Me desperté algunas horas después con un bostezo, levantándome del sofá de la sala. Decidí tomar una siesta y aparentemente perdí la noción del tiempo, pero me sentí bastante renovado. ¿Fue el sueño real o lo que hice justo antes?

Pasando una mano por mi cabello, me senté mirando alrededor, al ver que no había nadie más, decidí ir a la cocina donde escuché algunos sonidos provenientes.

No me sorprendió demasiado ver quién estaba allí, Artoria y Rin aparentemente se habían despertado hace un rato y ya tenían algo frente a ellos, comiendo.

"Yo." Saludé, saludando a medias.

"Schweinorg". Rin aún se veía un poco cansada, y recordé que ella no era realmente una persona madrugadora, o la hora que fuera cuando se despertaba.

Artoria se animó, con el tenedor en la boca y las mejillas un poco hinchadas. Ella hizo un ruido de reconocimiento.

Lindo.

No pude evitar acariciar su cabeza, ganándome otro sonido ahogado de ella.

Afortunadamente, la casa venía con un refrigerador y otras comodidades, de naturaleza mágica, para que aún pudieran trabajar en este mundo. Lo mejor de todo fue la cafetera, ya que tenía una cafetera lista por lo que vi frente a Rin, podía adivinar a quién tenía que agradecer por eso. Disfruté mi primer sorbo, sentándome frente a ellos. "¿Dormiste bien después de tu aventura?" Yo pregunté.

"Olvidé lo que era una cama hasta ahora". Rin exageró, pero claramente estaba renovada.

"La suavidad de una cama siempre es bienvenida, pero estoy más que acostumbrada a dormir en el suelo bajo las estrellas". añadió Artoria. "Hay muchas cosas que se dan por sentadas en esta era que yo no tenía".

A veces es fácil olvidar cuánto gastó Artoria en la guerra, acampando y moviéndose de un campo de batalla a otro.

Y la comida, estoy seguro. Me reí.

"El horror." Artoria susurró, estremeciéndose.

Rin y yo simplemente compartieron una mirada mientras ella se acercaba y le daba una palmada en el hombro a Artoria.

"¿Segundos?" Rin ofreció su propio plato.

"Si, gracias." El Rey de los Caballeros aceptó felizmente.

Si las cosas fueran diferentes, me pregunto si podría haberme ganado su corazón a través de la comida.

'Sé yo mujer y te dejaré comer lo que quieras cuando quieras'

Bueno, la idea si es divertida si nada más.

"¿Están listos para un pequeño viaje después del desayuno?" Tomé otro sorbo de mi café, aunque no lo prefiero así de negro, aún podía apreciar la alta calidad.

"¿Cómo qué?" preguntó Rin, dejando su propia taza.

Whiterun está a solo veinte minutos a pie de la casa si vamos por ese camino. Debería ser casi mediodía ahora. Me rasqué la mejilla calculando mentalmente el tiempo. Tomé una siesta que se convirtió en un sueño, y durmieron durante más de un día, así que debería ser por ahí.

"No hemos visto ninguna de estas ciudades además de Hibernalia y por eso simplemente buscamos provisiones para nuestro viaje". Artoria expresó sus pensamientos. "¿Qué piensas, Rin?"

"No me importaría echarle un vistazo, tengo suficiente dinero para ir de compras y no sentirme mal". Rin suspiró, mirando al techo.

"¿Algo mal?" Yo pregunté.

"Es solo... un sentimiento extraño ser rico".

"Tengo una cantidad exorbitante de dinero en este momento y siento que necesitas un golpe en la cabeza por estar deprimido por ser rico". Yo inexpresiva.

"Muérdeme, Schweinorg". Rin resopló. "Pero... es más como todos mis tiempos anteriores ahorrando, tratando de aprovechar los pocos recursos que tenía y acumulando todo con tanta fuerza... y ahora, aquí estoy con montañas de oro a mi nombre".

"Ah, conozco el sentimiento". Sonreí levemente. "Tal vez no con la riqueza material, sino con otras cosas". Podía recordar lo hambriento que estaba de diferentes tipos de afecto, y aquí estaba ahora con amigos, amantes y familia. "¿Estás feliz?"

"¿Eh?"

"¿Estás feliz de haber llegado a este punto? ¿Valió la pena? Mirando hacia atrás ahora, ¿habrías cambiado algo?" Miré mi café, tal vez proyectando algunos de mis propios pensamientos sobre la pregunta.

"Sí, estoy bastante feliz en este momento". Tenía una sonrisa de contenido en su rostro. "Tengo algunas cosas que probablemente cambiaría, pero no me arrepiento mucho".

