|Comienzo|

Max se levantaría notando que el sol le daba en la cara, miraría por la ventana dando se cuenta que había llegado a california.

-Que emoción, que emoción- jamás había visitado esta ciudad, por lo que todo lo que estaría viendo seria nuevo para el.

El autobús al llegar hacia la estación, bajaría del trasporte mirando hacia todos lados.

-Muy bien ciudad, sorpréndeme- al voltear a la derecha, un folleto chocaría con su cara.

-No me refería a esta clase de sorpresas- al quitar ese folleto de su cara vería que sería una oportunidad para el.

Audiciones de concurso de canto.

El ganador recibirá el gran premio de $100,000.

Audiciones abiertas en el Moon theater.

551 echo drive.

-¡Cien mil dólares!, ¿alguien me dice donde queda el teatro Moon?-.

Luego de pedir muchas direcciones llegaría al teatro, en donde vería una gran fila de animales, solo formaría mientras que la fila avanzaba a una gran velocidad, hasta que sin darse cuenta ya había pasado, llegaría en donde estaba el escenario, topándose con un koala.

-Hola, ¿sabe en donde está el dueño del teatro?-.

-Estás hablando justo ahora con él, ¿quieres inscribirte?-.

-Sí señor, me llamo Max-.

-Ok Max, no te alejes mucho, podría llamarte en cualquier momento-.

-Gracias señor-.

Solo me alejaría mientras que una jirafa entraba al escenario, sin darse cuenta un gorila se había puesto a su lado.

-espero que me seleccionen- diría el gorila llamando la atención de Max.

-A mi también, vine desde muy lejos como para que no me seleccionen, por cierto, me llamo Max- le daría la mano al gorila, quien correspondería al gesto.

-Me llamo Johnny-.

-¡Max, te toca!- reconocería la voz del koala, se despediría de Johnny, quien solo le diría "buena suerte", al llegar al escenario estaría a punto de cantar su canción, sin embargo la imagen del señor Crystal, junto con los demás que lo rechazaron inundarían su mente, por lo que cantaría otra canción.

-Disculpe si la canción que cantare suena algo terrorífica-.

-No te preocupes, tu solo canta- Max solo movería su cabeza en señal que aceptaba, preparando su garganta se dispondría a cantar.

Your heart is pounding and it can't is stopped.

You tell yourself you're okay.

It's too bad your doors can't be locked.

To keep the monsters away.

You check behind the door.

There's nothing there no more.

You should've stay in bed...

You've heard this noise before.

You dart across the floor.

Try not losing your head...

Prepare for the horrors.

This night will keep repeating over and over and over.

Until you make it to the end.

They hide 'round the corners.

You better peel your eyes and keep looking over.

Your shoulder 'cause you'll never be alone, again.

-¿lo hice bien señor moon?- nervioso por pensar que había cantado mal.

-Lo hiciste excelente Max-.

-¡El siguiente es Johnny!- diría la iguana que estaba al lado del señor Moon.

Ya luego de unas horas.

A todos nos habían llamado para la selección, todos intentando no mostrar ninguna imperfección.

-Muy bien, veamos...- el koala caminaría un poco para después voltear haciendo que todos se pongan rectos, para después seguir caminando.

-Esto parece como si el ejército nos estuviese reclutando- diría Max en susurros para que solo Johnny lo escuchara.

-Ni que lo digas-.

Moon escogería a una puercoespín y a un grupo de ranas, mencionando a los solistas, llamaría a Johnny y algunas otras personas.

-Buena suerte- volvería a decir en susurros hacia el gorila quien solo levantaría el pulgar mientras se ponía al frente con los demás seleccionados.

-Mike, súper guau, tú tienes que estar en mi show-.

-Oh para sí vos insistís- respondería el ratón mientras se alejaba de los demás.

-Y me quedo con Pete y uno más, déjenme ver- al pasar detrás de un toro, este se tiraría un gas, haciendo que todos lo miren.

