¿Última oportunidad?

Había pasado dos semanas y realmente se notaba que Cade se esforzaba por hablar conmigo, me había acorralado en los baños, provocado e incluso humillado, pero ni siquiera reaccioné.

Hoy era debate en clase, me encantaba el debate por el simple hecho de pelearme con lo demás para ganarles con argumentos sólidos.

—Bien chicos es el gran día —anunció feliz— ideas para el debate, comiencen.

—Si el vestido era azul con negro o dorado con blanco —comentó Lita.

Todos se rieron, sería un buen tema.

—Carecerían de argumentos, además que está claro que era azul —sonrió el profesor.

—Legalización de la marihuana —sugirió Sam sonriendo.

—Fue el debate pasado Samuel, deberías venir más seguido te sorprenderías de lo interesante que son las clases —regaño el profesor.

Sam golpeó a su amigo quien se reía divertido.

—Venga chicos algo interesante —pidió.

—Que tal si las parejas homosexuales pueden ser padres —sugirió Cade.

Algunos hicieron alboroto y otros simplemente me miraron.

—Me gusta el tema, ¿Todos de acuerdo? —preguntó el profesor.

Claro, todos aceptaron pues era una gran idea de Cade Hope y cual ovejas lo seguirían.

Nos dividimos en dos los que estaban de acuerdo y los que no.

—Bien chicos ya saben como es esto, se respetan las ideas de todos, no quiero comentarios ofensivos u homofobicos y Percy —miró a mi amigo— si nos enojamos no aventamos nada de acuerdo.

<No prometo nada> sonrío triunfante, no era al único que le encantaba los debates.

—Dice que está bien —informe.

Me senté en mi asiento prometiéndome que cualquier cosa que dijera no contestaría.

—Cade empieza ya que fue tu idea —señaló el profesor.

—Bueno debido a la sociedad en la que se vive actualmente el desarrollo en un familia con padres del mismo sexo puede perjudicar al infante en cuestión —inició, sabía como hablar.

En ese momento se inició el debate, argumentos que ya me conocía "No es natural" "Volverán gay al niño" "Si no pueden tenerlos naturalmente no deberían adoptar" en cualquier otro punto abría saltado y les habría arrancado la cabeza... en este punto estaba sentado dibujando en mi libreta, se podían meter sus opiniones por el culo.

<De verdad no dirás nada> se quejó.

—No —contesté mirando mi libreta— y tú tampoco.

Todo se centro en el último punto de Cade.

—El punto de mi compañera es erróneo, la necesidad de tener hijos viene de la finalidad reproductiva del humano la cual no se puede hacer con una pareja homosexual, a pesar de eso muchas parejas siguen esa finalidad adoptando y otros más egoístas deciden rentar un utero —me miró con una sonrisa triunfante.

Ni siquiera pude alzar la cabeza, apreté el puño tan fuerte que sentía como las uñas se enterraban en mi palma.

<Ya está, eres un imbecil al menos a él lo tuvieron porque lo querían no como tú maldito accidente> atacó molesto.

Le miré cansado, pero él solo espero a que lo tradujera, negué con la cabeza y aún así me golpeó.

—Jensen nos podrías decir lo que tu amigo quiere expresar —pidió el profesor.

Suspiré abrumado.

—Dice que es un imbecil y que él es un accidente —contesté.

El salón hizo ese clásico uhh que calentaba.

—Lo dice él o lo dices tú —me miró directo.

<Yo imbecil, me alegro que te estés muriendo> expresó molesto.

—Lo siento no entiendo mudo —murmuro riendo.

Ninguno en clase conocía el lenguaje de señas pero todo el mundo conocía el universal, así que mi amigo tomó lo primero que encontró para lanzárselo, fallo pero le dió a Sam.

—Idiota —lo llamó Cade al ver que la nariz de su amigo sangraba.

Percy levantó los dedos medios para mostrárselos.

