En el instituto informaron que jueves no dictarían clases, y el viernes aun seguirían investigando sobre los asesinatos. 

Mejor para mi. Temía a que llegara el viernes y Osana confesara sus sentimientos a Senpai debajo del cerezo. Bueno, al fin y al cabo, iba a impedirlo de alguna manera, pero em...hubiera estado bastante complicado. Lo bueno es que tengo una semana mas para pensar en como demonios me desharé de ella.

Durante todo el fin de semana analicé cada movimiento que iba a hacer. Ya no podía cometer errores. La última vez casi me cuestan muy caros.

Acostumbro a espiar a Taro en mis tiempos libres, en realidad...siempre lo hago (¿Y cómo no hacerlo?). Pero hice una pequeña excepción durante esos dias.

Si. Investigué a ese tal "Budo Masuta". No me pareció necesario averiguar su rutina fuera del horario escolar. Solo lo busqué a través de sus redes sociales. Eso me basta para saber de todo.

Es un chico bastante popular, y muy amigable viendo la cantidad de personas que lo siguen. Se destaca por su personalidad heroica y su fortaleza y... nada. No encontré más de lo que ya sabía de él.

Tal parece que, por obviedad claramente, tiene cierto desprecio hacia los delincuentes.

Es interesante. Tal vez puedo inculpar a alguna tonta delincuente por el asesinato de Shima y ya me lo quitaría de encima. Aunque sería difícil, a no ser de que les plante evidencia falsa y Budo vaya tras ellos.

Un momento. ¿Por qué estoy planificando tantas cosas? Ese muchacho no será capaz de descubrirme. Solo es un idiota que quiere hacerme creer que me detendrá. ¿Por qué diablos dudo tanto?

"...La próxima vez que te vea te mataré"

Claro. Aun recuerdo las "amenazantes" palabras de Masuta. Ja, seguro que el líder del club de artes marciales va a matarme. No me hagan reír. Es probable que sienta rencor, odio hacia mi, pero no podría cargar con el peso de mi muerte. Solo alguien al que le preocupan sus propios intereses es capaz de algo así. Alguien...como yo.

De nuevo lunes. Se siente un clima bastante pesado. 

Vamos...solo fueron dos muertes. No es para tanto.

Mientras guardaba mis cosas en el casillero, noté que a mi alrededor hablaban casi susurrando sobre Kokona y sobre Shima. ¿Tan populares eran?. Disimuladamente hacia que acomodaba mis libros para poder escuchar lo que decían.

Como sospeché, muchos culpaban a la banda de delincuentes. Perfecto.

-No lo se...si he escuchado que agredieron físicamente a varios estudiantes pero...¿Matar? De lo que yo sepa jamas lo han hecho.

Voltee a ver. Esa voz me sonaba conocida. Repugnantemente conocida.

Masuta, de nuevo. Se encontraba hablando con el resto de su club cerca de los casilleros.

-Podría ser Sensei, pero no hay que confiarse- le decía mi compañera, Mina Rai.

-Es verdad- afirmaba uno de los chicos- ¿Desde cuando defiende a los delincuen...?

-¡No estoy defendiendo a nadie!-gritó Budo haciendo que sus discípulos se sobresaltaran. Y lo admito, yo también me sobresalté un poco.- Solo estoy analizando la situación. No me importa si la policía no encontró pruebas ¡De alguna forma u otra encontraré al asesino!

No me di cuenta en que momento se decidió a voltear hacia donde yo estaba. Me observaba sin alguna expresión, como si de pura casualidad hubiésemos conectado miradas. 

Cerré la puerta de mi casillero y me fui de ahí; no quería verlo ni soñando. Perderá su tiempo si intenta encontrarme. Problema de él.

Me dirigí hacia la fuente para ver como se encontraba mi Senpai. Manteniendo su rutina habitual, lo vi en la fuente leyendo su libro, pero su cara era distinta. Irónicamente parecía desconectado de su lectura. Lo veia...¿Deprimido? Ay no...Senpai...No puedo verte así.

Pero...tampoco puedo acercarme. Tengo miedo de actuar como tonta y que te enfades conmigo y...

¡¿Osana?! 

¿P-por qué se te está acercando tanto?

Me aproximé para ver que hacían. Ella se sentó a tu lado. ¿C-cómo se atreve a tal cosa?