-Hay por dios, no saben cuanto lo siento- este se volvería a tirar otro gas -no sé que me está pasando-.

-Te agradezco que vinieras-.

Este pisaría fuerte, al hacerlo aplastaría al caracol, haciendo que todos miren al pobre caracol en el suelo.

-Hay por dios, Ray, ¿estás bien?, resiste Ray, acá estoy- mientras que el toro se marchaba estaba tirándose gases.

-¿Ok?, bueno aquí se queda... Daniel, gracias Johnny-.

Al decir eso, Johnny se estaría marchando, quien Max lo estaría mirando, ese chico tiene potencial.

-¡Daniel estas en el show!-.

-¿Qué?, ¿señor está usted hablándome?- por la gran diferencia de estatura no podía escuchar nada, Moon quien tomaría el megáfono de la iguana se dispondría a hablarle.

-¡Te decía que tu estas...! hay por Dios, esto va a volverme loco, Johnny, te quedas, ¡Daniel gracias por venir!-.

-¡Sí!-.

-Bueno, son todos de mi lista-.

Al decir eso se escucharían varias quejas de los demás animales, aunque uno estaría triste por no ser seleccionado, este recordaría las palabras de su amiga.

"Esta no es la única ciudad en el mundo".

Al disponerse para ir hacia la salida, escucharía que el koala diría su nombre y el de otra persona.

-Rosita y Max siguen aquí-.

-Si aquí estoy- saldría una cerdita dentro de toda esa multitud junto con el zorro.

-Rosita, tiene una gran voz pero verla es aburrido- eso le dolió incluso a Max.

-Lo sabia- se dispondría a irse hasta que la voz de Moon la detendría.

-Lo que hare será emparejarte con... Gunter, ¡Gunter, en donde estas!-.

-Ya sí, yo soy- este pegaría un salto mientras que giraba en el aire.

-El animara las cosas en el escenario y tu Max, estas dentro, solo te pido que cantes otra canción para el gran día, no digo que la canción que cantaste sea mala, pero no creo que a los niños les encante oír como un monstruo entra hacia sus habitaciones.

-Seguro, cantare otra cosa-.

Luego de un rato.

Estarían todos los seleccionados en el escenario mientras que Moon les hablaba llegarían un grupo de niñas con su radio.

-Oh no, no, no, ustedes no, ya escogí a la categoría de grupo, adiós- luego de decir eso, las chicas solo empezarían a hablar en coreano.

-¿En qué idioma están hablando?- preguntaría el gorila hacia el zorro.

-Creo que es coreano, no estoy seguro-.

-No, niñas, ya tome mi decisión- volverían a hablar, para después encender su radio y empezar a bailar.

-No, niñas no- Moon apagaría su radio para después llamar a la señorita Crawly para que las eche.

-Oye Moon ¿Cómo es la historia?, el premio esta acá dentro- Preguntaría Mike encima del cofre.

-¿El premio?, si seguro, todo está hay-.

-Pues abrilo queres, me encantaría ver como se ven cien mil dólares- todos los demás que fueron seleccionados alentaban la idea de ver los cien mil dólares.

-Claro, ya lo voy a abrir... ¿Qué?, ¿Qué dijiste?-.

-Dijo cien mil dólares- diría un ovejo quien tenía un folleto en las manos.

-¿Cien?... olvide mis llaves, ya regreso- arrugaría el folleto mientras que se llevaba a empujones a la iguana.

-Eso fue raro, por cierto, ¿alguien sabe en donde queda el hotel más cercano hacia acá?, es que soy nuevo en la ciudad-.

-Claro, de aquí vas derecho, luego cruzas hacia la izquierda, vuelves a seguir derecho y lo encontraras-.

-Ok gracias rosita, ¡ya regreso!- tomaría sus cosas que estaban en los asientos del teatro, correría para llegar hacia el hotel, al estar en frente, se acercaría hacia la recepción.

-Disculpe, ¿hay habitaciones disponibles?- vería como la chica empezaría a teclear en su ordenador.

