Segunda parte.
El mayor cortó el beso cuando el aire se hizo necesario, separó al menor de su cuerpo, sonriendo, y el otro le contestó con una sonrisa lasciva también mientras acariciaba el miembro del mayor por sobre la ropa, varias caricias provocativas, mordidas por parte de SeokJin al hombro descubierto de Kook, lamidas en el cuello del mayor por parte del menor y ya pronto la excitación era tal que el mayor volteó al más joven, quien sin que nada le dijeran apoyó sus manos en la mesa y elevó su trasero. SeokJin apretó su erección contra las nalgas contrarias, y condujo una de sus manos hasta la entrepierna del menor introduciéndola debajo de la ropa, mientras la otra mano sostenía su cadera.
– Hy-hyung… ahh…t-tengo calor… – musitó apenas audible, SeokJin mordió su labio inferior invadido por el fuego sexual que quemaba su cuerpo, sabía que Kook se refería a que su ropa ya sobraba, y no al calor corporal que de seguro estaba sintiendo. Embistió aun con la ropa, y el gemido del menor fue algo sonoro.
– JungKook… contrólate – río sofocado, y jaló el pantalón del pijama junto con la ropa interior ajena, para luego hacer lo mismo con su ropa.
Nuevamente su mano se fue hasta el miembro del menor, esta vez no había tela que molestara, podía masturbarle libremente, acariciándolo, rozándolo, haciéndole desear hasta luego recién agarrarlo rodeándolo con su mano en un movimiento que subía y bajaba por el falo de Kook, el cual se retorcía en la mesa, sus piernas temblaban, y sus caderas se movían solas, sin que su conciencia le mandara, deseando sentir más el miembro firme de SeokJin junto a su entrada, apresándolo entre una nalga y la otra, mientras aquella mano le daba esas deliciosas atenciones.
El mayor no resistió mucho aquella situación, su sexo siendo apresado por aquel trasero tan codiciado ¿acaso Kook veía los muslos que tenía? ¡Por dios SeokJin iba a explotar sino lo penetraba ya!
Extendió sus dedos lo más que pudo tratando de agarrar nalga y muslo del pequeño, lo que fuera, pero necesitaba sentir la carne siendo apretada en la palma de su mano que marcaba los dedos en esa blanca piel. Mientras lentamente, habiendo dejado de masturbar al menor se introducía en él, para luego comenzar un enceguecedor vaivén tan conocido por ambos.
Reprimiendo gemidos para evitar despertar a los demás, el ritmo aumentaba, enloqueciéndolos dentro de aquel mundo de lujuria, desesperación, y dolor por la traición que ambos sentían, hasta el momento en el cual SeokJin ya no aguantaba más, por lo que para estimular al otro a llegar al orgasmo, llevó su mano nuevamente al miembro del menor masturbándolo con poca delicadeza, siendo brusco y rápido, al ritmo de las penetraciones, Kook no demoró mucho después de eso, cuando terminó corriéndose en aquella mano, apretando su frente contra la superficie de la mesa y sus uñas arañándola mientras un jadeo incontrolable salía de sus labios, SeokJin terminó dentro del menor tirando su cabeza hacia atrás y mordiendo sensualmente su labio inferior, dejando que las oleadas de placer le hicieran estremecerse una y otra vez.
– Es-estamos lo-cos por hacer e-esto – entrecortado, con la respiración acelerada, JungKook pronunció aquellas palabras cuando el mayor salió de él, soltando un quejido luego como respuesta a ese vacío reciente.
– Quizás… – pausó antes de seguir hablando para volver a tomar un ritmo de respiración algo normal y luego proseguir – pero NamJoon nos lo hace a nosotros… ¿no dijiste que tenía tu pene dentro de su boca hoy? – sonrió superficialmente, él también tenía un corazón, que ahora estaba roto.
– ¿Qué…acaso quieres tenerlo en tu boca también? – sonrió bromista dándose vuelta para ver al mayor de frente, quien ya se había vestido de la cintura para abajo nuevamente. Pero cuando vio que SeokJin se inclinaba delante de él ya no le pareció tan gracioso. – ¡Hyung! ¿Qué haces? Nosotros… recién…
– JungKook, tienes diecisiete años, se te parará enseguida otra vez… por lo menos… para limpiarlo servirá ¿no? – Kook no lo podía creer, de hecho juraba que el otro sólo estaba jugándole una broma, pero no quiso averiguarlo, actuó antes de eso.
