No todo es un cuento de hadas

[Mi reflejo, Mulán]

¿Puedes simplemente escucharte? No paras de hablar, una señorita es más recatada. Pareces una loca.

Calladita te ves más bonita.

¡Alexa ya estás grande!

¡Madura!

¿Por qué sigues guardando eso? Son juguetes para niños. ¿Acaso tus papás no te dice nada? Se nota que tu madre no te pone atención.

¿Por qué no te comportas como las chicas de tu edad? ¡Sal! Intégrate a las fiestas y deja de encerrarte en tu habitación.

¿Para qué quieres salir? No tienes amigos, deja de rogar por atención.

¿Puedes dejar de reír como una desquiciada?

No seas escandalosa, molestas a los demás. No es de buen gusto que rías así.

¡Cállate!

¿En serio? ¿Gastronomía? ¡Esa no es una cartera! ¡Te vas a morir de hambre!

¿A qué vas a esa escuela? ¿Quieres aprender a cocinar? ¡Patética!

¡Basta, Alexa! A nadie le importa la opinión de una mujer.

Soy mayor que tú y es obvio que tengo la razón.

Alexa despierta sobresaltada en su cama, últimamente ha tenido horribles sueños que le recuerdan gran parte de su juventud. Muchas personas, a quienes no desea llamarles familia, le hicieron mucho daño. Por más que sus padres buscaron defenderla, la semilla de la inseguridad ya había germinado dentro de ella.

Por mucho que finja, aún no lo ha superado por completo, la terapia ayudó un poco, pero el resto se quedó en ella. Alexa debe aceptar lo que es para que todo lo demás fluya.

Como si fuera una mala jugada para ella, esa tarde, mientras navega por sus redes sociales, unas imágenes captan su atención. Después de todo, sí habían conseguido imágenes de Chris Evans y su "nueva conquista", como aquel blog la llama. No saben su identidad, pero se aprecia mejor su rostro. Comete el error de leer los comentarios y absorber todo lo que dicen de ella.

Nadie la conoce y los comentarios al azar parecen encajar con sus mayores miedos. Sus defectos parecen brillar en un resaltador fluorescente. Las fotos no se expanden tanto, pero sabe que ahora están en búsqueda de su identidad.

¿Darán con ella?

¿Cómo lo enfrentará?

¿Está lista para esto?

—¡Alexa! Te buscan —dice Jack ingresando al pequeño cuarto en donde comen y descansan —. ¿Estás bien? —pregunta al notar la tristeza en su mirada.

—Lo estoy, Jack, sólo pensaba —murmura y limpia un poco sus mejillas.

—Pues entonces no pienses tanto —le dice y ella sonríe levemente.

—¿Quién me busca?

—Un señor elegante —le comunica.

Alexa lo acompaña hasta el frente de la pastelería, en efecto, es un señor con aspecto elegante.

—¿Señorita Alexa Smith? —pregunta aquel sujeto y ella asiente —. Soy el licenciado Adam Williams, ¿Podemos hablar?

—Claro, vamos —dice, y ante la atenta mirada de Jack, lo conduce hacia la oficina de Helen.

Alexa observa que aquel hombre toma de inmediato asiento y abre el portafolio que lleva con él, de inmediato saca un grupo de hojas engrapadas y se la extiende.

—¿Qué es esto? —pregunta la chica confundida.

—La señorita Helen Blake dijo que usted quería leer el contrato de compraventa antes de firmarlo, espero que quede conforme con los beneficios que obtendrá y le aseguro que no encontrará mejor oferta en el mercado —comienza a decirle —. Mi representado está muy satisfecho con la fama que ha adquirido este local y está entusiasmado por fusionarlo con Piero's —le dice.

Alexa se queda paralizada.

¿Vender Delicious a Piero's?

La cadena de pastelerías Piero's es una de las más grandes en el mercado. Tiene una fama impresionante y la pastelería italiana manda en ella. Hizo algunas visitas ahí durante su preparación como repostera, sin embargo, nunca le interesó como un trabajo, siempre quiso hacer algo por su cuenta.

—Le explico que, de aceptar estos acuerdos, usted tiene la oportunidad de permanecer en este local, claro, como una empleada más. Su experiencia le puede garantizar que sea la encargada en jefe, pero tendrá que pasar por la misma evaluación que el resto —continúa el señor Williams hablando —. Hay más cláusulas en el contrato, por si gusta revisarlas.

Alexa sigue en shock, pero ante aquellas palabras reacciona.

Mueve con rapidez sus ojos buscando palabras claves. De aceptar la compraventa, esta incluye el secreto de sus recetas de los postres que presentó en el evento de Gucci, todo el mobiliario pasa al control del nuevo dueño, el personal será reemplazado de acuerdo a las necesidades y nada garantiza su permanencia ahí.

¿Qué está pasando?

De pronto todo le da vueltas y siente inmensas ganas de vomitar.

—¿Se siente bien? —pregunta el señor Williams al notar la palidez en su rostro.

Amablemente le ayuda a sentarse mientras Alexa comienza a respirar con dificultad.

—¿Señorita Smith? —la llama preocupado.

Realmente él era inocente, sólo fue a cumplir su trabajo. Es claro que desconocía que Helen nunca habló con Alexa sobre la venta del local y los derechos de las creaciones de la chica.

—¿Desde cuándo han iniciado las negociaciones? —pregunta ella intentando regular su respiración.

—Hace casi dos meses, pensé que estaba usted enterada. A pesar de que la señorita Blake es la socia mayoritaria, usted debió estar informada.

