Como si fuera una manta eléctrica
—¿Leon? ¿Dónde te has metido?—preguntó Koga, mirando a su alrededor en busca de su corgie.
El Oogami acababa de llegar de uno de sus trabajos como idol, y lo único que tenía ganas de hacer en ese momento era pasar un tiempo con su perro, Leon. Sin embargo, llevaba un par de minutos buscándolo, pero no había rastro de él.
Viendo que allí no se encontraba, optó por buscarlo en las habitaciones de la planta, sin obtener resultados. Al acercarse a la zona del ascensor y las escaleras, le pareció ver unas pequeñas huellas de patas, por lo que supuso que su mascota había subido a uno de los siguientes pisos.
Por inercia, Koga no se detuvo en el segundo piso, sino que fue directamente al tercero, descubriendo así que las huellas conducían a uno de los dormitorios.
—¿El dormitorio de Sakuma?—susurró el Oogami antes de entrar en el cuarto del susodicho.
El idol emitió un suspiro de alivio al ver que su perro se encontraba sobre la cama de Rei, agitando la cola, mientras era abrazado por el líder de UNDEAD.
—Así que estabas aquí, ¿eh?—preguntó Koga al mismo tiempo que esbozaba una leve sonrisa y se acercaba con pasos ligeros a la cama del Sakuma.
Leon emitió un leve ladrido al ver a su amo, que le acarició con cariño la zona de la cabeza entre las orejas.
Koga miró entonces a su líder:éste respiraba acompasadamente, y su rostro relajado daba a entender que estaba en el séptimo sueño. El Oogami frunció el ceño al ver unas pequeñas ojeras bajo el párpado inferior del Sakuma, dando a entender que últimamente o no dormía o no podía dormir bien y no dormía lo suficiente.
—¿Wanko?—susurró de pronto Rei, logrando asustar al mencionado.
—¡Ah, Sakuma!—exclamó el de cabellos platinados.
—No grites, que tengo sueño—musitó el líder de UNDEAD antes de abrazarse más a Leon.
—A todo esto, ¿qué haces con mi perro?—preguntó Koga mientras se sentaba en el borde de la cama.
—Tenía frío, y Leon apareció por casualidad, se subió a mi cama y se tumbó a mi lado. Él estaba calentito, así que aproveché y lo usé como manta eléctrica—contestó el Sakuma, aún adormecido. Acto seguido, sonrió y dijo—:Fu, fu. ¿Acaso estás celoso de que me haya buscado a otro perro?—Rei se incorporó en la cama, soltando a Leon, que bajó al suelo del dormitorio, y tomó del cuello de la camiseta a Koga, confundiéndolo—. Sabes que tú eres el único perro en mi vida, Koga.
Antes de dejar al otro responder, el de cabellos azabaches tiró de él hacia delante, causando que ambos cayeran sobre la cama. Sin perder ningún segundo, Rei se abrazó al torso de su compañero, atrapándolo entre sus brazos.
—¡¿Pero qué te crees que haces?!—exclamó el Oogami mientras trataba de librarse del agarre del mayor. Sin embargo, éste ya había cerrado los ojos, y se aferraba con fuerza a la espalda del contrario.
Koga alzó la mano para separar el cuerpo de Rei del suyo, mas se detuvo al ver el rostro del de cabellos azabaches:éste fruncía los labios y el ceño y temblaba; verdaderamente tenía frío.
El Oogami suspiró y dejó de hacer movimientos bruscos, lo que calmó al Sakuma. El de cabellos platinados se acomodó en la cama de su superior para después acomodar al contrario de manera que al despertar no tuviera ninguna contractura o molestia cervical; así pues, movió el cuerpo de su superior un poco más arriba, de modo que la cabeza de Rei descansara sobre la zona en la que tenía el corazón.
El miembro de UNDEAD suspiró y se abrazó al Sakuma, causando que éste se estremeciera y entreabriera los ojos.
—Si quieres que te deje usarme de almohada y radiador al mismo tiempo, duérmete de una vez, que mañana hay ensayo y no quiero que te caigas de sueño—susurró Koga antes de colocar su mano izquierda sobre el cabello de Rei, acariciándolo y proporcionándole un pequeño masaje en el cuero cabelludo, relajando al líder de UNDEAD. Éste sonrió al sentir aquello y cerró los ojos, dispuesto a dormir.
Koga pronto también sintió que el sueño se apoderaba de él, por lo que di un puntapié a sus zapatillas, tirándolas al suelo, e hizo un gesto a Leon, que subió a la cama de nuevo y se tumbó a los pies de su dueño.
En apenas un par de minutos, los dos jóvenes y el perro se encontraban durmiendo tranquilamente, compartiendo entre ellos el calor corporal.
-MGGBBRAE
Shot inspirado en el hecho de que canónicamente, cuando Rei tiene frío se abraza al corgie de Koga, Leon.
Espero os guste el shot ^^
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top