Miré a Artoria, quien parecía complacida con las palabras de Rin, un sentimiento que compartía. Estaba feliz de que Rin finalmente tuviera algún tipo de paz, algo de felicidad creada por ella misma a la que aferrarse. Esa mirada en sus ojos, no vi ese estrés velado o timidez que impregnaba todas sus acciones y palabras.

La atmósfera tranquila y pacífica se interrumpió repentinamente cuando Jinn irrumpió en la cocina con varios pergaminos. "¡Están todos aquí!" Exclamó, dejándolos sobre la mesa.

"Hola Jin". Artoria fue la primera en hablar.

"Artoria~" Jinn prácticamente saltó hacia ella, agarrándola en un rápido abrazo.

"Jinn". Artoria sonrió ante el cariño, devolviendo el abrazo.

"¿Cómo está mi hermana?"

"¿¡H-hermana!?" Artoria tartamudeó.

"¿No lo somos?" Jinn se echó hacia atrás, luciendo confundido. "Creo que el término era hermanas Harem para cuando compartimos el mismo hombre".

Contuve una risita, bebiendo mi café. No sé si Jinn estaba bromeando intencionalmente con Artoria, o si esta era su personalidad predeterminada, pero fue divertido verlo. Ahora que lo pienso, Jinn le estaba diciendo lo mismo a Meridia, acercándola a la idea.

"Eso... no es incorrecto". Artoria no parecía molesta por el término, más bien desconcertada por lo repentino. Quizás la connotación negativa de 'hermana' en su mente la estaba haciendo detenerse.

Jinn solo sonrió ante la admisión, y creo que lo está haciendo a propósito en este momento.

Rin se aclaró la garganta, atrayendo nuestra atención. "¿Qué pasa con todo esto, tiene que ver con el Elder Scroll?" Hizo un gesto hacia los documentos y pergaminos que estaban sobre la mesa.

"Sí" Jinn asintió con entusiasmo. "Pude hacer referencia a varias cosas en la biblioteca de la universidad para ayudarme". Jinn se acercó y se sentó a mi lado.

La vi moverse, muy levemente en su asiento. El movimiento de su trasero para ponerse mejor cómoda.

Supongo que escuchó mis palabras.

"¿Encontraste alguna pista?" pregunté, poniéndome de pie para conseguir una recarga. "¿Y te gustaría una taza de café?"

"¿Café?" Ella inclina la cabeza. "Me encantaría probar algunos. Conozco el sabor, al menos la variedad Remnant, pero tengo curiosidad por experimentarlo".

"¿Nunca has tomado café antes?" Rin pareció sorprendida.

"Bueno, he vivido casi toda mi existencia en mi lámpara. Ha habido muchas primeras veces en estas últimas semanas". Admitió Jinn.

"Pobrecito." Rin miró horrorizada ante el pensamiento, volviéndose hacia mí. "¡Schweinorg, tráele todo el café!"

"¡Sí, señora!" Saludé.

Rin definitivamente era una maga, al menos, tenía sus mismos pensamientos con respecto al café.

"¿Cómo se lo toma?" Yo pregunté.

"No sé." Jinn esbozó una sonrisa. "Probaré lo que me recomiendes".

"Tenía el mío simplemente negro, supongo que es un buen punto de partida". tarareé para mí mismo.

"Tampoco recuerdo haberte visto participar en una comida, ¿no has intentado comer antes, Jinn?" añadió Artoria.

"Bien...." Noté por el rabillo del ojo que Jinn me miró, con un rosa muy tenue en sus mejillas. "He probado algo bastante recientemente. Aunque supongo que debería expandirme un poco más". Ella sonrió inocentemente.

"Tu primera comida, ¿fue buena?" Artoria cuestionó.

"Oh, estaba delicioso~"

Oh Jinn, realmente eres un glotón para el castigo.

"Te ayudaré a probar todos los alimentos en estas tierras". Artoria decidió, sus ojos brillando intensamente.

"¿Estás seguro de que no estás buscando una razón para atiborrarte?" Rin se quedó inexpresiva.

"Tonterías, es mi deber como hermana ayudarla a experimentar las alegrías de la vida". Artoria negó sin problemas, menos ella desviando la mirada y sonrojándose un poco.

"Claro, te creo completamente". Rin puso los ojos en blanco. "Bueno, no es que no tengamos suficiente dinero para saciar tu apetito... por unos días".

"¡Rin!" Artoria resopló. "No soy tan malo." Ella murmuró.