Hablaban muy bajo. No puedo escuchar lo que están diciendo. Pero...t-tu sonreíste, y en consecuencia ella se sonrojó. 

La mataré...

Parecía que iba a acercarse mas...y tu la dejabas. ¿P-por qué Senpai?

Justo en ese instante ella se apartó de ti como si hubiera estado avergonzada y se levantó bruscamente. Mejor para ella. Un segundo mas y la asesinaba con lo primero que encontrase.

-¡V-vamos! ¡No te quedes ahí Baka! ¡Acompáñame o llegaré tarde a mi salón! 

Al decir eso Osana tomó la mano de MI Senpai y prácticamente lo arrastró para que fuera con ella. Agh...cada día le tengo mas odio.

Iba a irme a clases también, pero me di cuenta de que había algo tirado cerca de la fuente.

Me acerqué solo por curiosidad. Era un libro. No...es....

¡Su libro! ¡Es el libro de mi Senpai! ¡Que suerte tengo!

Lo tomé rápido y lo observé. Esto se verá genial en mi altar.

Pero...Senpai lo lee todos los días... No me gustaría verlo aburrido y sin nada que hacer. Además... si no tiene que leer, no tendrá alternativa mas que hablar con Osana. Y si habla con Osana...¡No puedo permitirlo!

Dudando un poco, me dirigí velozmente hacia el salón de Taro. De seguro no habrá nadie aun, así que solo dejaré su libro en su pupitre y me iré. No es tan difícil.

Llegué y el salón estaba vacío. Fuí hasta el lugar de Senpai y dejé cuidadosamente el libro sobre él. Me imagino lo tierno que se debe ver estudiando. Qué lástima que no estamos en la misma aula.

-Disculpa...creo que este no es tu salón.

Lo que me faltaba.

-No, claro que no.- coincidí dándome la vuelta para tener de frente al imbécil de Budo Masuta.
 
-¿Puedo preguntar que haces aquí?

-En primera, ya estas preguntando, y en segunda...-pude ver como soltó una pequeña risa ante mi comentario. Sutil, pero lo noté. No le di importancia.- Solo...quería devolverle este libro a...Taro Yamada.

Miró hacia el pupitre en donde había puesto el libro. Luego volvió a verme a mi. Es increíble lo desconfiado que puede llegar a ser este joven. 

-Que amable de tu parte.- me elogió.- Pero...¿Por qué no se lo das a él?

¿En serio va a hacerme tantas preguntas?

-Tengo que irme.- dije para largarme de una vez por todas.

-Espera.- me detuvo antes de que atravesara la puerta- ¿Cual es tu nombre?

En cualquier momento voy a golpearlo por tanta preguntadera.

-Ayano.

-Ayano entonces...- volteó la vista antes de seguir. No tengo idea de que quiere decirme, pero yo solo quiero irme. Ya.- tu...¿Conocias a Shima? Ya sabes...la chica que fue...asesinada.- dijo eso último con algo de dificultad.

No entiendo por qué...me pregunta eso tan de repente.

-Yo... En realidad no. Tal vez cruzamos palabras alguna que otra vez pero... No se mucho sobre ella.

Esta vez estaba siendo sincera. Falsamente sincera.

-Esta bien. Comprendo.- me dijo con evidente tristeza.

-Lo siento...- dije intentando fingir empatía. El me miró. Me puso un tanto nerviosa porque no me decía nada, asi que continué- Lamento lo que sucedió con tu amiga. Y con tu...compañera- mentí, mirando el pupitre que antes pertenecía a Kokona.

Él me sonrió. Me causa bastante escalofrios. Tal vez porque nuestro último encuentro no fue presisamente...amistoso.

-Gracias.

Yo asentí y por fin pude irme hasta mi salón. Afortunadamente aun no había llegado la profesora, y además, la conversación que tuve con Budo fue rápida, por lo que no me encontré con Senpai. No es que no quiera, pero... No quiero hacer el ridículo en frente de él.

Había visto en los pasillos unos carteles en las paredes (no es que quise verlos, sino que se encontraban por todas partes), que avisaban que el supuesto baile de este viernes habia sido movido al siguiente. Comprensible supongo...

Mientras la profesora corregía algunos trabajos en su escritorio, aproveché para sacar mi celular. Tenía un mensaje de Info-chan.

//En el receso ven al info-club. Es importante. De antemano te advierto que no tengo muy buenas noticias para ti//

Grandioso...parece que será un largo dia.