– Iré al baño hyung, ya puedo limpiarme yo solito… – le miró de reojo algo desconfiado, mientras en la mirada del otro se reflejaba cierta picardía que Kook podía jurar que algo ideaba.
– JungKook, ¿te gustaría jugar con NamJoon un rato? – su sonrisa se volvió algo cínica, por un momento Kook temió, un temblor recorrió su cuerpo, pero… NamJoon era un maldito infiel.
– ¿Qué tienes en mente? – sin pensarlo mucho aceptó, entró al baño y SeokJin le siguió.
Ya tenían una especie de venganza preparada, aunque no era algo que alguien con sentido común haría en estos casos, pero la mente de SeokJin era algo extraña, y Kook tan sólo un adolescente que buscaba experiencias nuevas en cada etapa de su vida, ¿y qué mejor que aprovechar las locuras de su segundo hyung? Ya no le debía respeto a NamJoon, pues él había estado en falta antes.
....
Era otra mañana, un amanecer distinto para SeokJin y Kook, quienes no tenían escrúpulos a la hora de fingir que todo estaba bien con NamJoon, el cual al quedarse solo con alguno de ellos dos, le besaba amorosamente, como si nada pasara, como si todo siguiera igual.
Las promociones apenas les daban un tiempo libre para vivir, pero entre tanto ajetreo, NamJoon y SeokJin habían logrado encontrar un momento íntimo para ambos, cuando JiMin, HoSeok, YoonGi y TaeHyung no estaban en el apartamento, y JungKook se encontraba dándose una ducha; en ese momento los mayores del grupo se encerraron solos en la habitación.
– Ji-Jin para, Kook está en el apartamento aun, esperemos que él se vaya – el líder apenas podía hablar pues la boca hambrienta del mayor devoraba sin consideración sus labios, subiéndole la remera, pellizcando su pecho y restregándose contra el cuerpo del menor, que sentado en la orilla de la cama, mantenía a SeokJin sobre su regazo, con las piernas abiertas, el pantalón desprendido, una notable erección y acariciándole el trasero por sobre el pantalón.
– No se dará cuenta… además – algo agitado se separó del mayor y le miró fijamente, quizás con un cierto deje de desprecio. – ¿Qué importa? Si nos ve le contaremos que estamos saliendo, que somos novios – la voz de SeokJin parecía de un niño, típico de su aegyo – y que nos amamos, ¿verdad? Algún día se van a enterar ¿no?
–…No creo que… ¡ah! – SeokJin movía sus caderas lentamente sobre la entrepierna del menor. – Esta sea la mejor forma… de enterarse. – miró a los ojos de aquel joven que hizo un puchero inflando sus mejillas, para luego sonreír y volver a besarlo con arrebato pasional.
Los cuerpos lentamente cayeron en la cama, y el mayor terminó de quitar aquella remera que estorbaba para deleitarse con el pecho del otro, las manos de NamJoon acariciaban toda la piel que pudiera verse libre en el contrario.
– ah, perdón… – la puerta se abrió y Kook apareció en el umbral, con la piel algo húmeda, goteando agua de su cabello, y con solo una toalla roja en su cintura; desprendiendo el suave aroma de jabón y shampoo. – ¿Interrumpo?
Los ojos de NamJoon se abrieron de par a par, JungKook los había visto y no en una situación que fuera fácil de explicar, SeokJin sobre él, besando su pecho, mientras él lentamente le iba conduciendo con sus manos en su cabeza hasta más abajo. Rápidamente sin pensarlo mucho empujó a SeokJin, allí no valía mucho que dijera la típica frase de “te lo puedo explicar” porque a la vista estaba que eso no tenía explicación lógica a no ser decir la verdad.
– ¡Kook!…yo… – su ritmo cardiaco aumentó, sintió un fuerte nudo en su garganta producto de un extraño miedo que sintió, allí no sólo Kook se enteraría de que él le engañaba con SeokJin, sino que seguramente haría un escándalo, en el cual SeokJin se enteraría también que él le engañaba con Kook.
– ¡Cálmate Kim! Parece que hubieras visto un fantasma… – SeokJin se levantó de donde había caído al ser empujado, sonriendo mostrando sus blancos dientes, como si nada malo sucediera tomó por los hombros al menor, y le obligó a sentarse nuevamente en la cama al ver que se iba levantando, la cara de estupefacto a NamJoon nadie se la quitaba, pero claro, SeokJin no entendía por qué el susto… ¿verdad? – JungKook… pensé que te perderías toda la diversión.
