferrarse a algo, pero fueron absorbidos a su desconocido final. Clara fue agarrada por B-312, quien no quería perderla... por muy poco que la conociera...

-¡busquen algo de que aferrarse, salven a los más débiles! -ordenó Amelia.

Los ODST fueron absorbidos... todo fue llevado por el portal.

Clara perdió las fuerzas, pero Seis no la perdería tan fácilmente.

-spartan... yo... no puedo... -Clara perdió el conocimiento.

-¡¡resista marine!! -gritó B-312.

Un pedazo enorme de blindaje, proveniente de Infinity, se acercó a toda velocidad y golpeó a B-312  haciéndolo soltarse de donde se agarraba.

En el aire, siendo atraído por el vórtice, B-312 trató de agarrar a Clara fallando en el intento y siendo golpeado por otro trozo quedándose sin escudo.

Amelia, Trevor y B-312 eran absorbidos a alta velocidad; Kelly, Linda y John perdieron fuerzas y fueron absorbidos a toda velocidad.

B-312 enterró su mano en la tierra para aferrarse a esta y evitar entrar al portal, Amelia y Trevor hicieron lo mismo.

Pero el terreno no era estable y los tres terminaron por perder el agarre, siendo absorbidos por el portal.

Del otro lado del vórtice...

En realidad Cortana había programado distintos destinos para cada uno, por lo que cada persona que entrara al vórtice terminaría en un mismo planeta pero en diferentes instalaciones, a 7km de cada uno mutuamente.

John se levantó con molestia, estaba cansado de seguir luchando y ya se sentía viejo a pesar de solo contar con 33 años de servicio.