Capítulo 31 "Lo siento"

Las obligaciones no dejaban de acumularse y acumularse, en esta ocasión Smile y yo estábamos preparándonos para una fiesta de lanzamiento, un producto nuevo para los fanáticos de la lectura, libros electrónicos a todo color, audiolibro, diccionario, música y tableta grafica con un diseño ultra delgado, ergonómico, portátil, diferentes colores, algunos con diseños y además, bonitos bolsos transportables, por supuesto mi Smile participó en todo este proceso, merece estar en esa fiesta y disfrutar todos sus logros, por supuesto que también recibirá todos los elogios correspondientes, es un puto genio y lo amo.

Abigail supervisaba nuestras vestimentas, eran las nueve de la noche, afortunadamente se nos ocurrió llegar a casa ayer por la mañana para poder estar bien descansados para hoy, bailaríamos hasta que se nos cayeran los pies.

Llevaba puesto un exquisito vestido largo color rojo vino, un escote sobrio y dos tiras de tela sobre el borde superior de mis pechos, resaltando sus curvas, ajustado hasta la cintura y desde ahí, la falda cae con gracia hasta el piso, pero esa no es la mejor parte, el detalle supremo de este vestido es el corte que comienza desde mi muslo hasta el final de la tela, mostrando mi pierna izquierda por completo, y por supuesto, como conjunto, sandalias plateadas con bonitos diamantes en las correas, pendientes sobrios y un bonito collar también con diamantes, maquillaje de noche, labios rojos, ojos con sombra oscura y brillo en la mitad interior, dándole profundidad a mi mirada, también un reloj y un bolso de mano, ambos plateados, para combinar, me encantaba como me veía esta noche.

Y a mi lado, mi flamante novio, sexy, caliente y perfecto, vistiendo una camisa blanca impecable de la mejor tela, traje negro, gemelos de diamantes en las muñecas, una corbata color vino como mi vestido para combinar, el pañuelo en la solapa izquierda era del mismo color, reloj de diamantes, zapatos de diseñador, y el cabello, maldita sea... Smile con el cabello recogido era mi nueva debilidad, me temblaban las piernas de solo observar su perfecto perfil, esa nariz respingada, esos labios carnosos, esos pómulos prominentes, sus largas pestañas...

Jadee sin darme cuenta, siendo atrapada viéndolo detenidamente por el personal y por él mismo.

— ¿Te gusta lo que ves?

Sonriendo de lado.

— ¿Sacaste esa frase de ligue de algún libro?

Devolviéndole la misma sonrisa.

— De hecho, sí, quería ver que se sentía, demasiado chiché para mi gusto, yo soy mucho más original.

— ¿Y qué me dirías tú, señor original?

— Después, cuando estemos solos — lamiendo sus labios— Haré que te tiemblen las piernas.

Sonriendo ladino.

Respiré con fuerza intentando mantener mi calentura a raya, debíamos salir en quince minutos, con Smile, quince minutos no son suficientes, y después de ese polvo, dudo mucho que pueda bailar toda la noche.

— ¿Es una promesa?

— Es un hecho.

Guiñándome un ojo.

Con eso en mente, ambos terminamos de prepararnos, subimos a la limusina que preparamos para hoy y fuimos directo a la fiesta.

Ya llegando al lugar, recorrimos la alfombra roja tomados de la mano, sonriendo a las cámaras y saludando a quienes ya nos conocían, Smile y yo éramos todas unas celebridades ahora, con el escándalo que protagonizó mi padre y la compañía en la mira, nuestros logros han sorprendido a muchos, llegando a tener nuevos inversionistas para acompañarnos en nuestro futuro próspero.

— Nunca me cansaré de decir que las cámaras me ponen nervioso, tú te ves muy guapa, pero ¿Y si la cámara me toma desprevenido y me veo mal? Esa foto estará en los noticieros y en los canales de chismes, el otro día aparecimos en uno que ponía nota a nuestras vestimentas ¿Y si no elegí bien?

Besé sus labios y tomé dos copas de champagne de la bandeja del garzón que pasó a nuestro lado, entregándole una.

— Te ves exquisito, realmente exquisito, de hecho, no puedo esperar al momento de llegar a casa para desvestirte yo misma y hacerte el amor con ese cabello atado tuyo, nunca creí que me pondría tanto verte así.

Besándolo otra vez.