—Muy bien es todo por hoy —suspiró el profesor— Sam ve a la enfermería, Percy a la oficina del director.

Mi amigo le miró molesto.

—No me veas así sabes lo que hiciste —regaño— los demás fuera, Cade y Jensen quédense.

El salón se vació por completo quedándonos a solas.

—Cade burlarte indirectamente de la discapacidad de tu compañero no es correcto —señaló ante su comentario— como segundo punto ¿Hay algún problema entre ustedes dos?

—No se, que Jensi se lo diga —sonrío.

—No tengo ningún problema —contesté— ¿Puedo irme?

El profesor Black suspiro.

—Cade discúlpate con Percy por favor —pidió— ahora podrías dejarnos a solas.

Cade no tuvo de otra así que asintió para salir.

—Jensen —me miró el profesor— te he visto algo apagado las últimas clases, sin contar que hoy no participaste, te he visto cansado, sin ánimos y a juzgar por los golpes que traes me preocupa que tengas problemas en casa...

Oh dios, ahora creían que mis padre me golpeaban... que bajó había caído.

—Mis padre son gays, a diferencia de muchos me tratan de maravilla —contesté— y no participé porque llevo toda la vida defendiendo mi crianza pero hoy no tenía ganas de hacerlo.

—Debiste decírmelo —comentó apenado.

—Está bien, cada quien tiene su opinión por más estupida que sea —sonreí.

Él asintió y me dió una sonrisa.

—Sabes que el debate es una gran parte de tu calificación, te dejaré entregarme un ensayo sobre tus puntos de vista del tema de acuerdo —me ayudo.

—Gracias —sonreí.

Estaba por irme cuando hice mi última movida.

—También vengo de un vientre de alquiler, Percy solo quiso defenderme —expliqué— le es difícil usar el lenguaje cuando nadie se da el tiempo de aprenderlo, lanzar una botella es más fácil.

—Lo se, no lo reprobaré pero también quiero su ensayo —aclaro.

—Gracias, es un buen profesor —alague.

Lo era, el profesor Black era joven y se involucraba demasiado con sus alumnos, algo que muchos no hacían.

Sabía que me había pasado, era verdaderamente un idiota pero había tratado con todo, ser bueno no funcionó, ser malo tampoco y mi última esperanza era desesperarlo al punto de gritarme... no lo hizo.

Como pidió el profesor me tuve que ir a disculpar con Percy, nunca me había caído bien pues era bastante molesto y siempre iba a la defensiva.

Ahí estaba sentado a la espera de que el director lo atendiera.

—Oye —lo llame— perdón por burlarme de ti, no es tu culpa no poder hablar.

Percy se levantó para empujarme con fuerza, se aproximó para rematar pero su fiel amigo lo separó.

—No vale la pena —le dijo Jens serio.

—Deja que me golpeé —le grité— tú también hazlo.

No hizo nada solo tomó a su amigo para sentarse a su lado esperando al director, ignorándome por completo.

Me fui molesto, no tenía nada que hacer ahí.

A la salida me fui al hospital pues me tocaba quimio.

Al llegar estaba Eve con un par de chicas, me senté a su lado como era usual.

—Hermosa —salude.

—Hola Cade —sonrió besando mis mejillas— ella es Luna, Megan y Ruby.

Las chicas saludaron animadas pero con ese dejo de lastima que era usual.

—¿Hoy no viene mi novio? —preguntó— quería presentárselas.

—Llega en un rato —contesté.

Me quedé escuchando la platica de la vida loca que llevaba Eve, una rebelde sin causa amante de los animales, la política y derechos.

Sus amigas me mostraron fotos de todas sus marchas, marcha de mujeres, el calentamiento global... esta chica apuntaba a ser la primera presidente si el Cáncer no la mataba.

Después de un rato ellas se fueron dejándonos a los dos solos.

—¿Tus amigos no vienen? —preguntó confundida.

—No lo saben —confesé.

—No estuviste la otra vez con un chico, un pequeño, con ojos realmente hermosos —sonrío.