—Nunca lo mencionó.

—Lamento esto, pero las negociaciones ya están muy adelantadas. Es un problema entre ustedes y tenemos una fecha límite para concluir el negocio. Espero que lo hablen pronto.

—No voy a firmar nada —dice Alexa y le devuelve la carpeta con el borrador del contrato.

—Piénselo bien, señorita Smith —y sin decir más, se retira.

Alexa se queda varios minutos más en aquella oficina. Todas las gavetas de la oficina están con llave al igual que la computadora. No hay nada de información ahí.

Desconoce el tipo de negocios que ha estado haciendo Helen, le marca varias ocasiones y ella no le responde, mucho menos le devuelve los mensajes. Está enojada.

Lava su rostro en búsqueda de eliminar cualquier rastro del llanto del coraje que ha tenido, y luego se concentra en la parte de la pastelería. Cede su turno para atender a los clientes, no está de humor para estar al frente.

Sus compañeros le preguntan sobre la visita de aquel sujeto, pero ella no desea hablar con nadie. Se mantiene seria y vuelve a encerrarse en su persona. Intenta llamar de nuevo a Helen y consigue la misma nula respuesta las primeras ocasiones, hasta que por fin lo logra.

—Necesito una explicación —dice Alexa cuando Helen responde.

—Ya te la dieron, ¿leíste el contrato? Sales muy bien beneficiada con todo, puedes seguir en la pastelería —responde Helen con obviedad.

—¿Por qué nunca me consultaste? No voy a firmar para vender esta pastelería.

—Te recuerdo que eres la socia minoritaria, tú sólo horneas y vives en tu cuento feliz con tu novio actor. Yo soy la imagen, yo doy la cara por todos —le recalca —. No todo es un cuento de hadas, la pastelería está en su mejor momento y yo quiero avanzar, ya no me atrae ese giro y el dueño de Piero's está interesado, la oferta es la mejor que recibiré y no lo voy a desaprovechar. El proceso está iniciado y a menos que puedas solventar todo, debes considerar firmar.

—Confié en ti, Helen. Confié mi sueño en ti —dice Alexa con frustración —. Para ti era sólo un negocio, pero para mí es mi más grande sueño.

—Los sueños son sólo eso, sueños. Que una super estrella, como Chris Evans, se haya fijado en ti, no significa que todo es color de rosas, ¿te has visto en un espejo? No estás a su altura. Intenté abrirle los ojos, pero no quiso escucharme.

—¿Todo esto es por él? ¿Por un hombre? ¿Por eso te quieres deshacer de Delicious?

—No te niego que él me interesó, pero esto va más allá. Siempre fuiste la favorita, la mejor, el ejemplo y yo, por más que me esforzara, no conseguía nada. Al principio me interesó esto, pero no estoy dispuesta a volver a quedar detrás de ti, suficiente fue la humillación que recibí en la fiesta. Ya no más, Alexa —y sin más, Helen cuelga.

Cuando Alexa se voltea, se encuentra con sus compañeros, quienes han captado gran parte de lo que Helen ha dicho y tienen una idea del problema, sus rostros los delatan. Intentan acercarse, pero ella los envía a casa.

Alexa se encarga sola de limpiar el lugar y dejar todo listo para el día siguiente. Cuando sale, Chris la espera dentro de su auto. Ella duda en subir, se siente muy mal y no quiere desquitarse con un inocente.

—¡Hey! —la saluda y se acerca a ella para besarla, pero a pesar de que es correspondido, no recibe el mismo ánimo de siempre —. ¿Está todo bien?

—Sí, lo está —responde Alexa mientras se coloca el cinturón de seguridad.

El trayecto al departamento de ella es en completo silencio. Las pocas veces que el actor la observa, ella se nota triste y molesta al mismo tiempo.

Apenas llegan, Alexa baja de inmediato del auto y Chris la sigue, deteniéndola.

—¿Qué pasa? —pregunta él sosteniendo su brazo.

—Nada, quiero estar sola, por favor.

—Alexa... Realmente quería pasar esta noche contigo y hablar sobre algunas cosas, pero ahorita me importa más lo que te pasa.

—¿De qué querías hablar? —pregunta en un hilo de voz, está a punto de quebrarse.

—Pensaba en pedirte que formalizáramos nuestra relación —susurra el actor.

Alexa se rompe al escuchar esas palabras. ¿En serio? ¿Justo ahora? Probablemente debió sentirse feliz, pero está tan estresada y con sus pensamientos hechos un lío, que no puede pensar con claridad.

—No es el momento —murmura Alexa.

—Lo es, llevamos casi dos meses saliendo y quiero esto. Te quiero a ti en mi vida.

—No sé si estoy lista para ser el foco de atención, no sé responder a momentos de estrés por si no lo notaste y... Y n-no estoy segura de estar dispuesta a pagar el precio de una relación contigo —dice en un hilo de voz.

El semblante del actor se tensa, claramente no esperaba esta respuesta.

—Alexa... —murmura Chris.

—Es en serio, necesito espacio. Hasta mañana —y sin esperar más, corre hacia el edificio para entrar.

Chris piensa en seguirla, pero se encuentra tan desconcertado por ese cambio de actitud, que opta por darle el espacio que le pide.

¿Meper donan? ☹️

Por cierto, si es que lo notaron, parece que repetí la canción, pero no. Hubo una confusión y Mi reflejo era aquí, y la canción del capítulo anterior era otra😅 Ya lo corregí.

Espero les guste el capítulo. Gracias por leer ❤️ ❤️