"Aquí estás." Interrumpí, colocando una taza frente a Jinn. Ambos parecieron detenerse, observándola tomarlo en sus manos, vacilante tomando un sorbo para ella. "¿Pues, qué piensas?"

"Hmm, hay una agradable amargura en ello. Aunque no creo que lo prefiera de esta manera". Jinn lo inspeccionó nuevamente antes de tomar otro sorbo.

"Bueno, no creo que a la mayoría de la gente le guste este negro".

"¡La única forma de beberlo es negro!" Rin exclamó.

"Como dice Rin, algunas personas equivocadas piensan que 'Black' es la única forma de tomar café. Hay muchas cosas que agregar para mejorar el sabor más allá de un paladar tan plebeyo".

"Esta es una colina en la que moriré, Schweinorg, será mejor que estés listo para pelear después de eso". Rin levantó su puño hacia mí.

Artoria le dio un golpe en la cabeza.

"Ay". Rin gimió, frotándose el lugar.

"Siempre estás tan irritable por la mañana, Rin". Artoria suspiró.

Rin sopló una frambuesa y luego empujó su cabeza contra su brazo sobre la mesa. "Muy poco sueño".

"Dormiste como... un día y medio". Señalé.

"Muy poco sueño". Rin reiteró con un bostezo. "De todos modos, ¿qué es eso de la cosita o algo así, Jinn?"

"Oh sí." Jinn se animó, contento de mirar desde un lado. "Con algunos recursos de la universidad y un poco de ayuda del Archimago, estamos a punto de reducir algunas ubicaciones en las que creemos que está el Elder Scroll".

"Bien hecho."

"¡Impresionante!"

"Buen trabajo, Jin". Alcancé su mano, tomándola en la mía. "Has estado haciendo un gran trabajo, gracias". Quiero que sepa que la aprecio, tal vez debería mostrarlo más a menudo.

"Um... sí, por supuesto". Parecía un poco tímida ante el repentino elogio, pero no hizo ningún intento de apartar su mano de la mía.

"Entonces, ¿qué estamos viendo exactamente?" Pregunté, queriendo saber algunos detalles.

"Bueno, los diarios de Harkon eran... un desastre. Si no estaban codificados, entonces eran casi una tontería para cualquiera excepto para él. Pero por lo que se reconstruyó, su hija robó o fue enviada a recuperar un Elder Scroll y ella desapareció con él o buscándolo. Tenemos algunos lugares en los que creemos que está ella o el pergamino se basa en movimientos y algunas historias y leyendas antiguas".

La solté para que pudiera desplegar un mapa, mostrando una vista básica de Skyrim. "Bueno, había alrededor de una docena de lugares, pero creemos que estos tres son los de mayor probabilidad". Señaló tres marcas, más grandes que varias más en el mapa.

"No están demasiado separados". Artoria echó un buen vistazo. "Podemos idear una ruta para atacar a los tres en un solo viaje".

"Probablemente podría hacerlo todo en un día. Schweinorg es mejor utilizando el caleidoscopio, ¿cuántos problemas tuvimos solo porque no pudimos armar una puerta o una trampa porque podría haber derribado el lugar sobre nuestras cabezas?" Rin expresó sus propios pensamientos.

"¿Por qué no sacaste a Ruby?" sonreí

"Vete a la mierda, ya sabes por qué". Rin resopló.

"Oh, la próxima vez que salga Ruby, ven a buscarme, tengo muchas ganas de conocerla". Dijo Jinn, ganándose la atención de Rin.

"C-claro". Rin suspiró.

Bueno, no podía culparla, era difícil rechazar una solicitud como esa cuando Jinn me dio esa mirada.

"De todos modos, ¿qué están marcados estos puntos?" Yo pregunté.

"Esta es la caverna de la grada de hielo". Señaló el que estaba más al sur. "Este de aquí es The Nameless Sanctuary, y por último es Dimhollow Crypt. Ahora creo que lo más probable es..."

Es la cripta. La corté.

"¿Qué?" Parecía confundida.

"Definitivamente la cripta". Rin solo asintió.

Apostaría mucho a que en efecto es la Cripta. Artoria ni siquiera pestañeó.

"¿Cómo estás tan seguro?"

"Oh, olvidé que no estás familiarizado con los vampiros". Me reí. "Algo que debes entender sobre ellos... son muy... estereotípicos".

"¿Qué quieres decir?" Jinn todavía parecía confundido.

"Toda la tradición, las historias, incluso los medios populares... sí, mucho de eso es deprimentemente preciso. Incluso en nuestro mundo natal, los Apóstoles Muertos actúan como un vampiro estereotípico sobre el que podrías leer en una novela. Completo con alguna convención de nomenclatura vanguardista y un castillo de nerviosismo. ¿Un lugar que lleva el nombre de una cripta? Eso está 100% garantizado como actividad vampírica".