Realmente se ve sexy, muy sexy.

— Jules ¿Qué haría sin ti? Me das dos palabras de aliento y mi autoestima aumenta del cielo a la tierra.

— Yo siempre voy a estar para recordarte lo increíble que eres.

Acariciando su cintura, bebiendo un sorbo de mi trago.

— ¿Qué? ¿No puedes aguantar hasta llegar a casa para tocarme?

Lamiendo sus labios, posando su mano en mi cintura, bebiendo de su trago.

— No puedo aguantar, me gusta tocarte.

— ¡Jules! ¡Cariño! ¡Por fin doy contigo!

— ¿Abuela?

Sonriendo amplia, fui hasta la mujer y la abracé.

— No te veo desde el funeral de tu madre ¿Por qué eres tan difícil de contactar? Primero, intento llamarte para saber si estás bien, resulta que me bloqueaste, luego me entero que te vas a casar, pero no recibo invitación, después, desapareces, joder, te busqué por todas partes, luego reapareces, y me entero de lo mal que lo estabas pasando y yo ni enterada, ahí caí en cuanta que tú no me bloqueaste ni me sacaste de tu vida, fue el cerdo de tu padre, le dije a tu mamá que ese hombre no era el correcto, pero cuando se dio cuenta... ya era demasiado tarde, y nunca pudimos obtener pruebas.

Habló con pesar sin dejar de acariciar mi espalda en un cálido abrazo.

— Abuela te extrañé un montón, y por mamá... ella está conmigo ahora, la llevé a un buen lugar en mi nuevo hogar, tengo amigos, muchos amigos y muy buenos, y tengo un novio, quiero presentarte al hombre del que me enamoré.

Alejándome un poco de ella, tomando su mano.

— Mi niña enamorada — sonriendo enternecida— Nada me hace más feliz que escuchar que tú eres feliz cielo, en la compañía no quisieron darme tu numero por temas de privacidad, pero no sabes cuánto te busqué.

Caminando conmigo hacia Smile.

— Abuela, estoy bien en serio — sonriendo al chico nervioso frente a mí— Él es Smile Ivanov, mi novio. Si no fuera por él, hubiese perdido la cabeza, es mi cable a tierra, y el hombre que me hace feliz — presentándoselo a mi abuela— Smile, ella es Rebeca Millet, mi abuela, es la mamá de mi mamá, es una increíble persona.

Smile carraspeó como si estuviese despertando de un trance, estirando la mano hacia mi abuela.

— Es un gusto conocerla por fin, Jules habló mucho de usted, le guarda un gran cariño.

La abuela tiró de su mano y lo estrechó en sus brazos con fuerza.

— Gracias, cariño, gracias por hacer a mi niña sonreír otra vez, por salvarla de ese infierno en el que vivía, nunca la vi tan radiante, con sus mejillas rosadas y llena de vida, toda abuela querría ver a su nieta así de feliz, tienes mi completa gratitud cariño.

— Gracias a usted por criar a una mujer como la madre de Jules y darme la oportunidad de conocer a una mujer tan fuerte como esta chica, tan inteligente, tan decidida, tan llena de vida, tan buena... usted no sabe cuanto me ayudó ella, estaba muy perdido antes de conocerla, ahora yo también soy feliz.

Se me soltaron un par de lagrimas al oírlos, mis personas favoritas por fin estaban reunidas.

Hablamos un rato todos juntos partiéndonos de la risa mientras le contábamos a la abuela un par de anécdotas con la pandilla, habían muchas cosas que salían mal, pero también nos divertíamos, le conté sobre las mejoras que hicimos en la casa de la otra abuela, la mujer que me salvó, le conté esa anécdota también, así, rápidamente nos pusimos al día, luego se la llevó un señor bastante guapo a la pista de baile, y ella, soltera, libre y amante del sexo, no se negó y fue con él, haciendo señas con sus manos que se lo follaría más tarde en el baño de hombres, y yo le creía.

— Y con ustedes, la mujer que hizo todo esto posible, hablo de Jules Millet, presidenta de Millet Enterprises Holdings Inc. Por favor suba a dar unas palabras.

Todo el mundo comenzó a aplaudir, observándome.

No me queda más que ir a dar ese discurso, y por cierto, es la primera vez que escucho mi cambio de apellido en voz alta, quería tener el de mamá, me daba asco ser una Kash y que mi compañía llevara el mismo sucio apellido, me alegra haberlo cambiado.

