UNO


Un cielo nocturno cubría aquella ciudad, junto con unas cuantas estrellas descansando en el, así como la brillante luz de la luna que iluminaba el camino de un pobre chico, que caminaba en una sola dirección, con un solo pensamiento dando vueltas dentro de su cabeza.

Ya era algo tarde, mas él no parecía darle tanta importancia, había salido hasta hace poco de su casa, sin darle una explicación a sus padres, un simple "saldré a caminar", fue su única excusa para ellos, claro que no lo cuestionaban, pues entendían a la perfección cual era su destino, el lugar al que se dirigía su único hijo.

Las calles estaban desiertas pese a no ser tan noche, no habían carros recorriendo las calles, el ruido de unos cuantos grillos se escuchaban en el camino que él seguía.

Una leve brisa fresca de vez en cuando golpeaba el rostro del chico, más que golpe, era como una caricia en sus pálidas mejillas, y esa caricia, resulto ser tan nostálgica, cálida y familiar para él, una caricia que hizo que una diminuta sonrisa se formara en sus labios y sus ojos brillaran como antes lo hacían.

***

Detuvo su caminar, mas todavía no llegaba a su destino, vio una pequeña banca bajo un gran árbol que dejaba caer unas pocas hojas, camino hasta el lugar y se sentó, juntando sus manos levanto la mirada, no al cielo, no a las estrellas, si no a la luna, que en todo momento lo había acompañado en su trayecto.

Sin darse cuenta comenzó a recordar, diversos fragmentos de lo que alguna vez fue llenaron su cabeza, cada uno los recordaba especialmente, y guardaba cada momento, cada recuerdo en una parte de su corazón.

Que maravillosos días...

Sí, eso era lo que pensaba, pero, ¿por qué hablaba de antes?, de un tiempo pasado donde todo para él había sido maravilloso, y ahora todo lo contrario, un simple recuerdo.

-¿Por qué tenía que ser así? _decía hablando por primera vez, ya que desde que salió de su casa solo había permanecido en silencio_ Dime porque tú, siendo tan inocente llegaste a irte de mi lado, ¿Cuál fue la razón de que decidieras marcharte de esa forma?.

Otra suave brisa soplo por sus mejillas, las hojas del árbol caían a su alrededor y su mirada seguía fija en la luz de aquella luna aun brillante que protagonizaba el cielo.

-Las sonrisas que me dabas, las sonrisas que se asomaban en tu rostro con cada broma que hacía, en cada momento que tu y yo pasábamos, en los momentos en que estábamos todos juntos... _cerro sus ojos volviendo a aquellos momentos donde lo que iluminaba su día, era aquella sonrisa_ Yo jure protegerla, jure que no estarías triste nunca más... Pero fallé,  no me di cuenta, cuando esa sonrisa comenzó a desaparecer, no me di cuenta que la sonrisa que dabas, no era la misma que antes, solo era una máscara para ocultar como te sentías...

Abrió sus ojos al sentir como algo caía sobre su cabeza, llevo una de sus manos para quitar lo que fuera que tuviera, y al bajarla se dio cuenta de que era, una flor, una flor blanca con un tono suave de amarillo, la flor favorita de ella, mordió sus labios tratando de contener sus lagrimas, pero sin dejar de recordar aquellos bellos momentos.

-Esa alegría que desbordabas todos los días, esa aura tan cálida que nos dabas a todos, que me dabas a mi... ¿Cómo no me di cuenta de que ya no estaba?, ¿Cómo no me di cuenta de que no era lo mismo?, Tal vez solo no quería verlo, tal vez fui solamente ciego... Solo me fije en tu exterior y no en tu interior...

Un suspiro salió de sus labios, decidido a seguir su camino se levanto de aquella banca y comenzó a alejarse, no sin antes darle una última mirada, ese lugar también significaba mucho...

  Fue hace tan solo unos pocos días antes de que tomaras esa decisión...  

*Flash back*

-Rapunzel, no te vayas a caer por favor _decía preocupado mirando como la chica brincaba sobre las bancas que estaban ahí_.

-Tranquilo Jack _decía animada para seguido detenerse en una y sentarse en ella_ Hay que disfrutar la vida.

-Pero no arriesgándonos _se acerco y se sentó a su lado sin dejar de mirarla_ Eres tan inocente...

-Y por eso mismo quiero experimentar... vivir cosas que nunca he hecho.

-Solo déjame estar contigo entonces _tomo su mano con delicadeza y la miro a los ojos_ déjame vivir esas aventuras contigo.