Jin caminó pausadamente hasta Kook, el cual cerró la puerta una vez que entró y la trancó desde adentro, el mayor llegó hasta el menor bajo la mirada incrédula de NamJoon, le sonrió, y Kook le correspondió con una insinuante sonrisa, recostándose contra la pared y permitiendo que el otro le tomara con una mano la nuca, y con la otra la cintura para luego besarle lentamente, introduciendo su lengua dentro de aquellos delicados labios, permitiendo que ese músculo jugara con el del menor, entrelazándose, acariciándose, y perdiéndolos a ambos en la pasión.
Los brazos del menor rodeaban el cuerpo del otro, acariciando su espalda, mientras la mano que antes estaba en la cintura del maknae se deslizaba hasta su trasero, acariciando por sobre la toalla, guiando luego hasta su parte delantera, arrancándole algunos suspiros al menor durante el beso.
NamJoon no podía creer lo que sus ojos veían, SeokJin y JungKook, besándose y tocándose mutuamente delante de sus ojos.
– ¡¿Qué demonios está sucediendo aquí?! – no pudo evitar preguntar con reproche, los otros dos al escucharle separaron sus bocas, girando sus rostros para mirarle, pero aun sin deshacerse de ese abrazo pasional, SeokJin río un poco, y palmeó una de las nalgas del menor, quien al sentir aquello, se deshizo del mediano de los tres, y se encaminó hasta el mayor.
– Hyung, ¿por qué tan irritado? Todo está bien – susurró con aquellos hinchados labios del beso, y se arrodilló frente al mayor; NamJoon intentó reaccionar cuando las manos del maknae se encaminaron hasta el cierre de su pantalón, pero SeokJin le había provocado antes, por lo cual se sentía algo excitado, más ahora ese beso que había presenciado, lejos de darle celos en esas condiciones, le hizo aumentar el deseo.
Por lo que sin poder protestar, tomó el cabello del menor y presionó aquellos hermosos labios contra su miembro aun cubierto por la ropa interior, con un poco de trabajo por su posición Kook resopló en la tela mientras intentaba deshacerse de aquellos pantalones, y luego el bóxer del todo, bajándolos hasta los tobillos del mayor para luego quitarlos completamente y engullir el miembro semi-erecto, moviendo su lengua sensualmente dentro, intentando que creciera más.
NamJoon soltó un ronco gemido, más bien un suspiro, mordió su labio inferior y observó desde arriba, como aquella carita le regalaba sexo oral, su miembro se escondía dentro de aquella pequeña boca, y los oscuros ojos lujuriosos de Kook levantaban su vista para verle, sacaba el miembro de su boca, lo lamía, jugaba con él y su lengua, mientras sus manos acariciaban los testículos del mayor, llenaba de besos el tronco del ya despierto sexo del líder, hasta la base, mordía levemente su ingle, mejor dicho, raspando sus dientes suavemente, y luego volvía a atender su miembro, subiendo por él, soplando, chupando su glande para luego introducirlo nuevamente lo más profundo que pudiera, y mover su cabeza al ritmo en el que la mano de NamJoon guiaba.
Por unos instantes el mayor había olvidado que allí también se encontraba SeokJin, pero rápidamente le recordó cuando la ropa del otro cayó al suelo, quedando desnudo en un abrir y cerrar de ojos, SeokJin se acercó hasta ellos, se subió a la cama y gateó por ella hasta llegar a NamJoon, le dedicó una sonrisa y luego besó la oreja del mayor, recorriendo su contorno con la punta de su lengua, chupó el lóbulo, y bajó por el cuello dando pequeñas mordidas, mientras arañaba y acariciaba la piel del pecho del mayor, pellizcando sus tetillas. Siguió el recorrido de besos por el cuello, con la dificultad de la pesada respiración de NamJoon, llegó subiendo por el mentón, hasta los labios ajenos y mordió el inferior, chupó sus labios e introdujo su lengua para un desenfrenado beso.
Cortó el beso dejando al líder totalmente sofocado y delirando gracias a la atención que allí abajo aun Kook le prestaba, el mayor de los tres se deslizó hasta el suelo, quedando al lado del menor, JungKook le observó curioso y sonrió con el palpitante sexo del mediano dentro de su boca, Jin se acercó y acarició la espalda desnuda llegando hasta la toalla para desatarla por completo, desnudando al pequeño, conduciendo su mano hasta la entrepierna y haciendo un bombeo en la erección del maknae, mientras su otra mano acariciaba la entrada de su trasero introduciendo apenas la punta de uno de sus dedos, Kook sin poder resistirlo, sus cuerdas vocales soltaban sonoros gemidos que chocaban de lleno con el miembro del rapero haciéndolo vibrar dentro de su boca, y sus caderas se elevaban, levantando su trasero como si fuera un felino en celo que le acarician el lomo.
