Cuando inicié este libro sabia que habría escenas duras, pero realmente necesitaba documentarlo de la manera en la que lo se hacer: escribiendo. 

Mi inspiración vino de un vídeo (Puedes verlo en multimedia). Lloré como por media hora imaginándome los horrores que puede vivir un perro en las calles, más aun en países latinos como en el que yo vivo y mucho de ustedes también habitan. A veces he pensado que la gente ha perdido un poco el corazón con los animales y no solo hablo de perros, hablo de todo tipo de animal, por eso quise agregar la caza ilegal, animales que son considerados plagas o aquellos que se utilizan para ropa o cosméticos. 

Créanme, yo estoy lejos de ser un alma pura como la que buscaba Firulais en la historia, al final soy humana y lo que nunca entendió Firulais por su inocencia es que los humanos erramos demasiado, pero la mayoría intenta de aprender de cada metida de pata que nos echamos.

Algunos pensaran que las escenas de los destripadores fueron un poco exageradas, pero hay tanta maldad en este mundo que estoy segura que cosas como esas si se ven. Yo misma he visto cosas feas que me gustaría cambiar y que a veces uno se encuentra atado de manos porque tu propio país no ayuda a que las cosas cambien.

Espero haber llegado con esta historia a tu corazón, traté de abordarla con el humor que me caracteriza pero con mas realidad que ninguna otra de mis historias.

Gracias a todos por leer y recuerden, hagamos mas el bien y ayudemos a cualquiera que nos necesite, mas que todo a aquellos que no pueden defenderse.