La chica solo le dio una sonrisa tímida, correspondió al gesto del muchacho entrelazando sus dedos con los de él, para seguido quedarse solo sumidos en un silencio para nada incomodo, sino tranquilo, solo el ruido de las hojas de los arboles moviéndose con el viento y el sonido de los animales a su alrededor.

*Fin del Flash back*

-Parecía todo normal, seguías siendo tú... _siguió su camino alejándose de aquel lugar_ ¿Por qué no logre ver lo que de verdad sentía tu corazón?, Teníamos muchos planes por vivir juntos, y con los demás...

¿Qué te hacía falta?, ¿En qué momento paso todo?.

-Una persona tan maravillosa como tú... no merecías eso, ¿cómo no me di cuenta de la tristeza que te invadía?, ese sentimiento que sentía tu frágil y delicado corazón que ahora no late mas...

Llego a su destino, una suave neblina recorría el lugar, tanto la entrada como el interior, no se sentía ni frió ni calor, dejo salir otro suspiro, y con su fuerza decidió dar el primer paso y entrar, una vez pasando aquella reja negra, comenzó a pasearse por aquel lugar silencioso, triste, nostálgico pero tranquilo a la vez, llego a su destino, se dejo caer de rodillas sobre la tierra fría que cubría ahora el lugar donde yacía la mujer que amaba.

Mirando a su tumba, no pudo evitar recordarla, su tés morena clara, su suave piel que le gustaba sentir en cada abrazo, donde se sentía seguro y en casa, en cada caricia, en cada noche que pasaban juntos, sus ojos verdes esmeralda, en los cuales a él le gustaba perderse y que le recordaban fácilmente al césped en el cual a ella también le gustaba correr y acostarse a mirar el cielo, su cabello largo y rubio, como si el mismo sol estuviera en ella, sus labios en un rosa suave, aquella mirada que te hacía sentir en el paraíso, esa sonrisa que sin una palabra te decía... "Todo estará bien" y con la cual tu podías sentirte tranquilo.

-Oh Punzi, _dijo llamándola por el apodo que usaban todos sus amigos y su familia con ella_ no sabes cuánto te extraño, cuanto te extrañan todos los demás, nuestros amigos, tu familia... Ojala pudiéramos regresar el tiempo... Ojala siguieras aquí con nosotros... Te necesito.

No sabe si fue su imaginación, pero pudo asegurar que sintió como si unos brazos lo rodeaban por atrás en un abrazo, y como sentía que acariciaban su mejilla, ese tacto, ese sentimiento, ese calor le recordó a ella... y sin poder contenerse más, las lagrimas salieron de sus ojos y resbalaron por sus mejillas, se había contenido todo este tiempo, pero uno tiene su límite y él había llegado al suyo, se acomodo de un modo en el que él estaba correspondiendo aquel abrazo, y aun que estaba triste, también sentía felicidad, sabía que era ella... ella estaba con él en ese mismo momento... no físicamente, pero estaba con él, lo sentía, sentía su esencia, su calor, su amor.

-Te Amo Punzi... siempre te amare...

Un susurro paso sobre sus oídos, sabía que significaba eso y fue algo que hizo que su corazón volviera a latir con intensidad, sabía lo que era...

"También Te Amo Jack"

Sintió una vez más como lo abrazaban con fuerza, un abrazo diferente al otro, este abrazo lo sentía más como una despedida, por lo cual devolvió el gesto con mayor fuerza, mayor sentimiento y un mayor cariño, demostrándole a ella que efectivamente, el amor que sentía por ella no había cambiado, ni cambiaría, seguiría ahí y aumentaría, ella seguiría en su corazón por siempre. Unos segundos después, sintió como poco a poco lo iba soltando, lo cual lo hizo sentirse por ese momento vacío, pero también totalmente conmovido.

-Estarás conmigo, ¿verdad? _ dijo mientras ponía sobre la tumba de ella, aquella flor que había caído en su cabeza en aquel lugar lleno de recuerdos, miro la flor y pudo ver como una brisa la acariciaba, pues los pétalos se movieron, y él sabía que esa era la respuesta, aun que no la pudiera escuchar, sabía que ella le había respondido.

"Siempre..."

Se levanto y dio una última mirada a la lapida donde descansaba ella.

"Recordamos con Amor a Rapunzel Corona"

"Amada hija y amiga"

Se dio la vuelta y salió de aquel lugar donde más personas descansaban, una sonrisa volvió a formarse en su rostro, si, ella ya no estaba más... y tal vez nunca sabría el porqué ella tomó  la decisión de marcharse, pero sabía que ella estaría con él y lo amaría por siempre.

Su amor sería eterno.

Además, ambos sabían, que algún día, se volverían a ver y volverían a estar juntos, como lo estuvieron en esta vida y en las que seguirán.

Fin.

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