– Eres tan pervertido pequeño… – susurró SeokJin, Kook al fin pudo sacar el miembro de su boca cuando las manos del mayor le dejaron quieto, le llamaba pervertido a él, ¿entonces SeokJin qué era? Suspiró más calmado, y los jadeos roncos de NamJoon calmaron, pero rápidamente un quejido como protesta apareció.
Los otros dos miraron excitados al rapero, NamJoon apreció aquellos rostros sonrojados, con labios entreabiertos, y ojos brillosos de placer, mientras la respiración de ambos chocaba contra su sexo expuesto, jamás, ni en sus mejores sueños, había logrado imaginar esa escena. Los otros dos se acercaron hasta la entrepierna, y mientras la mano de SeokJin bombeaba su miembro, las bocas y lenguas llenaban de besos todo el falo, introduciéndolo por turnos una vez cada uno en su boca.
Otra vez, Nam comenzó a jadear, con aquella voz gruesa que le caracterizaba, sus manos apretaron la arrugada sábana debajo de él; el calor era tan sofocante que creía morir ahogado allí dentro, su cuerpo comenzaba a sudar rápido, y no tardó mucho en aparecer ese calor ardiente en toda su zona genital, tensando sus músculos, sintiendo el cosquilleo previo del orgasmo, quemando el extremo de su miembro como si le hubieran prendido fuego allí abajo. Pero al mismo tiempo esa sensación se iba al Kook sacarlo de su boca, y volvía a aparecer cuando SeokJin lo introducía, NamJoon no paraba de repetir en su mente nublada que por amor de dios uno de los dos se detuviera hasta que alcanzara el clímax.
El cual no llegó, pues al ver los tensos músculos de NamJoon, y el temblor en sus piernas y pequeños escalofríos, SeokJin se retiró e hizo que Kook hiciera lo mismo.
Ambos se levantaron y el mediano gruñó, ¡¿qué demonios estaban haciendo?!
– ¡¿Por qué se frenaron?! – les miró con reproche y Kook sonrió alcanzando sus labios, acostándolo en la cama quedando sobre él.
– Tan sólo estamos jugando hyung – comentó pícaro, bajando con sus besos por el ancho cuello, acariciando el vientre del mayor y deslizando su lengua por todo el pecho.
SeokJin besó la espalda del menor con besos húmedos, mordiendo de vez en cuando, y elevó un poco su trasero abriendo las nalgas del menor, pasó su lengua moviéndola con desenfreno pero a la vez delicadeza por toda la entrada del pequeño, Kook comenzó a gemir, emitiendo pequeños sonidos desde su garganta que excitaban mucho más a los mayores, siguió bajando por el abdomen del mayor e introdujo su lengua en el ombligo de éste, imitando los movimientos de SeokJin en su trasero.
El rapero ya no se quedaría espabilando, Kook quería jugar, entonces jugaría, no entendía como aquella situación se había dado, pero ¿qué más daba? Era lo mejor que podría pasarle en la vida en ese momento.
Tomó el miembro del menor y lo estimulo mientras sus labios exigían los contrarios, Kook comenzaba a gemir más sin poder resistirse, SeokJin con su traviesa lengua detrás, mientras la mano de NamJoon le atendía, no quería correrse aun, pero si aquello seguía así no tardaría.
El mayor abandonó su trabajo, tomó del cabello al maknae y lo jaló hasta él, quitándolo de los labios de NamJoon y conduciéndolo a sus propios labios, Nam se irguió sin dejar de masturbarlo, y entre los dos voltearon a Kook para quedar de espaldas al líder, quien una vez así comenzó a introducir su pene en la estrecha entrada del menor. Kook soltó un gemido, y cayó prácticamente sobre las sábanas quedando en cuatro patas, SeokJin aprovechó y condujo el rostro del menor hasta su entrepierna, y mientras NamJoon le envestía fuerte y brutamente por su trasero, SeokJin le envestía más suavemente contra su boca.