— Ya vuelvo, guapo.

Besé los labios de Smile y caminé hacia el escenario, menos mal Abigail previó este escenario y preparó un discurso para mí.

***

SMILE

Me despedí de mi chica y la vi caminar con elegancia hacia el escenario, con esa sonrisa angelical que todo el mundo ama, tomando de su bolso las tarjetas con la presentación que preparó con anterioridad junto con la señora Abigail, hablando tranquilamente, con palabras compuestas y complicadas que la hacían ver intelectual y comprometida.

— Ah... estoy orgulloso de mi chica.

Bebiendo de mi copa, viéndola desenvolverse con naturalidad en uno de sus dos mundos, cualquiera en el que ella esté, siempre es... perfecta.

Y la amo.

— Vaya... así que al gigoló le soltaron la correa ¿Esperas a tu dueña?

Rodé los ojos, volteando para verla.

— Barbara. Siempre es un gusto encontrarme contigo.

— ¿No te duele el culo por haber sido follado tantas veces?

Palidecí.

— ¿De qué hablas?

— Hablo de esto, Smile de La casa de las conejitas.

Tomó su bolso y tomó una hoja de él, una fotografía mía doblada, acompañando hombres hacia el interior del prostíbulo, siguiente imagen, yo follando con un tipo, siguiente imagen, yo follando con tres tipos, siguiente imagen... yo... patéticamente desmayado siendo cargado por Jules, ella con todas mis cosas encima, parecía muy cansada.

— Ah, esa me la quedo yo, así inició nuestra historia de amor — quitándole la ultima foto— ¿Ahora eres paparazzi?

Guardándola en mi saco.

— ¿Cuánto te paga la presidenta para follar con ella? Yo también podría hacer el esfuerzo si me viste costoso, pandillero hijo de puta, basurero de semen, puto.

— Sí, soy todos esos, y también soy tu jefe, bárbara, el departamento en el que estás, está a cargo mío, trabajas bien, y no quiero que nuestros intereses personales se involucren con lo laboral, yo soy muy profesional.

Bebiendo de mi trago con tranquilidad, no es la primera vez que alguien me llama puto, es lo que fui después de todo.

— ¿Cuántas enfermedades le pegaste ya a la presidenta? Yo si fuera ella, no te tocaría ni con tres pares de guantes.

— Ah no, a Jules no le gusta el látex, y si vas a joderme querida — dando un paso hacia ella— hazlo — quitándole las imágenes, rompiéndolas en mil pedazos— pero no oses involucrar a Jules en esto, ella es buena, y que yo haya sido prostituto no perjudicará su maravillosa carrera, tu no sabes nada sobre mí — dando otro paso hacia Bárbara, ella retrocedió— y soy un pandillero, recuérdalo, tengo muchos amigos que podrían hacerte la vida imposible.

— ¿Estás amenazándome?

Encogiéndose.

— Te estoy advirtiendo.

— ¿Qué está pasando?

Jules hizo aparición en la escena, viendo los trozos de papel a nuestros pies, se agachó con sutileza y tomó uno de estos, levantando la cabeza.

— ¿Quién fue?

Observando a Bárbara y sus secuaces, tres chicas igual de maliciosas que ella.

— Pregunté quien fue.

Enojándose.

— Presidenta ¿Sabía usted que su novio es un prostituto?

Dijo una de las chicas que venía con Barbara.

— Estoy preguntando quien fue María, no te pedí que escarbes en el pasado de mi novio.

Uy... se está enojando.

Quería resolver esto por mí mismo.

— Señorita, no creo que sea buena idea que se involucre con este tipo de... personas — observándome con asco— imagine qué pasaría si la prensa se entera.

— Es todo, las cuatro están despedidas — dijo Jules— Quiero sus cartas de renuncia en mi escritorio el lunes a primera hora, y también las demandaré por difamación, escarbar en el pasado de otra persona y ocuparlo para extorción es un delito muy grave, no permitiré que hablen mal de mi novio. La fiesta terminó para ustedes, señoritas.

Dio media vuelta, tomó su copa y la derramó sobre los trozos de papel, los pisoteó, destruyendo cualquier tipo de prueba, tomó mi mano y nos alejamos.

— Esa perra...

Tomando una nueva copa, bebiéndola por completo.