"Es triste que sea tan cierto". Rin solo negó con la cabeza.

"Tales cosas se sabían incluso en mi tiempo". añadió Artoria.

"Pero... todas mis notas apuntan a que The Nameless Sanctuary es lo más probable..."

Palmeo su hombro. "Te diré algo, primero revisaremos la cripta, y si nos equivocamos, puedes actuar con aire de suficiencia todo lo que quieras y no discutiré contigo sobre este tipo de asuntos en el futuro".

"Hmph, te mantendré firme en esto". Se cruzó de brazos con un resoplido.

Oh, pobre niña. Tal vez si los vampiros fueran algo conocido en su mundo natal, lo entendería. Incluso Harkon actuaba como un vampiro estereotípico, era triste pensar en eso.

Especialmente porque tuve que interactuar con los Ancestros de los Apóstoles Muertos en muchas iteraciones de mi vida pasada.

Sin mencionar a Altrouge... esa chica emo está haciendo una rabieta en alguna parte.

"Bueno, antes de irnos, quería regresar a Whiterun".

"¿Whiterun? Esa es la ciudad con Dragonborn – tu amigo, ¿correcto?"

"Ese es." Asenti. "Rin y Artoria expresaron su deseo de ir, ¿tú también quieres venir?"

"¿No te importaría tenerme allí? Yo no exactamente... me mezclo". Ella hizo un gesto para sí misma. "Recibo muchas miradas incluso en el Colegio, no sé cómo me tratarán en una ciudad abierta como Whiterun".

"Por favor, ambos sabemos que esas miradas no son porque seas azul".

"Oh, cállate". Ella sonrió brillantemente, palmeando mi hombro. "Hablo en serio, por lo que he leído, los nórdicos no son del tipo más abierto a las cosas nuevas".

"Bueno, es bastante conocido que tengo alas allí, no me he enfrentado a muchos problemas... abiertamente. Algunos idiotas o algo así están armando un escándalo, pero por lo demás me llevo muy bien con ellos". Expliqué.

"Bien." Ella estuvo de acuerdo. "Iré, deseo encontrarme con este amigo del que hablas y echar un vistazo a la ciudad".

"De hecho, yo también deseo conocer a este Thorum, este Dragonborn por mí mismo". Artoria asintió ante la declaración de Jinn.

"No me importaría conseguir algunos suministros mientras estamos fuera". Rin agregó.

"Podemos conseguir cualquier cosa que necesitemos antes de salir a buscar el Elder Scroll". Estaba un poco emocionado, quería ver qué era realmente este llamado Elder Scroll. Y quería que finalmente conocieran a mi mejor amigo.

Fue raro, no creo haber visto a Jinn nervioso antes. No era obvio, pero ahora la conocía lo suficiente como para darme cuenta de algunas cosas. Grandes multitudes como esta, ella nunca ha tenido experiencia en lidiar con ellas antes.

En la Universidad, probablemente solo estaba viendo a un puñado de personas como máximo a la vez, aquí, había docenas de personas en cada esquina, y oh chico, la miraban.

Era difícil pasar por alto.

Su piel era azul, un azul muy hermoso que me pareció extremadamente atractivo, pero azul de todos modos. Esa no era una mirada normal por aquí... al menos su tono de azul. Creo que había algunos Elfos que tenían la piel azul, pero era mucho más tenue.

Casi de inmediato, agarré su mano para aliviar su nerviosismo. Y si soy honesto, creo que ella aprecia eso más de lo que deja ver. A Artoria tampoco pareció importarle, y sigo agradeciendo a mis estrellas de la suerte que no parecen ser del tipo celoso.

Hizo otra nota mental para darle un poco de afecto a Artoria más tarde también.

"Oh, estos se ven bien". Rin estaba mirando un puesto lleno de joyas junto con algunas piedras sin cortar en una canasta. "Sin errores obvios –" Levantó un collar de esmeraldas hacia el cielo, dejando que un poco de luz brillara en él. "Los cortes son limpios, Jewel apenas tiene impurezas".

Dejé de escuchar cuando ella comenzó a regatear con el dueño, golpeando a la pobre mujer hasta que consiguió el artículo por un trato.

"Oh, me gustan estos". Jinn me llevó a otro puesto, el cliente le dio una mirada rápida, pero no dijo nada. "La piel de estas botas es simplemente espléndida, y el diseño es encantador".

¿Sería sexista hacer un comentario de 'chicas' sobre ella inmediatamente pasando por encima de unos zapatos?