Los tres se sentían completamente enviciados en ese punto, el pequeño trasero de Kook era delirante para NamJoon apretando con sus paredes internas su sexo, la boca húmeda era el estimulante perfecto para Jin, quien cerrando sus ojos y tirando su cabeza hacia atrás movía rítmicamente sus caderas, mientras que Kook, no podía dejar de derretirse por dentro sintiendo aquel roce en su próstata por parte de NamJoon, y aquel miembro pasar por su sensible lengua.
El movimiento cada vez más descoordinado, necesitando pronto una culminación, a NamJoon se la habían quedado debiendo, por lo que su miembro casi doliente, no tardó en volver a experimentar esas sensaciones orgásmicas, llevándolo a una rápida eyaculación dentro del menor quien gimió como pudo al sentirse lleno del líquido del mayor. Salió del interior de Kook e intentó calmar su respiración, SeokJin salió de la boca ajena y se posicionó detrás de Kook, le fue fácil penetrarlo con los restos de NamJoon que servían como un lubricante, por lo que de una fuerte estocada se adentró en él, Kook llevó su mano a su miembro masturbándose algo necesitado.
El líder les observó, como SeokJin se violentaba contra aquel delgado cuerpo bajo él, y como el pequeño se atendía así mismo proporcionándose placer, nunca había visto algo más excitante en su vida, Kook le encantaba, le fascinaba ese pequeño gigante, y SeokJin era su perdición también, le gustaba demasiado, por eso que ellos estuvieran montándole terrible espectáculo ahora, era algo que NamJoon no podía permitir olvidarse a futuro. Inconscientemente comenzó a tocarse otra vez, bajando su mano por su pecho, pasando por su abdomen, vientre y llegando a su cansado miembro, tan sólo tocándolo y acariciando, mientras observaba la escena.
La velocidad de los otros aumentaba pero eso no se interpuso en los planes de NamJoon, quien una vez que logró despertar su miembro fue hasta los otros dos, haciendo que se detuvieran un poco, se apoyó detrás de SeokJin y le penetró suavemente, el mayor mordió la nuca de Kook cuando sintió aquella intromisión, el menor se quejó como un gato, y contrajo las paredes de su ano como protesta, el miembro de SeokJin sintió ese ahorco, y tuvo que gemir fuertemente perdiendo el equilibrio, Kook sonrió aguantando su peso, y NamJoon río vencedor, SeokJin había comenzado todo aquello y ahora no resistía al parecer.
– ¿Qué pasa SeokJin? ¿Ya te cansaste? – una sonrisa divertida se dibujaba en el rostro del líder al preguntar aquello, SeokJin elevó su rostro y fijó sus nublados ojos en la pared, el aire le faltaba, su trasero palpitaba y los espasmos que su parte delantera dentro de Kook le provocaba no le dejaban pensar, estaba agitado, con sus labios abiertos, los relamió un poco mientras se adaptaba a su nueva posición entre medio de aquellos dos.
– ¡Hey! Aish…soy el del primer piso, ¿podrían moverse maldita sea? – Kook gimió deseoso moviendo sus caderas hacia Jin. El otro jadeó, apretó sus dientes con fuerza, mientras su pecho se violentó con el fuerte ritmo de la respiración, subiendo y bajando.
Nuevamente comenzó a moverse al sentir las embestidas del mayor contra él. El sonido de sus cuerpos húmedos chocar entre si se oía junto a los gemidos desenfrenados que soltaban sus bocas, como una cadena, los tres gimiendo al unísono mientras sus movimientos descoordinados que intentaban ser coordinados aumentaban haciendo que los gemidos también aumentaban, tomando más velocidad. Ese fuego nuevamente quemaba el sexo de NamJoon y hacia arder sus testículos y miembro dentro de SeokJin.
A Jin las fuerzas realmente se le estaban yendo pero su cuerpo solo se manejaba furiosamente, guiado por ese cosquilleo de su vientre y esa eléctrica ola de placer que se conducía por su próstata cada vez que NamJoon la estimulaba al penetrar y salir. Y Kook, sentía el peso de SeokJin sobre él, metiéndose más profundo en su interior, haciendo que el menor mordiera sus labios desesperado, arrugara las sábanas bajo él y se masturbara con frenesí intentando calmar esa sensación de urgencia que su cuerpo sentía, mientras SeokJin le sostenía del pecho, sin darse cuenta que levemente frotaba sus dedos contra las tetillas del menor, provocándole corrientes placenteras que conectaban esa zona con su parte inferior.