— Estaba manejándolo bien, no tenías que despedirlas.

Viéndola beber como si no hubiese un mañana.

— Sí, sí que tenía que hacerlo, debiste hacerlo tú ¿Cómo tienes en tu departamento zorras como esas? ¿Cómo se enteraron?

Me encogí de hombros, quitándole la siguiente copa que tomó, bebiéndola yo.

— A mí no me interesa mientras no te afecte a ti, sería un gran escándalo y no quiero perjudicar a la empresa.

— Mis abogados se encargarán de callarlas, tú no te preocupes por nada, y aunque saliera a la luz ¿Qué más da? Yo no me avergüenzo de ti.

— ¿No lo haces? ¿En serio?

Quitándole la copa que tomó de la charola de los malditos garzones que seguían ofreciendo y ofreciendo.

— Para mí eres perfecto tal cual eres — frunciendo el ceño— pero deja de quitarme los tragos.

Señalándome.

— No bebas tanto, te sentirás mal — acariciando su brazo— no estropearé las cosas, voy a cuidar mi imagen desde ahora.

— ¿Qué más da la maldita imagen? A mí me fotografiaron la semana pasada con un top y un short más corto que mi paciencia, cargando un bate y dándole con él a un narcotraficante que quiso pasarse de listo porque quemé su droga la semana anterior a esa — encogiéndome de hombros— la gente siempre quiere hablar de la vida ajena, así su miserable vida no parece tan patética.

Me acerqué a ella, acariciando su entrecejo, estirándolo.

— Olvidemos los temas desagradables, vamos a bailar — tomando sus manos— es tu fiesta, divirtámonos.

Tirando de ella hacia la pista de baile, la acerqué a mi cuerpo y posé una de mis manos en su cintura, meciéndonos de un lado hacia el otro, aprovechando la melodía lenta.

— Entre sus fotos, encontré algo curioso.

Dije.

— ¿Qué más tenía esa perra?

— Una foto de mí, siendo cargado por ti. Ese día que me sacaste del prostíbulo y tomaste todas mis cosas para salir, estabas muy cargada, no sé cómo pudiste caminar así, cómo bajaste las escaleras, con mi peso ya era casi misión imposible.

Giró entre mis brazos y sonrió, apoyando su mano en mi hombro, relajándose.

— Cuando la persona que quieres está en problema, nuestra fuerza aumenta. Todo en lo que pensaba era en ti, quería salvarte a ti.

— Esa es una buena foto, una gran historia para contar en el futuro.

Rei.

— Te amo.

Apoyando su rostro en mi pecho, sin dejar de bailar.

— También te amo, preciosa, también te amo.

***

JULES.

Antes de darme cuenta, un año pasó desde que conocí a los chicos de la Free Souls, y este debería ser un momento feliz y nostálgico, pero era todo lo contrario, estábamos metidos en un gran problema hasta el cuello.

Smile vestía uno de sus impecables trajes, llevaba el cabello atado y no sonreía, ese era el principal indicio de que algo no estaba bien.

Hace unos meses, cuatro chicas de la empresa fueron despedidas por intentar difamar a Smile, como consecuencia, las despedí y competí el error de no cumplir mi palabra y demandarlas, por despecho, liberaron todas las imágenes que poseían a la prensa, y por semanas, no han dejado de hablar de nosotros, de él, y por días he visto como su sonrisa se ha ido desvaneciendo, eso... me destruye, odio verlo triste.

Smile decidió dar una rueda de prensa para aclarar la situación, dice temer por la reputación de la empresa, y esa es la ultima de mis preocupaciones. Ahora está rodeado de cámaras y flases, dos cosas que odia, para aclarar algo de lo que no tuvo la culpa.

— ¿Podemos ir y sólo hacerles una visita a esas chicas?

Angry estaba más molesto de lo habitual, furioso en realidad.

No se ha despegado de nuestro lado desde que se enteró de lo que le hicieron a su hermano.

— Ya las busqué, las ratas escaparon del país — refunfuñando como él— Tenía pensado reventarles la operada nariz que tienen.

Viendo la incomodidad de mi hombre.

— Perras...

Apretando los puños.

— Buenas tardes, agradezco a todos por venir.

Angry y yo desviamos nuestra atención hacia nuestro castaño favorito, pobre temblaba como gelatina, apretando ambas manos para disimular su nerviosismo.