—Lo arruine, ahora me ignora —expliqué— no quiere saber nada de mi.

Ella se quedó un momento pensándolo.

—Deberías hablar con él —sugirió.

—Ya lo intenté de todo pero no me lo permite —añadí.

—No es correcto pero cuando estás tan jodido es tu última opción —añadió— puede salir bien o empeorarlo todo.

—¿Qué? —pregunté viendo mi última opción.

—Chantajealo, usa tu historia de chico moribundo —sugirió.

Suspiré abrumado, no caería en eso esta vez... pero si podía chantajearlo con otra cosa.

—Eres muy lista —sonreí.

Me odiaba por hacer esto pero era mi última oportunidad.

Llame a Jeff haciendo mi plan, solo él podía hacerlo.

Para suerte de Percy solo le dieron detención dos días.

Volví a casa después de recoger a mi hermano, caminamos a casa como solíamos hacer.

—¿Por qué te fuiste de la fiesta? —preguntó mientras devoraba su helado.

—Percy me necesitaba —contesté.

—Me enseñas lenguaje de señas —pidió como si nada.

—Claro, quieres aprender a pelearte con él de otra manera que no sean golpes —me burlé.

—No, entró un chico que es sordo mudo y no tiene muchos amigos —confesó aún viendo su helado con amor.

Lo abrace, no era un total cabron.

—Pero si quiero saber cuando me llama idiota —se quejó.

Me reí porque lo hacía muy seguido y mi hermano nunca se daba cuenta, al llegar vi ese auto negro frente a la casa.

—Entra, te veré en un momento —ordene.

Mi hermano hizo caso, no era ningún problema solo era el chofer de Cade.

—Joven Blue —me llamó.

—Hola Jeff —saludé— Cade te envío.

—Me pidió que lo llevara a su casa —explicó.

—Se que solo haces tu trabajo Jeff pero no iré —asegure.

—El joven Cade me pidió que le dijera que si no hablaba con él les diría a todos sobre su enfermedad —dijo no muy cómodo.

Bufé molesto, este cabron era imposible.

—Si él dice algo yo le diré a todos que tiene cáncer —le recordé.

—Supuso que diría eso así que me pidió que le dijera que él se morirá en un mes o dos pero usted todavía tiene una vida por delante —explicó.

Suspiré cansado.

—Que se joda —agregué— solo dile que me deje por favor, que si quiere arreglar las cosas que me deje tranquilo de verdad.

Jeff asintió para irse, esperaba que le quedara claro por una vez por todas.

Llegue a casa apoyado de mi hermano, me llevo hasta a mi habitación para ayudarme a llegar a la cama.

—Tengo frío —dije cansado.

Él tomó una de las cobijas que tenía en el suelo pues mágicamente siempre terminaban ahí, me cubrió con la manta arropándome.

—¿Te traigo algo de comer? —preguntó sentándose en la orilla de la cama— te puedo preparar una sopa.

—Siempre te quedan saladas —me burlé— pero no tengo hambre.

Él asintió preocupado, si no decía algo iba a llorar.

—Que tal unos brownies —sonreí— ya sabes especiales.

Me sonrío algo esperanzado.

—Si, está bien —aseguró levantándose de la cama.

—Puedes decirle a Jeff que venga —pedí.

Mi hermano bajo a preparar los Brownies mientras Jeff entraba en mi habitación, dado a que no estaba Jensen era claro que no había funcionado.

La había cagado enormemente y por primera vez en mi vida no sabía cómo resolverlo.

Hola, Hola 👋

Veníamos a establecer que de ninguna manera pensamos de esta manera 🙌🏻 los comentarios homofóbicos en este capítulo fueron solo para fines del capítulo y no representan nuestras ideas, ni las del personaje.

Por favor no odien a bb Cade 🥺

Esperamos les haya gustado, esto se va a poner bueno ❤️

LOVE IS LOVE
🏳️‍🌈

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