– ¡Ma-maldición! – exclamó el menor al sentir varias mordidas de un SeokJin totalmente desesperado, apresuró más su mano en su miembro para provocar su propio orgasmo, se contrajo levemente y terminó eyaculando sobre la cama, dejando su cuerpo caer, creando el efecto domino, cayendo los otros dos sobre él, aun embistiendo.
Los espasmos de placer, la piel erizada, ese fuerte jadeo que siguió al gemido sonoro que escapó de sus labios, más las contracciones de su zona intima, apretando con fuerza el miembro de SeokJin, hicieron que el mediano de los tres se corriera dentro del pequeño, temblando, provocando también así que NamJoon explotara dentro de él. Los tres cayeron derrotados, mientras los quejidos de Kook hacían que lentamente los otros dos salieran de encima de él, NamJoon saliendo despacio de SeokJin, y SeokJin saliendo de forma algo bruta del menor al caerse a su costado.
Las respiraciones eran frenéticas, los músculos de sus cuerpos encontraban relajación luego de aquello, perdiendo totalmente las fuerzas, agitados, y aun sintiendo que toda la habitación les daba vueltas.
– N-nunca creí que esto sería tan bueno… – susurró el menor de los tres, SeokJin asintió tragando saliva, intentando regularizarse.
– Se suponía que esto era una despedida, por engañarnos maldito Kim… – murmuró SeokJin, el mediano elevó un poco su cabeza y les miró sorprendido. – Nos enteramos que jugabas a dos puntas… y pensamos esto como una despedida, para que veas lo que te perderás, de ahora en adelante…
– Lo siento… – NamJoon aspiró fuertemente, y soltó con más calma el aire. – Sé que no es excusa, pero… me enamoré de ambos, y cuando me di cuenta, ya… no podía elegir, y no quería perder a ninguno de los dos… supongo que, ese fue mi error…
– Pues… el que me hayas engañado y pidas disculpas no quita que aun te ame… – susurró SeokJin – y que JungKook esté más bueno que comer pollo con la mano. – el menor sacó fuerzas de donde no supo y le arrojó una almohada a Jin. – Lo siento, esto es serio… – mordió sus labios intentando no reír, pero luego no aguantó, y soltó una débil carcajada. – JungKook ¡vamos! No te lo tomes tan mal, es la mejor puta experiencia que he vivido en mi vida, no me importaría que las cosas sigan así de ahora en más… en vez de una despedida.
Los ojos de los otros dos se ampliaron por sobremanera, ¿de verdad SeokJin estaba diciendo aquello? Debía estar bromeando seguramente el descarado ese… aunque, después de lo que acababan de hacer, tan santos y puros no eran como para creer que aquello era una locura… y NamJoon estaba enamorado de SeokJin, así como también de JungKook… SeokJin estaba enamorado de NamJoon, pero le encantaba el maknae, y Kook, aunque también estaba enamorado de NamJoon, no iba a negar que el encuentro en la cocina con Jin y lo que acababan de hacer, le había hecho perder la cabeza por el mayor. Quizás la idea, no era tan mala después de todo.
– Yo no soy celoso… claro, si me avisan – SeokJin guiñó su ojo a NamJoon, quien se recostó en la cama con sus brazos arriba llevando sus manos entrelazadas detrás de su cabeza.
– Yo tampoco lo soy – comentó finalmente el rapero, SeokJin habiendo escuchado que él estaba de acuerdo se arrimó hasta él y apoyó su cabeza en el pecho ajeno.
–…Supongo que yo tampoco… lo soy… – Kook gateó hasta el otro lado de NamJoon y se apoyó en el pecho del mayor también así como SeokJin. – Siempre y cuando, quede entre nosotros solos… – los mayores sonrieron, y el pequeño también, NamJoon bajó sus musculosos brazos y abrazó a los dos cuerpos a cada lado de él.
Había sido un maldito infiel, pero las cosas le habían resultado mejor de lo que alguna vez pudo imaginar, él no gobernaba su corazón enamorado de dos jóvenes, y ahora Kook y SeokJin ya no sentían esos celos que antes sí, porque no importaba con quien estuviera NamJoon de los dos, ya que ellos también podrían estar juntos, conociéndose y enamorándose más…
Ahora eran una pareja de tres.
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Ooooooook
Ojalá les haya gustado!
Y que pos el lemon pie haya sido decente😅😂
Buano, nos leemos cuídense musho 😘😘
Bye byeee🤗🤗
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