— Mi nombre es Smile Ivanov, tengo veintiún años, y sí, fui prostituto, no ocultaré parte de mi pasado porque no fue algo que yo eligiera. Tengo un gemelo, ambos fuimos criados bajo la mano de mi madre, una prostituta bastante conocida dónde yo vivo, nos crío en ese prostíbulo y nos vendió a pederastas desde que tengo uso de razón, les encantaba cuando nos resistíamos, les encantaba vernos llorar. A los dieciséis, ya nos había hecho una buena reputación y venían de todas partes para abusar de nosotros, lo pasábamos horrible, pesadillas dormido o despierto. Mi gemelo logró salir de ahí, pero yo no tuve la misma suerte, mi madre me manipulaba, y cada vez que salía de ahí con la intención de no volver, iba con sus guardias y me arrastraba por la fuera directo al prostíbulo, quedándose en el cuarto y drogándome antes de la visita de cada cliente, asegurándose de que no fuera a escapar, porque para ella yo era un buen negocio. Quise contarles esto sobre mi vida privada, porque no quiero que mi novia se vea involucrada en mi caótico pasado, Jules fue la única que veló por mí cuando sentí que ya no podía más, ella pagó por mi libertad, le pagó millones a mi madre para que me dejara en paz, esa mujer... siempre tuvo esos planes en mente, siempre quiso usarnos, teníamos un buen padre, el señor Ivanov nos dio su apellido y nos quiso, hasta los cinco años estuvo presente en nuestras vidas, ese fue el último recuerdo feliz que tuve de mi infancia, mi madre le dijo que morimos en un accidente, fingió todo, desde el funeral hasta el entierro, e hizo de nosotros unos muñecos. Yo jamás quise ser un prostituto, jamás lo disfruté y es por eso que públicamente haré mi denuncia contra mi madre, porque sé de niños a los que les está haciendo lo mismo que a mí y a mi hermano nos hizo por años, ya no puedo callarme.

Las voces de los reporteros se hicieron escuchar apenas Smile calló, haciéndole incómodas preguntas que él respondió sin reparos, aclarando todas las dudas habidas y por haber, todas, hasta las más dolorosas, todo para no involucrarme a mí, para no involucrar a la empresa, cosa que yo no necesitaba joder, yo quería mantenerlo a salvo, yo quería... protegerlo.

Cuando todo terminó, él no vino hacia nosotros, sólo susurró un "Lo siento" antes de montar su motocicleta y alejarse.

¿A qué se refiere con lo siento? ¿Qué está pasando? ¿Qué va a hacer?



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BUENAS BUENAAAS

LES TRAJE UN CAPITULO BASTANTE TRISTE LA VERDAD, BEBÉ SMILE ESTÁ ENFRENTANDO SU PASADO DE LA PEOR FORMA POSIBLE, ÉL DEBERÍA PODER HABERLO ENTERRADO Y NO HABLAR MÁS DE ELLO, PERO AL PARECER, NADIE LO DEJARÁ HACERLO, Y SIENDO AHORA PRACTICAMENTE UNA FIGURA PÚBLICA, DEBIÓ DAR DECLARACIONES, CUALQUIER COSA CON TAL DE PROTEGER A JULES

BEBÉ SMILE ES TODO LO QUE ESTÁ BIEN EN ESTA VIDA, CUIDENMELO QUE ESTÁ CHIQUITO

ESA CUATRO PERRAS MERECEN LA MUERTE, NADIE TOCA A MI BEBÉ Y SALE IMPUNE, ESPERO QUE EL AVIÓN EN EL QUE FUERON FALLARA.

JULES Y SMILE HAN TENIDO MUCHO AVANCE A LO LARGO DE LA HISTORIA, SUS PERSONAJES HAN TENIDO MUCHO DESARROLLO

BEBÉ ANGRY SIEMPRE ACOMPAÑANDO A SU HERMANO, YO SIMPLEMENTE LOS AMO, TENGO PROBLEMAS CON ESTE PAR DE BEBÉS

SMILE QUE VAS A HACER? ¿POR QUÉ TE DISCULPAAAAAS?

TENGO MIEDO SEÑORES

NOS LEEMOS MÁS PRONTO QUE TARDE, LES TENGO UNA SORPRESA PARA EL PROXIMO CAPITULO 

BESOOOOOOOS 

QUE TENGAN BONITO MARTES

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