-Si, en el noveno piso se encuentran, son 40 dólares semanal- Max sacaría el billete desde su billetera, que bueno que había ahorrado lo suficiente, al pagar, la chica le entregaría las llaves de su habitación, que serian la número 93, usaría el elevador para llegar más rápidamente, al estar en frente de su habitación introduciría la llave para entrar.

-Que acogedora, debería irme hacia el teatro- solo dejaría sus cosas en una de las camas, volvería a usar el elevador para llegar a la recepción, la chica lo miraría dirigirse hacia la salida.

-No pierda la llave- escucharía decir de la chica, solo asentiría mientras que volvía a correr hacia el teatro, al llegar entraría hacia el escenario, viendo que todos conversaban.

-¿El señor Moon no ha regresado?- como si lo estuviese invocando, la puerta por donde había entrado, se abriría dando paso a Moon y el ovejo.

-Ok, pónganme atención, los voy a enviar a casa ahora- todos mirarían con confusión al koala, ¿los estaba corriendo?.

-Sí, porque como mi padre solía decir, una noche de descanso te dará un gran día de trabajo- decía mientras se acercaba hacia donde estábamos todos.

-Así es, los ensayos empezaran justo mañana a primera hora y si quieren ser estrellas y ganar esos cien mil dólares, más vale que estén listos para trabajar como nunca habían trabajado en su vida-.

-Así que vayan a dormir y sueñen en grande- todos festejando por las palabras, mientras que las niñas regresaban y se ponían a bailar y cantar.

-Señorita Crawly-.

Todos se estaría marchando hacia sus casas, incluso la televisión estaba afuera grabando a todos, Max le entraría algo de hambre y también para conocer la ciudad, se dirigiría a lo que parecía ser una plaza.

-Cafetería donde estas- sentiría que alguien le estaba tocando la espalda, al voltear, vería a un lobo con una maleta, lo más probable es que sea nuevo en la ciudad.

-Hola, ¿sabes en donde hay una cafetería?-.

-Estamos igual, también intento buscarla- miraría por todos los lados, hasta que notaria que de una esquina había una.

-Ya la vi, sígueme- el lobo lo seguiría, al llegar a la cafetería, buscarían una mesa, al sentarse, se produciría un ambiente incomodo, por lo que Max hablaría para evitar más incomodes.

-¿Eres nuevo en la ciudad?-.

-Uh, si, llegue hace un rato, decidí que primero comería algo para después ir a buscar mi hotel-.

-Genial, por cierto me llamo Max-.

-Me llamo Isaac, mucho gusto Max- una camarera llegaría hacia en donde estaban, quien al pedir lo que comerían, empezarían a hablar, a pesar de no tener muchos temas en común, se divertían hablando de lo que si tenían en común, luego llegaría la misma camarera junto con sus pedidos, luego de comer, ambos se dispondría a salir de la cafetería.

-¿Y ahora qué hacemos?-.

-Yo tenía planeado ir a buscar un hotel-.

-Bueno, porque no vamos al hotel en el que me estoy quedando, seguro tiene una habitación-.

-Entonces vamos-.

Los chicos se dispondrían a ir al hotel de Max, al llegar la chica le dio la habitación 94, por lo que serian vecinos, ambos subirían con la ayuda del elevador conversando por todo el camino.

-Bueno, nos vemos mañana Max- se despediría el lobo con la mano, mientras que Max imitaba el gesto.

-¿Qué hora es?- al revisar su teléfono este marcaría las 4:30.

-Si se hizo tarde rápido, bueno, ¿Qué hago ahora?- este notaria su micrófono en su cama.

-Cantar estaría bien- se dispondría a cantar para pasar las horas, después de todo, al pasar las horas se daría cuenta que serian las 7, por lo que buscaría algo de comer en sus maletas, al terminar de comerse un sándwich, este se dispondría para cambiarse para dormir, después de todo, mañana será un gran día.

Canciones usadas en el capitulo

Never be alone again shadrow

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