"12 Septims para tu novia". Dijo la anciana, con un tono suave en su voz.

"Por supuesto." Felizmente dejo las monedas en el mostrador, dejando que Jinn abrace sus botas nuevas. "¿Ves algo más que quieras?"

"Bien...." Echó un vistazo a una bufanda que colgaba de arriba.

Me reí, apretando su mano. "La bufanda también". Miré hacia arriba y vi otro que despertó mi interés. "Ese también". Lo señalé.

"7 septimos". La anciana dijo claramente.

"¿Como me veo?" Jinn se puso rápidamente la bufanda alrededor del cuello mientras yo añadía más monedas al mostrador, metiéndome la segunda por ahora.

"Oh, cariño, si no tuvieras un hombre, tendrías que vencerlos con una pala". La mujer mayor se rió.

Jinn parecía eufórico por el cumplido; Creo que doblemente porque fue de alguien fuera de nuestro 'círculo'. Un extraño la felicitó y no se desanimó por su 'singularidad'.

"Soy un hombre afortunado." Besé su mejilla, ganándome una brillante sonrisa de ella.

La anciana simplemente arrulló. "Me recuerda a mi esposo, bendiga su alma en Sovngard. Cuídala tú, jovencito". Ella movió su dedo.

"Bueno, creo que ella me cuida más". Me reí.

Y no lo olvides. Jinn me empujó juguetonamente, volviéndose hacia la mujer mayor. "Gracias por los artículos".

"Oh, no lo menciones querida, solo los hago para pasar el tiempo en estos días. Ahora vete, ve a pasar tiempo con tu novio lejos de esta anciana". Ella le dio una cálida sonrisa.

Jinn soltó una risita y me arrastró hasta donde estaba Artoria.

"¿Encontraste algo bueno?" Pregunté mientras nos acercábamos.

"Todavía tengo que encontrar cualquier artículo que desee adquirir". Artoria admitió mientras caminábamos. Hizo un buen trabajo manteniendo siempre a Rin en la mira.

"¿Es eso así?" Tarareé mientras ella se giraba para mirar algo más.

"Si yo - "

Envolví suavemente la segunda bufanda alrededor de ella, ganándome una mirada de sorpresa de ella.

"¿Guillermo?" Tocó la tela, mirándome a mí ya Jinn, que vestía una similar, aunque de un color diferente.

"¿Te gusta?"

"Es adorable." Sus mejillas se tornaron de un leve color rosa. "Gracias."

"Por supuesto." Sonreí.

"¡Guillermo!" Todos nos giramos para ver quién gritaba. Reconocí la voz de inmediato, pero nadie más lo hizo.

"Torum". Saludé con un saludo, después de haber notado que Rin retrocedió cuando mi nombre fue pronunciado tan fuerte.

Supongo que no fue tan extraño encontrarme con él, el edificio Companion no está muy lejos y este es el mercado más grande de Whiterun, sin mencionar que probablemente sobresalgamos como un pulgar dolorido.

"Amigo mío, te ves mejor después de nuestro entrenamiento, mucho menos suciedad en tu cara". Se acercó, golpeándome el hombro. "¿Y quiénes son estas hermosas damas?"

Me estremecí un poco ante la mención de nuestro entrenamiento. Era principalmente yo comiendo tierra o avergonzado por mi falta de habilidad en el área. Bueno, supongo que la falta de habilidad es relativa.

"Tú debes ser Thorum, yo soy Artoria Pendragon, la novia de Wilhelm y la guardia de Rin". Artoria fue la primera en presentarse.

"Bienvenido, Lady Pendragon." Thorum dio un saludo cortés. Will ha hablado mucho de ti.

"Soy Jinn, también la mujer de Wilhelm". Ella le sonrió a mi amigo.

"Lady Jinn, también se ha hablado de ti, pero él no mencionó tu color exótico y encantador". Thorum fue suave con el cumplido, y si no lo supiera mejor, podría haber estado preocupado.

"Oh, eres tan dulce como dijo". Jinn se rió.

Rin Tohsaka. Rin finalmente habló. "Soy alumno de su abuelo". Era educada, aunque un poco franca.

"Es un placer conocerla finalmente, Lady Tohsaka". Thorum saludó, teniendo un pequeño problema con la convención de nombres. "Ven, déjame invitarte a todos a comer y beber, podemos intercambiar historias a expensas de Will". Thorum se rió.

"¿Sabes qué? Me encantaría escuchar algunas historias". Rin me miró con maldad. "¿Qué es eso que dijiste sobre el entrenamiento?"